El ferrocarril Transpatagónico es un proyecto del que se está hablando desde hace más de 25 años. A iniciativa del diputado Lorenzo Pepe, su estudio de prefactibilidad para su construcción y funcionamiento dio lugar a la ley 24.364 que prevé un trazado ferroviario con llegada a los puertos del Litoral marítimo con corredores bioceánicos conectando puertos del Pacífico chileno con puertos argentinos del Atlántico Sur.
El ferrocarril Trasandino del Sur, producto de la ley 23.253, también de autoría del mencionado legislador, necesita concretar solamente la unión ferroviaria de 220 kilómetros de extensión (140 Km. en territorio argentino y 80 Km. en territorio chileno), para unir Zapala(Neuquén) de la Argentina, con Lonquimay de Chile para luego llegar hasta el puerto de Talcahuano, en el océano Pacífico.
Factibilidad: Mediante el decreto 309/98, del Poder Ejecutivo Nacional, aprobó los términos de referencia que presentó la empresa Canarail Consultants Inc. de Canadá la que realiza un proyecto de factibilidad del complejo ferroportuario patagónico que comprende el estudio de los costos de diseño, construcción, operación y mantenimiento e ingreso por fletes de carga, partiendo de la localidad de Choele-Choel vinculándola con los puertos de San Antonio Oeste, San Antonio Este, Puerto Madryn, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos en Santa Cruz y Río Grande en Tierra del Fuego, proporcionando a nuestro país de una ruta para camiones y vehículos de pasajeros entre el continente y la isla de Tierra del Fuego, que evitará la necesidad de transitar por el sur de Chile, reduciendo las demoras y el consiguiente costo.
El proyecto: La primer etapa comprende desde Choele-Choel hasta San Antonio Oeste/San Antonio Este y de San Antonio Oetse a Puerto Madryn, la reconstrucción de la línea Puerto Deseado-Colonia Las Heras y la posible vinculación con puerto Chacabuco, en Chile, habilitando también la conexión desde Zapala hasta Lonquimay, posibilidad que sumada al acceso ferroviario al Puerto San Antonio Este habilitaría un corredor bioceánico entre los puertos de San Antonio Este y Puerto Madryn en el Océano Atlántico con el puerto de Talcahuano en el océano Pacífico, optimizando por medio de ellos las exportaciones patagónicas.
La propuesta se complementa con una vinculación marítima entre el continente y la isla de Tierra del Fuego a través de un sistema de transbordadores denominado Roll on-Roll off, operará entre Punta Loyola y Caleta La Misión, proporcionando al estado argentino una vinculación permanente para camiones y vehículos entre el continente y Tierra del Fuego, reduciendo el viaje de once horas evitando el trayecto por territorio chileno que debe cubrirse actualmente para unir las ciudades de Río Gallegos y Río Grande.
La segunda etapa comprende la traza Puerto Madryn-Comodoro Rivadavia-Caleta Paula. Esta etapa incluye la prolongación de los ramales Comodoro Rivadavia, Sarmiento hasta Río Mayo y el ramal Puerto Deseado-Colonia Las Heras, hasta la localidad de Perito Moreno, interconectando los puertos chilenos de Chacabuco y Natales. Se calcula que la red por construir superará los 1.600 Km. y que la obra requerirá la participación de 15.000 personas. Este ferrocarril beneficiará a numerosas provincias, no solo patagónicas y permitirá acortar las distancias entre Tierra del Fuego y el resto del país.
El proceso del Mercosur exige hacer más eficiente y moderno el sistema de transporte multimodal, obligándonos a tener en cuenta los pronósticos para exportar a países del Pacífico, adicionando las demandas del transporte ferroviario que resultarán del uso de la hidrovía Río Tiete-Río Paraná que ejecuta Brasil para los productos de las 63.000 industrias de San Pablo.
Los beneficios: De concretarse este proyecto de los puertos patagónicos quedarán conectados con la red ferroviaria que llega a Bahía Blanca y se interconecta con los ramales a Rosario, por medio de La Pampa húmeda y a Cuyo por el ramal Laboulaye.
Los productores locales, las economías regionales y el comercio exterior argentino y del Mercosur se verán beneficiados enormemente con este proyecto y por virtud del ferrocarril Transpatagónico y del ferrocarril Transandino del Sur, estarán integrados absolutamente.
Los estudios de factibilidad para la preparación técnica de los pliegos y el llamado a licitación estuvieron a cargo de la empresa canadiense Canarail. El proyecto destaca la importancia de la interconexión del nuevo ferrocarril con distintos puertos del país, con la hidrovía de los ríos Paraná-Paraguay y con la construcción de corredores bioceánicos entre los puertos del Atlántico y el Pacífico.
El Ferrocarril Transpatagónico permitirá contar con 2.200 kilómetros de vías férreas que se extenderán desde la ciudad neuquina de Zapala hasta Ushuaia, uniendo las seis provincias patagónicas. El tendido de vías se realizará en tres etapas: la primera facilitará el traslado inicial de 2.800.000 toneladas de mercaderías. La trascendencia del proyecto se observa en que el 14 % de las exportaciones nacionales surge de las provincias patagónicas. Ese índice asciende al 32 % si se consideran las exportaciones de productos primarios y combustibles. Las estimaciones indican que sólo por fletes, el Transpatagónico producirá un ahorro de 200 millones de dólares anuales, y su explotación brindará una rentabilidad plena en menos de 5 años.
Fuente: Diario La Nación, 18 de agosto de 1999, nota del Sr. Juan Mannal y Suplemento Especial Diario Clarín.