Por Fernando Bertello - LA NACION
Una misión empresaria vendrá en mayo con ese objetivo.
Además de la soja, China está interesada en poner el foco en otro producto emblemático del campo argentino: la leche. Según pudo saber La Nacion, en mayo próximo visitará la Argentina una delegación de Mengniu, una gigantesca corporación vinculada con el Estado que, entre otros productos, maneja el 25% del consumo de lácteos en ese país. El objetivo de la misión es buscar socios para entrar en el negocio local.
"La idea de la corporación es venir a producir leche en la Argentina; ellos están dispuestos a producir y procesar. Vienen a buscar socios", expresó Miguel Paulón, presidente del Centro de la Industria Lechera CIL).
En noviembre pasado, cuando el ministro de Agricultura, Julián Domínguez, viajó a Pekín para cerrar un acuerdo para la apertura del mercado chino para la carne bovina, los empresarios asiáticos tomaron contacto por primera vez con sus pares argentinos. Otra fuente de la industria no descartó que los chinos evalúen comprar vaquillonas en el país, una estrategia que ya hizo Venezuela por un acuerdo firmado en 2006 entre ambos gobiernos.
Con un crecimiento económico que no se detiene y miles de chinos que acceden cada vez más a una mejor alimentación, en ese país está previsto que el consumo de lácteos suba 15% en los próximos cinco años. Cada habitante allí consume productos lácteos por el equivalente a unos 24 litros por año, contra 200 litros de la Argentina. Se estima que este año China va a importar más de 400.000 toneladas de leche en polvo. En este contexto, los chinos están buscando abastecerse en el exterior y la Argentina podría entrar en esa estrategia.
"Vamos a recibirlos y contactarlos con nuestros socios", indicó Paulón. Informalmente trascendió que algunas empresas argentinas ya habrían abierto tratativas reservadas con la empresa china para acelerar negociaciones. Según Paulón, además de buscar alianzas de negocios para asegurarse el abastecimiento desde la Argentina, "es probable" que la corporación china también intente atender el mercado local. En China, Mengniu procesa todos los días 9,8 millones de litros. Eso equivale, para comparar, a casi dos veces el volumen que aquí maneja La Serenísima en su pico de producción.
En la actualidad, China ocupa el décimo lugar en el ranking de compradores de los productos lácteos argentinos, encabezado por Venezuela. Según datos del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el año pasado el mercado chino se llevó 2914 toneladas de leche en polvo por un monto de US$ 9,67 millones.
Además, adquirió 708 toneladas de quesos por 2,63 millones de dólares. En el rubro otros lácteos, que comprende la categoría sueros y proteína lácticas, ese mercado compró 5822 toneladas por 12,7 millones de dólares. "Creo que esto puede ser una alternativa interesante [de negocio] y va a impactar favorablemente en la producción argentina", concluyó el presidente del CIL.
Blog independiente que impulsa el desarrollo científico -tecnológico, socio-económico y la capacidad de defensa nacional. Sin inversión no hay tecnología y sin tecnología no hay desarrollo, y sin desarrollo, no hay defensa. El derecho a vivir libremente conlleva la responsabilidad de defender esa libertad frente a cualquier ataque. "Solo quienes pueden ver se dan cuenta que falta algo"... Desde el 2006 junto a ustedes.
martes, 22 de febrero de 2011
Después de 50 años, proyectan construir un nuevo pabellón en Ciencias Exactas
Por Nora Bär - LA NACION
Dos egresados, el matemático Sebastián Ceria y el arquitecto Rafael Viñoly, donan su participación
Fotos: Ceria / Viñoly
Sebastián Ceria, uno de los directores de la empresa de software Axioma, es reconocido como una autoridad en el campo de la "optimización" [la rama de la matemática que intenta dar respuesta a problemas en los que se desea elegir el mejor entre un conjunto de elementos].
El viernes último, Ceria y Viñoly mantuvieron una audiencia con la presidenta Cristina Fernández acompañados por el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, Lino Barañao, para proponerle la construcción de un nuevo pabellón en la Ciudad Universitaria que albergaría los departamentos de Computación y Ciencias de la Atmósfera, y el Instituto de Cálculo. Viñoly donaría el diseño (calculado en un 4% de la obra) y Ceria, el proyecto, que equivale a unos 150.000 dólares.
"Hace mucho tiempo que vivimos en el extranjero -cuenta Ceria-, pero tanto Rafael como yo pensamos que tenemos una deuda con la universidad en la Argentina. Dado que en Exactas hace mucho tiempo que no se construye y que la computación creció muchísimo en estas décadas, se nos ocurrió la idea de crear un nuevo ámbito que atraiga tanto a los científicos como al público en general. Creemos que será un imán que atraerá a la gente joven para que se forme en esta disciplina."
La Facultad de Ciencias Exactas y Naturales es el principal centro de formación científica del país. Allí trabaja el 10% de los investigadores del Conicet y obtiene su título (en áreas como la matemática, la física, la química, la biología, la geología, la paleontología, la oceanografía y las ciencias de la atmósfera) el 25% de los doctores de la Argentina. "El nuevo edificio tendría como motivo el cero y el infinito, que inspiran dos patios interiores que ilustran el poder de crecimiento que brinda la ciencia -afirma el matemático-. Un pabellón adicional permitiría que los chicos vinieran con sus computadoras para interactuar con los docentes de la facultad."
La construcción está planteada en planta baja y un piso, con dos patios abiertos que permiten el vínculo con el exterior. El acceso principal se conectaría con el Pabellón I (donde hoy se cursan las carreras de Física, Matemática y Computación). El edificio agregaría unos 10.000 m2 a la Facultad de Ciencias Exactas, tendría un diseño de bajo mantenimiento y amigable con el ambiente, e integraría en un mismo ámbito la docencia y la investigación, además de propiciar una fluida colaboración entre la universidad y las industrias.
Lo único que falta determinar, ahora, es qué área del Estado se hará cargo del financiamiento de la obra, cuyo costo se calcula en alrededor de un millón de dólares. La iniciativa, tan infrecuente por estas latitudes, es destacable. "En esto no nos preocupa ser originales -subraya Ceria-. Ojalá que tengamos muchos imitadores y que este ejemplo se multiplique. No importa el tamaño de la donación, la universidad necesita de todos sus graduados." y es el creador de algunos de los edificios más notables del mundo, como el Foro Internacional de Tokio, entre muchos otros. Si bien sus caminos profesionales son diferentes, tienen algo en común: ambos viven en Nueva York, donde desarrollaron carreras brillantes, y ambos son graduados de la Universidad de Buenos Aires.
Dos egresados, el matemático Sebastián Ceria y el arquitecto Rafael Viñoly, donan su participación
Sebastián Ceria, uno de los directores de la empresa de software Axioma, es reconocido como una autoridad en el campo de la "optimización" [la rama de la matemática que intenta dar respuesta a problemas en los que se desea elegir el mejor entre un conjunto de elementos].
Rafael Viñoly dirige una conocida compañía de arquitectos que lleva su nombre (con filiales en Londres, Los Angeles, Abu Dhabi, Dubai y Bahrein)
"Hace mucho tiempo que vivimos en el extranjero -cuenta Ceria-, pero tanto Rafael como yo pensamos que tenemos una deuda con la universidad en la Argentina. Dado que en Exactas hace mucho tiempo que no se construye y que la computación creció muchísimo en estas décadas, se nos ocurrió la idea de crear un nuevo ámbito que atraiga tanto a los científicos como al público en general. Creemos que será un imán que atraerá a la gente joven para que se forme en esta disciplina."
La Facultad de Ciencias Exactas y Naturales es el principal centro de formación científica del país. Allí trabaja el 10% de los investigadores del Conicet y obtiene su título (en áreas como la matemática, la física, la química, la biología, la geología, la paleontología, la oceanografía y las ciencias de la atmósfera) el 25% de los doctores de la Argentina. "El nuevo edificio tendría como motivo el cero y el infinito, que inspiran dos patios interiores que ilustran el poder de crecimiento que brinda la ciencia -afirma el matemático-. Un pabellón adicional permitiría que los chicos vinieran con sus computadoras para interactuar con los docentes de la facultad."
La construcción está planteada en planta baja y un piso, con dos patios abiertos que permiten el vínculo con el exterior. El acceso principal se conectaría con el Pabellón I (donde hoy se cursan las carreras de Física, Matemática y Computación). El edificio agregaría unos 10.000 m2 a la Facultad de Ciencias Exactas, tendría un diseño de bajo mantenimiento y amigable con el ambiente, e integraría en un mismo ámbito la docencia y la investigación, además de propiciar una fluida colaboración entre la universidad y las industrias.
Lo único que falta determinar, ahora, es qué área del Estado se hará cargo del financiamiento de la obra, cuyo costo se calcula en alrededor de un millón de dólares. La iniciativa, tan infrecuente por estas latitudes, es destacable. "En esto no nos preocupa ser originales -subraya Ceria-. Ojalá que tengamos muchos imitadores y que este ejemplo se multiplique. No importa el tamaño de la donación, la universidad necesita de todos sus graduados." y es el creador de algunos de los edificios más notables del mundo, como el Foro Internacional de Tokio, entre muchos otros. Si bien sus caminos profesionales son diferentes, tienen algo en común: ambos viven en Nueva York, donde desarrollaron carreras brillantes, y ambos son graduados de la Universidad de Buenos Aires.
Los peligros que encierra un país sin controles
Por Delia Ferreira Rubio para LA NACION
La función de control es esencial en las democracias. Sin control la discrecionalidad y la impunidad aumentan; los funcionarios comienzan a comportarse como dueños de los recursos y los derechos de los ciudadanos y hacen con ellos lo que se les ocurre. Sin control no hay límites al poder, ni se puede hacer efectiva la responsabilidad de los funcionarios.
Un principio elemental del control es que el controlante no dependa del controlado, es decir que sea independiente. Ese principio no se cumple acabadamente en el sistema político argentino. En efecto, la Sindicatura General (Sigen) depende del gobierno de turno, al igual que la Oficina Anticorrupción. La Auditoría General de la Nación (AGN), que es el órgano de control externo en la órbita del Congreso, está integrado por siete miembros, cuatro de los cuales pertenecen al oficialismo.
La independencia no basta; es necesario que los organismos de control tengan la competencia y los recursos necesarios para llevar adelante su labor. Si el órgano de control no puede acceder a la información necesaria, directamente el control no existe. Si el controlado -en este caso el Gobierno- no brinda la información sobre las compras que realiza, los precios que paga, las empresas que contrata, los subsidios y recursos que reparte, el control es imposible. Es el caldo de cultivo perfecto para el abuso de poder y la corrupción.
El control tiene por finalidad detectar los problemas, pero no como una cacería de brujas, sino como un mecanismo de corrección. Los informes de la AGN incluyen sugerencias y recomendaciones para que la administración corrija errores, mejore sus procedimientos, en fin, ajuste su actuación a la ley. Pero de poco sirven esas sugerencias, si el Congreso actúa como obstáculo al control, al acumular los informes sin darles tratamiento.
El Gobierno tiene una actitud paradojal en materia de información. Mientras el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, intima a las consultoras privadas para que le digan en qué basan sus estudios y mediciones sobre los niveles de inflación, bajo amenaza de aplicar sanciones, el mismo Gobierno se muestra reacio a brindar la información que le solicita la Auditoría General de la Nación, que ha debido recurrir a la Justicia para intentar conseguir los datos necesarios para realizar su labor. Tampoco es seguro que el medio elegido sea eficaz, ya que el cumplimiento de las órdenes judiciales no es precisamente una conducta habitual de esta administración.
El Gobierno ha dado pruebas suficientes de su escasa vocación por la transparencia. La Sigen dejó de publicar en su página de Internet los informes que elabora. El organismo que se encargaba de velar por el acceso a la información pública fue desarticulado. La Jefatura de Gabinete se escuda en el derecho a la intimidad para no responder los pedidos de información sobre publicidad oficial o el programa Futbol para Todos. El Indec dejó de dar información para trasmitir el "relato" oficial, que poco tiene que ver con la realidad.
La falta de transparencia no sólo pone de manifiesto un desprecio notable por los principios básicos de la República, sino que da lugar a la sospecha. Si la administración ha actuado dentro de la ley, por qué no proporcionar la información solicitada por el organismo de control. Por sólo mencionar un caso, si los subsidios a las obras sociales para la compra de medicamentos se otorgaron correctamente, qué problema hay en dar esa información. La causa que investiga la denominada "mafia de los medicamentos" parece dar alguna explicación.
El déficit en la función de control genera incentivos para la corrupción, favorece el abuso de poder, facilita la influencia del crimen organizado en las estructuras del Estado, afecta la seguridad jurídica y garantiza la impunidad.
En la Argentina, la falta de control no es una amenaza futura, sino una realidad que se agrava cada día. Es preocupante porque en un país sin control lo que está en juego es la libertad.
(*) Miembro del Directorio de Transparency International.
La función de control es esencial en las democracias. Sin control la discrecionalidad y la impunidad aumentan; los funcionarios comienzan a comportarse como dueños de los recursos y los derechos de los ciudadanos y hacen con ellos lo que se les ocurre. Sin control no hay límites al poder, ni se puede hacer efectiva la responsabilidad de los funcionarios.
Un principio elemental del control es que el controlante no dependa del controlado, es decir que sea independiente. Ese principio no se cumple acabadamente en el sistema político argentino. En efecto, la Sindicatura General (Sigen) depende del gobierno de turno, al igual que la Oficina Anticorrupción. La Auditoría General de la Nación (AGN), que es el órgano de control externo en la órbita del Congreso, está integrado por siete miembros, cuatro de los cuales pertenecen al oficialismo.
La independencia no basta; es necesario que los organismos de control tengan la competencia y los recursos necesarios para llevar adelante su labor. Si el órgano de control no puede acceder a la información necesaria, directamente el control no existe. Si el controlado -en este caso el Gobierno- no brinda la información sobre las compras que realiza, los precios que paga, las empresas que contrata, los subsidios y recursos que reparte, el control es imposible. Es el caldo de cultivo perfecto para el abuso de poder y la corrupción.
El control tiene por finalidad detectar los problemas, pero no como una cacería de brujas, sino como un mecanismo de corrección. Los informes de la AGN incluyen sugerencias y recomendaciones para que la administración corrija errores, mejore sus procedimientos, en fin, ajuste su actuación a la ley. Pero de poco sirven esas sugerencias, si el Congreso actúa como obstáculo al control, al acumular los informes sin darles tratamiento.
El Gobierno tiene una actitud paradojal en materia de información. Mientras el secretario de Comercio, Guillermo Moreno, intima a las consultoras privadas para que le digan en qué basan sus estudios y mediciones sobre los niveles de inflación, bajo amenaza de aplicar sanciones, el mismo Gobierno se muestra reacio a brindar la información que le solicita la Auditoría General de la Nación, que ha debido recurrir a la Justicia para intentar conseguir los datos necesarios para realizar su labor. Tampoco es seguro que el medio elegido sea eficaz, ya que el cumplimiento de las órdenes judiciales no es precisamente una conducta habitual de esta administración.
El Gobierno ha dado pruebas suficientes de su escasa vocación por la transparencia. La Sigen dejó de publicar en su página de Internet los informes que elabora. El organismo que se encargaba de velar por el acceso a la información pública fue desarticulado. La Jefatura de Gabinete se escuda en el derecho a la intimidad para no responder los pedidos de información sobre publicidad oficial o el programa Futbol para Todos. El Indec dejó de dar información para trasmitir el "relato" oficial, que poco tiene que ver con la realidad.
La falta de transparencia no sólo pone de manifiesto un desprecio notable por los principios básicos de la República, sino que da lugar a la sospecha. Si la administración ha actuado dentro de la ley, por qué no proporcionar la información solicitada por el organismo de control. Por sólo mencionar un caso, si los subsidios a las obras sociales para la compra de medicamentos se otorgaron correctamente, qué problema hay en dar esa información. La causa que investiga la denominada "mafia de los medicamentos" parece dar alguna explicación.
El déficit en la función de control genera incentivos para la corrupción, favorece el abuso de poder, facilita la influencia del crimen organizado en las estructuras del Estado, afecta la seguridad jurídica y garantiza la impunidad.
En la Argentina, la falta de control no es una amenaza futura, sino una realidad que se agrava cada día. Es preocupante porque en un país sin control lo que está en juego es la libertad.
(*) Miembro del Directorio de Transparency International.
Empresas indias desembarcan en América Latina en busca de tierras
Inversores del país asiático están recorriendo la región en busca de oportunidades para invertir en tierras, que les aseguren un suministro de materias primas de origen agrícola. Un grupo adquirió 600 mil hectáreas en Argentina
El gigante del subcontinente asiático necesita cada vez más tierras aptas para la agricultura, con el objetivo de garantizar la alimentación de una población de unos 1.100 millones de personas.
En esa línea, el grupo inversor Walbrook, encabezado por el empresario indomalayo Pakiri Arumugam, compró cerca de 600.000 hectáreas en la Argentina, según el embajador indio en Buenos Aires, Rengaraj Viswanathan.
