(Diario La Nación) -El gobierno de Mujica los autorizó a amarrar en sus puertos
MONTEVIDEO.-
En lo que se prevé como el inicio de un nuevo conflicto diplomático
entre la Argentina y Uruguay, dos barcos pesqueros con bandera de las
islas Malvinas entraron la semana pasada a los puertos de Montevideo y
Punta del Este. La autorización uruguaya contradice el compromiso del
gobierno del presidente José Mujica, que en la cumbre del Mercosur se
había comprometido a adoptar medidas para impedir el ingreso en sus
puertos de estos buques, en solidaridad con el reclamo de soberanía de
la Argentina.
La nave Argos Galicia arribó al puerto de Punta del Este para desembarcar tripulantes y cargar provisiones, y continuó viaje hacia España, de acuerdo con el periódico oriental. El segundo barco, Chicha Touza, entró a Montevideo y transbordó 1090 toneladas de calamar en bloques y 100 toneladas de pescado en cajas, con destino a España.
En la reunión de países del tratado regional, Uruguay adhirió al reclamo de la Argentina mediante un comunicado oficial emitido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de ese país, en el que destacaba "la solidaridad continental, basada en lazos de hermandad histórica y cultural" entre los países. En el mismo texto decía: "Uruguay considera a las islas Malvinas como una posición colonial inglesa en América latina y, en consecuencia, no puede reconocer su pabellón".
Meses después de sellar este acuerdo con el resto de los países del Mercosur, el presidente Mujica apoyó una misión comercial que visitó las islas para buscar nuevos mercados. La decisión de bloquear los buques con bandera de Malvinas tiene otro antecedente: en noviembre de 2010, la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) también había acordado un compromiso de prohibición de la entrada a sus puertos de barcos de esa procedencia.
El presidente de la Administración Nacional de Puertos de Uruguay (ANP), Alberto Díaz, desestimó ayer la información sobre los pesqueros. "Tenemos orden de que, si vienen barcos con bandera de Malvinas, no les podemos dar entrada", reafirmó en declaraciones radiales. "El tema de la información es importante porque hay muchos barcos parecidos y pesqueros, por lo que es una situación compleja", afirmó Díaz, aunque admitió: "Hay que buscar si hay más barcos y nuestra gente está investigando"..
Es la conducta habitual de nuestro "hermanos rioplatenses". Hacen esta política desde los 50s cuando enviaban un buque mensualmente a las Malvinas con los viveres y la logística que necesitaban los kelpers. Además, fue un paraíso de espías británicos durante la II GM que espiaban las actividades de la Argentina pro-eje. También, un paraíso fiscal para los ciudadanos argentinos "cueveros". Sin contar, como un acogedor refugio a opositores de diversos gobiernos locales - se acuerdan de Radio Colonía-. Para que te "lastimen poco" hay que beneficiarlos -actitud que no hace este gobierno- y esperar que no te pongan otra papelera contaminante justo en el borde de la frontera. Así son , funcionan en consonancia con el dicho: "los países no tienen amigos, solo intereses"...
Acaso, se puede creer que los microfonos quedan imprudentemente "abiertos" cuando insultan a los presidentes argentinos o a sus ciudadanos. Las coincidencias no existen en la politica internacional.
Todo lamentable...