Patrullas de seguridad en El Salvador

Efectivos del Comando de Fuerzas Especiales y otras fuerzas comenzaron a mediados de enero del 2011 la concentración de unidades en el sector residencial San Antonio de Soyapango, a unos 800 metros al norte de la Urbanización Campanera. En esta oportunidad, las unidades estaban al frente de los militares, y no solo se limitaban a apostarse en las entradas de las colonias o de sus pasajes, sino que se internaban a los cafetales o pasaban de una comunidad a otra entre veredas, como lo hicieron al ingresar a la comunidad Argentina desde la residencial San Antonio. El interior de La Campanera lucía tranquila. Los notables pandilleros que dominan la zona se habían desvanecido por el momento.

Unidades militares motorizadas también se desplegaron a las colonias del barrio San Jacinto y comunidad Iberia, mientras otras se han localizado en Lourdes, Colón, La Libertad. Los soldados han recibido autorización de efectuar arrestos y hacer uso de sus armas de fuego cuando la situación lo amerite.

Hoy día destaca que se hacen los patrullajes de las zonas más conflictivas o en tareas de seguridad de los alrededores de las prisiones con los Humvees M1151. Pero recalca la falta de motorizados protegidos al punto que se han sacado los cuatro últimos AML-H90 funcionales para las misiones de patrulla. Estos se mantienen en los alrededores de Santa Tecla, y Lourdes, cerca de su base, debidos a los constantes dolores de mantenimiento que sufren. En realidad deberían de repotenciarlos a todos, e intercambiarles sus torretas por algo más sencillo.

Los Cashuat porta personal no pueden utilizarse porque sus vidrios han caducado su vida-útil y ahora están amarillos de viejos, lo que no permite visibilidad, y en realidad son una amenaza al transito. Otra desventaja es la falta de techo de protección, algo necesario en las áreas donde el “enemigo” domina las alturas.

El Salvador construyó éstos vehículos semi blindados de combate usando como base el pickup Dodge M-37B de ¾ ton. Se construyeron 40 en la versión artillada (VBA) y 26 en la de transporte de personal (VBTP). Entre 1994 y 1995 ESTRANFA (antes Maestranza) desarrollo el modelo mejorado partiendo de dos ejemplares a los que se les acomodaron los ejes del camión M35 Reo, repotenciándoles el motor y otros cambios (Cashuat-II). En 1998 se realiza por primera vez esa misma modificación en otros dos diseños en los talleres del Regimiento. Sin embargo, el presupuesto para actualizar la flota de 40 vehículos sobrevivientes no se realiza y todo queda en los modelos ya terminados. En el 2005 se realizan los trabajos de su reemplazo partiendo de un Ford F-350 de 4-5 toneladas con torreta abierta y dos cañones de 20mm recuperados de los aviones Ouragan (un Cashuat-2005). Con una estructura similar al HMETT norteamericano, el prototipo se concluye y ensaya, pero luego se suspende todo después que una auditoria descubre un desfalco en el presupuesto del proyecto.

El ímpetu que recibe ahora la FAES por parte del ejecutivo despierta esperanzas a que se reanude el programa Cashuat-2005, o que se permita la repotenciación y estandarización al Cashuat-II, o algo mejor. Además, algunos de ellos podrían llevar un pedestal que permita la colocación de las torretas semi-blindadas TCM-20 o aquella ya desarrollada con el Cashuat-2005.

Hoy día, bajo el mando del Cnel. Edwin Chavarría Bolaños, el Regimiento de Caballería distribuye fuerzas al Comando Zumpul, Comando San Carlos y Comando Zeus en las operaciones militares generales en apoyo a la autoridad civil, asimismo, desarrolla tareas en base a tres operaciones: Plan Cuscatlán, que consiste en apoyo a la PNC, específicamente al combate a las drogas; Plan San Bernardo, en apoyo a la población civil en caso de cualquier desastre natural; y el Plan Guardianes, apoyo a la Policía en patrullaje anti-delincuencial. Este último fue diseñado hace muchos años atrás como damos en evidencia a continuación.

Por toda la controversia ahora de la presencia de los militares en las calles, es notable que en 1999, unos 2000 policías, con el apoyo de 600 efectivos del ejército, comenzaran una ofensiva similar contra el crimen en el área metropolitana de San Salvador como parte del ya mentado Plan Guardianes. Durante ese periodo los soldados se trasladaban en tanquetas en las zonas suburbanas de la capital y sus alrededores. Con ellas, el ejército colocaba un cordón de seguridad en los contornos del Gran San Salvador como parte de la Operación Ciudad Segura, dirigida a zonas de mayor índice criminal. Durante esa operación, en el sector de San Ramón, dos tanquetas Cashuat del Regimiento de Caballería patrullaban la zona. En contraste, durante esta nueva "ofensiva" del 2011, los Cashuats se mantenían en casa. (JAMH Grupo Edefa)

Fuente: Defensa.com