Somalia, al borde de una nueva guerra abierta entre Gobierno e insurgentes

El Ejecutivo anuncia una ofensiva militar contra las milicias radicales. Al Shabab y Hezb al Islam controlan gran parte del país y de la capital
Somalia se encuentra al borde de una nueva guerra abierta después de que el Gobierno haya anunciado una ofensiva militar contra los insurgentes de Al Shabab (Los Muchachos) y Hezb al Islam, milicias radicales que controlan gran parte del territorio del país.

Foto: Insurgentes de la milicia Hezb al Islam, al sur de Mogadiscio. Reuters

El ministro de Defensa, Sheikh Yusuf Mohamed Siyad, líder de una milicia islámica integrada en el Gobierno, conocido como 'Indhadde', declaró que el Ejecutivo tiene "suficientes efectivos como para atacar contundentemente a los insurgentes", informaron este lunes los medios locales.
"Hemos finalizado un plan para recuperar el control de la capital y restaurar la ley y el orden. La ofensiva comenzará en Mogadiscio y se extenderá a todas las regiones de Somalia que están controladas por Al Shabab y sus aliados", aseveró 'Indhadde'.

Mientras, los combatientes de Al Shabab, milicia vinculada a Al Qaeda, han comenzado a hacer barricadas en las calles principales de Mogadiscio, se preparan para una guerra abierta y han anunciado decenas de ataques suicidas para los próximos días. Abdi Sheij Abdilahi, que afirmó ser el comandante de la brigada suicida de Al Shabab, dijo ayer a la agencia Efe por teléfono que cuentan con unos 200 jóvenes que están preparados para llevar a cabo atentados suicidas: "Ya tenemos preparados a nuestros mártires, que son unos 200, y que se inmolarán donde nos ataquen las fuerzas enemigas".

También por teléfono, uno de los supuestos suicidas de Al Shabab, que dijo tener 15 años y que no facilitó su nombre, declaró a Efe que estaba "listo para morir, para matar a los soldados del Gobierno procristiano". "Participo en la guerra santa desde hace tres años, y continuaré participando en ella hasta que me muera", aseguró.

El Gobierno de Somalia, que según sus responsables inició la planificación de la ofensiva hace varios meses, ha recibido apoyo militar de países africanos y de la Unión Europea, entre los que se encuentran Francia, Uganda y Kenia, que se limita al entrenamiento de los líderes militares somalíes. En el sur de Somalia, donde mayor es el control de los radicales islámicos, según los medios locales, miles de personas han iniciado el éxodo por temor a la anunciada ofensiva, mientras Kenia ha cerrado su frontera para evitar que Al Shabab cumpla su amenaza de atacar ese país.

Unos 3,2 millones de ciudadanos somalíes necesitan ayuda humanitaria para poder sobrevivir, y uno de cada seis niños sufre malnutrición aguda en el país, según anunció la ONU el viernes pasado. Somalia carece de Gobierno estable desde que el dictador Siad Barré fuera derrocado en 1991 y vive en una permanente guerra civil entre clanes, señores de la guerra y grupos islámicos, entre los que destaca Al Shabab, que controla buena parte de Mogadiscio y del sur y el centro de Somalia.

Fuente: elmundo.es