Un problema de presupuesto, eso es.
Una auditoría realizada por la Oficina Nacional de Auditoría (el perro guardián financiero del gobierno británico) dice que el apetito de los militares británicos es mayor que su presupuesto.
El plan de diez años del Ministerio de Defensa para comprar y apoyar nuevos equipos en los próximos diez años tiene un presupuesto de £ 186.4 mil millones ($ 244.7 mil millones). Pero los auditores pronostican que el costo real del Plan de equipo 2018-2028 será de £ 193.3 mil millones (US $ 253.8 mil millones), o un déficit de aproximadamente $ 7 mil millones.
El plan "sigue siendo inasequible, con costos previstos que superan los presupuestos en £7.000 millones [US $ 9,200 millones] en los próximos 10 años", concluyó la auditoría. “Esta variación podría aumentar o disminuir dependiendo de las diferentes circunstancias, ya que el Departamento [Ministerio de Defensa] estima que el peor escenario de costos aumentará en £ 14.8 mil millones [US $ 19.4 mil millones] en caso de que se materialicen todos los riesgos identificados. Sin embargo, parte de su análisis sigue siendo optimista y los costos podrían aumentar aún más. El Departamento está mejorando su comprensión de los riesgos de asequibilidad, pero todavía no estamos completamente seguros de la solidez de algunas de sus suposiciones subyacentes, en particular en torno a las eficiencias ".
Los planes de diez años comenzaron en 2012, después de lo que los auditores describieron como una gestión financiera deficiente que llevó a costos subestimados y presupuestos insuficientes. El plan de 2017–2027 incluía una letanía de artículos, incluidos nuevos submarinos de propulsión nuclear, vehículos blindados y aviones F-35.
Pero los auditores advierten que el Ministerio de Defensa está a la altura de su antigua magia contable. “El enfoque del Departamento de establecer un presupuesto de diez años más bajo que los costos previstos del Plan para 2018 a 2028 corre el riesgo de repetir las prácticas que llevaron a la introducción original del Plan de Equipos. En 2012, el Departamento anunció su intención de hacer el balance del Plan, con los costos de previsión totalmente financiados desde el inicio del año. Desde la Revisión de Gastos 2015, el Departamento no ha financiado completamente sus costos desde el principio ".
En cambio, los militares recurren a la reducción de costos sobre una base ad hoc que se centra en la "asequibilidad a corto plazo en lugar del valor a largo plazo del dinero. Nuestro trabajo reciente, por ejemplo, sobre el soporte de equipos navales, ha demostrado que esto puede llevar a un aumento de los costos. Para que el 2018–19 sea asequible, el Departamento ha retrasado los programas de trabajo, como el reemplazo de los submarinos de clase Astute y la introducción de aviones controlados a distancia (Protector), lo que podría aumentar los costos futuros ”.
Gran Bretaña no es la única nación con chanchullos de presupuesto de defensa. El ejército de los EE. UU. ha manipulado durante mucho tiempo los números para complacer al Congreso: por ejemplo, al extender la producción de un artículo al ordenar menos artículos en un número mayor de años para reducir el costo presupuestario por año, aunque el precio general sube.
Un Tesoro de un centavo que mata de hambre al ejército es una vieja queja británica que se remonta a la década de 1930 y antes. Como la quinta economía más grande del mundo, Gran Bretaña debería poder pagar un ejército bien equipado, incluso si existen dudas sobre si los artículos caros, como los portaaviones y los submarinos de misiles Trident, ofrecen la mejor explosión para la libra esterlina. Pero al igual que otras naciones, Gran Bretaña tiene que hacer malabarismos con otras prioridades, como los programas de bienestar social. Las armas y la mantequilla son necesarias, aunque el costo de las armas, y de la mantequilla, aumenta cada año.
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