Si bien Arumugam es de nacionalidad malaya, su etnia tamil, del sur del subcontinente asiático, lo vincula con India y Viswanathan menciona el caso "para incrementar el interés" en inversiones sudamericanas entre sus connacionales, según le dijo el empresario a la Agencia AFP, que produjo un artículo datado en Nueva Delhi y firmado por Diego Laje.
En tanto, la empresa india Shree Renuka Sugars adquirió 130.000 hectáreas de tierra en Brasil para la producción de azúcar. Esta organización es la principal refinadora de azúcar y productora de alcohol de India y facturó unos u$s1.200 millones en el año fiscal 2010. "India es, por cualquier medida, un país relativamente pobre en recursos naturales y abundante en mano de obra, mientras que América Latina y el Caribe es generalmente lo opuesto", explicó un informe Banco Interamericano de Desarrollo.
Para el analista de AFP, "los indios conocen bien el modelo de subcontratación, con el que han triunfado en el mundo con el uso de tecnología y mano de obra barata". "Dada la relativa escasez de capital y potenciales riesgos al comprar tierra en América Latina, adaptaron ese modelo a la producción agrícola", agregó.
"Latinoamérica puede ser el mejor destino para la subcontratación agrícola, plantando para exportar a Asia y Medio Oriente", consignó Dave Ramswamy, socio de Allied Venture, una consultora de capitales uruguayos que opera este negocio en India.
Ramswamy admitió que esta operatoria ya está bien establecida en Sudamérica: "No promovemos la compra de tierras per se, el mercado de arriendos agrícolas en la Argentina, Uruguay y algunas partes clave de Brasil está bien desarrollado, se puede pagar un monto y realizarlo", dijo Ramswamy. Sin embargo, la complementariedad y las futuras necesidades de India ilustran un escenario de profundización de este tipo de emprendimientos.
"La agricultura es un negocio de agua, Latinoamérica tiene 26% de agua dulce del mundo, Asia tiene 60% de la población y menos de 25% del agua del planeta", explicó Ramswamy. En India "las napas se secan, la producción disminuye y con el cambio climático los patrones de lluvias cambian: Asia está encaminada hacia una tormenta perfecta en suministro de alimentos", vaticinó.
Un informe de la NASA, la agencia espacial de los EEUU, utilizó tecnología satelital para estudiar la situación agrícola en el gigante asiático. "Aunque el uso de aguas subterráneas ha sido uno de los principales impulsores de la producción de granos para la alimentación en países en desarrollo como India, hay creciente evidencia que su uso no ha sido sostenible", concluyó el informe publicado en 2010. El mismo trabajo alerta sobre una pérdida de velocidad en la expansión de la frontera agropecuaria en el subcontinente y la merma en áreas disponibles para la agricultura con el proceso de urbanización que acompaña el actual crecimiento económico de este mercado.
Los empresarios "irán directamente a acuerdos de arriendo en América latina y traerán alimentos a Asia," explicó Ramswamy. "Comprar tierras no es un gran negocio", ya que a tasas de rentabilidad alrededor de 7% anual el empresario evalúa que Asia es una mejor oportunidad para inversiones, concluyó.
Fuente: Infobae.com
El gigante del subcontinente asiático necesita cada vez más tierras aptas para la agricultura, con el objetivo de garantizar la alimentación de una población de unos 1.100 millones de personas.
En esa línea, el grupo inversor Walbrook, encabezado por el empresario indomalayo Pakiri Arumugam, compró cerca de 600.000 hectáreas en la Argentina, según el embajador indio en Buenos Aires, Rengaraj Viswanathan.
Si bien Arumugam es de nacionalidad malaya, su etnia tamil, del sur del subcontinente asiático, lo vincula con India y Viswanathan menciona el caso "para incrementar el interés" en inversiones sudamericanas entre sus connacionales, según le dijo el empresario a la Agencia AFP, que produjo un artículo datado en Nueva Delhi y firmado por Diego Laje.
En tanto, la empresa india Shree Renuka Sugars adquirió 130.000 hectáreas de tierra en Brasil para la producción de azúcar. Esta organización es la principal refinadora de azúcar y productora de alcohol de India y facturó unos u$s1.200 millones en el año fiscal 2010. "India es, por cualquier medida, un país relativamente pobre en recursos naturales y abundante en mano de obra, mientras que América Latina y el Caribe es generalmente lo opuesto", explicó un informe Banco Interamericano de Desarrollo.
Para el analista de AFP, "los indios conocen bien el modelo de subcontratación, con el que han triunfado en el mundo con el uso de tecnología y mano de obra barata". "Dada la relativa escasez de capital y potenciales riesgos al comprar tierra en América Latina, adaptaron ese modelo a la producción agrícola", agregó.
"Latinoamérica puede ser el mejor destino para la subcontratación agrícola, plantando para exportar a Asia y Medio Oriente", consignó Dave Ramswamy, socio de Allied Venture, una consultora de capitales uruguayos que opera este negocio en India.
Ramswamy admitió que esta operatoria ya está bien establecida en Sudamérica: "No promovemos la compra de tierras per se, el mercado de arriendos agrícolas en la Argentina, Uruguay y algunas partes clave de Brasil está bien desarrollado, se puede pagar un monto y realizarlo", dijo Ramswamy. Sin embargo, la complementariedad y las futuras necesidades de India ilustran un escenario de profundización de este tipo de emprendimientos.
"La agricultura es un negocio de agua, Latinoamérica tiene 26% de agua dulce del mundo, Asia tiene 60% de la población y menos de 25% del agua del planeta", explicó Ramswamy. En India "las napas se secan, la producción disminuye y con el cambio climático los patrones de lluvias cambian: Asia está encaminada hacia una tormenta perfecta en suministro de alimentos", vaticinó.
Un informe de la NASA, la agencia espacial de los EEUU, utilizó tecnología satelital para estudiar la situación agrícola en el gigante asiático. "Aunque el uso de aguas subterráneas ha sido uno de los principales impulsores de la producción de granos para la alimentación en países en desarrollo como India, hay creciente evidencia que su uso no ha sido sostenible", concluyó el informe publicado en 2010. El mismo trabajo alerta sobre una pérdida de velocidad en la expansión de la frontera agropecuaria en el subcontinente y la merma en áreas disponibles para la agricultura con el proceso de urbanización que acompaña el actual crecimiento económico de este mercado.
Los empresarios "irán directamente a acuerdos de arriendo en América latina y traerán alimentos a Asia," explicó Ramswamy. "Comprar tierras no es un gran negocio", ya que a tasas de rentabilidad alrededor de 7% anual el empresario evalúa que Asia es una mejor oportunidad para inversiones, concluyó.
Fuente: Infobae.com
Macri y Duhalde sellaron el primer acuerdo electoral y van juntos en Santa Fe
El humorista Del Sel irá junto a un intendente duhaldista. No tendrán rivales en su interna. El Socialismo presentó cuatro fórmulas para las primarias del 22 de mayo
Después de convencerlo y de presentarlo como su candidato en Santa Fe, el jefe de Gobierno porteño aceptó que el compañero de fórmula del humorista Miguel del Sel en esa provincia sea un dirigente del PJ Federal cercano al ex presidente Eduardo Duhalde.
La fórmula de Gobernador y Vice que presentará el PRO para las primarias abiertas y obligatorias del 22 de mayo quedó conformada por la anunciada candidatura de Del Sel junto al intendente de Chabás, Osvaldo Salomón, un dirigente del PJ Federal. Ese no es el único justicialista disidente duhaldista que estará en las listas del PRO, tal como se llamará la boleta santafesina. El duhaldista Norberto Nicotra, a quien en un momento se barajó como posible candidato a vice gobernador junto al humorista del grupo Midachi, será quien encabece la lista de diputados provinciales.
Así, Macri y Duhalde dieron el primer paso concreto en el terreno electoral, que se suma a las señales que vienen dando de ambos lados para sellar una alianza electoral para las primarias nacionales del 14 de agosto.
Además de las listas del PRO, anoche también se presentaron cuatro fórmulas del oficialista Frente Progresista Cívico y Social y otros cuatro binomios por el Frente Santa Fe Para Todos, producto de un acuerdo entre el kirchnerismo y los peronistas que responden a Carlos Reutemann.
Las primarias provinciales se realizarán el 22 de mayo y definirá los candidatos a gobernador, vice, legisladores provinciales, intendentes y presidentes comunales para los comicios generales del 24 de julio.
En el oficialismo provincial, la fórmula que apoyará el gobernador Hermes Binner será la de Antonio
Bonfatti, actual ministro de Gobierno, y el concejal radical Jorge Henn. También se presentaron el senador Rubén Giustiniani-Ana Copes (ARI); el intendente santafesino Mario Barletta (UCR) junto a el diputado nacional de la CC-ARI, Carlos Comi, y Luís Cáceres-Ricardo Terrile (UCR).
En el peronista Frente Santa Fe Para Todos formalizaron sus postulaciones el diputado Agustín Rossi y el secretario general de ATE, Jorge Hoffmann; el ex canciller Rafael Bielsa junto a Oscar Martínez; el intendente rafaelino Omar Perotti con el ex defensor del Pueblo, Carlos Bermúdez, y el senador provincial Juan Carlos Mercier acompañdo del ex ministro de Gobierno de Carlos Reutemann, Ángel Baltuzzi.
Fuente: Cronista.com
Después de convencerlo y de presentarlo como su candidato en Santa Fe, el jefe de Gobierno porteño aceptó que el compañero de fórmula del humorista Miguel del Sel en esa provincia sea un dirigente del PJ Federal cercano al ex presidente Eduardo Duhalde.
La fórmula de Gobernador y Vice que presentará el PRO para las primarias abiertas y obligatorias del 22 de mayo quedó conformada por la anunciada candidatura de Del Sel junto al intendente de Chabás, Osvaldo Salomón, un dirigente del PJ Federal. Ese no es el único justicialista disidente duhaldista que estará en las listas del PRO, tal como se llamará la boleta santafesina. El duhaldista Norberto Nicotra, a quien en un momento se barajó como posible candidato a vice gobernador junto al humorista del grupo Midachi, será quien encabece la lista de diputados provinciales.
Así, Macri y Duhalde dieron el primer paso concreto en el terreno electoral, que se suma a las señales que vienen dando de ambos lados para sellar una alianza electoral para las primarias nacionales del 14 de agosto.
Además de las listas del PRO, anoche también se presentaron cuatro fórmulas del oficialista Frente Progresista Cívico y Social y otros cuatro binomios por el Frente Santa Fe Para Todos, producto de un acuerdo entre el kirchnerismo y los peronistas que responden a Carlos Reutemann.
Las primarias provinciales se realizarán el 22 de mayo y definirá los candidatos a gobernador, vice, legisladores provinciales, intendentes y presidentes comunales para los comicios generales del 24 de julio.
En el oficialismo provincial, la fórmula que apoyará el gobernador Hermes Binner será la de Antonio
Bonfatti, actual ministro de Gobierno, y el concejal radical Jorge Henn. También se presentaron el senador Rubén Giustiniani-Ana Copes (ARI); el intendente santafesino Mario Barletta (UCR) junto a el diputado nacional de la CC-ARI, Carlos Comi, y Luís Cáceres-Ricardo Terrile (UCR).
En el peronista Frente Santa Fe Para Todos formalizaron sus postulaciones el diputado Agustín Rossi y el secretario general de ATE, Jorge Hoffmann; el ex canciller Rafael Bielsa junto a Oscar Martínez; el intendente rafaelino Omar Perotti con el ex defensor del Pueblo, Carlos Bermúdez, y el senador provincial Juan Carlos Mercier acompañdo del ex ministro de Gobierno de Carlos Reutemann, Ángel Baltuzzi.
Fuente: Cronista.com
Lanzan plan para promover en diez años el desarrollo de la industria
Lo hará el Gobierno este jueves. Entre otros objetivos, la propuesta oficial buscará hacia 2020 incrementar el PBI un 5%, así como sustituir importaciones y elevar el producto industrial de u$s69.775 millones a u$s140.000 millones Plan Estratético Industrial al 2020. Así fue bautizada la nueva iniciativa del Gobierno nacional, elaborada entre la Cepal y el Ministerio de Producción para impulsar el desarrollo del sector y, como consecuencia, mejorar el crecimiento del Producto Bruto Interno (PBI) a lo largo de los próximos nueve años.
Como metas principales, el proyecto se propone lograr un crecimiento promedio del PBI del 5% anual, duplicar el PBI industrial, lograr un superávit comercial de u$s25.000 millones, una inversión del 28% sobre el producto, y reducir la tasa de desempleo al 4%, publicó el diario El Cronista.
Con este plan, el Gobierno planifica, además, aumentar fuertemente las exportaciones de las Manufacturas de Origen Industrial (MOI), así como sustituir importaciones, añadió el matutino. No obstante, si bien la iniciativa fija metas a cumplir, las acciones para alcanzarlas no fueron delineadas porque se desprenderán de los distintos debates participativos sobre políticas industriales a corto, largo y mediano plazo, que convocará la Cepal a partir del 21 de marzo.
Cada foro girará en torno a cinco ejes: situación de la producción nacional, sustitución de importaciones y aumento de exportaciones; incorporación de ciencia y tecnología e innovación; consolidación de cadenas de valor locales; inserción en la cadena y crecimiento de las pymes e integración regional y global.
Así, de estas discusiones surgirán medidas que el Gobierno irá tomando para los sectores: alimentos; calzado, textiles y confecciones; madera, papel y muebles; material de construcción; bienes de capital; maquinaria agrícola; autos y autopartes; medicamentos; software y químicos y petroquímicos.
El plan será oficializado este jueves por la presidente Cristina Kirchner y la ministra de Industria, Débora Giorgi, en momentos en que “se conjugan una macroeconomía sólida, una base industrial consolidada y un escenario externo favorable, con fuerte demanda de los productos nacionales”, según los fundamentos del proyecto.
Fuente: Infobae.com
Como metas principales, el proyecto se propone lograr un crecimiento promedio del PBI del 5% anual, duplicar el PBI industrial, lograr un superávit comercial de u$s25.000 millones, una inversión del 28% sobre el producto, y reducir la tasa de desempleo al 4%, publicó el diario El Cronista.
Con este plan, el Gobierno planifica, además, aumentar fuertemente las exportaciones de las Manufacturas de Origen Industrial (MOI), así como sustituir importaciones, añadió el matutino. No obstante, si bien la iniciativa fija metas a cumplir, las acciones para alcanzarlas no fueron delineadas porque se desprenderán de los distintos debates participativos sobre políticas industriales a corto, largo y mediano plazo, que convocará la Cepal a partir del 21 de marzo.
Cada foro girará en torno a cinco ejes: situación de la producción nacional, sustitución de importaciones y aumento de exportaciones; incorporación de ciencia y tecnología e innovación; consolidación de cadenas de valor locales; inserción en la cadena y crecimiento de las pymes e integración regional y global.
Así, de estas discusiones surgirán medidas que el Gobierno irá tomando para los sectores: alimentos; calzado, textiles y confecciones; madera, papel y muebles; material de construcción; bienes de capital; maquinaria agrícola; autos y autopartes; medicamentos; software y químicos y petroquímicos.
El plan será oficializado este jueves por la presidente Cristina Kirchner y la ministra de Industria, Débora Giorgi, en momentos en que “se conjugan una macroeconomía sólida, una base industrial consolidada y un escenario externo favorable, con fuerte demanda de los productos nacionales”, según los fundamentos del proyecto.
Fuente: Infobae.com
La economía mundial también está amenazada por una tormenta solar
El fenómeno se espera que impacte en la Tierra en 2013. Afectaría las telecomunicaciones y podría haber daños a las redes tecnológicas. Se trata de una tormenta electromagnética que se produjo en el sol la semana pasada
Foto: Imagen de explosión solar tomada por un satélite
Según los expertos, el fenómeno solar golpearía fuertemente a las telecomunicaciones, los sistemas de información y las infraestructuras de distribución eléctrica en todo el planeta. La tormenta electromagnética afectaría fuertemente las redes de teléfonos celulares que dependen de las señales horarias suministradas por los satélites con posicionamiento global.
Los científicos también advirtieron sobre los posibles daños que la llamarada generaría al aumentar a grandes niveles la tensión eléctrica, lo que ocasionaría fallas en la red, como la que dejó a oscuras a la ciudad canadiense de Quebec en 1989. El ciclo de actividad del sol transcurre en once años, con múltiples variaciones y se espera que el próximo pico de actividad se registre en 2013. Investigaciones recientes, revelaron que últimamente el sol se "ha estado despertando", tras varios años de baja actividad.
Fuente: Infobae.com
Comentario:
Esperemos que no tenga nada que ver con las profecias Mayas para diciembre del 2012...
Foto: Imagen de explosión solar tomada por un satélite
Según los expertos, el fenómeno solar golpearía fuertemente a las telecomunicaciones, los sistemas de información y las infraestructuras de distribución eléctrica en todo el planeta. La tormenta electromagnética afectaría fuertemente las redes de teléfonos celulares que dependen de las señales horarias suministradas por los satélites con posicionamiento global.
