(La Voz de Rusia) - La tarea más importante para China
desde el inicio de su rivalidad militar con EEUU fue crear en el plazo
más corto posible armamentos capaces de neutralizar portaaviones. Sin
embargo, en comparación con el respectivo potencial de la antigua Unión
Soviética, China aún anda notablemente atrasada en el desarrollo de ese
tipo de armas.
Collage: La Voz de Rusia
La
Armada soviética estaba en condiciones de destruir al menos varios
grupos de portaaviones. La respectiva fuerza soviética tenía su
componente clave en las divisiones de bombarderos Tu-22M2 y Tu-22M3
armados con misiles de crucero X-22.
Estos
aviones representaban el pináculo del desarrollo de los medios
portamisiles aéreos en la Unión Soviética. El problema era que para
atacar un solo portaaviones con su flotilla de escolta había que
utilizar al menos una división de bombarderos portamisiles, integrada
por noventa aparatos, o sea, muchos más de los que posee la aviación
china y un número casi igual a la totalidad de los bombarderos H-6 en
dotación de las FFAA de China, hoy día. La estrategia soviética partía
de la necesidad de combatir seis portaaviones de una vez. Pero la Fuerza
Naval de la URSS solo contaba con cuatro divisiones de bombarderos
portamisiles Tu-22 y Tu-16. El resto eran aparatos de la aviación de
largo alcance.
Las
bajas iban a ser muchas incluso en caso de éxito. Se estimaba la
pérdida de un 50 % de la fuerza atacante. Algunos aviones de
reconocimiento y designación de objetivos se daban por perdidos ya en la
etapa de planificación del ataque.
El
éxito de la operación dependía de varios factores, pero, ante todo, de
la localización del blanco. Esta misión corría a cargo de los aviones de
reconocimiento Tu- 95RTs y el sistema de satélites de designación del
objetivo llamado Leyenda. Sin embargo, los aviones eran vulnerables y
los satélites inseguros. Por eso, en tiempos de paz, un buque de
superficie soviético seguía a cada grupo de portaaviones estadounidenses
ejecutando el control visual y transmitiendo continuamente las
coordenadas actualizadas del mismo. En caso de un ataque y antes de su
inevitable perdición, este buque debía ocasionar el máximo daño posible
al portaaviones enemigo. Obviamente, no era muy eficaz como un arma de
ataque, pero su misión se daba por cumplida ya con la transmisión de las
coordenadas exactas del blanco.
Se
suponía que la aviación naval operaría en coordinación con los cruceros
portamisiles y submarinos nucleares dotados de misiles de crucero
pesados. El conjunto de estas fuerzas daba un alto grado de seguridad
para romper la defensa de los buques de escolta y destruir el
portaaviones. Cabe señalar que los cruceros portamisiles de superficie
y, sobre todo, los submarinos nucleares eran armas tan costosas que el
conjunto de las llamadas “medidas asimétricas” soviéticas difícilmente
resultaban más barato que los propios portaaviones estadounidenses.
Por
otro lado, para construir portaaviones comparables en eficacia con los
de EEUU, la Unión Soviética habría necesitado décadas enteras de
experiencia, mientras que esta estrategia le permitía aprovechar el
personal calificado y las tecnologías disponibles en sus FFAA.
A
pesar de la aparente similitud de estrategias, la fuerza china
destinada a impedir la eventual injerencia militar estadounidense en
Asia tiene poco que ver con el respectivo cuerpo soviético, ya que no
dispone de cruceros portamisiles ni de submarinos nucleares con misiles
de crucero pesados, y posee muy pocos bombarderos portamisiles de largo
alcance.
La
fuerza de ataque de la aviación naval china está integrada en buena
parte por cazas y bombarderos tácticos armados con misiles antibuque
relativamente ligeros. Su área de acción se limita a la primera cadena
de islas y las inmediaciones de Taiwán, con lo que China evita la
necesidad de construir muchos bombarderos pesados. Se sabe que el país
asiático posee un nuevo tipo de misiles balísticos antibuque, pero su
real capacidad aún sigue siendo un enigma. La Armada china incorpora
activamente nuevos submarinos diesel-eléctricos.
EEUU
asigna importantes recursos financieros para contrarrestar la
estrategia china. Entre otras medidas, está mejorando la defensa
antiaérea de su fuerza naval. Además, considera el posible bloqueo de
las vías estratégicas de comunicaciones marítimas. La tarea de alcanzar
los niveles soviéticos en la capacidad de combatir los portaaviones
estadounidenses resultaría demasiado costosa para China y le podría
impedir la construcción de portaaviones propios. Por otro lado, es
bastante peligroso apostar únicamente por los misiles balísticos
antibuque. Todo parece indicar que, en algún momento, China tendrá que
escoger entre las dos estrategias de desarrollo de su fuerza naval, para
evitar la trampa en la que cayó la Armada soviética.
nv/as/sm
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
china no necesita gastar miles de millones de dolares para destruir portaviones, porque nunca se enfrentaran, china es el mayor tenedor de deuda americana, si deja de comprarle bonos EEUU quiebra, aparte de las enormes reservas de dolares que tiene China, si se desprende de ellas, por ejemplo comprando oro o cualquier cosa, el dolar se hunde... EEUU necesita a china, necesita poder vender sus productos ahi... Los chinos lo saben y lo tienen agarrado por los huevos.
ResponderEliminarComo ganar una guerra, sin tirar un tiro jejejeje
Grandes Chinos!!! - -
No te olvides de la opcion de no pagar la deuda, el dolar se recuperaria en poco tiempo del crack inicial y china perderia miles de millones de dolares que los americanos se ahorrarian en devolver, resultado china pierde mucho mas que u.s.a.
EliminarRealmente crees que los americanos son tan estupidos de entregar a china la forma de derrotar a su pais.