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viernes, 30 de junio de 2017

Firma estatal planea participar en la licitación Renovar 2 con un proyecto de energía eólica

(Telam) - Representantes de Powerchina recorrieron con gobernador el lugar del emplazamiento, en el que la empresa provincial Invap trabaja hace años con el proyecto, asociada con la transportadora Transcomahue, también estatal.

La empresa estatal de Río Negro, Eólica Rionegrina SA (ERSA), aliada con la china Powerchina Resources Limited, prepara su presentación en la segunda licitación internacional del gobierno nacional para energías alternativas, con un proyecto de parque eólico en Cerro Policía, a 440 kilómetros al noreste de Bariloche, en plena meseta patagónica, informó el gobierno provincial.

El gobernador Alberto Weretilneck recibió en Buenos Aires a representantes de Powerchina y los acompañó a recorrer el lugar del emplazamiento, en el que la empresa provincial Invap trabaja hace años con el proyecto, asociada con la transportadora Transcomahue, también estatal.

Invap y Transcomahue se presentaron en la primera licitación de RenovAr con el mismo proyecto, pero el concurso favoreció a Enivisión Energy, con un parque eólico en Cerro Alto, también en la provincia.

La secretaria de Energía Eléctrica de Río Negro, Andrea Confini, destacó que la nueva alianza con Powerchina surgió de la visita a China del gobernador Alberto Weretilneck junto al presidente Mauricio Macri, cuando anunciaron la construcción de una central nuclear en Río Negro, oportunidad en la que el mandatario provincial visitó instalaciones de esa corporación asiática.

“Ahora en Cerro Policía observamos el funcionamiento de las torres que están instaladas midiendo el recurso eólico desde hace más de 15 años, cuyos registros se encuentran certificados, lo cual es una condición no excluyente para este tipo emprendimientos”, resaltó Confini.

Agregó que “la intención de fomentar y generar espacios de modelos comerciales mixtos, que cuenten con participación estatal y privada, facilitará el arribo de las inversiones que Río Negro necesita para explotar nuestra potencialidad para la producción energética a partir de fuentes renovables”.

“Es algo que que impulsa el gobernador para convertirnos en una provincia energéticamente sustentable y en una de las referentes del sector”, afirmó la funcionaria.

jueves, 29 de junio de 2017

Aluar construirá parque eólico que demandará u$s 815 millones de inversión

Resultado de imagen para Aluar construirá parque eólico(Cronista.com) - La única fabricante de aluminio del país envió una comunicación a la Bolsa de Comercio en la que informó que fueron incorporados al estatuto los objetivos de producción de "energía eólica, térmica y solar". 

Aluar, la única empresa fabricante de aluminio del país, con planta en Puerto Madryn, Chubut, comenzará en los próximos días las obras de instalación de su propio parque eólico con la correspondiente línea de alta tensión, que demandará una inversión total de 815 millones de dólares.

La compañía es una industria electrointensiva que utiliza la energía como insumo imprescindible para transformar la aluminita en aluminio mediante un proceso de electrólisis que informó hoy que modificó su estatuto social para incluir las nuevas actividades energéticas, que se desarrollarán a través de la firma controlada Genpat.

En una nota enviada a la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, Aluar comunicó hoy que fueron incorporados al estatuto los objetivos de producción de “energía eólica, térmica y solar”, y de comercialización de energía eléctrica “generada en cualquiera de sus formas”. 

Aluar obtuvo semanas atrás el visto bueno de las autoridades ambientales de la provincia, mientras a fines de marzo pasado se realizó la correspondiente audiencia obligatoria, según confirmaron a Télam fuentes de la empresa.

La potencia instalada total del parque será de 510 megavatios (MW), mientras la línea de alta tensión de 132 KW tendrá una extensión de 21,4 kilómetros para transportar la energía generada.