Los científicos también advirtieron sobre los posibles daños que la llamarada generaría al aumentar a grandes niveles la tensión eléctrica, lo que ocasionaría fallas en la red, como la que dejó a oscuras a la ciudad canadiense de Quebec en 1989. El ciclo de actividad del sol transcurre en once años, con múltiples variaciones y se espera que el próximo pico de actividad se registre en 2013. Investigaciones recientes, revelaron que últimamente el sol se "ha estado despertando", tras varios años de baja actividad.
Fuente: Infobae.com
Comentario:
Esperemos que no tenga nada que ver con las profecias Mayas para diciembre del 2012...
lunes, 21 de febrero de 2011
Inti y Proa crean red de laboratorios para autopartes
El Instituto Nacional de Tecnología Industrial firmó un convenio con la Cámara de Empresarios Autopartistas (Fundación PROA) para la creación del mencionado servicio, que pueda ser utilizada por toda la industria automotriz.
El acuerdo por la producción de autopartes espera recuperar un talón de aquiles en la estructura industrial automotriz."La intención es romper en conjunto con esa supuesta debilidad que es sostenida por las terminales automotrices en cuanto a la falta de estructuras para ensayos y homologación de componentes”, sostuvo el presidente del INTI, Enrique Martínez.
A través de un comunicado, indicó que este acuerdo "rompe con la dependencia que se da en el sector que, en definitiva, no tiene que ver con un producto sino con un marketing muy específico. Una certificación de esta red de laboratorios con el sello INTI no lo va a revertir, pero puede ayudar a hacerlo. Estamos subiendo un escalón".
Por su parte, el titular PROA Sergio Klaut, manifestó, "tenemos una calidad óptima, pero como todo, es mejorable. Es bueno Tener un respaldo para presentar nuestros productos ante los distintos clientes". Estimó que "lo que hay que hacer es mejorar los productos a través del INTI y complementarnos con algunos laboratorios bien instalados con los distintos asociados”.
En tanto que para el vicepresidente de la asociación de automotrices, Julio Cordero, "esto es un avance, con el que el Estado comienza a interpretar y hacer lo que siempre predica: que las pymes son la base del desarrollo productivo argentino”. Consideró que “hay que romper la estructura que lleva esta clase de estudios a Brasil o Europa, porque sino se pierde la inversión inicial en cualquier proyecto”.
El desarrollo nacional se verá incrementado con esta red de laboratorio, en la medida en que no se deberá depender de otros países para lograr una certificación de calidad y un uso compartido de laboratorios que lleven los estándares al máximo posible.
Fuente: El Argentino.com
El acuerdo por la producción de autopartes espera recuperar un talón de aquiles en la estructura industrial automotriz."La intención es romper en conjunto con esa supuesta debilidad que es sostenida por las terminales automotrices en cuanto a la falta de estructuras para ensayos y homologación de componentes”, sostuvo el presidente del INTI, Enrique Martínez.
A través de un comunicado, indicó que este acuerdo "rompe con la dependencia que se da en el sector que, en definitiva, no tiene que ver con un producto sino con un marketing muy específico. Una certificación de esta red de laboratorios con el sello INTI no lo va a revertir, pero puede ayudar a hacerlo. Estamos subiendo un escalón".
Por su parte, el titular PROA Sergio Klaut, manifestó, "tenemos una calidad óptima, pero como todo, es mejorable. Es bueno Tener un respaldo para presentar nuestros productos ante los distintos clientes". Estimó que "lo que hay que hacer es mejorar los productos a través del INTI y complementarnos con algunos laboratorios bien instalados con los distintos asociados”.
En tanto que para el vicepresidente de la asociación de automotrices, Julio Cordero, "esto es un avance, con el que el Estado comienza a interpretar y hacer lo que siempre predica: que las pymes son la base del desarrollo productivo argentino”. Consideró que “hay que romper la estructura que lleva esta clase de estudios a Brasil o Europa, porque sino se pierde la inversión inicial en cualquier proyecto”.
El desarrollo nacional se verá incrementado con esta red de laboratorio, en la medida en que no se deberá depender de otros países para lograr una certificación de calidad y un uso compartido de laboratorios que lleven los estándares al máximo posible.
Fuente: El Argentino.com
A fin de año se inaugura Atucha II, la tercera central nuclear de Argentina
Por Ignacio Chausis
Su finalización mejorará la matriz energética del país y permitirá que el conocimiento tecnológico se aproveche en nuevas usinas atómicas.
El año 2011 puede marcar un antes y un después en lo que respecta al desarrollo de energía local, con la apertura de la central atómica de Atucha II, y la utilización total de la capacidad hidroeléctrica de Yacyretá, tras décadas de retraso y abandono en las obras. En ambos casos se trata de proyectos que diversifican la matriz energética local a través del desarrollo de energías renovables, que aumentan el grado de autonomía del país en cuestiones de energía y reducen la utilización de gas.
Las obras para la central nuclear de Atucha II (CNA II), en la localidad de Lima, provincia de Buenos Aires, comenzaron a mediados del año 1981, y seis años después fueron suspendidas tras una decisión política del gobierno de Raúl Alfonsín. Esa medida del gobierno radical tenía como argumento principal la errónea suposición de que la Argentina contaba con inmensas reservas gasíferas, por lo que se privilegió el crecimiento de la generación termoeléctrica.
A pesar de que hacia 1994 las obras de Atucha II habían avanzado en un 80%, la administración neoliberal del menemismo le dio la estocada final al proyecto, porque la privatización del sector nuclear implicó la paralización total de la construcción. Las obras recién se retomaron hacia 2006 y como parte esencial del Plan Nuclear Argentino, dispuesto por el ex presidente Néstor Kirchner. En la actualidad trabajan cerca de 5000 técnicos, y las tareas de finalización están a cargo de Nucleoeléctrica Argentina SA, firma que opera las otras dos centrales con las que cuenta el país (Atucha I, al lado de Atucha II y Embalse Río Tercero, en Córdoba).
Atucha II es una central de tipo moderna, de características similares a las construidas en Alemania, Brasil y España. Su entrada en funcionamiento está prevista para el último trimestre del corriente año, momento en que se convertirá en la tercera central nuclear del país, y la quinta sudamericana. Cuenta con una potencia neta de 692 megavatios y aportará al mercado eléctrico mayorista unos 5800 GW/h anuales, lo que equivale al 4% de la matriz energética.
Se calcula que tal cantidad de energía permitirá satisfacer las necesidades de una población de 5 millones de habitantes, además de ahorrarle al país el consumo 1200 millones de metros cúbicos de gas natural por año (consumo actual). Asimismo, permitirá evitar la emisión a la atmósfera de 3,5 millones de toneladas de CO2 por año.
Cabe destacar que tanto el agua pesada como los elementos combustibles necesarios para el funcionamiento de la CNA-II serán producidos en el país. Todas las actividades de construcción y suministro correspondientes a la finalización de la central vienen priorizando la participación de los proveedores y contratistas locales.
Asimismo, el gobierno busca avanzar con la construcción de la cuarta central nuclear. Con este fin, el ministro de Infraestructura, Julio de Vido, llevó adelante una ronda de consultas en diciembre pasado con los principales fabricantes de centrales nucleares del mundo, para establecer la tecnología que se utilizará. El funcionario mantuvo contactos con ejecutivos de la francesa Areva; Rosatom, de Rusia, de la CNDC de Corea del Sur, y la estadounidense Westinghouse, consideradas en el mundo como las máximas referentes en la construcción y equipamiento de centrales atómicas.
Fuente: ElArgentino.com
Su finalización mejorará la matriz energética del país y permitirá que el conocimiento tecnológico se aproveche en nuevas usinas atómicas.
El año 2011 puede marcar un antes y un después en lo que respecta al desarrollo de energía local, con la apertura de la central atómica de Atucha II, y la utilización total de la capacidad hidroeléctrica de Yacyretá, tras décadas de retraso y abandono en las obras. En ambos casos se trata de proyectos que diversifican la matriz energética local a través del desarrollo de energías renovables, que aumentan el grado de autonomía del país en cuestiones de energía y reducen la utilización de gas.
Las obras para la central nuclear de Atucha II (CNA II), en la localidad de Lima, provincia de Buenos Aires, comenzaron a mediados del año 1981, y seis años después fueron suspendidas tras una decisión política del gobierno de Raúl Alfonsín. Esa medida del gobierno radical tenía como argumento principal la errónea suposición de que la Argentina contaba con inmensas reservas gasíferas, por lo que se privilegió el crecimiento de la generación termoeléctrica.
A pesar de que hacia 1994 las obras de Atucha II habían avanzado en un 80%, la administración neoliberal del menemismo le dio la estocada final al proyecto, porque la privatización del sector nuclear implicó la paralización total de la construcción. Las obras recién se retomaron hacia 2006 y como parte esencial del Plan Nuclear Argentino, dispuesto por el ex presidente Néstor Kirchner. En la actualidad trabajan cerca de 5000 técnicos, y las tareas de finalización están a cargo de Nucleoeléctrica Argentina SA, firma que opera las otras dos centrales con las que cuenta el país (Atucha I, al lado de Atucha II y Embalse Río Tercero, en Córdoba).
Atucha II es una central de tipo moderna, de características similares a las construidas en Alemania, Brasil y España. Su entrada en funcionamiento está prevista para el último trimestre del corriente año, momento en que se convertirá en la tercera central nuclear del país, y la quinta sudamericana. Cuenta con una potencia neta de 692 megavatios y aportará al mercado eléctrico mayorista unos 5800 GW/h anuales, lo que equivale al 4% de la matriz energética.
Se calcula que tal cantidad de energía permitirá satisfacer las necesidades de una población de 5 millones de habitantes, además de ahorrarle al país el consumo 1200 millones de metros cúbicos de gas natural por año (consumo actual). Asimismo, permitirá evitar la emisión a la atmósfera de 3,5 millones de toneladas de CO2 por año.
Cabe destacar que tanto el agua pesada como los elementos combustibles necesarios para el funcionamiento de la CNA-II serán producidos en el país. Todas las actividades de construcción y suministro correspondientes a la finalización de la central vienen priorizando la participación de los proveedores y contratistas locales.
Asimismo, el gobierno busca avanzar con la construcción de la cuarta central nuclear. Con este fin, el ministro de Infraestructura, Julio de Vido, llevó adelante una ronda de consultas en diciembre pasado con los principales fabricantes de centrales nucleares del mundo, para establecer la tecnología que se utilizará. El funcionario mantuvo contactos con ejecutivos de la francesa Areva; Rosatom, de Rusia, de la CNDC de Corea del Sur, y la estadounidense Westinghouse, consideradas en el mundo como las máximas referentes en la construcción y equipamiento de centrales atómicas.
Fuente: ElArgentino.com
La importación de energía le cuesta al país u$s 330 millones por mes
Por PABLO FERNÁNDEZ BLANCO - Cronista.com
Es para comprar gasoil, fueloil, gas de Bolivia y LNG, que llega por barco. En el Gobierno aseguran que es la base del crecimiento económico de los últimos años
La combinación entre el fuerte crecimiento económico y la paralela caída en la oferta de gas engrosan cada vez más el monto de divisas que sale del país para cubrir la importación de energía. De acuerdo con datos provisionales de despachos públicos, empresas y analistas privados para este año, la Argentina deberá desembolsar unos u$s 336 millones por mes para adquirir gas desde Bolivia, por barco, fueloil y gasoil para generadoras eléctricas y vehículos.
Ese número no incluye las compras de naftas al exterior, que son eventuales, ni la importación de electricidad desde Brasil, dado que de acuerdo con el Ministerio de Planificación, a cargo de Julio de Vido, un convenio bilateral permite el intercambio compensado entre ambos países de manera que la cuenta final de cada año termine en cero.
El número es enorme por donde se lo mire. Alcanza, por caso, para multiplicar por 2,5 veces los $ 6.340 millones que distribuyó el año pasado el Gobierno a través de la Asignación Universal por Hijo (AUH), una de las medias más redituables del kirchnerismo en términos sociales y políticos. Pero es la base, de acuerdo con funcionarios e industriales, para que el sector productivo tenga energía que le permita crecer a más del 8%, como en enero.
Se importa energía para fabricar productos industriales, cosas con valor agregado y alto contenido tecnológico que promueven el empleo. Sin energía no se puede hacer funcionar al país, es el argumento que esgrimen en Planificación.
Aunque una porción de la factura energética será cubierta por empresas privadas, el grueso correrá por cuenta del Estado. El gasto más importante será en combustibles líquidos, una alternativa que Planificación utiliza desde 2004 para enfrentar el crecimiento de la demanda en un contexto de déficit de gas. De acuerdo con cálculos de Cammesa, este año se importarán 2,3 millones de metros cúbicos (m3) de gasoil para abastecer a las centrales eléctricas, que con la exención de impuestos vigente costarán u$s 112,31 millones en el promedio mensual.
El número es un poco mayor si se considera el costo adicional de dejar al combustible en el lugar en el que se lo utilizará. Eso es necesario en verano, pero más aún en invierno, apuntó una fuente familiarizada con la operación.
Debido a los problemas crónicos de gasoil que tiene la Argentina, Cammesa, una compañía mixta pero conducida por De Vido, importa todo el gasoil que consumen las centrales para no ocasionar problemas de abastecimiento en el parque automotor.
Con esa intención, las petroleras Esso, Shell, YPF y Petrobras y la energética estatal Enarsa tienen previsto utilizar, cuanto menos, el cupo de 2 millones de m3 de gasoil sin impuestos que no consume Cammesa. Para eso deberán desembolsar, a los valores actuales, poco más de u$s 97 millones en promedio mensual, que venderán en el mercado local, si se tiene en consideración un dólar de u$s 4,05, a 512 el m3, un 12% menos que su costo.
Un escalón más abajo en la lista de gastos se ubica el fueloil para centrales eléctricas, otro combustible líquido que reemplaza al gas pero de menor calidad que el gasoil. Cammesa espera contar este año con un millón de toneladas desde el exterior a u$s 400 cada una, que redondean unos u$s 33 millones mensuales.
Cierran la lista las compras de gas a Bolivia y de LNG (gas licuado que llega por barco a las costas de Bahía Blanca). No hay números públicos con respecto a sus precios, y se estima que ingresarán al país en promedio 5 millones de m3 diarios de cada uno. De acuerdo con el con sultor Francisco Mezzadri, el valor del primero ronda los u$s 263.880 el m3 (en el primer trimestre) y el segundo llega a u$s 360.000 el m3, por lo que redondean u$s 39,5 millones y u$s 54 millones por mes en cada caso.
Es para comprar gasoil, fueloil, gas de Bolivia y LNG, que llega por barco. En el Gobierno aseguran que es la base del crecimiento económico de los últimos años
La combinación entre el fuerte crecimiento económico y la paralela caída en la oferta de gas engrosan cada vez más el monto de divisas que sale del país para cubrir la importación de energía. De acuerdo con datos provisionales de despachos públicos, empresas y analistas privados para este año, la Argentina deberá desembolsar unos u$s 336 millones por mes para adquirir gas desde Bolivia, por barco, fueloil y gasoil para generadoras eléctricas y vehículos.
Ese número no incluye las compras de naftas al exterior, que son eventuales, ni la importación de electricidad desde Brasil, dado que de acuerdo con el Ministerio de Planificación, a cargo de Julio de Vido, un convenio bilateral permite el intercambio compensado entre ambos países de manera que la cuenta final de cada año termine en cero.
El número es enorme por donde se lo mire. Alcanza, por caso, para multiplicar por 2,5 veces los $ 6.340 millones que distribuyó el año pasado el Gobierno a través de la Asignación Universal por Hijo (AUH), una de las medias más redituables del kirchnerismo en términos sociales y políticos. Pero es la base, de acuerdo con funcionarios e industriales, para que el sector productivo tenga energía que le permita crecer a más del 8%, como en enero.
Se importa energía para fabricar productos industriales, cosas con valor agregado y alto contenido tecnológico que promueven el empleo. Sin energía no se puede hacer funcionar al país, es el argumento que esgrimen en Planificación.
Aunque una porción de la factura energética será cubierta por empresas privadas, el grueso correrá por cuenta del Estado. El gasto más importante será en combustibles líquidos, una alternativa que Planificación utiliza desde 2004 para enfrentar el crecimiento de la demanda en un contexto de déficit de gas. De acuerdo con cálculos de Cammesa, este año se importarán 2,3 millones de metros cúbicos (m3) de gasoil para abastecer a las centrales eléctricas, que con la exención de impuestos vigente costarán u$s 112,31 millones en el promedio mensual.
El número es un poco mayor si se considera el costo adicional de dejar al combustible en el lugar en el que se lo utilizará. Eso es necesario en verano, pero más aún en invierno, apuntó una fuente familiarizada con la operación.
