Por Diego Castells - LA NACION
Por la nueva traza de La Rábida, trasladarían la escultura frente al Centro Cultural Kirchner
Luego del controverito traslado del monumento a Cristóbal Colón, todo indica que la obra en homenaje a Juana Azruduy correría la misma suerte: ahora, el Gobierno planea mudarlo por la nueva traza de la avenida La Rábida, que contempla el proyecto del Parque del Bajo y atraviesa el emplazamiento actual del monumento, por lo que tendría que ser removido. La escultura de bronce, que mide 9 metros y pesa 25 toneladas, fue diseñada por Andrés Zerneri y se encuentra sobre un pedestal de siete metros.
A mediados de 2015, la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner celebró su inauguración junto a Evo Morales, su par boliviano. El país vecino donó un millón de dólares para que se ejecutara la obra ,que ocupó el lugar de la estatua de Cristóbal Colón, en la plaza lindera a la Casa Rosada. Ahora, las autoridades removerían la estatua de Juana Azurduy para llevarla a la Plaza del Correo, entre el monumento a Almirante Brown y el Centro Cultura Kirchner (CCK).
El monumento de Juana Azurduy, una iniciativa de la ex presidenta Cristina Kirchner. Foto: S. Aznarez.
"El monumento de Juana Azurduy se va a mover por el proyecto del Parque del Bajo, y ante la consulta sobre su nueva ubicación, nosotros sugerimos que fuera reubicada en la plaza frente al Centro Cultural Kirchner, en un lugar que sea posible teniendo en cuenta que hay estacionamientos subterráneos ", dijo a LA NACION Teresa de Anchorena, de la Comisión Nacional de Monumentos Históricos. La experta en patrimonio explicó que la idea es que el estacionamiento actual de la Plaza del Correo se haga bajo tierra, mientras los equipos técnicos precisan el punto exacto del nuevo emplazamiento "más cerca o más lejos, pero en el eje de la entrada del CCK", explicó de Anchorena.
Si bien el concurso urbanístico para la creación del Parque del Bajo cierra pasado mañana, y un jurado tendrá 15 días para elegir a la propuesta ganadora, las pautas del certamen no dejan demasiado lugar para la imaginación al estipular que los monumentos que se encuentran en el Parque Colón quedarán dentro del nuevo megaproyecto de más de 100.000 m², que abarcará desde la avenida Corrientes hasta la avenida Belgrano, y desde Paseo Colón a Huergo o Madero. Integrantes de las asociaciones y comisiones de consulta presentes en la última reunión sobre el proyecto del Parque del Bajo ratificaron la sugerencia de la Comisión Nacional de Monumentos Históricos, y consideraron a la Plaza del Correo, frente al CCK, como un emplazamiento propicio para el monumento.
Uno de los objetivos del concurso urbanístico convocado por el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte de la ciudad, juntamente con la Presidencia de la Nación, es el de recuperar el eje histórico e institucional que conforman la sede de gobierno, la Pirámide de Mayo y el Congreso.
En los días previos a la apertura de sobres, el gobierno busca consensuar posturas entre los distintos grupos y asociaciones interesados en el destino de las piezas más simbólicas del predio lindero a la Casa Rosada. Según fuentes ministeriales, ya se habría acordado con la Fundación Vasco Argentina Juan de Garay el traslado de la estatua del fundador de la ciudad por frente del Retoño de Guernica, que a sus 98 años, no sería conveniente trasplantar. El monumento a Juan de Garay se mudaría entre 25 y 30 metros, al otro lado del árbol que representa el símbolo sagrado de la libertad. Así, ambos permanecerían unidos cerca de su lugar actual, junto al nuevo helipuerto.
Antes de que todo esto suceda, el ganador del concurso tendrá que trabajar juntamente con equipos técnicos del Gobierno, las asociaciones interesadas, y empresas involucradas. Luego, se confeccionarán los proyectos de ley necesarios para elevarlos a la Legislatura porteña. "Los monumentos se tienen que trasladar por ley", explicaron a LA NACION en el Ministerio de Desarrollo Urbano y Transporte de la ciudad. El ministro del área, Franco Moccia, aseguró: "La ubicación de los monumentos debe hacerse por ley y no por imposición de nadie. Por suerte, las polémicas han quedado atrás: trabajamos en conjunto con las instituciones, organizaciones, comerciantes y vecinos interesados en el área porque ese consenso es el que se merecen figuras históricas como Juana Azurduy, tan importante para la Argentina".
El Parque Colón es como un tablero de ajedrez en el que los jugadores tendrán que meditar con cautela el más mínimo movimiento de cualquiera de sus piezas. Basta recordar la polémica que suscitó la decisión de remover el monumento a Cristóbal Colón en 2013, por parte de la entonces presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que terminó con su mudanza al espigón Puerto Argentino frente al Aeroparque, en Costanera Norte, donde aún no fue ensamblado.