Venezuela cerró en julio de 2006, un contrato con el astillero vigués Rodman Polyships para adquirir 31 lanchas patrulleras, por un valor de 199 millones de dólares.
Este acuerdo forma también parte del reiterado acuerdo de noviembre de 2005, entre España y Venezuela. Las embarcaciones encargadas a Rodman, similares a las que equipan al Servicio Marítimo de la Guardia Civil, serán de diferentes esloras: 30, 20 y 17 metros.
El astillero vigués ha realizado un estudio previo y ha anunciado que el acuerdo se completaría con una transferencia tecnológica al país iberoamericano, para montar un pequeño astillero para la construcción de pesqueros.