Debido a los problemas crónicos de gasoil que tiene la Argentina, Cammesa, una compañía mixta pero conducida por De Vido, importa todo el gasoil que consumen las centrales para no ocasionar problemas de abastecimiento en el parque automotor.
Con esa intención, las petroleras Esso, Shell, YPF y Petrobras y la energética estatal Enarsa tienen previsto utilizar, cuanto menos, el cupo de 2 millones de m3 de gasoil sin impuestos que no consume Cammesa. Para eso deberán desembolsar, a los valores actuales, poco más de u$s 97 millones en promedio mensual, que venderán en el mercado local, si se tiene en consideración un dólar de u$s 4,05, a 512 el m3, un 12% menos que su costo.
Un escalón más abajo en la lista de gastos se ubica el fueloil para centrales eléctricas, otro combustible líquido que reemplaza al gas pero de menor calidad que el gasoil. Cammesa espera contar este año con un millón de toneladas desde el exterior a u$s 400 cada una, que redondean unos u$s 33 millones mensuales.
Cierran la lista las compras de gas a Bolivia y de LNG (gas licuado que llega por barco a las costas de Bahía Blanca). No hay números públicos con respecto a sus precios, y se estima que ingresarán al país en promedio 5 millones de m3 diarios de cada uno. De acuerdo con el con sultor Francisco Mezzadri, el valor del primero ronda los u$s 263.880 el m3 (en el primer trimestre) y el segundo llega a u$s 360.000 el m3, por lo que redondean u$s 39,5 millones y u$s 54 millones por mes en cada caso.
Cría de truchas en la pampa húmeda
Por Mercedes Manfroni para LA NACION
El productor agropecuario Luis Ruete Güemes incuba ovas y produce alevinos en doce tanques australianos en su establecimiento de Cañuelas; su destino final son los lagos del sur argentino
Foto: Alevinos de trucha.
De tener un uso primordial como reservorios de agua, pasaron a ser utilizados como piletas de natación, en el mejor de los casos, cuando no quedaron totalmente obsoletos. Este es el aparente destino de los tanques australianos.
Sin embargo, hay quienes se rebelaron contra el poco uso que hoy se les da y supieron revivir su capacidad productiva a través de la acuicultura, que es el cultivo de todas aquellas especies de animales y vegetales relacionadas directa o indirectamente con el agua.
Uno de esos "rebeldes" es Luis Ruete Güemes, productor agropecuario de Cañuelas (Ver foto), quien, a través del uso de tanques australianos y el desarrollo de una sala de incubación, llegó a crear un eficiente sistema de producción acuícola en su campo. Este emprendimiento le valió el Premio a la Excelencia Agropecuaria LA NACION-Banco Galicia al Mejor Productor en la categoría Acuicultura en la edición 2009.
Los métodos usados por Ruete Güemes no sólo son económicamente rentables, sino también ecológicamente sustentables y recomendables, ya que al realizar la producción acuícola en tanques no hay riesgo de contaminar lagos o cuencas fluviales a partir de un mal manejo.
Su incursión en esta actividad comenzó cuando en 2002 vendió tierra (para relleno) para la construcción de la autopista Cañuelas-Monte. Entonces, a los dos grandes pozos que quedaron decidió transformarlos en lagos artificiales y sembrar truchas para que sus hijos, aficionados a la pesca, pudieran desarrollar allí las habilidades deportivas que hasta el momento realizaban en los lagos patagónicos. Pero el proyecto fue un fracaso porque las truchas enseguida se fueron a la parte más profunda de la laguna, no comían, no se reproducían, tampoco picaban. Finalmente murieron.
Pero Ruete Güemes, ya entusiasmado con la acuicultura y con la posibilidad de incorporar una nueva producción en su campo, donde hacía agricultura y ganadería, no se dio por vencido y quiso seguir desarrollando la actividad acuícola. Si no era en la laguna, sería en tanques australianos.
Para quienes no pueden ni quieren alcanzar el nivel de Ruete Güemes, "los medios acuáticos del agro son varios", dijo Compagnucci. "Tanques australianos, jaulas en lagunas formadas en bajos naturales, aprovechamiento de agua desechada en los tambos" son algunos de los ejemplos que pueden servir para arrancar en la actividad, dijo el asesor. Por ser accesible, no es menos rentable: potencialmente, en un tanque australiano se pueden criar entre 3 y 4 toneladas de pescado, cuyo valor oscila entre los 15 y 20 pesos el kilo, con una tasa interna de retorno de la inversión del 35%, aproximadamente.
En esta actividad, la logística es un capítulo aparte y también aquí Ruete Güemes tuvo que abrirse camino. Por suerte, Cañuelas está cerca de Ezeiza y no bien llegan las ovas en una caja de telgopor, son trasladadas rápidamente a su sala de incubación.
Tras 60 días, cuando está terminado el proceso de incubación y cría de los alevinos y están listos para el engorde, llega el momento de trasladarlos a destino, el sur argentino. Como no hay vehículos especiales para esta tarea, se usan camiones cisterna con los que se traslada la leche. "El camión pasa por un lavadero del Senasa, y se lo carga con agua fría y tanques de oxígeno." Durante el viaje, hay que frenar la marcha cada dos horas para chequear el nivel de oxígeno en el agua.
A pesar de los logros, en Laurihué siguen pensando cómo seguir haciendo crecer la producción acuícola. "Hoy hacemos sólo reproductores y alevinos. Sin embargo, para alcanzar volúmenes que el mercado requiere se necesita más extensión", dijo Compagnucci. Como en Laurihué no tienen espacio para hacer el engorde, Ruete Güemes está tratando de desarrollar esa actividad en algún embalse, algo que es muy frecuente en la Patagonia.
El productor agropecuario Luis Ruete Güemes incuba ovas y produce alevinos en doce tanques australianos en su establecimiento de Cañuelas; su destino final son los lagos del sur argentino
Foto: Alevinos de trucha.
De tener un uso primordial como reservorios de agua, pasaron a ser utilizados como piletas de natación, en el mejor de los casos, cuando no quedaron totalmente obsoletos. Este es el aparente destino de los tanques australianos.
Sin embargo, hay quienes se rebelaron contra el poco uso que hoy se les da y supieron revivir su capacidad productiva a través de la acuicultura, que es el cultivo de todas aquellas especies de animales y vegetales relacionadas directa o indirectamente con el agua.
Uno de esos "rebeldes" es Luis Ruete Güemes, productor agropecuario de Cañuelas (Ver foto), quien, a través del uso de tanques australianos y el desarrollo de una sala de incubación, llegó a crear un eficiente sistema de producción acuícola en su campo. Este emprendimiento le valió el Premio a la Excelencia Agropecuaria LA NACION-Banco Galicia al Mejor Productor en la categoría Acuicultura en la edición 2009.
Los métodos usados por Ruete Güemes no sólo son económicamente rentables, sino también ecológicamente sustentables y recomendables, ya que al realizar la producción acuícola en tanques no hay riesgo de contaminar lagos o cuencas fluviales a partir de un mal manejo.
Su incursión en esta actividad comenzó cuando en 2002 vendió tierra (para relleno) para la construcción de la autopista Cañuelas-Monte. Entonces, a los dos grandes pozos que quedaron decidió transformarlos en lagos artificiales y sembrar truchas para que sus hijos, aficionados a la pesca, pudieran desarrollar allí las habilidades deportivas que hasta el momento realizaban en los lagos patagónicos. Pero el proyecto fue un fracaso porque las truchas enseguida se fueron a la parte más profunda de la laguna, no comían, no se reproducían, tampoco picaban. Finalmente murieron.
Pero Ruete Güemes, ya entusiasmado con la acuicultura y con la posibilidad de incorporar una nueva producción en su campo, donde hacía agricultura y ganadería, no se dio por vencido y quiso seguir desarrollando la actividad acuícola. Si no era en la laguna, sería en tanques australianos.
Hoy Laurihué, como el productor llamó al establecimiento acuícola en honor a su madre, Laura Güemes (Hue, además de ser la onomatopeya de Güemes, significa "lugar" en mapuche), cuenta con doce tanques australianos donde cría alevinos (estado previo a la adultez del pez), una sala de incubadoras con 20 bateas de cuatro metros por tres y 40 centímetros de profundidad para incubar las ovas. Se usan equipos para enfriar el agua, que es de pozo. Se incuban a 7 grados hasta que nacen. Después se les va subiendo la temperatura hasta llegar a 18 grados.
Gracias al consejo que desde el principio le brindó Luis Compagnucci, asesor acuícola, Ruete Güemes puso a punto sus instalaciones para comenzar a criar ovas y vender alevinos. "Traje el equipamiento principalmente de los Estados Unidos y algo de Chile, acá no hay nada", comentó a LA NACION y advirtió: "Lo más difícil es la incubación". Sin embargo, no se dejó asustar y después del fracaso con la laguna compró 5000 ovas y las crió. Como tuvo un buen desempeño, se entusiasmó, y comenzó los trámites para importar ovas de los Estados Unidos. "Son mejores genéticamente: mientras que las truchas nacionales tardan un año para llegar a pesar 400 gramos, las norteamericanas requieren diez meses para pesar un kilo", aclaró.
Laurihué es hoy el único importador de ovas de trucha Arco Iris, ya que consiguió que el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) lo declarara libre de enfermedades. Por eso tiene la categoría de "cuarentena", que exige una serie de medidas sanitarias y una espera de 40 días entre cada camada de incubación.
Para quienes no pueden ni quieren alcanzar el nivel de Ruete Güemes, "los medios acuáticos del agro son varios", dijo Compagnucci. "Tanques australianos, jaulas en lagunas formadas en bajos naturales, aprovechamiento de agua desechada en los tambos" son algunos de los ejemplos que pueden servir para arrancar en la actividad, dijo el asesor. Por ser accesible, no es menos rentable: potencialmente, en un tanque australiano se pueden criar entre 3 y 4 toneladas de pescado, cuyo valor oscila entre los 15 y 20 pesos el kilo, con una tasa interna de retorno de la inversión del 35%, aproximadamente.
En esta actividad, la logística es un capítulo aparte y también aquí Ruete Güemes tuvo que abrirse camino. Por suerte, Cañuelas está cerca de Ezeiza y no bien llegan las ovas en una caja de telgopor, son trasladadas rápidamente a su sala de incubación.
Tras 60 días, cuando está terminado el proceso de incubación y cría de los alevinos y están listos para el engorde, llega el momento de trasladarlos a destino, el sur argentino. Como no hay vehículos especiales para esta tarea, se usan camiones cisterna con los que se traslada la leche. "El camión pasa por un lavadero del Senasa, y se lo carga con agua fría y tanques de oxígeno." Durante el viaje, hay que frenar la marcha cada dos horas para chequear el nivel de oxígeno en el agua.
A pesar de los logros, en Laurihué siguen pensando cómo seguir haciendo crecer la producción acuícola. "Hoy hacemos sólo reproductores y alevinos. Sin embargo, para alcanzar volúmenes que el mercado requiere se necesita más extensión", dijo Compagnucci. Como en Laurihué no tienen espacio para hacer el engorde, Ruete Güemes está tratando de desarrollar esa actividad en algún embalse, algo que es muy frecuente en la Patagonia.
El desafío de crecer y sumar actividades
El mismo sistema que se utilizó para el tomate se replicaría para la producción de dulces, pollos parrilleros y carne
La propia evolución del trabajo plantea nuevos objetivos, tal el caso de abastecer una mayor demanda. "El desafío es ver cómo hacemos para manejar volúmenes importantes por fuera de las redes de comercio justo en algunos productos, como el tomate", cuenta Natalia Manini, ingeniera agrónoma integrante de la UST. Y añade que recientemente comenzaron a abastecer a Cáritas Córdoba y que también estarían en condiciones de proveer a fundaciones o a comedores escolares. "La duda era hasta dónde podríamos sostener una demanda más grande que la surgida desde las redes de comercio justo, entonces hemos ido probando y testeando nuestra capacidad productiva. Y ahora vemos que los volúmenes nos dan para dar un salto. A su vez, que podamos sumar demanda va a traccionar hacia atrás a toda la cadena."
Con el entusiasmo propio de quien entiende las opciones que se abren en el futuro próximo para el crecimiento, Natalia cuenta que la idea es ir integrando todas las producciones existentes entre los campesinos, "desde la alfalfa con las cabras y la comercialización de los cabritos, hasta una cadena avícola", para la cual ya cuentan con muchos productores de pollos, con una pequeña planta de elaboración de alimentos balanceados y con la incubadora de pollitos. "También estamos trabajando en la cadena de la miel y en la de dulces. Donde aún nos resta mucho por hacer es en la cadena de la carne, donde hasta ahora los aportes de la UST han tenido más que ver con el manejo de la sanidad y la productividad que con aspectos de comercialización. Para eso estamos permanentemente intercambiando experiencias con otros movimientos campesinos que tienen más conocimientos en ganadería".
Acerca de la integración de una cadena pecuaria, Manuel Quiroga, campesino de Jocolí Norte (Mendoza), señala que en breve se podría complementar la producción de forraje con la cría de ganado caprino y bovino. "En general los campesinos todos tenemos animalitos, pero no todos tienen la posibilidad de producir forrajes. Entonces, de esta forma, quienes sí podemos producir pasto estaríamos contribuyendo a mantener una producción sin altibajos, con una provisión constante de alimento". En tal sentido, cuenta que en las tierras que trabaja se sembrarán alfalfa y maíz.
Gracias al financiamiento externo y a recursos propios, la UST cuenta con un parque de maquinarias para la producción de forrajes, es decir, tractor, cegadora, rastrillos y enfardadora. Para que estas maquinas puedan ser utilizadas por todos los campesinos, se optó por centralizar su manejo y mantenimiento en dos productores. Uno de ellos es Ernesto Roland, que cuenta que desde lo productivo "sería bueno que podamos comenzar a hacer más hectáreas de pasto para optimizar el uso de las máquinas y para generar reservas forrajeras".
Con la misma lógica de sumar valor a las materias primas trabaja la bodega de la UST, donde se elabora vino artesanal bajo la marca "Campesino". José Quinteros, que combina el quehacer en la bodega con el área de tierras de la organización, dice que el vino obtenido puede competir con cualquier otro vino de bodegas mayores. "En estos momentos debemos comprar el 70% de la uva a productores que no son de la organización, pero la idea es ir incrementando la producción de uva para depender menos de la materia prima ajena.
Al mismo tiempo, estamos trabajando para mejorar la calidad de la uva bonarda, que es la que utilizamos para el vino tinto." José explica que gracias al apoyo del Instituto Nacional de Vitivinicultura, que cambió la nomenclatura de "vino casero" por "vino artesanal", cuentan con un cupo de hasta 12.000 litros.
- Comercio justo. El tomate triturado, los dulces y el vino de la UST pueden adquirirse en Coop. La Asamblearia, de la calle Bonpland 1660 ( http://www.asamblearia.com.ar/ ); Coop. Puente del Sur (4450-7730 y http://www.puentedelsurcoop.com.ar/ ); Red Tacurú ( http://www.redtacuru.com.ar/ ); Sercupo ( productoscampesinos@gmail.com ), y en el Centro de Estudiantes de la Fauba, Av. San Martín 4453.
- Fomento. Entre las fuentes de financiamiento alternativas se destacan el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, la Subsecretaría de Agricultura Familiar y algunas agencias de cooperación internacional.
- Vínculo. Para contactarse con la UST: (0261) 4905028 o vía mail a campesinosdecuyo@gmail.com.
Fuente: Diario La Nación
La propia evolución del trabajo plantea nuevos objetivos, tal el caso de abastecer una mayor demanda. "El desafío es ver cómo hacemos para manejar volúmenes importantes por fuera de las redes de comercio justo en algunos productos, como el tomate", cuenta Natalia Manini, ingeniera agrónoma integrante de la UST. Y añade que recientemente comenzaron a abastecer a Cáritas Córdoba y que también estarían en condiciones de proveer a fundaciones o a comedores escolares. "La duda era hasta dónde podríamos sostener una demanda más grande que la surgida desde las redes de comercio justo, entonces hemos ido probando y testeando nuestra capacidad productiva. Y ahora vemos que los volúmenes nos dan para dar un salto. A su vez, que podamos sumar demanda va a traccionar hacia atrás a toda la cadena."
Con el entusiasmo propio de quien entiende las opciones que se abren en el futuro próximo para el crecimiento, Natalia cuenta que la idea es ir integrando todas las producciones existentes entre los campesinos, "desde la alfalfa con las cabras y la comercialización de los cabritos, hasta una cadena avícola", para la cual ya cuentan con muchos productores de pollos, con una pequeña planta de elaboración de alimentos balanceados y con la incubadora de pollitos. "También estamos trabajando en la cadena de la miel y en la de dulces. Donde aún nos resta mucho por hacer es en la cadena de la carne, donde hasta ahora los aportes de la UST han tenido más que ver con el manejo de la sanidad y la productividad que con aspectos de comercialización. Para eso estamos permanentemente intercambiando experiencias con otros movimientos campesinos que tienen más conocimientos en ganadería".
