El dìa de la presentaciòn en sociedad del helicóptero chino CATIC Z-11 en las instalaciones del Batallòn de Aviación de Ejèrcito 601, ante autoridades y medios de prensa, la intenciòn del Ejèrcito parecìa querer sumar a otras fuerzas a utilizar un helicóptero ligero de uso comùn, con la idea de producirlo en sus talleres para lo cual necesitaba de un pequeña escala para poder fabricarlos.
Por lo pronto, dentro de la propia Aviación de Ejèrcito se anunciaba que cumplirìa con el rol de instrucción, rescate, exploraciòn y ataque, con esas tareas se unificarìa la flota de UH-12E, A-109 y SA.315B, lo que tambièn podrìa entenderse como extensivo a las otras fuerzas que utilizan el Hughes 500 y SA.315B Lama en la Fuerza Aèrea y al SA.316 Alouette III de la Aviación Naval.
Para el Estado Mayor Conjunto, la elección de un ùnico modelo (o que al menos compartan motor y transmisión) pueden permitir una mayor economía de costos por unificación de flota con sus pares de la Fuerza Aèrea y la Aviación Naval, ya que concentrarìa el esfuerzo en un solo tipo de helicóptero que puede beneficiar las tareas de mantenimiento y bajar los costos operativos.
Pero poco tiempo después, surgirìan cuestionamientos a la calidad del helicóptero, debido a la objetable estrategia de los chinos de mandar un demostrador con motor francès y luego ofrecer un modelo con motor chino desconocido por el Ejèrcito. A ese fallido intento se agregò tres meses después la aparición en escena del helicóptero Cicarè CH-14, el que hasta el dìa de su presentaciòn, no tenìan conocimiento el MinDef, ni del Estado Mayor Conjunto ni sus pares de las otras fuerzas. Un proyecto nunca consensuado y del que hay incertidumbre acerca de su futuro.
Cabe mencionar que el proyecto de Cicaré que presentó el Ejército, es para un helicóptero de ataque y exploraciòn y en tareas de instrucción. Si bien, tanto la Fuerza Aérea como la Armada nunca dieron a conocer su opinión acerca de la aeronave, sì trascendió la opinión desfavorable del Ministerio de Defensa porque no se siguió la cadena de mando y porque para ser financiado deben requerirlo las otras fuerzas. Esto vuelve el tema de los helicópteros livianos de uso comùn en las FFAA casi a fojas cero.
Tratando de identificar las necesidades de las tres fuerzas podrìamos distinguir algunos roles: instrucción, rescate en montaña, enlace, exploraciòn y ataque, antisubmarino y antitanque. Las dos ùltimas requieren de plataformas màs especializadas que no seràn analizadas en este artìculo.
A simple vista una alternativa “natural” para cumplimentar los roles mencionados aparece el Eurocopter/Helibras AS.350B2 y para operaciones de rescate en alta montaña el AS.350B3, la versión equipada con el màs potente Turbomeca Arriel 2B.
Como la copia china parece hoy fuera de competencia, vayamos al original, ya que al principio su precio parecìa atractivo, luego se hablò de un presupuesto de 80 millones de dòlares para 40 helicòpteros, los mismos valores que los helicópteros franceses con la ùnica ventaja de la forma de pago, que incluìa compensaciones por productos agropecuarios. Con el tiempo, esta ventaja tambièn desaparecerìa, ya que los chinos aplicaron algunas sanciones en respuesta a las restricciones a las importaciones chinas impuestas por el gobierno argentino por el masivo ingreso de productos chinos.
Otra alternativa puede ser el Bell 206 Jet Ranger en la versión militar OH-58 y pariente del ARH-70, en el caso del Jet Ranger no serìa problemàtico el cambio ya que utiliza la turbina Allison 250-C30R ampliamente utilizada por la Fuerza Aèrea y en el mercado civil argentino, este helicóptero puede cumplir misiones de RESCOM, exploraciòn y ataque, enlace e instrucción, pero su punto vulnerable estarìa en el rescate en montaña frente al AS.350B3 que tiene el record mundial de aterrizaje en altura y despegue para un helicóptero, a 8800 mts en el Monte Everest.
Por último y para que la industria nacional no quede relegada una vez más, Cicaré debería continuar con el desarrollo del helicóptero, aunque cambiando el objetivo inicial de un helicóptero de ataque por uno de instrucción conjunta, enlace y exploraciòn armada. Para eso el Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea deberìan confluir en un requerimiento de esta naturaleza. Cicaré anunció que desarrollarìa una versión posterior llamada CH-16 de cinco plazas y que reunía esas características, pero por el momento este helicóptero es sólo un dibujo en un tablero y las necesidades de las FFAA son para hoy.
Fotos: Juan Carlos Cicalesi/Saorbats-scramble-Aircav e Internet