Comprar armas rusas también es una opción más barata para aquellos países en desarrollo, que en caso contrario, tendrían que construir sus propias industrias de defensa. China es un obvio cliente para los fabricantes de armas rusas. Otros Estados como la India, Brasil, Indonesia e Irán siguen dirigiéndose a Moscú para llenar sus arsenales. Incluso varios aliados de Occidente, como Turquía, Arabia Saudita y Corea del Sur han considerado la compra de armas rusas en uno u otro momento.
El portal National Interest ha seleccionado las cinco mejores armas que Rusia puede vender en todo el mundo.
Sukhoi Su-27
El caza Su-27 (designación de OTAN: Flanker) fue la respuesta soviética a los aviones estadounidenses F-15 y F-16. Está pensado para realizar misiones de superioridad aérea, pero también es apto para cualquier operación de combate. El caza supera a sus rivales norteamericanos en velocidad, ya que alcanza unos 2.525 kilómetros por hora, y puede portar armas aire-aire, como misiles.
Muchos países del mundo cuentan con Su-27 o modelos derivados. Estos son la India, Indonesia o Vietnam, mientras que China tiene licencia para fabricar el caza bajo el nombre J-11. Por su parte, la desintegración de la Unión Soviética permitió a sus exintegrantes, como Bielorrusia, Ucrania, Kazajistán y Uzbekistán, quedarse con sus propios Su-27.
Sukhoi Su-35
El Su-35 (designación de OTAN: Flanker-E), es un impresionante derivado del Su-27. Fue construido para afrontar los nuevos retos en el mundo después de la Guerra Fría y se espera que entre en servicio a finales de este año. Esta aeronave de generación 4++ alcanza una velocidad máxima de 2.390 kilómetros por hora y dispone de un mejorado sistema de armamento.
Algunos gobiernos extranjeros, sobre todo China, ya expresaron su interés en la compra del caza una vez se inicien las exportaciones. Corea del Sur, Indonesia, la India y Brasil también se encuentran entre los clientes potenciales.
El tanque T-90
El tanque T-90 es la versión más sofisticada de la familia de los carros de combate soviéticos T-72/T-80. Es más pequeño y más ligero que el estadounidense M-1 Abrams. El T-90 pesa tan solo 46 toneladas frente a las 60 toneladas del Abrams. Sin embargo, dispone de un arma no menos poderosa con sistema de control de fuego más avanzado, así como cañón de ánima lisa de 125 mm., capaz de disparar proyectiles perforantes de uranio empobrecido y misiles antitanques AT-11 guiados por láser, con un alcance de cuatro kilómetros.
T-14 Armata
El tanque T-14, estrenado este año, ha atraído rápidamente el interés de especialistas internacionales, representando una nueva generación de carros de combate. Diseñado completamente desde cero, el Armata destaca con una torre totalmente automatizada y deshabitada, operada por la tripulación del tanque en modo digital desde una cápsula fuertemente blindada.
El tanque consta de un cañón-lanzador de 125 milímetros de calibre y ametralladora de 7,62 mm. Otra ventaja de este tanque es su radar, capaz de seguir en modo automático hasta 40 objetivos dinámicos (proyectiles) y 25 blancos aerodinámicos, así como rastrear un territorio en un radio de unos 100 kilómetros. La defensa activa del tanque es capaz de destruir todos los proyectiles y misiles que se dirijan contra él a una velocidad de hasta 1.700 metros por segundo. El tanque tiene muy buenas perspectivas comerciales, considerando que China y la India intentan actualizar su flota blindada, que generalmente consiste en vehículos de fabricación soviética.
El sistema antiáereo S-400 Triumf
El S-400 es actualmente el más avanzado sistema ruso de defensa antiaérea y antimisilística. Tiene un alcance de hasta 400 kilómetros y puede abatir blancos a una altura de entre 5 metros y 60 kilómetros.
Este complejo es capaz de vigilar simultáneamente hasta 36 blancos aéreos de cualquier tipo y contraatacarlos con hasta 72 misiles.
Rusia ya ha desplegado estos sistemas en la provincia de Kaliningrado, un enclave colindante con Polonia y Lituania, teniendo así bajo control una amplia gama de operaciones de la OTAN.
En abril pasado, Rusia y China ya firmaron un contrato para el suministro de sistemas rusos de defensa antiaérea S-400 Triumf al gigante asiático por valor de 3.000 millones de dólares. Esto pondría en peligro las operaciones de EE.UU. en el oeste del Pacífico en caso de hostilidades entre Pekín y Washington en dicha zona. Además aseguraría la superioridad china en el aire frente a Taiwán. Arabia Saudita, Turquía y Belorrusia también han expresado su interés en dichos sistemas.
bahhhhhh pura basura militarmente rusia nunca podria contra eeuu solo puede contra paises vecinos y pequeños ademas rusia se caracteriza por fabricar armamento mediochatarra y barato
ResponderEliminarCOMO IDEA, PODRIA SER BUENA, PERO NUESTROS MILITARES NO TIENEN BUENA ONDA CON EL MATERIAL RUSO, HASTA AHORA, EL TEMA PASA POR VARIOS CARRILES, ENTRE ELLOS EL ECONOMICO Y SOBRE TODO LA VOLUNTAD POLITICA. ES UN LINDO SUEÑO
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