Acerca de la integración de una cadena pecuaria, Manuel Quiroga, campesino de Jocolí Norte (Mendoza), señala que en breve se podría complementar la producción de forraje con la cría de ganado caprino y bovino. "En general los campesinos todos tenemos animalitos, pero no todos tienen la posibilidad de producir forrajes. Entonces, de esta forma, quienes sí podemos producir pasto estaríamos contribuyendo a mantener una producción sin altibajos, con una provisión constante de alimento". En tal sentido, cuenta que en las tierras que trabaja se sembrarán alfalfa y maíz.
Gracias al financiamiento externo y a recursos propios, la UST cuenta con un parque de maquinarias para la producción de forrajes, es decir, tractor, cegadora, rastrillos y enfardadora. Para que estas maquinas puedan ser utilizadas por todos los campesinos, se optó por centralizar su manejo y mantenimiento en dos productores. Uno de ellos es Ernesto Roland, que cuenta que desde lo productivo "sería bueno que podamos comenzar a hacer más hectáreas de pasto para optimizar el uso de las máquinas y para generar reservas forrajeras".
Con la misma lógica de sumar valor a las materias primas trabaja la bodega de la UST, donde se elabora vino artesanal bajo la marca "Campesino". José Quinteros, que combina el quehacer en la bodega con el área de tierras de la organización, dice que el vino obtenido puede competir con cualquier otro vino de bodegas mayores. "En estos momentos debemos comprar el 70% de la uva a productores que no son de la organización, pero la idea es ir incrementando la producción de uva para depender menos de la materia prima ajena.
Al mismo tiempo, estamos trabajando para mejorar la calidad de la uva bonarda, que es la que utilizamos para el vino tinto." José explica que gracias al apoyo del Instituto Nacional de Vitivinicultura, que cambió la nomenclatura de "vino casero" por "vino artesanal", cuentan con un cupo de hasta 12.000 litros.
- Comercio justo. El tomate triturado, los dulces y el vino de la UST pueden adquirirse en Coop. La Asamblearia, de la calle Bonpland 1660 ( http://www.asamblearia.com.ar/ ); Coop. Puente del Sur (4450-7730 y http://www.puentedelsurcoop.com.ar/ ); Red Tacurú ( http://www.redtacuru.com.ar/ ); Sercupo ( productoscampesinos@gmail.com ), y en el Centro de Estudiantes de la Fauba, Av. San Martín 4453.
- Fomento. Entre las fuentes de financiamiento alternativas se destacan el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, la Subsecretaría de Agricultura Familiar y algunas agencias de cooperación internacional.
- Vínculo. Para contactarse con la UST: (0261) 4905028 o vía mail a campesinosdecuyo@gmail.com.
Fuente: Diario La Nación
Una cadena con valor campesino
Por Dante A. Rofi - Diario La Nación
A partir del tomate, pequeños productores y peones rurales de Mendoza desarrollaron una red que integra el invernadero, la chacra, la industrialización y la venta del producto terminado
Bajo el azote del sol mendocino, brazos de campesinas se entrelazan para construir un presente mejor y un futuro posible. La producción de alimentos de alta calidad y la generación de puestos de trabajo genuinos son sólo dos de los objetivos alcanzados por las familias que conforman la Unión de Trabajadores Rurales sin Tierra (UST), organización integrante del Movimiento Nacional Campesino Indígena, que desde 2001 concentra el esfuerzo y las esperanzas de unas 600 familias de pequeños productores y peones rurales de esta provincia y del sur de San Juan.
Y para llegar a cumplir aquellos objetivos, amén de las luchas por la defensa de la tierra y por el acceso al agua en forma equitativa, estos pequeños productores eligieron agregar valor a las producciones primarias, entre ellas la del tomate. Fue así como a partir de un trabajo solidario y cooperativo conformaron una cadena de valor, que unió la obtención de plantines en un invernadero, la producción del tomate en las chacras, la elaboración del tomate triturado o entero en dos pequeñas fábricas y la distribución del producto terminado tanto a nivel zonal, en los comercios del interior mendocino, como dentro de las redes de comercio justo, que llevan los productos de la UST a Mendoza capital, Buenos Aires, Córdoba y Rosario.
Para desarrollar la cadena del tomate se ideó un sistema de microcréditos internos. "Básicamente son créditos en insumos y cada uno de los eslabones devuelve ese crédito en productos. Entonces, el vivero pide semillas y agroquímicos y los devuelve en plantines; el chacarero pide insumos para la producción (además del plantín se les provee, gasoil y agroquímicos) y los devuelve en cajas de tomates; las fábricas ya saben que van a tener determinada cantidad de cajas para procesar, entonces lo que piden es el dinero para comprar botellas y etiquetas, y para la retribución semanal a quienes trabajan en ellas, y una vez que se comercializa el producto terminado se cierra el ciclo con el ingreso de los recursos", cuenta a LA NACION Natalia Manini, ingeniera agrónoma integrante de la UST.
El proceso se inicia en el invernadero, que en la temporada primavera/verano trabaja al máximo de su capacidad sin detenerse y se llena 4 veces, lo que equivale a una cantidad aproximada de 670.000 plantines. Una vez cubierta la cuota de plantines necesaria para el encadenamiento, el resto se comercializa en la comunidad. "Además de producir los plantines de tomate y de melón en chacra de verano, comenzamos a producir repollo y coliflor en invierno", dice Micaela Quiroga, joven campesina que trabaja en el vivero y que, a su vez, forma parte del área de Comunicación de la UST.
En la segunda etapa, los chacareros reciben los plantines y el resto de insumos necesarios. "Se ha estimado que la mitad de la producción que se obtiene a partir del aporte de insumos es la que se devuelve, la mitad restante el chacarero la comercializa dentro o fuera de la organización", explica Natalia. Agrega que con tomate se producen unas 10 hectáreas, con un rinde promedio de 20.000 kilos por hectárea y picos de hasta 40.000 kg. "Nosotros tenemos un seguimiento completo de la historia de cada planta, desde el invernadero hasta algo muy importante, que en general en la industria convencional no se tiene en cuenta, que es el tiempo de carencia de determinados remedios que se aplican a las plantas. Y como nosotros consumimos lo que producimos, tenemos muchas etapas que nos garantizan la calidad del producto final".
Previo al inicio del trabajo de elaboración del tomate triturado se realizaron varios talleres de capacitación para la manipulación de alimentos y para el uso del instrumental que garantice la calidad, como ser los pehachímetros. También se consensuó un protocolo de elaboración para lograr productos de calidad uniforme. Para ello se realiza como practica el loteo de la producción, que contribuye a realizar la trazabilidad de los productos que se comercializan.
Natalia detalla que hay un compromiso con los productores acerca de la calidad que deben tener los tomates destinados a la cadena, por lo que ellos deben hacer una primera clasificación. "Luego, con los tomates ya en las fábricas, nosotras hacemos un segundo claseado, los lavamos con agua levemente clorada, y hacemos un sancochado, que baja la carga microbiana y despega la cáscara. De ahí se pasa a la máquina -especialmente diseñada para nosotros- que retira la piel y muele el tomate; ese producto cae en escurridores, donde sigue perdiendo agua. A continuación se le hace un agregado de ácido cítrico, como precaución frente al botulismo. Por último, se envasa, se tapa y se hace un baño maría de una hora, para esterilizar el envase.
Todo se lotea y tenemos la precaución de estibar los productos al menos tres meses, tiempo durante el cual nosotros y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) hacemos controles periódicos". Las fábricas se ajustan a la normativa vigente, lo que le permitió a la UST la habilitación para vender los productos en el mercado formal a través de la obtención de los números de RNE y RNPA. Para la temporada 2011 se prevé la producción de unas 40.000 unidades de tomates de piso. La botella de 950 gramos sale de las fábricas con un valor de $ 6,50, mientras que en las redes de comercio justo se las consigue entre 7,50 y 8,50 pesos.
Cristian Ciurletti y Pablo Cerutti, bromatólogo e ingeniero agrónomo del INTI, respectivamente, aclaran que el tomate triturado de la UST es un producto que parte de una materia prima de muy alta calidad. "Además, no se utiliza ningún tipo de conservante artificial, lo que lo hace un producto natural. Nosotros, desde el INTI Frutas y Hortalizas de Mendoza, hacemos todos los análisis técnicos y avalamos la calidad del producto". Añaden que el emprendimiento tiene un valor relevante porque atiende la problemática del éxodo rural al generar opciones de trabajo genuinas. "Hace tres años nos vinculamos con la UST y no deja de sorprendernos la alegría con la que trabajan. El consumidor debe darle una oportunidad a este producto porque se va a encontrar con un alimento natural, con el sabor propio del tomate y una concentración que difícilmente encuentre en el circuito convencional."
Raimundo Laugero, ingeniero agrónomo integrante de la UST, dice que la venta es parte de la cadena, "porque el producto no va a una góndola perdida de un supermercado". Los mismos campesinos se involucran en la comercialización. "Así nos vinculamos con Puente del Sur en Buenos Aires, que acerca al consumidor la producción de los movimientos campesinos de todo el país; con el Mercado Solidario de Rosario, y con la Cooperativa La Asamblearia, en Palermo. Lo mismo ocurre en Mendoza capital, donde un grupo de estudiantes universitarios formaron una red de comercio justo".
A partir del tomate, pequeños productores y peones rurales de Mendoza desarrollaron una red que integra el invernadero, la chacra, la industrialización y la venta del producto terminado
Bajo el azote del sol mendocino, brazos de campesinas se entrelazan para construir un presente mejor y un futuro posible. La producción de alimentos de alta calidad y la generación de puestos de trabajo genuinos son sólo dos de los objetivos alcanzados por las familias que conforman la Unión de Trabajadores Rurales sin Tierra (UST), organización integrante del Movimiento Nacional Campesino Indígena, que desde 2001 concentra el esfuerzo y las esperanzas de unas 600 familias de pequeños productores y peones rurales de esta provincia y del sur de San Juan.
Y para llegar a cumplir aquellos objetivos, amén de las luchas por la defensa de la tierra y por el acceso al agua en forma equitativa, estos pequeños productores eligieron agregar valor a las producciones primarias, entre ellas la del tomate. Fue así como a partir de un trabajo solidario y cooperativo conformaron una cadena de valor, que unió la obtención de plantines en un invernadero, la producción del tomate en las chacras, la elaboración del tomate triturado o entero en dos pequeñas fábricas y la distribución del producto terminado tanto a nivel zonal, en los comercios del interior mendocino, como dentro de las redes de comercio justo, que llevan los productos de la UST a Mendoza capital, Buenos Aires, Córdoba y Rosario.
Para desarrollar la cadena del tomate se ideó un sistema de microcréditos internos. "Básicamente son créditos en insumos y cada uno de los eslabones devuelve ese crédito en productos. Entonces, el vivero pide semillas y agroquímicos y los devuelve en plantines; el chacarero pide insumos para la producción (además del plantín se les provee, gasoil y agroquímicos) y los devuelve en cajas de tomates; las fábricas ya saben que van a tener determinada cantidad de cajas para procesar, entonces lo que piden es el dinero para comprar botellas y etiquetas, y para la retribución semanal a quienes trabajan en ellas, y una vez que se comercializa el producto terminado se cierra el ciclo con el ingreso de los recursos", cuenta a LA NACION Natalia Manini, ingeniera agrónoma integrante de la UST.
El proceso se inicia en el invernadero, que en la temporada primavera/verano trabaja al máximo de su capacidad sin detenerse y se llena 4 veces, lo que equivale a una cantidad aproximada de 670.000 plantines. Una vez cubierta la cuota de plantines necesaria para el encadenamiento, el resto se comercializa en la comunidad. "Además de producir los plantines de tomate y de melón en chacra de verano, comenzamos a producir repollo y coliflor en invierno", dice Micaela Quiroga, joven campesina que trabaja en el vivero y que, a su vez, forma parte del área de Comunicación de la UST.
En la segunda etapa, los chacareros reciben los plantines y el resto de insumos necesarios. "Se ha estimado que la mitad de la producción que se obtiene a partir del aporte de insumos es la que se devuelve, la mitad restante el chacarero la comercializa dentro o fuera de la organización", explica Natalia. Agrega que con tomate se producen unas 10 hectáreas, con un rinde promedio de 20.000 kilos por hectárea y picos de hasta 40.000 kg. "Nosotros tenemos un seguimiento completo de la historia de cada planta, desde el invernadero hasta algo muy importante, que en general en la industria convencional no se tiene en cuenta, que es el tiempo de carencia de determinados remedios que se aplican a las plantas. Y como nosotros consumimos lo que producimos, tenemos muchas etapas que nos garantizan la calidad del producto final".
Previo al inicio del trabajo de elaboración del tomate triturado se realizaron varios talleres de capacitación para la manipulación de alimentos y para el uso del instrumental que garantice la calidad, como ser los pehachímetros. También se consensuó un protocolo de elaboración para lograr productos de calidad uniforme. Para ello se realiza como practica el loteo de la producción, que contribuye a realizar la trazabilidad de los productos que se comercializan.
Natalia detalla que hay un compromiso con los productores acerca de la calidad que deben tener los tomates destinados a la cadena, por lo que ellos deben hacer una primera clasificación. "Luego, con los tomates ya en las fábricas, nosotras hacemos un segundo claseado, los lavamos con agua levemente clorada, y hacemos un sancochado, que baja la carga microbiana y despega la cáscara. De ahí se pasa a la máquina -especialmente diseñada para nosotros- que retira la piel y muele el tomate; ese producto cae en escurridores, donde sigue perdiendo agua. A continuación se le hace un agregado de ácido cítrico, como precaución frente al botulismo. Por último, se envasa, se tapa y se hace un baño maría de una hora, para esterilizar el envase.
Todo se lotea y tenemos la precaución de estibar los productos al menos tres meses, tiempo durante el cual nosotros y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) hacemos controles periódicos". Las fábricas se ajustan a la normativa vigente, lo que le permitió a la UST la habilitación para vender los productos en el mercado formal a través de la obtención de los números de RNE y RNPA. Para la temporada 2011 se prevé la producción de unas 40.000 unidades de tomates de piso. La botella de 950 gramos sale de las fábricas con un valor de $ 6,50, mientras que en las redes de comercio justo se las consigue entre 7,50 y 8,50 pesos.
Cristian Ciurletti y Pablo Cerutti, bromatólogo e ingeniero agrónomo del INTI, respectivamente, aclaran que el tomate triturado de la UST es un producto que parte de una materia prima de muy alta calidad. "Además, no se utiliza ningún tipo de conservante artificial, lo que lo hace un producto natural. Nosotros, desde el INTI Frutas y Hortalizas de Mendoza, hacemos todos los análisis técnicos y avalamos la calidad del producto". Añaden que el emprendimiento tiene un valor relevante porque atiende la problemática del éxodo rural al generar opciones de trabajo genuinas. "Hace tres años nos vinculamos con la UST y no deja de sorprendernos la alegría con la que trabajan. El consumidor debe darle una oportunidad a este producto porque se va a encontrar con un alimento natural, con el sabor propio del tomate y una concentración que difícilmente encuentre en el circuito convencional."
Raimundo Laugero, ingeniero agrónomo integrante de la UST, dice que la venta es parte de la cadena, "porque el producto no va a una góndola perdida de un supermercado". Los mismos campesinos se involucran en la comercialización. "Así nos vinculamos con Puente del Sur en Buenos Aires, que acerca al consumidor la producción de los movimientos campesinos de todo el país; con el Mercado Solidario de Rosario, y con la Cooperativa La Asamblearia, en Palermo. Lo mismo ocurre en Mendoza capital, donde un grupo de estudiantes universitarios formaron una red de comercio justo".
Ambicioso proyecto bajo la cordillera
Por Nora Bär - LA NACION
Iniciativa en estudio. Escudriñar el universo desde las entrañas de la Tierra. Proponen construir un túnel a 1750 metros de profundidad para detectar materia oscura, que constituiría la mayor parte del universo
Como en una canción de María Elena Walsh, los físicos y cosmólogos están en un tremendo problema: las cuentas les dan mal. Toda la materia que ven y la energía que registran sus instrumentos más precisos sólo representaría... ¡el 4% del universo! Es decir, que el 96% estaría compuesto por "algo" enigmático y muy diferente de lo que conocemos: la materia y la energía oscuras.
Resolver este intríngulis científico podría confirmar o refutar varias predicciones cruciales del modelo del Big Bang, actualmente vigente, pero exige detectar y estudiar las partículas que conforman la materia oscura, como los neutrinos (que se desplazan a velocidades cercanas a la de la luz y tendrían un tamaño equivalente a la mil millonésima parte de un protón). Para eso, hay que colocar detectores que operen a temperaturas muy cercanas al cero absoluto (-273° Celsius), de modo que cada vez que alguno pase por ellos los caliente levemente.
