Por Eduardo Szklarz/Diálogo - Los nuevos sensores serán vitales para la seguridad de la cumbre de líderes mundiales, que se realiza a finales de 2018 en Buenos Aires.
El radar MTPS-43, de largo alcance, será actualizado para garantizar la vigilancia aeroespacial de Argentina durante el G20. (Foto: Fuerza Aérea Argentina)
La Argentina está reforzando su sistema de radares para asegurar la vigilancia aeroespacial durante la Cumbre de Líderes del G20, prevista para el 30 de noviembre y el 1.o de diciembre de 2018 en Buenos Aires. El país va a renovar los radares MTPS-43 y TPS-43, de largo alcance, y fabricar el RAM-2, un radar de alcance mediano.
La iniciativa integra un amplio proceso de desarrollo e instalación de sensores a través de contratos firmados entre la Fuerza Aérea Argentina (FAA) y el Instituto de Investigaciones Aplicadas (INVAP), una empresa nacional de alta tecnología. Hasta ahora la prioridad en la instalación de radares había sido la frontera norte, donde operan redes de narcotráfico y trata de personas. Pero con la proximidad de la cumbre del G20, que reunirá a los mandatarios de los principales países del mundo en Buenos Aires, el Ministerio de Defensa de Argentina decidió fortalecer la vigilancia también alrededor de la capital.
“Ya contamos con un radar operativo en la ciudad de Merlo [a unos 40 kilómetros de Buenos Aires], pero su radio de cobertura es limitado. Para el G20, vimos la necesidad de brindar vigilancia y control aeroespacial en toda la provincia de Buenos Aires”, dijo a Diálogo el Comodoro Carlos Marcelo Villa, director de Sensores Radar de la Dirección General de Material de la FAA. “Con tres radares móviles más, tendremos la capacidad suficiente para asegurar una defensa aeroespacial integral”, completó.
Juan Belikow, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad de Buenos Aires, dijo a Diálogo que los radares serán de suma importancia para la seguridad del evento. “Hay jefes de Estado que no vendrían al país de no garantizarse este requisito que, por otra parte, es obligatorio para cualquier sede del G20”, afirmó Belikow. “Esos equipos serán también fundamentales para la lucha contra el narcotráfico y el contrabando de otros bienes ilícitos en la región.”
Los tres radares
El desarrollo de los radares argentinos incluye dos procesos: actualización y modernización. “Actualizar es cuando uno tiene un componente y le hace una mejora a ese mismo componente. Es lo que llamamos un upgrade”, explicó el Comod. Villa. “Modernizar es cuando uno cambia el componente por algo que cumple una función más moderna.”
En ese sentido, el Ministerio de Defensa de Argentina y la FAA decidieron contar con los siguientes radares para el G20:
• Un radar móvil MTPS-43, de 1978, 3D (azimut, distancia y altura) y de largo alcance (200 millas náuticas o 360 km). Este aparato ya había sido modernizado y estaba operativo en la provincia de Chaco, en el norte argentino. El INVAP lo va a actualizar.
• Un radar móvil TPS-43, también de 1978, 3D y de largo alcance, que no estaba operativo. “Ese radar lo vamos a modernizar y se va a convertir en un MTPS-43, o sea que los dos radares van a quedar iguales”, dijo el Comod. Villa.
El Radar de Alcance Mediano Experimental sirvió para el desarrollo del modelo RAM-2, que será usado para asegurar la vigilancia aeroespacial durante el G20 en Buenos Aires. (Foto: Fuerza Aérea Argentina)
• Un radar RAM-2, 3D y de mediano alcance (170 millas náuticas o 306 km). Este es un radar nuevo, que está en desarrollo.
“Como especialista en radar, puedo decir que esos sensores son de prestaciones similares a los internacionales. Argentina ha logrado autonomía en el desarrollo de estos sistemas”, afirmó el Comod. Villa. “Además, el 70 por ciento de los componentes son de industria nacional.”
Ubicados en lugares estratégicos, los tres aparatos brindarán una cobertura integral sobre la provincia de Buenos Aires. “No va a haber medio que ingrese al espacio aéreo de la provincia que no sea visto por esos radares”, precisó el oficial. “Después del G20, el radar MTPS-43 volverá al Chaco y los otros dos seguramente van a contribuir a la seguridad aeroespacial del norte del país.”
Los plazos de modernización, actualización y fabricación oscilan entre siete y 10 meses desde el momento de la firma del contrato. “La meta es tener un radar en agosto, otro en septiembre y el tercero en octubre”, aclaró el Comod. Villa. “Estamos trabajando muy rápido con el INVAP, tratando de minimizar los riesgos para cumplir con esos objetivos.”
Centro de coordinación
La FAA destacó el trabajo interagencial que será desarrollado durante el G20. “Tenemos la responsabilidad primaria de la vigilancia y el control aeroespacial. Y le brindamos esa información a las fuerzas de seguridad para que realicen las tareas de su competencia”, aclaró el Comod. Villa.
El oficial recordó que habrá un centro de coordinación para la defensa aérea trabajando codo a codo con un centro similar para la defensa terrestre. Ambos estarán en permanente contacto con las fuerzas de seguridad.
Los nuevos radares formarán parte del Sistema Nacional de Vigilancia y Control Aeroespacial (SINVICA), que busca lograr cobertura aérea y marítima sobre todo el territorio argentino. “El SINVICA es un programa ambicioso, con una gran cantidad de radares a lo largo y a lo ancho del país”, completó el Comod. Villa.
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