Por Laura Rocha
| LA NACION
Se
sumarán a los 372.699 que ya existen; habrá tanto especies autóctonas
como otras aptas para dar una configuración lineal; colocarán unas 7000
por año
Arce tridente, fresno
dorado, ibirá pitá, anacahuita y ligustro disciplinado son algunas de
las especies de los nuevos 70.000 árboles que tendrá la ciudad de Buenos
Aires en los próximos 10 años. Ése es el objetivo del máster plan de
arbolado que el gobierno porteño presentará hoy y que prevé incorporar
unos 500 ejemplares por comuna por año.
La iniciativa se realizó a partir del censo fitosanitario de 2011, que indica, por ejemplo, que el fresno americano ( Fraxinus pennsylvanica
) constituye la especie dominante, con valores de frecuencia altísimos
para lo que debería ser un arbolado sustentable desde el criterio de la
biodiversidad. "Asimismo, la proliferación de ejemplares incorporados
por los propios vecinos sin el asesoramiento adecuado hicieron del ficus
( Ficus benjamina ) un emblema de este proceso, siendo una
especie absolutamente inconveniente para integrar el arbolado de
alineación debido a que el desarrollo veloz de sus raíces levanta
veredas, rompe cañerías y avanza rápidamente hacia el interior de las
viviendas", indicó Jorge Fiorentino, director general de Arbolado
porteño.
La primera especie de la flora argentina con un lugar
preponderante en el arbolado lineal es el jacarandá, que ocupa el 6°
lugar, con el 3,6% del total. Con respecto al estado general del
arbolado de las veredas, el 86% se encuentra en buen estado. El 1,8% se
encuentra seco y está siendo extraído para su reemplazo por la especie
más conveniente para cada situación. "La idea es consolidar una imagen de arbolado similar
en la ciudad. Es decir que la cantidad y la calidad de los ejemplares
sea parecida", continuó el funcionario.
Según el censo, la cifra total de ejemplares es de
372.699. Las comunas 9 (Liniers, Mataderos y Parque Avellaneda), 11
(Villa General Mitre, Villa Devoto, Villa del Parque y Villa Santa Rita)
y 12 (Coghlan, Saavedra, Villa Urquiza y Villa Pueyrredón) son las que
tienen más cantidad de árboles, con 38.687, 37.521 y 36.474 ejemplares,
respectivamente. Y son las que poseen mayor densidad (entre 23 y 25
árboles por hectárea). Las más despobladas son las comunas 1 (Retiro,
San Nicolás, Puerto Madero, San Telmo, Montserrat y Constitución), 2
(Recoleta) y 3 (Balvanera y San Cristóbal).
Cabe aclarar que estas cifras se refieren a los árboles
que están en las veredas. Por eso, la comuna 14, que comprende todo
Palermo, no está entre las tres primeras.
Facundo Carrillo, presidente de la comuna 2, indicó:
"Hasta octubre vamos a plantar 330 árboles. Los vecinos podrán sumarse
al compromiso de cuidar un árbol mientras crece, ayudando con su riego
durante el primer año de vida y, así, contribuir a que el árbol se
mantenga vital por muchos años".
"Pocas grandes urbes del mundo poseen este patrimonio
verde, que en varios casos data de más de un siglo. Esto arrastra muchos
problemas a los que hay que buscarles soluciones. Por eso es que
diseñamos el Plan Maestro para el Arbolado Público lineal porteño.
Convocamos a los mejores especialistas y, luego de escuchar todos los
puntos de vista y opiniones, llegamos a esta conclusión", dijo Diego
Santilli, ministro de Ambiente y Espacio Público. El plan maestro, que
incluyó el censo, se realizó con una partida especial del préstamo para
el aliviador del arroyo Maldonado por 1.800.000 dólares.
Hacia la segunda mitad del siglo XIX Buenos Aires
incorporó la idea del verde como modelo de ciudad sana, bajo una noción
organicista de la trama urbana. "Se consideraba la ciudad como un
organismo vivo que respiraba a través de la vegetación, promoviendo la
calidad de vida de sus habitantes", señaló Graciela Benito, curadora del
Jardín Botánico y docente de la UBA.
"Esta concepción primó en la planificación de los
espacios públicos porteños, donde las intervenciones paisajísticas se
vieron potenciadas desde la Dirección de Parques y Paseos de la
municipalidad por las gestiones consecutivas del arquitecto Charles
Thays y del ingeniero agrónomo Benito Carrasco, quienes entre 1891 y
1918 trazaron los ejes rectores de esos trabajos, que no sólo
contemplaron la importancia estética, sino también la higiene, el ocio y
la expansión de la población", agregó.
En los parques y plazas hay unos 52.000 ejemplares. Los
que tienen más cantidad son el parque Tres de Febrero, con 7000, y el
Indoamericano, con 3500. El Jardín Botánico posee 1900 ejemplares y el
Zoo de Buenos Aires, 1000.
Eduardo Haene, director de la Reserva Ecológica y
asesor técnico del plan maestro de arbolado señaló que lo más notorio
con la incorporación de los nuevos ejemplares autóctonos se reflejará en
la biodiversidad. "Lo vecinos que tengan en su vereda un ejemplar de
anacahuita comenzarán a ver muchas más mariposas, por ejemplo. Este plan
marca un punto de inflexión", indicó Haene.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.