Hasta ahora, esos instrumentos están en túneles o cavernas bajo las montañas para aprovechar los miles de metros de blindaje que ofrecen la tierra y las rocas a la radiación cósmica, todos en el hemisferio Norte. Sin embargo, si prospera la iniciativa que impulsan los físicos del Conicet Xavier Bertou, del Centro Atómico Bariloche, y Osvaldo Civitarese, de la Universidad Nacional de La Plata, dentro de cinco o seis años podría haber uno en la Argentina. Más precisamente, en el Paso de Agua Negra, en la provincia de San Juan.
Este monumental proyecto ya se encuentra en estudio en el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, y propone adosar un gran laboratorio al túnel que uniría Chile y la Argentina para tender un corredor bioceánico que conectaría Santos o Porto Alegre, en Brasil, con Coquimbo, en el país trasandino.
El acuerdo para realizar esta obra fue firmado el 28 de agosto de 2009 por los presidentes Cristina Fernández, Michelle Bachelet y Lula da Silva, y, en este momento, dos equipos de ingenieros de las empresas Bureau de Projetos Ltda., de Brasil, y Geoconsult Buenos Aires SA, con la dirección del ingeniero M. Bofer, están haciendo los estudios de factibilidad en forma conjunta. Costaría unos 850 millones de dólares y a mediados de año se haría la licitación. Para construir el laboratorio, habría que agregar un 1% más, unos diez millones.
"Este laboratorio permitiría realizar varios experimentos de gran volumen -explica el doctor Civitarese-. Uno haría posible la detección de propiedades de los neutrinos, como el decaimiento beta doble, un proceso muy exótico que sólo existiría si estas partículas tienen masa. También podríamos estudiar las «oscilaciones» de neutrinos produciendo un haz de estas partículas en el Fermilab, de Chicago, y detectándolo en San Juan. Pero, además, está la posibilidad alojar experimentos de biología, geofísica, estudios ambientales y microelectrónica."
Como suele suceder, el azar jugó un papel crucial en la génesis de este gran sueño. "Con Xavier, nos enteramos por casualidad del túnel y se nos ocurrió que se podría radicar allí este gran proyecto científico", afirma Civitarese.
La posibilidad de que se creara el laboratorio Andes ya tuvo una amplia repercusión y, en los últimos seis meses, los físicos recibieron cartas de intención de las sociedades de físicos de México, Brasil, Chile, y de grupos experimentales de los Estados Unidos, Francia, Italia, Rusia y Alemania, todos ansiosos por participar. "Estados Unidos estaba por construir un laboratorio similar en una mina de oro, en Dakota, y se acaba de cancelar -cuenta el científico-. Prácticamente nos enviaron una súplica para colocar un acelerador de partículas acá si se llega a construir." Y más adelante, subraya: "Lo importante es no dejar pasar la oportunidad de hacer el estudio de factibilidad, que es imprescindible realizar al mismo tiempo que el del túnel".
El gobierno de San Juan encaró con entusiasmo el proyecto de Agua Negra y recibió con beneplácito la iniciativa del laboratorio Andes. Próximamente, los investigadores realizarán un taller en la Comisión Nacional de Energía Atómica para exponer los lineamientos de este desafío. "Esta es una tarea para 30 o 40 años. Tendría una proyección incalculable sobre las nuevas generaciones, que podrían desarrollar experimentos propios -destaca Civitarese-. Podría establecerse un centro con gran circulación de profesores visitantes, estudiantes de doctorado... La Argentina estaría en la punta de la física mundial, porque el de Agua Negra sería el único laboratorio de este tipo en el hemisferio Sur. Es una oportunidad increíble", concluye.
Iniciativa en estudio. Escudriñar el universo desde las entrañas de la Tierra. Proponen construir un túnel a 1750 metros de profundidad para detectar materia oscura, que constituiría la mayor parte del universo
Como en una canción de María Elena Walsh, los físicos y cosmólogos están en un tremendo problema: las cuentas les dan mal. Toda la materia que ven y la energía que registran sus instrumentos más precisos sólo representaría... ¡el 4% del universo! Es decir, que el 96% estaría compuesto por "algo" enigmático y muy diferente de lo que conocemos: la materia y la energía oscuras.
Resolver este intríngulis científico podría confirmar o refutar varias predicciones cruciales del modelo del Big Bang, actualmente vigente, pero exige detectar y estudiar las partículas que conforman la materia oscura, como los neutrinos (que se desplazan a velocidades cercanas a la de la luz y tendrían un tamaño equivalente a la mil millonésima parte de un protón). Para eso, hay que colocar detectores que operen a temperaturas muy cercanas al cero absoluto (-273° Celsius), de modo que cada vez que alguno pase por ellos los caliente levemente.
Hasta ahora, esos instrumentos están en túneles o cavernas bajo las montañas para aprovechar los miles de metros de blindaje que ofrecen la tierra y las rocas a la radiación cósmica, todos en el hemisferio Norte. Sin embargo, si prospera la iniciativa que impulsan los físicos del Conicet Xavier Bertou, del Centro Atómico Bariloche, y Osvaldo Civitarese, de la Universidad Nacional de La Plata, dentro de cinco o seis años podría haber uno en la Argentina. Más precisamente, en el Paso de Agua Negra, en la provincia de San Juan.
Este monumental proyecto ya se encuentra en estudio en el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva, y propone adosar un gran laboratorio al túnel que uniría Chile y la Argentina para tender un corredor bioceánico que conectaría Santos o Porto Alegre, en Brasil, con Coquimbo, en el país trasandino.
El acuerdo para realizar esta obra fue firmado el 28 de agosto de 2009 por los presidentes Cristina Fernández, Michelle Bachelet y Lula da Silva, y, en este momento, dos equipos de ingenieros de las empresas Bureau de Projetos Ltda., de Brasil, y Geoconsult Buenos Aires SA, con la dirección del ingeniero M. Bofer, están haciendo los estudios de factibilidad en forma conjunta. Costaría unos 850 millones de dólares y a mediados de año se haría la licitación. Para construir el laboratorio, habría que agregar un 1% más, unos diez millones.
"Este laboratorio permitiría realizar varios experimentos de gran volumen -explica el doctor Civitarese-. Uno haría posible la detección de propiedades de los neutrinos, como el decaimiento beta doble, un proceso muy exótico que sólo existiría si estas partículas tienen masa. También podríamos estudiar las «oscilaciones» de neutrinos produciendo un haz de estas partículas en el Fermilab, de Chicago, y detectándolo en San Juan. Pero, además, está la posibilidad alojar experimentos de biología, geofísica, estudios ambientales y microelectrónica."
Como suele suceder, el azar jugó un papel crucial en la génesis de este gran sueño. "Con Xavier, nos enteramos por casualidad del túnel y se nos ocurrió que se podría radicar allí este gran proyecto científico", afirma Civitarese.
La posibilidad de que se creara el laboratorio Andes ya tuvo una amplia repercusión y, en los últimos seis meses, los físicos recibieron cartas de intención de las sociedades de físicos de México, Brasil, Chile, y de grupos experimentales de los Estados Unidos, Francia, Italia, Rusia y Alemania, todos ansiosos por participar. "Estados Unidos estaba por construir un laboratorio similar en una mina de oro, en Dakota, y se acaba de cancelar -cuenta el científico-. Prácticamente nos enviaron una súplica para colocar un acelerador de partículas acá si se llega a construir." Y más adelante, subraya: "Lo importante es no dejar pasar la oportunidad de hacer el estudio de factibilidad, que es imprescindible realizar al mismo tiempo que el del túnel".
El gobierno de San Juan encaró con entusiasmo el proyecto de Agua Negra y recibió con beneplácito la iniciativa del laboratorio Andes. Próximamente, los investigadores realizarán un taller en la Comisión Nacional de Energía Atómica para exponer los lineamientos de este desafío. "Esta es una tarea para 30 o 40 años. Tendría una proyección incalculable sobre las nuevas generaciones, que podrían desarrollar experimentos propios -destaca Civitarese-. Podría establecerse un centro con gran circulación de profesores visitantes, estudiantes de doctorado... La Argentina estaría en la punta de la física mundial, porque el de Agua Negra sería el único laboratorio de este tipo en el hemisferio Sur. Es una oportunidad increíble", concluye.
Nueva terminal de omnibus en Miramar
El 22 de Febrero a las 17,30 hs.en la calle 40 en el predio de la estación de trenes, inauguran la terminal de ómnibus en Miramar.
La terminal de ómnibus permitirá un ordenamiento del tránsito reclamado por la ciudadanía desde hace dos décadas. Actualmente, existen un par de centros determinados para ingreso y egreso de colectivos en la ciudad, donde el principal se ubica sobre la diagonal Fortunato de la Plaza entre las calles 15 y 19. Allí se encuentran la mayoría de las empresas de larga distancia y durante el verano el panorama es un verdadero caos, situación que se ve agravada por los gases emanados por los vehículos que causan enormes incomodidades a los vecinos y a quienes transitan por allí.
El otro sector se encuentra sobre la avenida 23 y 34, donde muchas veces algunos choferes que circulan previamente por arterias aledañas desarrollan altas velocidades con los riesgos que esto conlleva. Las improvisadas dársenas determinaron además una rotura importante de la carpeta asfáltica dando una imagen de descuido y suciedad que pasará al olvido una vez culminada la mencionada obra.
La terminal de ómnibus permitirá un ordenamiento del tránsito reclamado por la ciudadanía desde hace dos décadas. Actualmente, existen un par de centros determinados para ingreso y egreso de colectivos en la ciudad, donde el principal se ubica sobre la diagonal Fortunato de la Plaza entre las calles 15 y 19. Allí se encuentran la mayoría de las empresas de larga distancia y durante el verano el panorama es un verdadero caos, situación que se ve agravada por los gases emanados por los vehículos que causan enormes incomodidades a los vecinos y a quienes transitan por allí.
El otro sector se encuentra sobre la avenida 23 y 34, donde muchas veces algunos choferes que circulan previamente por arterias aledañas desarrollan altas velocidades con los riesgos que esto conlleva. Las improvisadas dársenas determinaron además una rotura importante de la carpeta asfáltica dando una imagen de descuido y suciedad que pasará al olvido una vez culminada la mencionada obra.
Fracasó Moreno en la planta de la papelera Massuh
Por Martin Kanenguiser - Diario La Nación
Pese a múltiples promesas del Gobierno, la papelera está cerrada hace nueve meses y no hay perspectivas de que sea reactivada
Subsidiados por un par de meses más, pero sin perspectivas claras de poder mantener su fuente de empleo en el mediano plazo, unos 200 trabajadores son los testigos más directos del fracaso del Gobierno para gestionar a la ex papelera Massuh. Después de once meses de la quiebra declarada por la Justicia a Massuh y tras nueve meses del cierre de la planta, la empresa no tiene perspectivas de reabrirse, según admitieron fuentes sindicales y empresarias a La Nacion.
La empresa se paralizó en octubre de 2008 por falta de inversiones del grupo Massuh, que ya había presentado el concurso preventivo de la firma diez años antes. Después de que el ex presidente Néstor Kirchner prometiera que el Gobierno no permitiría que "cierren las fábricas y que se pierda un solo empleo", el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, aplicó un plan de salvataje con fondos públicos y se comprometió a que la planta sería proveedora exclusiva de papel del Estado, con el nombre de Papelera Quilmes.
Nada de eso se cumplió; poco a poco, la empresa "rescatada" por un fideicomiso manejado por Moreno se enfrentó con las duras condiciones para mantenerse, hasta que, en mayo pasado, cuando el Gobierno ya había perdido más de $ 50 millones, la planta cerró con 500 trabajadores.
"Lo de venderle al Estado fue una expresión de deseo de Moreno, pero él se portó bien con nosotros y hasta fuimos a su cumpleaños", explicó Héctor Urbanovicz, uno de los delegados sindicales de los 200 trabajadores papeleros que se mantienen por el subsidio del Ministerio de Trabajo. Entre otras cuestiones, nunca prosperó la idea de que las diferentes áreas de Gobierno coordinaran la compra de papel a una sola empresa; tampoco terminó de definirse en forma clara la figura jurídica por la cual podía asegurarse la continuidad de la empresa.
Y la municipalidad de Quilmes, a cargo de Francisco Gutiérrez -que jugó un rol importante en el inicio- tampoco siguió aportando al proyecto. "Sería imposible que pongan los 20 millones de pesos mensuales que se requieren para que esto funcione", lo justificó el delegado sindical. "El cierre aumento la concentración de la producción de papel obra en los dos productores que quedaron: Ledesma y Papel de Tucumán", se lamentaron en el municipio, que impulsó la creación del Instituto Argentino del Libro, que se proveería de papel de la ex Massuh, como único plan viable de reactivación. "Pero somos conscientes de que el gobierno nacional no va a instrumentarlo hasta ver el resultado de las elecciones presidenciales, dado que se opone el gremio papelero, alineado con la CGT de Luis Barrionuevo", agregó un funcionario.
La finalización del apoyo estatal, consistente en el pago de los salarios y vigente hasta el cierre de la firma, está pautado para mayo, por lo que los trabajadores ya están preparados para movilizarse si en los próximos días no hay novedades respecto de la reapertura de la planta papelera.Mientras vigilan el predio para que no sea ocupado y para mantener la maquinaria en buenas condiciones, los trabajadores mantienen el diálogo con los principales acreedores del pasivo cercano a $ 250 millones (el fondo inversor canadiense IIG Trade Opportunities y el Banco Provincia) para mantener su esperanza.
También, aclaró Urbanovicz, hubo contactos con importantes representantes de Venezuela, que hasta ahora no prosperaron. Tampoco hubo nuevas respuestas del Gobierno. "Le enviamos dos cartas a la presidenta Cristina Kirchner, pero aún no obtuvimos una respuesta", dijo Urbanovicz.
"Queremos volver a trabajar cuanto antes", indicó el dirigente sindical, que se encuentra a la espera de las novedades de la jueza María Cristina O'Reilly, que debe publicar el precio del remate de la planta para ver si aparecen oferentes en forma oficial. Un importante empresario del sector admitió que no será fácil reactivar el proyecto, tanto por la falta de funcionamiento pleno de la planta por más de dos años, como por la causa por presunta contaminación ambiental que se sigue en la provincia de Buenos Aires y que también complica los planes.
A un costado de todas las discusiones, Héctor Massuh cultiva el perfil bajo, por lo que ya no se lo ve por los pasillos de su querida Unión Industrial Argentina (UIA) que supo presidir. Cerca suyo juran que jamás cobró un peso del fideicomiso, pese al convenio que había firmado en su momento con el Gobierno, en el que se preveía que cobraría un canon en concepto de alquiler de la planta de Quilmes.
Angel Kolomietz, ex representante de los supervisores de Massuh, trazó un panorama más pesimista que Urbanovicz. Aunque logró comenzar a trabajar en otra empresa, Kolomietz jura que "muchos trabajadores cobraron dos meses del seguro de desempleo y luego no obtuvieron ninguna respuesta".
El Ministerio de Trabajo no dio precisiones a las consultas de La Nacion ni sobre la cantidad ni sobre el plazo del beneficio otorgado a los ex empleados de la papelera. "El Gobierno trabajó muy bien en la separación de la gente, para la tribuna estuvo muy bien porque logró hacer desaparecer el conflicto de la agenda pública", dijo Kolomietz.
Pese a múltiples promesas del Gobierno, la papelera está cerrada hace nueve meses y no hay perspectivas de que sea reactivada
Subsidiados por un par de meses más, pero sin perspectivas claras de poder mantener su fuente de empleo en el mediano plazo, unos 200 trabajadores son los testigos más directos del fracaso del Gobierno para gestionar a la ex papelera Massuh. Después de once meses de la quiebra declarada por la Justicia a Massuh y tras nueve meses del cierre de la planta, la empresa no tiene perspectivas de reabrirse, según admitieron fuentes sindicales y empresarias a La Nacion.
La empresa se paralizó en octubre de 2008 por falta de inversiones del grupo Massuh, que ya había presentado el concurso preventivo de la firma diez años antes. Después de que el ex presidente Néstor Kirchner prometiera que el Gobierno no permitiría que "cierren las fábricas y que se pierda un solo empleo", el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, aplicó un plan de salvataje con fondos públicos y se comprometió a que la planta sería proveedora exclusiva de papel del Estado, con el nombre de Papelera Quilmes.
Nada de eso se cumplió; poco a poco, la empresa "rescatada" por un fideicomiso manejado por Moreno se enfrentó con las duras condiciones para mantenerse, hasta que, en mayo pasado, cuando el Gobierno ya había perdido más de $ 50 millones, la planta cerró con 500 trabajadores.
"Lo de venderle al Estado fue una expresión de deseo de Moreno, pero él se portó bien con nosotros y hasta fuimos a su cumpleaños", explicó Héctor Urbanovicz, uno de los delegados sindicales de los 200 trabajadores papeleros que se mantienen por el subsidio del Ministerio de Trabajo. Entre otras cuestiones, nunca prosperó la idea de que las diferentes áreas de Gobierno coordinaran la compra de papel a una sola empresa; tampoco terminó de definirse en forma clara la figura jurídica por la cual podía asegurarse la continuidad de la empresa.
