Ambos renovaron sus relaciones en momentos que aumentan las tensiones entre Washington y Moscú. Un jefe de Estado Mayor ruso visita La
Habana para estudiar el sistema de defensa aéreo
Cuba y Rusia se encuentran inmersas en un proceso de intensificación de las relaciones sin precedentes desde la desaparición de la Unión Soviética y que se extiende desde el terreno religioso hasta el de las nuevas tecnologías, pasando por el militar y el comercial.
Casi 20 años después del desplome del bloque socialista europeo, las visitas de funcionarios de alto rango del gobierno ruso a Cuba es prácticamente continuo, y ha llegado hasta campos inéditos como el religioso, con la inauguración el pasado día 19 de la primera catedral ortodoxa rusa en la isla.Casi sin tiempo para que el templo inaugurado empiece su actividad pastoral, el jefe del Estado Mayor de la Defensa Aérea del Ejército de Tierra ruso, teniente general Alexandr Máslov, inició esta semana una visita a la isla para estudiar el sistema de defensa aéreo cubano, según informó el mando de las tropas terrestres rusas.
La visita, que no ha sido confirmada en La Habana por la embajada rusa, incluye encuentros con el viceministro jefe del Estado Mayor General de las Fuerzas Armadas cubanas, Álvaro López Miera, y con el comandante de la Fuerza Aérea y la Defensa Aérea, Pedro Gómez. Como telón de fondo está el interés cubano por modernizar su armamento, fundamentalmente soviético, y el de Rusia por mantener una plaza estratégica en su búsqueda de un equilibro "multipolar" frente a los Estados Unidos. El próximo viaje de un representante gubernamental ruso tendrá lugar hoy y estará protagonizado por el ministro de Comunicaciones, Igor Schegoliev, que tiene previsto suscribir un memorándum de entendimiento con las autoridades cubanas.
Según dijeron fuentes rusas a Efe, el acuerdo, que será suscrito también por el ministro de Informática y Comunicaciones cubano, Ramiro Valdés, abarcará los terrenos de las telecomunicaciones, los correos y la cooperación en la ciencia informática. Schegoliev tiene previsto, además, asistir a la inauguración de la oficina de la agencia rusa Ria Novosti en La Habana. Tras la visita de Schegoliev, está previsto que el 3 de noviembre arribe a Cuba el ministro de Transporte, Igor Levitin, para encabezar la delegación de su país en la Feria Internacional de La Habana.
Además, se baraja la fecha del 6 de noviembre para la que sería, de confirmarse, la tercera visita en tres meses del viceprimer ministro ruso, Igor Sechin.Sechin visitó Cuba a finales de julio, junto con el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, general Nikolai Patrushev, para entrevistarse con el presidente cubano, el también general Raúl Castro, y volvió a pasar por tierras antillanas a mediados de septiembre camino a Venezuela.El nuevo contexto de relaciones entre Rusia y Cuba surgió a partir de las visitas en 2004 del canciller ruso, Serguei Lavrov, y en 2006 del entonces primer ministro, Mijail Fradkov.
Esta última dejó la concesión de un crédito de 350 millones de dólares de Rusia a Cuba, un logro que, según opinó entonces Fradkov, fue una prolongación del diálogo iniciado en el año 2000 por Vladimir Putin, cuando visitó la isla como presidente.
Sin embargo, la decisión de Putin en 2001 de cerrar la base de espionaje electrónico de Lourdes, último residuo de la masiva presencia soviética en Cuba durante la Guerra Fría, había dejado las relaciones muy golpeadas.Fuentes rusas no esconden que la situación geoestratégica de Cuba sigue teniendo un gran valor para Rusia. La creciente tirantez entre Moscú y Washington como consecuencia del plan de los EEUU de crear un escudo militar cerca de las fronteras de territorio ruso y los incidentes derivados de la invasión de Rusia de Georgia durante la reciente crisis en Osetia del Sur plantean a Moscú la necesidad de relanzar sus vínculos con antiguos aliados.
Sin embargo, las fuentes consultadas aseguran que el contexto es muy diferente al de la Guerra Fría, ya que Rusia quiere comercio con Cuba y que la isla tenga acceso a tecnología para colaborar con ella en terrenos como el de la informática y las telecomunicaciones.Así las cosas, el contexto será diferente aunque el escenario será el mismo, porque el gobierno cubano levantó la Universidad de Ciencias Informáticas en el mismo emplazamiento en que estaba situada la base de Lourdes.
Es lamentable, que estas dos potencias mundiales, gasten esfuerzos por situaciones conflictivas, transitorias -vistas dentro de cien años-y pudieran abocarse a contribuir en el desarrollo de los pueblos, que al final, los beneficiaria a ellos mismos. La historia enseña que todos los imperios terminan...
Fuente: EFE