Macri habló con Putin sobre la represa de Neuquén

Por Martín Bidegaray - Clarin.com
El gobierno argentino está definiendo un préstamo de US$ 1.900 millones con el banco de desarrollo ruso. Es para la construcción de la represa Chihuido en Neuquén. Pero le queda por sobrellevar un obstáculo no menor: la tasa de interés que le cobrarán. El presidente Mauricio Macri le hizo ayer una propuesta al mandatario ruso Vladimir Putin y para hoy se espera una definición.


Chihuido es una obra presupuestada en US$ 2.200 millones, que puede llegar a US$ 2.600 millones, por readecuaciones y redeterminaciones. El gobierno anterior había convenido -pero no llegó a firmar- una tasa de financiamiento del 6,5%, pero la actual administración argumenta que el riesgo país argentino está bajando (la provincia de Buenos Aires se endeudó al 5,75%) y que se puede reducir la tasa. A partir de ese planteo, el banco ruso Vnesheconombank ofreció financiar la obra con una tasa de 5,5%.

Putin tuvo ayer una conversación telefónica con Macri. De la Casa Rosada salió una propuesta para el gobierno ruso de una tasa de 5%. Y hasta hay funcionarios que creen que es posible arreglar por menos, por el 4,5% de interés.

Si todo se encamina, es probable que el ministro de Interior y Obras Públicas, Rogelio Frigerio, vaya a Rusia. La invitación comprendería al presidente Macri, pero no viajaría. Aunque las represas de Santa Cruz están dentro del ministerio de Energía, Chihuido quedó bajo la órbita del ministerio del Interior y Obras Públicas.

Corporación América (de Eduardo Eurnekian) y Panedile forman parte del consorcio que resultó adjudicatario de la obra. En su momento, se habló de un 85% de financiamiento ruso, pero ahora esa propuesta también fue reformulada y comprendería un 95% de la obra. La obra se extendería por 20 años y el préstamo tiene 66 meses de gracia. Sobre un total de US$ 2.200 millones, los rusos financiarían US$ 1.900 millones.

Clarín adelantó que Eurnekian esperaba que todo estuviera listo para el próximo jueves 16 con Putin en San Petesburgo. Ahora, las negociaciones se están haciendo directamente entre los gobiernos.