Nadie puede decir que es imposible. Obras mayores y más costosas se han hecho. Todos pueden decir que es imposible. Obras menores y mucho más baratas no se han hecho...
¿Hay un punto intermedio en la Argentina desplanificada, que pese a todo tiene un ministerio para tal fin? ¿Toda obra de infraestructura es una decisión política? De ser así, hay que darle la derecha a quienes creen que no hay manera de pensar un proyecto de tales características: dragar el Riachuelo y llegar con barcazas al Mercado Central para darle salida a los productos frescos vía convenios con otros puertos del mundo (el de Barcelona por ejemplo) y lograr una expansión no adyacente a los espacios actuales del puerto de Buenos Aires. Es decir, si hubiera que atar el efecto "Riachuelo como vía navegable" a la causa política, por lo que se ve hoy de la clase política, descartemos dicho efecto.
En 2001, cuando Ricardo del Valle estaba al frente de la Administración General de Puertos (AGP), suscribió un acuerdo con la Corporación del Mercado Central de Buenos Aires para que el puerto use unas cuantas hectáreas (360) para almacenamiento y distribución. No hubo avances hasta ahora.
Dicen, no obstante, que esta semana se firma definitivamente el convenio (por 105 hectáreas). Y la idea es, en algún día, lograr dragar el Riachuelo y ver trenes de barcazas por allí. Dicen que esta semana se fijan las pautas finales, y los costos con el Mercado Central. Y dicen, las autoridades que andan detrás del proyecto, que van a ver "en vida" barcazas navegando por el Riachuelo, con productos frescos, con Europa como destino final...
Fuente: LA NACION
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