Los especialistas militares se pusieron a hablar de los aviones de combate rusos aún en los años 60, cuando los ejércitos de otros países fueron dotados con las primeras partidas de aviones de caza de las oficinas de diseños y proyectos Mikoián y Sujoi.
Por sus posibilidades no cedían a los mejores aviones de combate extranjeros de aquellos tiempos y en algunos parámetros incluso los superaban. Y hoy, casi 40 años después, esas máquinas, en su mayoría MIG-21, componen el núcleo del parque de aviones de las Fuerzas Aéreas de varios países. No obstante, aún es temprano para hablar de que esos cazas han agotado totalmente su recurso.
Por cuenta de la instalación en esos mismos MIG-21 de modernos sistemas de información y nuevos armamentos, pueden competir perfectamente con los aviones de cuarta generación de fabricación occidental como el F-15, el F-16 y el “Mirage-2000”. Al mismo tiempo, sus posibilidades de combate se multiplican por cuatro y su plazo de explotación se prolonga aún en 20-25 años.
Los fabricantes rusos proponen variantes análogas de modernización para los aviones MIG-27, SU-22, Su-24. Y el MIG-29, por ejemplo, puede ser adoptado a los estándares de la OTAN. “Rosoboronexport” está dispuesto a ofertar a los socios extranjeros otro modelo no menos interesante: el SU-30-MK. Gracias al radar “Bars” el caza puede orientarse de forma operativa y con precisión en la situación de combate y detectar automáticamente hasta 10 aparatos aéreos a gran distancia.
Ustedes, estimados oyentes, pueden ver los modelos que se ofertan en el sitio de la compañía en la web: http://www.rusarm.ru/ Dicho sea de paso las propuestas de “Rosoboronexport” comprenden no sólo la modernización o perfeccionamiento del parque de aviones de tal o cual país. También se ofertan modelos modernos.
Tomemos por caso a Brasil, cuyo gobierno aún en 2001 anunció una licitación para la compra en un principio de 24 y después de 12 modernos caza para las Fuerzas Aéreas del país por un monto de 700 millones de dólares. De los 7 participantes 3 tienen posibilidades reales para ganar la licitación: la compañía rusa “Sujoi” con el avión SU-35, la francesa “Dassault” con el “Mirage 2000-5BR”, y las compañías SAAB y British Aerospace con el avión conjunto Grippen.
Al día de hoy la cuestión de la compra queda abierta por cuanto el presidente brasileño Luiz Inácio Lula de Silva aplazó la toma de la resolución para el año 2004. De tal modo, quedan posibilidades y bastante buenas.
Según los especialistas, el SU-35 supera a sus rivales casi en todos los parámetros: autonomía de vuelo, velocidad máxima y peso de los armamentos. Uno de los directivos de “Rosoboronexport”, Alexandr Smeliakov, entrevistado por nuestra emisora, dijo: No sólo proponemos adquirir nuestras máquinas, sino también organizar su producción conjunta sobre la base de las empresas brasileñas, cooperando a la vez con las principales compañías aeronáuticas de Brasil.
El SU-35,- dice Alexandr Smeliakov,- es tan universal, que puede ser adaptado perfectamente a los armamentos o aviónica de otros países. Por eso nuestra cooperación tecnológica con Brasil consistirá precisamente en combinar los estándares rusos y brasileños.
Actualmente, las corporaciones aeronáuticas Mikoián y Sujoi siguen ostentando el liderazgo en la creación de aviones rusos de combate. Y esto no sólo tiene que ver con los aviones de caza. Los especialistas valoran altamente el avión de asalto blindado multifuncional SU-25. Su primer vuelo lo realizó hace 25 años y desde entonces es ampliamente utilizado no sólo por el ejército ruso, sino también en muchos países de Europa, el Oriente Próximo, Africa, América del Sur y la región Asia-Pacífico. Ultimamente se hicieron varias modificaciones del SU-25: de cubierta, de choque y multifuncional. El complejo de puntería y navegación instalado en ese avión puede detectar, escoltar automáticamente y destruir objetos móviles de día y de noche, independientemente del estado del tiempo.
Fuente: Reproducido de la página web de la emisora "Voz de Rusia" y Ria Novosti