Por Jaime Rosemberg - La Nación - Carlos Vignolo, titular del programa, asegura que se mantendrán los proyectos a pesar del ajuste Fuente: Archivo
Desde que asumió su cargo, en agosto del año pasado, el radical correntino Carlos "Mono" Vignolo sufre lo mismo que su antecesor, José Cano: la desconfianza y el escepticismo de propios y extraños por los resultados concretos del Plan Belgrano , el ambicioso plan de infraestructura para diez provincias del norte argentino que el presidente Mauricio Macri promueve desde el inicio de su mandato. Un escepticismo que creció con el ajuste presupuestario que se puso en marcha tras el inicio de las negociaciones con el FMI.
"Más allá de lo que se dice, se ha aportado un total de $300.000 millones por año repartidos en obras para las diez provincias, con un criterio equilibrado", se defiende Vignolo, funcionario clave del exgobernador de Corrientes Ricardo Colombi y hoy con un asiento en el gabinete nacional (tiene rango de ministro como titular del plan). "Se tiene la visión de que para poder hacer obras tenés que tener caja, como tenía (Julio) De Vido. No somos órgano ejecutor, no se puede duplicar lo que ya existe, pero sí decidimos dónde y cuándo se hacen las obras", se defiende.
El plan de ajuste para reducir el déficit que comanda el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, amenaza con afectar la obra pública, motor principal del Plan Belgrano. Vignolo lo niega, al menos en su área de gestión. "Se ha decidido cuidar la obra pública porque da empleo y moviliza la economía", afirma, y se queda con una promesa del propio presidente Mauricio Macri y el jefe de Gabinete, Marcos Peña, de quien Vignolo depende en el organigrama del Gobierno. "Todas las obras comprometidas, en desarrollo o presupuestadas, se sostienen", asegura el exintendente de Corrientes.
Para Vignolo hay dos obras prioritarias que beneficiarán al postergado norte del país. Para el NOA, la recuperación de la red ferroviaria a través del Belgrano Cargas. ¿Se enojará Hugo Moyano, el líder de Camioneros? "No tendría por qué, ellos pueden hacer los tramos más cortos, que además son más rentables", se ataja. Para el NEA, el Plan Belgrano tiene acordada la ampliación de la ruta del Mercosur, un segundo puente entre Resistencia y la capital de Corrientes, y la inauguración de tres nuevos puertos.
En tiempos de rispideces con los gobiernos peronistas, Vignolo muestra cifras y datos "para que nadie desconfíe". Las estadísticas hablan de un 98 por ciento de ejecución de lo proyectado para el año pasado y un 25 por ciento en el primer trimestre de 2018. Elogia al ministro del Interior, Rogelio Frigerio, que ejecutó el "125 por ciento del presupuesto" que tenía destinado a obras, unos $60.000 millones. "No se beneficia a Jujuy o a Corrientes porque tienen gobiernos radicales", afirma Vignolo, sin precisar cuánto reciben las siete provincias peronistas de las diez que están incluidas en el plan.
Lo que sí muestra el funcionario es un enojo similar al del Presidente con las provincias que firmaron el pacto fiscal y no cumplen con su "espíritu", el de bajar la presión impositiva para favorecer las inversiones de sectores como la minería, la industria y el comercio.
"Salvo Corrientes y Santiago del Estero, las demás aumentaron los impuestos a las empresas vía servicios. Y eso que recibieron un 47 por ciento más de recursos propios en el último año", se quejan cerca del titular del plan.
Vignolo advierte además que hay un "seguimiento presupuestario" del dinero que administran las provincias para obras públicas. Confía en que, a pesar del mandato de austeridad que emana de la Casa Rosada, el Plan Belgrano seguirá en funcionamiento hasta el fin del mandato de Cambiemos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.