Por William Márquez - BBC Mundo
Mientras Edward Snowden -el
contratista de inteligencia que reveló al mundo un masivo programa de
espionaje y de Estados Unidos- sigue estancado en Moscú esperando un
gobierno que le ofrezca asilo político, continúa el flujo de
publicaciones sobre la extensión del programa de vigilancia.
Programa PRISM
Son pocos los detalles que se conocen del programa PRISM. Fue un sistema lanzado en 2007 por la NSA que le
permite captar correos electrónicos, videos, fotografías, llamadas de
voz e imagen, actividad en los medios sociales, contraseñas y otros
datos de usuarios contenidos por las principales empresas de internet en
EE.UU.
Se supone que PRISM no debe intencionalmente seleccionar ciudadanos estadounidenses o ninguna otra persona que viva en el país, así que la NSA hace una búsqueda que arroja objetivos en el extranjero con lo que llaman el 51% de confianza de que así es. Una vez un sospechoso es identificado, todas las personas con que haya tenido contacto también están sujetas a investigación, como también las personas en los buzones de éstas últimas.
Algunos expertos en seguridad cuestionan si el margen de 51% es suficiente para garantizar la exclusión de estadounidenses. Otros críticos afirman que el sistema es una amenaza para los derechos humanos.
Hasta el 5 de abril hay 117.675 objetivos de vigilancia activos en la base de datos de PRISM -que deben todos ser extranjeros- pero la interrogante es cuánta información de estadounidenses ha sido incidentalmente recogida por el sistema.
Captación de datos telefónicos
El diario británico The Guardian publicó una orden secreta de un tribunal que exigía a la empresa de telecomunicaciones Verizon a entregar todos sus datos telefónicos a la agencia de manera diaria y rutinaria.
Verizon, una de las mayores empresas de teléfonos en EE.UU., está obligada ha revelar los metadatos de todas las llamadas que procesa, tanto nacionales como internacionales, en las que por lo menos uno de los usuarios está en el país.
Estos metadatos incluyen los números telefónicos, los números de las tarjetas de pago, los números de serie de los teléfonos usados, la hora y duración de las llamadas. Lo que no incluyen son el contenido de la conversación ni las direcciones o detalles financieros de los usuarios.
James Clapper, director de Inteligencia Nacional de EE.UU., confirmó que el gobierno había recogido secretamente millones de registros telefónicos pero aseguró que se respetaba los derechos civiles y privacidad de los ciudadanos. Advirtió, no obstante, que la revelación al público de estos programas había causado daño irreversible en la prevención de futuros ataques terroristas contra EE.UU.
Pero el principal diario de la capital estadounidense The Washington Post insistió en un editorial que el público necesitaba mayores explicaciones sobre el programa para evaluar si valía la pena en aras de la seguridad. Posteriormente, en un documento hecho público por el Comité de Inteligencia del Senado, el gobierno sostuvo apenas haber investigado 300 llamadas el año pasado para obtener mayor información.
Programa TEMPORA
La agencia británica de escuchas electrónicas, la Oficina Central de Comunicación del Gobierno (GCHQ, por sus siglas en inglés) fue acusada de recoger información de empresas de internet a través del sistema PRISM.
El diario The Guardian reportó que la agencia de espionaje británica estaba "pinchando" cables de fibra óptica que transportan comunicaciones globales y que estaba compartiendo grandes cantidades de datos con su contraparte la NSA.
Según el informe, GCHQ intervenía 200 cables de fibra óptica, lo que le permitía recoger muchos más datos que la agencia estadounidense; unos 600 millones de comunicaciones diarias. Supuestamente, la información recopilada se guardaba durante 30 días para ser seleccionada y analizada. El resultado fue que la agencia británica pudo generar 197 informes de inteligencia con el material. De acuerdo al periódico, la fuente de esos documentos también fue Edward Snowden y que la operación se llama TEMPORA y lleva un año y medio activada.
Hackeo a China
El "soplón" aseguró que los objetivos en Hong Kong incluían la Universidad China, funcionarios públicos y empresas. "Hackeamos las columnas centrales de las redes -básicamente los grandes "direccionadores" (routers) de internet- que nos dan acceso a las comunicaciones de cientos de miles de computadoras sin tener que hackear cada una de ellas", dijo el diario citando a Snowden.
El gobierno chino manifestó su profunda preocupación por los supuestos ciberataques contra sus ciudadanos. Pekín aprovechó la oportunidad para calificar el gobierno de Barack Obama de hipócrita por llamarle la atención a China por sus ciberataques cuando Washington está haciendo exactamente lo mismo.
Escuchas a la Unión Europea
La prestigiosa revista alemana Der Spiegel expresó haber visto documentos filtrados de la NSA que evidenciaban espionaje de las oficinas de la Unión Europea tanto en EE.UU. como en el viejo continente.
Des Spiegel aseguró que Edward Snowden le había dejado ver archivos secretos que mostraban como EE.UU. espió una red de computadores internos de la UE en Washington en las oficinas del bloque de naciones en la ONU, en Nueva York.
Uno de los documentos, fechado septiembre 2010, explícitamente designo la representación de la UE en la ONU como un "objetivo", escribió la revista.
Los archivos también indicaban que la NSA realizó actividad de escuchas electrónicas en un edificio en Bruselas, donde se encuentra el Consejo de Ministros y el Concejo Europeo de la UE.
El escándalo amenaza las buenas relaciones entre EE.UU. y sus aliados europeos. En la actualidad Europa y Washington están negociando un pacto comercial y algunos analistas estiman que las estrategias comerciales y asuntos militares de los europeos pueden haber quedado comprometidas.
Los gobernantes de Francia, Francois Hollande, y Alemania, Angela Merkel, tildaron el supuesto espionaje de inaceptable y advirtieron que el pacto comercial podría verse afectado. "Ya no estamos en la Guerra Fría", expresó el portavoz de Merkel a la prensa.
Vigilancia de embajadas
Según el artículo de Der Spiegel, los servicios de inteligencia han intervenido las sedes diplomáticas en Washington y Nueva York. Los países afectados incluyen Francia, Italia y Grecias, así como países aliados no europeos como Japón, Corea del Sur e India.
The Guardian, por su parte, dice que los documentos detallan una amplia gama de métodos para espiar e interceptar mensajes, incluyendo dispositivos electrónicos, antenas especializadas y "pinchazos" telefónicos.
El diario británico también menciona los nombres codificados de los supuestos operativos contra las misiones de Francia y Grecia en la ONU, así como el de la embajada de Italia en Washington.
Lo que está por venir
El 29 de junio, el periodista de The Guardian Glenn Greenwald, se refirió en rueda de prensa a la publicación de muchas más revelaciones sobre el espionaje de EE.UU.
El jefe de WikiLeaks declaró que se había tomado mucha precaución para que Snowden no pudiera recibir presión de ningún gobierno para evitar más publicaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.