Por Julieta Pelcastre - Dialogo.com
Decomiso de drogas: Agentes de la Gendarmería Nacional
argentina descubren paquetes de cocaína escondidos en un campo de propiedad
privada cerca a Estanislao del Campo, en la provincia de Formosa. Los agentes
decomisaron 700 kg de cocaína. La Gendarmería Nacional y las Fuerzas Armadas se
han unido en la lucha contra el tráfico de drogas a lo largo de la frontera
norte del país. [Fotografía: AFP / Gendarmería]
En los primeros nueve meses de 2013, las fuerzas de seguridad argentinas
decomisaron 52 toneladas de mariguana a lo largo de la frontera norte del país,
dijeron las autoridades. La cantidad sobrepasa las 50 toneladas de mariguana que las fuerzas de
seguridad confiscaron en la región durante todo el año 2012.
Los decomisos son parte de una importante iniciativa de seguridad
implementada en julio de 2011. La iniciativa de seguridad se llama Operación
Escudo Norte. El esfuerzo es parte del Plan Fortín II, una amplia estrategia
gubernamental para proteger las fronteras de Argentina.
Unidades del Ejército Argentino y la Gendarmería Nacional y la Guardia
Costera de Argentina han unido fuerzas para combatir el tráfico de drogas y
otros negocios criminales a lo largo de la frontera norte del país, compartida
con Paraguay, Bolivia y Chile.
La iniciativa fue anunciada por la presidenta argentina, Cristina Fernández
de Kirchner, en julio de 2011. Al momento, al menos 7,000 miembros de las
fuerzas de seguridad de Argentina han participado en la Operación Escudo Norte.
El esfuerzo también incluye al menos a 6,000 oficiales de la Gendarmería
Nacional y la Guardia Costera, y a 800 soldados de las Fuerzas Armadas
Especiales.
En septiembre, el Ejército argentino anunció el despliegue de otros 4,500
soldados para reforzar la seguridad en las fronteras del noreste y noroeste del
país. Estos soldados operarán en Jujuy, Salta, Formosa, Corrientes y Misiones,
dijeron las autoridades.
Una región peligrosa
Las organizaciones criminales transnacionales trafican drogas, principalmente
cocaína, a través de la frontera norte de Argentina, dijo Carlos Mendoza Mora,
director de Strategic Projects Consulting, una compañía de seguridad privada. El
contrabando de drogas tiene lugar, principalmente, a través de la frontera que
Argentina comparte con Bolivia, dijo Mendoza Mora. Los grupos del crimen
organizado procesan en ese país las hojas de coca, que constituyen la materia
prima para la cocaína.
“Las organizaciones criminales que tienen el control de la distribución de
drogas están empezando a trasladarse a Argentina y el alcance de sus actividades
criminales se está expandiendo hasta incluir el tráfico de personas, la
extorsión y cargos similares a alquileres”, dijo Mendoza Mora. “El gobierno
argentino está tomando las acciones necesarias para anticiparse a estas
situaciones”.
En la región de la frontera, equipos de seguridad que incluirán a 12 soldados
del Ejército argentino se unirán a tres oficiales de la policía y empezarán a
patrullar en diciembre de 2013, de acuerdo a La Nación.
Los equipos de seguridad patrullarán en regiones aisladas, en donde se sabe
que operan los traficantes de drogas, dijeron las autoridades. Los
narcotraficantes, a menudo, realizan el contrabando de drogas en vehículos
pequeños, o pasan drogas llevándolas en mochilas.
Mejora en la seguridad
Los oficiales de policía que harán patrullajes con soldados tendrán la
autoridad de arrestar a sospechosos de tráfico de drogas, decomisar sus drogas y
realizar investigaciones criminales, dijo Mendoza Mora. Según la Ley de Defensa
Nacional del país, las Fuerzas Armadas argentinas tienen prohibido realizar
ciertas tareas de seguridad, como la realización de investigaciones criminales.
“Esta ley nos permite vigilar y controlar nuestras fronteras, incluidos el
espacio aéreo, territorial, fluvial y marítimo. El Ejército no desempeñará
tareas de seguridad interna”, dijo el ministro de Defensa, Agustín Rossi.
Durante una cena para honrar a las Fuerzas Armadas en julio de 2013, la
presidenta Cristina Kirchner dijo que “no tiene sentido tener a las tropas en
medio de los centros urbanos y no en nuestras fronteras, en donde pueden
desempeñar un papel más importante en cooperación con otras fuerzas de
seguridad”.
Narcovuelos
Desde julio de 2011, el radar de la Fuerza Aérea argentina ha detectado más
de 800 vuelos no registrados e ilegales, dijeron las autoridades. De estos, 242
vuelos estaban relacionados con el tráfico de drogas, declaró la Gendarmería
Nacional a La Nación.
Las bandas argentinas están colaborando con los grupos criminales de Bolivia,
Paraguay y Brasil para traficar drogas a diferentes partes del país y a través
de la frontera norte, dijo Mendoza Mora.
Gran parte de la cocaína que ingresa a Argentina por medio del contrabando es
transportada a la región de Buenos Aires, donde las bandas locales venden la
droga, dijo el analista de seguridad.
Los grupos argentinos del crimen organizado pueden obtener grandes ganancias
con el contrabando de cocaína a otros países, explicó Mendoza Mora. Por ejemplo, cerca del 90% de la cocaína que los traficantes de drogas
introducen a Argentina por medio del contrabando, ingresa a través de la puerta
de entrada de Salta, dijo Mendoza Mora. En Salta, un kilo de cocaína vale 4,500
dólares, comentó. Sin embargo, la misma cantidad de drogas podría llegar a valer
7,500 dólares en Rosario y podría ser vendida por más de 26,000 dólares en
Europa, precisó.
Diversidad de tácticas
Cuando empiecen a patrullar juntos, el Ejército y la Gendarmería Nacional
deberán utilizar una variedad de tácticas en la lucha contra el narcotráfico
transnacional y otros negocios criminales, dijo Mendoza Mora. Las fuerzas de
seguridad también deben reunir información de inteligencia sobre los grupos del
crimen organizado, explicó.
“Para evitar un incremento en la violencia, el gobierno federal debe mejorar
los procesos de recolección de información e inteligencia, implementar ataques
ingeniosos y, en todo caso, reforzar la solidaridad social para prevenir un
incremento en la demanda de drogas”, comentó el analista de seguridad.
Los grupos del crimen organizado posiblemente alteren sus actividades en
respuesta al aumento de la seguridad a lo largo de la frontera norte de
Argentina, dijo Mendoza Mora. De ser necesario, las fuerzas de seguridad deben estar preparadas para
contrarrestar a los narcotraficantes haciendo ajustes en sus tácticas,
concluyó.