Por Natasha Niebieskikwiat - Clarin.com
Las negociaciones las encabeza el canciller Jorge Faurie, quien hoy recibe a directivos de Naval Group. Macri y Macron decidieron limar las tensiones en su bilateral de enero pasado en París.
El canciller Jorge Faurie recibirá esta tarde al presidente del Naval Group, Hervé Guillou. De acuerdo a lo que pudo confirmar Clarín de fuentes oficiales en ambos gobiernos, Argentina y Francia relanzaron las negociaciones para la adquisición por parte de este país de cuatro L'Adroit OPV 90. Estos patrulleros oceánicos de origen francés son considerados por la Armada y la Defensa esenciales para el control del mar argentino, tanto de las actividades de pesca ilegal como de otros ilícitos, en una zona que es ya estratégica a nivel mundial.
Consultado por este diario, el embajador de Francia ante la Argentina, Pierre Herri Guignard, confirmó que Guillou fue "invitado por el cancilller", quien encabeza ahora las negociaciones. Guignard señaló que el grupo constructor de patrulleros, entre otros, está aquí para "continuar conversaciones abiertas durante la visita del Presidente (Mauricio) Macri". El diplomático agregó: "Me alegro de esa reunión que demuestra una voluntad mutua de avanzar con el proyecto de adquisición de 4 patrulleros".
En los hechos, las negociaciones se relanzaron cuando en la bilateral que mantuvieron en París, en enero, los presidentes Macri y Emmanuel Macron decidieron poner paños fríos a las tensiones de lado a lado. "Aunque son importantes, la relación con Francia va más allá de los cuatro patrulleros marítimos", subrayaban esta mañana en Presidencia.
Por su parte, desde la cartera del ministro de Defensa Oscar Aguad ya dieron su posición a favor de esta compra que, además de cubrir una necesidad imperiosa funcionaría como un "bálsamo" en lo logístico -aunque no humano- tras la tragedia del ARA San Juan, sobre fines del año pasado. Los 44 tripulantes del submarino desaparecieron con la nave, precisamente haciendo espionaje y controles de actividades ilegales en el Atlántico Sur.
Las negociaciones por los cuatro patrulleros comenzaron a enredarse cuando por un lado se experimentó la tradicional dureza de Francia en las negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea -otros proteccionistas son Irlanda y Polonia-. Y por el otro, también fueron reacios a abrir el mercado europeo al biodiésel argentino, cuando así lo dictaminó la Organización Mundial del Comercio. Este fue trabado por años hasta que se volvió abrir el mercado. Y ahora ahora existe otro lobby que presentó una nueva denuncia en la OMC. Macron en su entrevista con Macri manifestó que hay líneas rojas en el acuerdo UE-Mercosur que no se pueden cruzar. Y ahora enfrenta una fuerte presión de ganaderos y agricultores, sin embargo cree que la apertura del comercio es el camino en la relación entre países. En el gobierno quiere por cierto alguna moneda de cambio en la adquisición de los cuatro patrulleros marítimos.
En su viaje a París de enero pasado, Macri dijo: "Francia vino con una nueva oferta. Yo les había dicho que el precio original me parecía muy caro (en su momento era un total de 300 millones de dólares). Confieso que necesitamos equipo nuevo, ahora que estamos en pleno debate sobre el rol de la defensa y la seguridad. Como ellos son insistentes vendedores, acomodaron su oferta y trajeron una mucho más competitiva".
Los detalles de la negociación de hoy aún se desconocen. Pero la intención es modificar algunas cuestiones. La oferta original era que dos de los OPV 90 se construyeran en Francia y dos en Argentina, que ya compró a los galos cinco aviones Super Etendard. Estos costaran 12.5 millones de euros y fueron adquiridos al a Dassault. Para el Gobierno serán esenciales junto a para la custodia aérea de las fronteras más allá de la cumbre del G20 de noviembre.
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