Y la municipalidad de Quilmes, a cargo de Francisco Gutiérrez -que jugó un rol importante en el inicio- tampoco siguió aportando al proyecto. "Sería imposible que pongan los 20 millones de pesos mensuales que se requieren para que esto funcione", lo justificó el delegado sindical. "El cierre aumento la concentración de la producción de papel obra en los dos productores que quedaron: Ledesma y Papel de Tucumán", se lamentaron en el municipio, que impulsó la creación del Instituto Argentino del Libro, que se proveería de papel de la ex Massuh, como único plan viable de reactivación. "Pero somos conscientes de que el gobierno nacional no va a instrumentarlo hasta ver el resultado de las elecciones presidenciales, dado que se opone el gremio papelero, alineado con la CGT de Luis Barrionuevo", agregó un funcionario.
La finalización del apoyo estatal, consistente en el pago de los salarios y vigente hasta el cierre de la firma, está pautado para mayo, por lo que los trabajadores ya están preparados para movilizarse si en los próximos días no hay novedades respecto de la reapertura de la planta papelera.Mientras vigilan el predio para que no sea ocupado y para mantener la maquinaria en buenas condiciones, los trabajadores mantienen el diálogo con los principales acreedores del pasivo cercano a $ 250 millones (el fondo inversor canadiense IIG Trade Opportunities y el Banco Provincia) para mantener su esperanza.
También, aclaró Urbanovicz, hubo contactos con importantes representantes de Venezuela, que hasta ahora no prosperaron. Tampoco hubo nuevas respuestas del Gobierno. "Le enviamos dos cartas a la presidenta Cristina Kirchner, pero aún no obtuvimos una respuesta", dijo Urbanovicz.
"Queremos volver a trabajar cuanto antes", indicó el dirigente sindical, que se encuentra a la espera de las novedades de la jueza María Cristina O'Reilly, que debe publicar el precio del remate de la planta para ver si aparecen oferentes en forma oficial. Un importante empresario del sector admitió que no será fácil reactivar el proyecto, tanto por la falta de funcionamiento pleno de la planta por más de dos años, como por la causa por presunta contaminación ambiental que se sigue en la provincia de Buenos Aires y que también complica los planes.
A un costado de todas las discusiones, Héctor Massuh cultiva el perfil bajo, por lo que ya no se lo ve por los pasillos de su querida Unión Industrial Argentina (UIA) que supo presidir. Cerca suyo juran que jamás cobró un peso del fideicomiso, pese al convenio que había firmado en su momento con el Gobierno, en el que se preveía que cobraría un canon en concepto de alquiler de la planta de Quilmes.
Angel Kolomietz, ex representante de los supervisores de Massuh, trazó un panorama más pesimista que Urbanovicz. Aunque logró comenzar a trabajar en otra empresa, Kolomietz jura que "muchos trabajadores cobraron dos meses del seguro de desempleo y luego no obtuvieron ninguna respuesta".
El Ministerio de Trabajo no dio precisiones a las consultas de La Nacion ni sobre la cantidad ni sobre el plazo del beneficio otorgado a los ex empleados de la papelera. "El Gobierno trabajó muy bien en la separación de la gente, para la tribuna estuvo muy bien porque logró hacer desaparecer el conflicto de la agenda pública", dijo Kolomietz.
Perú recibirá dos helicópteros MI-35 rusos para combatir la narcoguerrilla
Las aeronaves con artillería de gran poder de fuego se convertirán para la Fuerza Aérea en una "pieza fundamental" en la lucha contra Sendero Luminoso.
El comandante general de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), Carlos Samamé, informó que en marzo llegarán al país los nuevos helicópteros blindados de combate MI-35, cuya adquisición fue aprobada por el gobierno para la lucha contra el narcoterrorismo en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE).
El gobierno peruano decidió el año pasado adquirir seis helicópteros de transporte MI-17 y dos de combate MI-35 para las operaciones militares en uno de los mayores valles cocaleros del país. Los nuevos aparatos serían un el adelanto de un grupo mayor de naves en vías de compra, cuyo número total no fue confirmado.
El comandante general de la FAP mencionó que para este año su institución castrense tiene prevista, además de la presentación de estos nuevos helicópteros, elevar la operatividad de sus aeronaves de combate y transporte. "Este año deben arribar aeronaves que hemos comprado y uno de los objetivos es que pronto estén operando todas las aeronaves que tenemos", sostuvo.
Samamé adelantó que en este primer semestre del 2011 estaría llegando el primer Twin Otter de un total de 12; avión capaz de transportar pasajeros y carga y que servirá para la vigilancia y servicio social en el territorio nacional.
Fuente: AFP
El comandante general de la Fuerza Aérea del Perú (FAP), Carlos Samamé, informó que en marzo llegarán al país los nuevos helicópteros blindados de combate MI-35, cuya adquisición fue aprobada por el gobierno para la lucha contra el narcoterrorismo en el Valle de los Ríos Apurímac y Ene (VRAE).
El gobierno peruano decidió el año pasado adquirir seis helicópteros de transporte MI-17 y dos de combate MI-35 para las operaciones militares en uno de los mayores valles cocaleros del país. Los nuevos aparatos serían un el adelanto de un grupo mayor de naves en vías de compra, cuyo número total no fue confirmado.
El comandante general de la FAP mencionó que para este año su institución castrense tiene prevista, además de la presentación de estos nuevos helicópteros, elevar la operatividad de sus aeronaves de combate y transporte. "Este año deben arribar aeronaves que hemos comprado y uno de los objetivos es que pronto estén operando todas las aeronaves que tenemos", sostuvo.
Samamé adelantó que en este primer semestre del 2011 estaría llegando el primer Twin Otter de un total de 12; avión capaz de transportar pasajeros y carga y que servirá para la vigilancia y servicio social en el territorio nacional.
Fuente: AFP
La Argentina y Paraguay inauguran Yacyretá
Cristina Kirchner y su par Fernando Lugo celebrarán el viernes en Posadas, Misiones, la finalización de las obras, 37 años después del inicio del proyecto, que tiene por objetivo dar respuesta a las necesidades de electricidad de la región
La obra en sí concluyó el pasado sábado, cuando se alcanzó el llenado a cota 83 (metros de altura sobre el nivel del mar), su cota de diseño máxima. Este nivel permitirá aprovechar a pleno los 3.100 megavatios de potencia instalados en la central y producir casi el 60 por ciento de la generación hidroeléctrica del país (un 22% del total de la electricidad consumida) y atender un nivel similar de la demanda del Paraguay.
El avance de cota 76 a cota 83 -que se registró entre 2006 y 2011 por la implementación del Plan de Terminación de Yacyretá impulsado por el ex presidente Néstor Kirchner- permite a la represa un adicional de 8000 Gigavatios h/año de energía que se entrega al sistema, y un plus de 1600 megawats de potencia.
En ese período, en energía adicional Yacyretá sumó 1,5 veces la energía anual de todas las centrales del Comahue y en potencia adicional sumó el equivalente a todas las hidroeléctricas de Mendoza, más la central de hidroeléctrica de Alicura. La potencia adicional lograda también equivale en 1,2 veces al Complejo Hidroeléctrico que comprende las centrales El Chocón y Arroyito.
Las actividades oficiales se desarrollarán en el cuarto tramo de la Avenida Costanera de la ciudad de Posadas, con la presencia de ambos presidentes, funcionarios de los dos países, gobernadores e intendentes de las comunidades involucradas. Tras finalizar el acto protocolar, se desarrollará un festival artístico que contará con la participación de músicos de Argentina y Paraguay, y como cierre, un show de fuegos artificiales.
El complejo Yacyretá consta de una gran represa, una central hidroeléctrica equipada con 20 generadores con una capacidad instalada de 3.100 MW (megavatios), dos vertederos con capacidad total para evacuar 95.000 metros cúbicos por segundo y una esclusa de navegación y un lago (embalse) de 160 kilómetros cuadrados. Está ubicada en el norte de la provincia de Corrientes, en la localidad de Ituzaingó, sobre el río Paraná, a l.470 kilómetros de Buenos Aires y 310 de Asunción.
El emprendimiento fue diseñado a cota de 83 metros sobre el nivel del mar, referidos al eje Posadas-Encarnación, para poder aprovechar al máximo el potencial hidroeléctrico del río Paraná. La construcción de la represa y la Central hidroeléctrica finalizó hace más de 10 años, pero el embalse recién el pasado sábado 12 se llenó a su cota de diseño de 83 metros.
Desde 1994 hasta el 2006 la Central operó a cota 76 metros sobre el nivel del mar. Con la instrumentación del Plan de Terminación de Yacyretá (PTY) desde el año 2004 se logró en abril de 2006 incrementar el nivel del embalse a cota 78 continuando progresivamente con su elevación a la cota de 83.
En el año 1973, los presidentes de entonces, Alfredo Stroessner, de Paraguay, y el general Juan Domingo Perón, de Argentina, firmaron el Acuerdo de Yacyretá para poder atender el crecimiento de demandas eléctricas de ambos países, pero la obra comenzó recién diez años después. Tras reiteradas interrupciones -la última en 1998 cuando se pone en funcionamiento la última turbina- la construcción fue retomada en 2004, a partir de la decisión del ex presidente Néstor Kirchner, quien encargó al ministro de Planificación Julio De Vido el diseño del PTY, en acuerdo con el por entonces presidente del Paraguay, Nicanor Duarte Frutos.
El PTY incluye la liberación de áreas y compra de tierras afectadas por el embalse, la construcción de 8.300 viviendas, la recomposición de trama urbana de Encarnación, Cambyretá, Carmen de Paraná en Paraguay, y Posadas-Garupa y Candelaria, del lado argentino. También, abarca acciones de protección ambiental, saneamiento y reposición de obras ferroviarias embarcadero de lanchas, nuevos puertos en Posadas y Santa Ana.
Oscar Thomas, director ejecutivo de la EBY, recordó en diálogo con Télam que el Gobierno sumará al complejo una usina adicional, Añá Cuá, que ampliará la potencia instalada de Yacyretá en 270 MW, para generar 1.600GW/h adicionales. Aña Cuá -cuya construcción se licitará este año- permitirá ampliar la capacidad de generación de la central binacional en un 8 por ciento, y será instalada en el Vertedero existente en uno de los brazos de la represa.
Fuente: Infobae.com
La obra en sí concluyó el pasado sábado, cuando se alcanzó el llenado a cota 83 (metros de altura sobre el nivel del mar), su cota de diseño máxima. Este nivel permitirá aprovechar a pleno los 3.100 megavatios de potencia instalados en la central y producir casi el 60 por ciento de la generación hidroeléctrica del país (un 22% del total de la electricidad consumida) y atender un nivel similar de la demanda del Paraguay.
El avance de cota 76 a cota 83 -que se registró entre 2006 y 2011 por la implementación del Plan de Terminación de Yacyretá impulsado por el ex presidente Néstor Kirchner- permite a la represa un adicional de 8000 Gigavatios h/año de energía que se entrega al sistema, y un plus de 1600 megawats de potencia.
En ese período, en energía adicional Yacyretá sumó 1,5 veces la energía anual de todas las centrales del Comahue y en potencia adicional sumó el equivalente a todas las hidroeléctricas de Mendoza, más la central de hidroeléctrica de Alicura. La potencia adicional lograda también equivale en 1,2 veces al Complejo Hidroeléctrico que comprende las centrales El Chocón y Arroyito.
Las actividades oficiales se desarrollarán en el cuarto tramo de la Avenida Costanera de la ciudad de Posadas, con la presencia de ambos presidentes, funcionarios de los dos países, gobernadores e intendentes de las comunidades involucradas. Tras finalizar el acto protocolar, se desarrollará un festival artístico que contará con la participación de músicos de Argentina y Paraguay, y como cierre, un show de fuegos artificiales.
El complejo Yacyretá consta de una gran represa, una central hidroeléctrica equipada con 20 generadores con una capacidad instalada de 3.100 MW (megavatios), dos vertederos con capacidad total para evacuar 95.000 metros cúbicos por segundo y una esclusa de navegación y un lago (embalse) de 160 kilómetros cuadrados. Está ubicada en el norte de la provincia de Corrientes, en la localidad de Ituzaingó, sobre el río Paraná, a l.470 kilómetros de Buenos Aires y 310 de Asunción.
El emprendimiento fue diseñado a cota de 83 metros sobre el nivel del mar, referidos al eje Posadas-Encarnación, para poder aprovechar al máximo el potencial hidroeléctrico del río Paraná. La construcción de la represa y la Central hidroeléctrica finalizó hace más de 10 años, pero el embalse recién el pasado sábado 12 se llenó a su cota de diseño de 83 metros.
Desde 1994 hasta el 2006 la Central operó a cota 76 metros sobre el nivel del mar. Con la instrumentación del Plan de Terminación de Yacyretá (PTY) desde el año 2004 se logró en abril de 2006 incrementar el nivel del embalse a cota 78 continuando progresivamente con su elevación a la cota de 83.
En el año 1973, los presidentes de entonces, Alfredo Stroessner, de Paraguay, y el general Juan Domingo Perón, de Argentina, firmaron el Acuerdo de Yacyretá para poder atender el crecimiento de demandas eléctricas de ambos países, pero la obra comenzó recién diez años después. Tras reiteradas interrupciones -la última en 1998 cuando se pone en funcionamiento la última turbina- la construcción fue retomada en 2004, a partir de la decisión del ex presidente Néstor Kirchner, quien encargó al ministro de Planificación Julio De Vido el diseño del PTY, en acuerdo con el por entonces presidente del Paraguay, Nicanor Duarte Frutos.
El PTY incluye la liberación de áreas y compra de tierras afectadas por el embalse, la construcción de 8.300 viviendas, la recomposición de trama urbana de Encarnación, Cambyretá, Carmen de Paraná en Paraguay, y Posadas-Garupa y Candelaria, del lado argentino. También, abarca acciones de protección ambiental, saneamiento y reposición de obras ferroviarias embarcadero de lanchas, nuevos puertos en Posadas y Santa Ana.
Oscar Thomas, director ejecutivo de la EBY, recordó en diálogo con Télam que el Gobierno sumará al complejo una usina adicional, Añá Cuá, que ampliará la potencia instalada de Yacyretá en 270 MW, para generar 1.600GW/h adicionales. Aña Cuá -cuya construcción se licitará este año- permitirá ampliar la capacidad de generación de la central binacional en un 8 por ciento, y será instalada en el Vertedero existente en uno de los brazos de la represa.
Fuente: Infobae.com
Ferrocarril: Detectaron reparaciones con materiales de menor calidad
Por Antonio Rossi - Diario Clarín
Los coches tuvieron menor capacidad de resistencia al impacto, según expertos.
Mientras las pruebas se encaminan a confirmar la hipótesis del “error humano” en el trágico choque de trenes de San Miguel, la aparición de una serie de elementos surgidos de las verificaciones de los coches siniestrados promete aportarle un nuevo y sorpresivo giro a la investigación judicial.
Los peritos de Ferrobaires –la empresa bonaerense responsable de la operación del tren que embistió a la formación urbana– y técnicos privados que analizaron el accidente pudieron detectar que los coches de la línea San Martín fueron reparados con materiales de menor calidad que los que se utilizaron para su fabricación.
Si bien habrá que esperar los peritajes de las formaciones para saber realmente que pasó, lo cierto es que esos coches reparados con elementos de inferior calidad experimentaron una menor capacidad de resistencia al impacto que sin dudas terminó influyendo en la magnitud de los daños y en la cantidad de víctimas y heridos. Antes de que fueron llevados a los depósitos judiciales de José C. Paz, los técnicos de la Provincia pudieron comprobar que las chapas de los paragolpes y las carrocerías de los tres coches más dañados eran de menor espesor que las originarias de fábrica.
En el caso especifico del cabezal que aloja el paragolpe, el soporte era de 4,83 milímetros de espesor frente a los 12,7 mm. que marcan las normas del fabricante. Al chequear las carrocerías, los peritos encontraron que en vez de tener el espesor de 2 mm. que diseñó el constructor las chapas eran de sólo 1,2 mm.
Para Norberto Rosendo –ingeniero ferroviario y titular de la Comisión Nacional Salvemos al Tren–, “es evidente que hubo una mala reparación que permitió que los vehículos se deformaran más de lo previsto. Los coches fueron fabricados para resistir un impacto de 70 toneladas y no pueden haberse arrugado de la manera en que lo hicieron a menos que no tengan los materiales indicados”.
Según explicó Rosendo no es casual que las muertes se hayan registrado en las dos zonas donde colapsaron los coches por la fuerza del impacto: el furgón y la unión entre el penúltimo y ante penúltimo vehículo. “La magnitud de los daños es propia de coches de madera o de aluminio que son menos resistentes, pero no de los coches metálicos del San Martín que fueron construidos casi como tanques de guerra”, remarcó.
Rosendo destacó que otro factor que contribuyó a elevar la cantidad de heridos fue el diseño de los asientos . “Son muy bajos y no tienen apoyacabezas para amortiguar el golpe de un choque de atrás. Los antiguos asientos de Ferrocarriles Argentinos eran más altos y permitían apoyar la cabeza, en cambio los nuevos parecen de teatro y no tienen en cuenta la seguridad de los pasajeros”, agregó.
