La elección uruguaya de blindados rusos Bear descartó los vehículos Paramount y los británicos Saxon

(defensa.com) - La firma sudafricana Paramount, que fabrica los Marauder, Matador y Maverick (como los que equipan a la Policía Militar de Río de Janeiro), así como los británicos Saxon AT 105, además de ofertas turcas a cargo de la empresa local ITC y otras de habituales proveedores de vehículos militares y policiales fueron en diversas instancias descartadas por el Ministerio del Interior uruguayo, para acabar anulando una licitación convocada hace casi seis meses para incorporar otros tres blindados para la Guardia Republicana, grupo de choque militarizado de élite de la Policía Nacional Uruguaya.

La Guardia Republicana, ante la radicalización, el aumento y la progresiva tecnificación de ciertas expresiones de violencia urbana, así como la habitual generación de duros disturbios deportivos, motines carcelarios  e inclusive crecientes reyertas entre bandas de narcotraficantes, había solicitado unos 9 blindados que se sumasen a los actuales 3 Gaz Tigr, para su distribución en las zonas más agitadas del territorio nacional,y, de ser posible, el mismo modelo. Dado que el Ministerio del Interior licitaba una partida inicial de 3 ejemplares, Paramount y la británica  L Jackson & Co, perdieron interés en la convocatoria, ya que no sería viable para ninguna de las dos colocar menos de seis vehículos, con su respectivo parque de repuestos, manuales, cursos, etc.

La opción británica, ejemplares retrofitados a partir de los originales con ametralladora 7.62 mm., basicamente un camion bedford blindado y artillado, con equipos antibarricada, y muchas otras capacidas- utilizado en Baherein, Ucrania, Malasia , Omán e Irak,  hubiera llegado a Uruguay por un precio unitario menor a 90.000 dólares, bastante más económico que otras alternativas. También, hubo ofertas de otras empresas locales, como ITC, habitual representante local de la industria de defensa turca (aunque no se habrían tratado de productos Otokar), que sí permanecieron en la licitación finalmente declarada desierta, cuya anulación produjo a sus ejecutivos un gran "desconcierto".

Aunque se habló insistentemente de cuestionamientos  y posibles impugnaciones al procedimiento, la exigua cantidad de unidades en cuestión dejaría estas posibilidades de lado, de momento, aunque diversos dealers locales están visiblemente molestos con la permanente recurrencia a compras directas por parte del Ministerio del Interior, más de una vez observada por el Tribunal de Cuentas y parlamentarios de la oposición. La militarización policial que se ha dado en los últimos años, y sus escasos resultados es vista con gran preocupación desde las Fuerzas Armadas. (Javier Bonilla)