El Pentágono apura la entrega de un explosivo destinado a volar sitios fortificados como los utilizados por Irán y Corea del Norte para sus programas nucleares. Sería una medida preventiva
Crédito: AP
El artefacto gigantesco de 15 toneladas, llamado "penetrador de construcciones sólidas", será la bomba convencional más grande en el arsenal norteamericano y podría llevar 2,4 toneladas de explosivos. Es casi 10 veces más poderosa que el arma que reemplazaría y podrá destruir arsenales subterráneos cubiertos por 4.535 kilos de concreto reforzado.
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El artefacto gigantesco de 15 toneladas, llamado "penetrador de construcciones sólidas", será la bomba convencional más grande en el arsenal norteamericano y podría llevar 2,4 toneladas de explosivos. Es casi 10 veces más poderosa que el arma que reemplazaría y podrá destruir arsenales subterráneos cubiertos por 4.535 kilos de concreto reforzado.
El Pentágono ha concedido un contrato de unos 52 millones de dólares para apresurar la instalación de la bomba en un bombardero Stealth B-2, invisible al radar, lo cual podría ocurrir en el segundo semestre del año próximo. El artefacto podría ser considerado un Plan B sobre la situación con Irán, que recientemente reveló la existencia, desde hace tiempo sospechada, de una instalación nuclear en las profundidades de una montaña cerca de la ciudad sagrada de Qom.
Los funcionarios del Pentágono reconocieron que la nueva bomba tiene la misión de volar sitios fortificados como los utilizados por Irán y Corea del Norte para sus programas nucleares, pero negaron haya un objetivo específico en mente."No creo que alguien pueda adivinar blancos potenciales", afirmó el secretario de Prensa del Pentágono, Geoff Morrell. "Esto es sólo una capacidad que creemos es necesaria dado el mundo en que vivimos".
Fuente: AP - Infobae.com
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