Argentina se convirtió en las últimas tres décadas en el país que más redujo su gasto militar en Sudamérica al pasar de 9.198 millones de dólares en 1980 a 2.830 millones en 2008, según el Ministerio de Defensa argentino.
Las estadísticas oficiales aseguran que el presupuesto militar de Argentina en 1980 representaba un 4,4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) del país, mientras que en la actualidad, si llega al 0,8 por ciento, uno de los índices más bajos de la región. Esta reducción se vincula con la historia de este país sudamericano, ya que en 1980 la fuerte inversión en Defensa respondía a los intereses del gobierno militar que se había impuesto cuatro años antes mediante un golpe de Estado, informó la agencia de noticias Notimex.
En 1983 los argentinos recuperaron la democracia, con lo cual el gasto militar comenzó a sufrir reducciones paulatinas hasta que en 1990 llegó a 2.052 millones de dólares, equivalente a un 1,45 del PIB. Una década más tarde, el presupuesto del sector aumentó a 3.739 millones de dólares, aunque su peso en el PIB fue menor, de apenas 1,35 por ciento, en tanto que en los años siguientes continuó una línea descendente.
El director del Centro de Estudios Nueva Mayoría, Rosendo Fraga, consideró que Argentina se convirtió en un caso extremo, en una región que, en general, registró un incremento presupuestario en materia de Defensa en los últimos tres años. El prestigiado analista de temas militares añadió que, sin embargo, es muy representativo que, a pesar del aumento nominal de Sudamérica en Defensa, siga siendo la región con el presupuesto más bajo del mundo en términos de PIB ya que sólo representa 2,0 por ciento. "La modernización de armamentos tiene más que ver con la necesidad de tener personal adecuadamente adiestrado antes que con un conflicto regional, aunque con algunas excepciones, como la de Venezuela o la de Colombia", afirmó Fraga.
Agregó que esta política de falta de inversión amplía la brecha tecnológica con las potencias militares ubicadas fuera de la región, pese a los esfuerzos brasileños por desarrollar proyectos y acuerdos que lo acerquen a los países con poder armamentístico. "La modernización de las organizaciones militares requiere bajos recursos, pero es muy resistida por el espíritu burocrático y corporativo que suelen tener las Fuerzas Armadas", explicó el analista. Un estudio del Centro de Estudios Nueva Mayoría precisó que los gastos en Defensa a nivel mundial se redujeron un promedio de 4,5 por ciento anual a partir de 1987, pero aumentaron sostenidamente desde 2001, tras los ataques terroristas en Estados Unidos.
En ese marco, el gasto militar en América del Sur pasó de 39.143 millones de dólares en 2007 a 51.110 millones de dólares al año siguiente, con países como Venezuela, Colombia y Brasil liderando un rubro donde Argentina quedó ya muy rezagado.
Fuente: Infodefensa.com
Es sumamente triste, pero todo gracias al mono riojano y los ex-montoneros.
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