Las reparaciones que quedaron bajo la lupa se realizaron entre 2005 y 2007. Los trabajos fueron pagados por la Secretaría de Transporte y la habilitación de los coches salió de la Comisión Reguladora del Transporte (CNRT), dos áreas que dependen del ministro de Planificación, Julio De Vido.
Hasta ahora, la Nación le endilgó toda la responsabilidad del accidente a la provincia de Buenos Aires. Pero si el juez, Juan Manuel Yalj, decide poner la mira el estado de los coches, los que tendrán que dar explicaciones serán los responsables de la UGOFE (la operadora privada del San Martín) y los funcionarios de Transporte que no controlaron la calidad técnica de las reparaciones.
Los coches tuvieron menor capacidad de resistencia al impacto, según expertos.
Mientras las pruebas se encaminan a confirmar la hipótesis del “error humano” en el trágico choque de trenes de San Miguel, la aparición de una serie de elementos surgidos de las verificaciones de los coches siniestrados promete aportarle un nuevo y sorpresivo giro a la investigación judicial.
Los peritos de Ferrobaires –la empresa bonaerense responsable de la operación del tren que embistió a la formación urbana– y técnicos privados que analizaron el accidente pudieron detectar que los coches de la línea San Martín fueron reparados con materiales de menor calidad que los que se utilizaron para su fabricación.
Si bien habrá que esperar los peritajes de las formaciones para saber realmente que pasó, lo cierto es que esos coches reparados con elementos de inferior calidad experimentaron una menor capacidad de resistencia al impacto que sin dudas terminó influyendo en la magnitud de los daños y en la cantidad de víctimas y heridos. Antes de que fueron llevados a los depósitos judiciales de José C. Paz, los técnicos de la Provincia pudieron comprobar que las chapas de los paragolpes y las carrocerías de los tres coches más dañados eran de menor espesor que las originarias de fábrica.
En el caso especifico del cabezal que aloja el paragolpe, el soporte era de 4,83 milímetros de espesor frente a los 12,7 mm. que marcan las normas del fabricante. Al chequear las carrocerías, los peritos encontraron que en vez de tener el espesor de 2 mm. que diseñó el constructor las chapas eran de sólo 1,2 mm.
Para Norberto Rosendo –ingeniero ferroviario y titular de la Comisión Nacional Salvemos al Tren–, “es evidente que hubo una mala reparación que permitió que los vehículos se deformaran más de lo previsto. Los coches fueron fabricados para resistir un impacto de 70 toneladas y no pueden haberse arrugado de la manera en que lo hicieron a menos que no tengan los materiales indicados”.
Según explicó Rosendo no es casual que las muertes se hayan registrado en las dos zonas donde colapsaron los coches por la fuerza del impacto: el furgón y la unión entre el penúltimo y ante penúltimo vehículo. “La magnitud de los daños es propia de coches de madera o de aluminio que son menos resistentes, pero no de los coches metálicos del San Martín que fueron construidos casi como tanques de guerra”, remarcó.
Rosendo destacó que otro factor que contribuyó a elevar la cantidad de heridos fue el diseño de los asientos . “Son muy bajos y no tienen apoyacabezas para amortiguar el golpe de un choque de atrás. Los antiguos asientos de Ferrocarriles Argentinos eran más altos y permitían apoyar la cabeza, en cambio los nuevos parecen de teatro y no tienen en cuenta la seguridad de los pasajeros”, agregó.
Las reparaciones que quedaron bajo la lupa se realizaron entre 2005 y 2007. Los trabajos fueron pagados por la Secretaría de Transporte y la habilitación de los coches salió de la Comisión Reguladora del Transporte (CNRT), dos áreas que dependen del ministro de Planificación, Julio De Vido.
Hasta ahora, la Nación le endilgó toda la responsabilidad del accidente a la provincia de Buenos Aires. Pero si el juez, Juan Manuel Yalj, decide poner la mira el estado de los coches, los que tendrán que dar explicaciones serán los responsables de la UGOFE (la operadora privada del San Martín) y los funcionarios de Transporte que no controlaron la calidad técnica de las reparaciones.
Viaje por el “corredor del hambre” en el norte del país
Por Gonzalo Sánchez - Diario Clarin
Casi 80 mil wichí viven amenazados por la falta de comida y el impacto de la deforestación en Salta, Chaco y Formosa. Clarín recorrió la zona para entender por qué ese drama está matando a los chicos.
No es que la comida no alcanza: es que la comida desapareció. Donde había un árbol de frutos, ahora se eleva una mata de yuyos estériles. Pero el agua tampoco sirve, los peces vienen raros y acechan nuevas enfermedades, algunas imprecisas y sin nombre, lo que las vuelve letales. El auto acaba de dejar la ciudad salteña de Tartagal para adentrarse rumbo a la frontera con Formosa y el Chaco a través de la ruta provincial 86, al sur del río Pilcomayo, un camino de ripio desecho por el barro de la última lluvia. En una sucesión de imágenes pretéritas, pasan los ranchos de madera y adobe de las comunidades wichí que habitan esta región del país desde el principio de los tiempos, cuando el monte era tupido y el hambre una palabra ausente.
Ahora, en la zona, solo se habla de lo mismo. Los dirigentes indígenas que reciben en cada parada a los enviados de Clarín dicen que la desnutrición está matando a sus hijos y que no saben bien qué hacer: que un día los chicos tienen diarrea, otro día no, luego de vuelta – “duritos, se quedan”, dice Esteban Soruco, líder de la Misión Kilómetro 6–, y así se mueren. Pero sí comprenden el fondo de la cuestión, las razones de ese drama relativamente nuevo que les ha descalabrado la existencia. Y esos argumentos, siempre breves, no encuentran quien los refute. Para explicar la muerte, señalan el horizonte: una lejanía sin selvas, de campos talados y vueltos a sembrar.
Entre fines de enero y principios de febrero, en el norte pobre de Salta murieron ocho menores wichí por causas relacionadas con la falta de alimentación. Pero ese drama no es patrimonio exclusivo de una provincia, sino que se extiende por toda la región chaqueña –que incluye al Chaco, Formosa y el este salteño– y afecta a una cultura completa. Dentro de ese corredor del hambre de más de 300 kilómetros cuadrados –la ruta que trazaron los enviados de este diario– viven entre 40 mil (según el Indec) y 80 mil (según organizaciones sociales) indígenas de la etnia wichí.
Supieron ser un pueblo nómade, acostumbrado a vivir de la pesca, la caza y la recolección, basados en una dieta equilibrada compuesta por esos mismos nutrientes tomados de la tierra. Pero sus hábitos alimentarios se vieron alterados cuando el bosque nativo desapareció, barrido por los desmontes de la industria agropecuaria, y el agua –hasta los mismos médicos que los ven morir lo confirman– se volvió una trampa. Ahora dependen de la ayuda social para salir adelante y de aquello que con ese dinero pueden comprar en las despensas de la ciudad: galletas, gaseosa, mortadela. Pero ni siquiera eso es suficiente para todo el mes, porque esos planes asistenciales, bautizados Inclusión, Nacer, Vida, finalmente suelen quedarse cortos.
“Es un proceso de asimilación asesino a la cultura del blanco”, dice la abogada Sara Esper, que asesora comunidades en litigios por la tenencia de la tierra y presentó en 2008 una denuncia por genocidio aborigen vinculada a la degradación del medio ambiente. “Detrás de esa desnutrición –sigue–, está la destrucción del ecosistema del que obtenían su alimento. Por eso el hambre. Pero si las cifras oficiales hablan de 26 desnutridos, deben ser 300, porque ruta adentro los médicos no llegan”.
“Hace diez años nosotros vivíamos con lo que necesitábamos –dice Miranda– pero vinieron las topadoras y la comida se acabó”. El hombre invita a caminar por los bordes de esa burbuja mínima de monte a la que fue reducido su espacio. La sombra, un bálsamo frente al calor homicida norteño, se termina de manera abrupta cuando el dirigente comunitario arriba a un descampado de la superficie de varias canchas de fútbol. “En 1996 –cuenta– acá teníamos bosque nativo, pero lo tiraron abajo y sembraron. Después vinieron las enfermedades que los médicos no saben decirnos qué son. Y no pudimos vivir más de la naturaleza, ya ni miel sacamos, todo este campo que nos rodea no sirve para más”, dice, y masca.
El caso de la comunidad Lapacho Mocho contra los empresarios que sembraron soja a su alrededor llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación en 2002, que prohibió los desmontes en el espacio ancestral habitado por esa gente. Fue el primer fallo a favor de una comunidad indígena del país del máximo tribunal, que en aquellos tiempos no había sido refundado por el kirchnerismo. Pero la penuria no terminó. El daño ambiental no tenía vuelta atrás y la pobreza continuó enquistada en la vida de Miranda y los suyos.
El mediodía, ahora, se torna insoportable. Respirar, en esta tierra, se ha vuelto penoso. Es preferible no saber cuánto calor hace. Roque sienta sobre sus piernas al pequeño Freddy y explica que tiene vómitos y diarrea. Muestra, también, unos brotes extraños que le salieron al chico sobre la piel. Dice que los médicos vinieron a revisarlo, pero no le dijeron nada y Freddy sigue igual. Habrá que salir rápido y agitado, con padre e hijo en el auto de Clarín. En el hospital será todo más vertiginoso aún: los médicos, los ojos llorosos de Freddy, una inyección, el suero, la rehidratación, el aviso de la enfermera de – “Este chico quedará internado”–, el silencio del padre, la brevedad de sus gestos de resignación, una resignación eterna.
Casi 80 mil wichí viven amenazados por la falta de comida y el impacto de la deforestación en Salta, Chaco y Formosa. Clarín recorrió la zona para entender por qué ese drama está matando a los chicos.
No es que la comida no alcanza: es que la comida desapareció. Donde había un árbol de frutos, ahora se eleva una mata de yuyos estériles. Pero el agua tampoco sirve, los peces vienen raros y acechan nuevas enfermedades, algunas imprecisas y sin nombre, lo que las vuelve letales. El auto acaba de dejar la ciudad salteña de Tartagal para adentrarse rumbo a la frontera con Formosa y el Chaco a través de la ruta provincial 86, al sur del río Pilcomayo, un camino de ripio desecho por el barro de la última lluvia. En una sucesión de imágenes pretéritas, pasan los ranchos de madera y adobe de las comunidades wichí que habitan esta región del país desde el principio de los tiempos, cuando el monte era tupido y el hambre una palabra ausente.
Ahora, en la zona, solo se habla de lo mismo. Los dirigentes indígenas que reciben en cada parada a los enviados de Clarín dicen que la desnutrición está matando a sus hijos y que no saben bien qué hacer: que un día los chicos tienen diarrea, otro día no, luego de vuelta – “duritos, se quedan”, dice Esteban Soruco, líder de la Misión Kilómetro 6–, y así se mueren. Pero sí comprenden el fondo de la cuestión, las razones de ese drama relativamente nuevo que les ha descalabrado la existencia. Y esos argumentos, siempre breves, no encuentran quien los refute. Para explicar la muerte, señalan el horizonte: una lejanía sin selvas, de campos talados y vueltos a sembrar.
Entre fines de enero y principios de febrero, en el norte pobre de Salta murieron ocho menores wichí por causas relacionadas con la falta de alimentación. Pero ese drama no es patrimonio exclusivo de una provincia, sino que se extiende por toda la región chaqueña –que incluye al Chaco, Formosa y el este salteño– y afecta a una cultura completa. Dentro de ese corredor del hambre de más de 300 kilómetros cuadrados –la ruta que trazaron los enviados de este diario– viven entre 40 mil (según el Indec) y 80 mil (según organizaciones sociales) indígenas de la etnia wichí.
Supieron ser un pueblo nómade, acostumbrado a vivir de la pesca, la caza y la recolección, basados en una dieta equilibrada compuesta por esos mismos nutrientes tomados de la tierra. Pero sus hábitos alimentarios se vieron alterados cuando el bosque nativo desapareció, barrido por los desmontes de la industria agropecuaria, y el agua –hasta los mismos médicos que los ven morir lo confirman– se volvió una trampa. Ahora dependen de la ayuda social para salir adelante y de aquello que con ese dinero pueden comprar en las despensas de la ciudad: galletas, gaseosa, mortadela. Pero ni siquiera eso es suficiente para todo el mes, porque esos planes asistenciales, bautizados Inclusión, Nacer, Vida, finalmente suelen quedarse cortos.
Según datos de la Secretaría de Ambiente de la Nación, entre 1998 y 2006 la superficie deforestada de todo el país fue de 2.295.567 hectáreas, más de 250.000 hectáreas por año, una hectárea cada dos minutos. Solo en el departamento de San Martín, provincia de Salta, donde ocurrieron las ocho muertes por desnutrición, hasta 2008 se habían talado 308 mil hectáreas. La ley de bosques, sancionada en 2007 y reglamentada en 2009, a pesar de las fuertes presiones de legisladores de provincias del norte, puso freno al proceso de degradación ambiental. Pero el daño ya estaba consumado y las deforestaciones clandestinas, por otro lado, continúan.
El paisaje, por lo tanto, es otro: planicies sembradas de soja rodean pequeñas concentraciones de monte en medio de la tierra parcelada. Y dentro de ellos, como refugiadas en la yema de un huevo, subsisten las comunidades indígenas que todavía no dejaron su hábitat natural para migrar como muchos de ellos, en un éxodo lamentable, a la periferia de los centros urbanos. “Es un proceso de asimilación asesino a la cultura del blanco”, dice la abogada Sara Esper, que asesora comunidades en litigios por la tenencia de la tierra y presentó en 2008 una denuncia por genocidio aborigen vinculada a la degradación del medio ambiente. “Detrás de esa desnutrición –sigue–, está la destrucción del ecosistema del que obtenían su alimento. Por eso el hambre. Pero si las cifras oficiales hablan de 26 desnutridos, deben ser 300, porque ruta adentro los médicos no llegan”.
Camino adentro, la tala indiscriminada también modificó el clima. La temperatura es ahora más elevada y 50 grados promedio durante el verano representan la normalidad. Bajo ese calor opresivo, Pedro Segundo, artesano de la comunidad Kilómetro 6, señala la soja que crece a menos de cien metros de su casa. “Los zapallos nacen muertos, nuestra comida no es la misma. A la mañana escuchamos el ruido de las avionetas que fumigan no sé con qué y cuando sopla viento, viene todo ese olor, que no sabemos qué trae. Los médicos nos piden purificar el agua pero no siempre se puede”.
“Es real –dirá después Gladys Paredes, la jefa de pediatría del hospital Tartagal, a pocos metros de una sala con 12 niños internados por desnutrición–, la alimentación equilibrada se vino abajo, los wichí entraron en el mercantilismo y tomaron lo malo de nuestra forma de vida. Había una miseria de más de 20 años, pero el desmonte la potenció y nadie puede dudar de que las fumigaciones los afectaron terriblemente. Hoy tenemos un aumento de los casos de leucemia, vinculados al cambio de las condiciones ambientales”.
Algo similar explica Roque Miranda, líder de la comunidad wichí Lapacho Mocho, en otro punto del mapa. Es la máxima autoridad en un grupo integrado por 18 mujeres, 14 hombres y 45 niños. Tiene 52 años y no hablará más de lo necesario. Su aliento delata el olor rancio de la coca mascada. Su hijo Freddy, de siete años, mira la escena con los ojos caídos y habrá que llevarlo al hospital para un chequeo urgente al final de la conversación, un camino de vuelta por esa ruta del hambre donde historias del mismo tenor se replican a cada lado del camino en la zona geográfica más olvidada de la Argentina.
El caso de la comunidad Lapacho Mocho contra los empresarios que sembraron soja a su alrededor llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación en 2002, que prohibió los desmontes en el espacio ancestral habitado por esa gente. Fue el primer fallo a favor de una comunidad indígena del país del máximo tribunal, que en aquellos tiempos no había sido refundado por el kirchnerismo. Pero la penuria no terminó. El daño ambiental no tenía vuelta atrás y la pobreza continuó enquistada en la vida de Miranda y los suyos.
El mediodía, ahora, se torna insoportable. Respirar, en esta tierra, se ha vuelto penoso. Es preferible no saber cuánto calor hace. Roque sienta sobre sus piernas al pequeño Freddy y explica que tiene vómitos y diarrea. Muestra, también, unos brotes extraños que le salieron al chico sobre la piel. Dice que los médicos vinieron a revisarlo, pero no le dijeron nada y Freddy sigue igual. Habrá que salir rápido y agitado, con padre e hijo en el auto de Clarín. En el hospital será todo más vertiginoso aún: los médicos, los ojos llorosos de Freddy, una inyección, el suero, la rehidratación, el aviso de la enfermera de – “Este chico quedará internado”–, el silencio del padre, la brevedad de sus gestos de resignación, una resignación eterna.
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