A partir del viernes 10, el Teatro General San Martín recuperará a pleno su capacidad. Es que será reinaugurada la Sala Casacuberta tras una refacción integral, tal como se había hecho con las salas Martín Coronado y Leopoldo Lugones. Así, los porteños podrán volver a disfrutar un espacio artístico emblemático de la ciudad.
Las obras en la Casacuberta son parte de un plan integral de recuperación del San Martín que comenzó en 2011. El proyecto de restauración a fondo ya está avanzado en un 52%. Todas las instalaciones a la vista del público ya fueron recuperadas, salvo el hall central, el de cada sala y los sanitarios. Lo que falta de la obra es "para adentro": desde las instalaciones de servicios hasta los camarines y otros espacios. El proyecto incluyó el arreglo de la fachada y la construcción de una sala de ensayos para el Ballet Contemporáneo. En todos los casos, se respetó el diseño original del edificio creado por los arquitectos Mario Roberto Alvarez y Macedonio Ruiz, que fuera inaugurado en 1960.
La sala Casacuberta es la que está en el segundo subsuelo. Fue nombrada así en honor de Juan José de los Santos Casacuberta (1798-1849), uno de los primeros actores dramáticos argentinos. Con forma de anfiteatro, cuenta con 550 butacas y un escenario de 35 metros por 6. Acaso, uno de sus principales encantos es la sensación de cercanía que los espectadores logran con los actores, a quienes se los puede ver perfectamente desde cualquier ubicación.
La obra consistió no sólo en la renovación de todas las instalaciones eléctricas y la colocación de cámaras y elementos de seguridad contra incendio, sino que se recuperaron el alfombrado y los tapizados de las butacas respetando los colores originales, además de que se trabajó en las carpinterías y revestimientos
La Casacuberta era la única sala que faltaba arreglar, tras la recuperación de la Coronado (935 localidades), la Cunill Cabanellas (100) y la Lugones (233), que se usa para cine. Además, en el marco de la reparación integral del complejo teatral ya se había reinaugurado el depósito de sastrería, que queda en la calle Gregoria Pérez al 3600, en Chacarita. Allí, donde se guarda todo el vestuario que se usa en las obras, se hizo una reforma general que permitió ampliar la capacidad de almacenamiento, aparte de arreglar todas las filtraciones de los techos, entre otras mejoras. A esto también se puede sumar la recuperación de la Sala Alberdi, que si bien depende del Centro Cultural San Martín, había estado tomada durante siete años por un grupo de alumnos y docentes que se negaban a una mudanza de los talleres. Tras un largo conflicto, fue desalojada y reparada, y en 2013 reabrió sus puertas.
"Así como el Colón o la Usina del Arte, el San Martín es un edificio único. Hicimos una intervención integral por primera vez en su historia, y lo importante es que pudimos concretarlo antes de que el edificio colapsara", comentó el ministro de Desarrollo Urbano, Daniel Chain. En tanto, su par de Cultura, Hernán Lombardi, agregó que "la restauración del San Martín es una gran noticia para todos los que aman el teatro. Lo más importante es que esta obra se pudo hacer sin que el complejo tuviera que cerrar, gracias al esfuerzo de todos los que trabajan allí".
La reinauguración será el viernes 10. Ya está confirmado que será con una presentación del Grupo de Titiriteros del San Martín, quienes harán un fragmento de El gran circo. Luego la sala alojará la obra El farmer, una adaptación de la novela de Andrés Rivera que será protagonizada por Rodrigo de la Serna y Pompeyo Audivert.