El proyecto implicará la instalación de 170 molinos en 3 etapas, al oeste de la ruta nacional 3 y al norte de la ruta provincial 4, sobre una superficie de 140 kilómetros cuadrados, a unos 10 kilómetros de Puerto Madryn. “Al desafectar algo más de 14.000 hectáreas de la actividad ganadera tradicional se estimula la recuperación de la diversidad vegetal y faunística del predio dedicado al proyecto”, destacó Aluar.

La primera etapa se concretará en no más de un año, mediante la instalación de 16 molinos de 180 metros de altura y con una potencia de 3,45 MW, que es mayor a los 2 MW de los aerogeneradores actualmente en operación.

La energía generada inicialmente no irá al Sistema Interconectado Nacional, sino que suplirá el uso de combustibles fósiles y asegurará el autoabastecimiento de Aluar.

El proyecto ubicará a la provincia de Chubut como la jurisdicción de mayor generación de energía eólica en el país, con tres parques, considerando el que construirá Genpat y los que están en funcionamiento, en las inmediaciones de las ciudades de Trelew y Rawson.

Según se estima, el emprendimiento requerirá en promedio 250 puestos de trabajo durante los 5 años de corresponden a las etapas de construcción y montaje.

La compañía planea complementar a mediano plazo sus actuales fuentes de provisión energética: la central hidroeléctrica de Futaleufú (que posee en un 60% y cuya potencia es de 472 MW) y la planta de generación térmica de ciclo combinado de Puerto Madryn.

Aluar también posee el 20,4% de Transpa, compañía encargada del transporte de energía eléctrica en la región, a través de dos líneas de 330 KW de 550 kilómetros de longitud.

En lo que respecta al estudio ambiental del proyecto, se destacan “aspectos positivos” como la menor emisión de gases de efecto invernadero: “por cada GWh generado a partir de fuentes renovables se evita la emisión de 500 toneladas de CO2 si se compara con la energía eléctrica que se obtiene por medio de una central térmica que consume combustibles fósiles‘, describe el estudio.
Se señalan también ‘aspectos negativos”, entre los que se menciona que los molinos interferirán sobre la visual del horizonte para las personas que circulan por las rutas nacional 3 y A010, y provincial 4.

Para instalar los equipos se realizará el desmonte de la cobertura vegetal autóctona en el 2% de la superficie de terreno dedicada el proyecto.

lunes, 26 de junio de 2017

Proyectos millonarios en la mira (II)

(La Nación) 
Centrales patagónicas
Foto: LA NACION 
Macri estuvo a punto de frenar el proyecto, pero decidió finalizarlo. La obra fue replanteada por diversas irregularidades y el Gobierno la terminará, pero todavía está en el último tramo de revisión, que culminará con una audiencia pública. El presupuesto actual ronda los US$ 4700 millones. Tiene un avance del 10,8% y se redujo en US$ 1400 millones el presupuesto aprobado por el kirchnerismo.

Río Turbio
Foto: LA NACION 
Durante la administración Kirchner se desembolsaron US$ 1600 millones en la central eléctrica Río Turbio, en Santa Cruz, aunque la construcción aún no está terminada. Equipos del Ministerio de Energía discuten con la constructora española Isolux Corsán el número final para su culminación. Se redujo esa cifra en US$ 550 millones.

Megaobras conflictivas
Foto: LA NACION 
En diciembre pasado, Enarsa dio de baja los contratos que tenía con Iecsa, la compañía que pertenecía a Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri (ahora en manos de Pampa Energía), para finalizar las centrales eléctricas Brigadier López y Ensenada de Barragán por $ 5600 millones.
El Gobierno prevé relicitar las obras faltantes, por lo que la iniciativa también tuvo demoras.

El negocio del gas
Foto: LA NACION 
En total son 12 los proyectos de transporte y distribución de gas que han sido o están siendo evaluados, de los cuales cuatro están parados en proceso de revisión de precios y tres, en proceso de elaboración de informes, que indican costos altos.
Un ejemplo es el gasoducto que debía recibir la gobernación de Santa Cruz, pero la administración actual anuló el proyecto por las denuncias.

Los problemas de Enarsa
Foto: LA NACION 
Enarsa, que se alimenta de fondos públicos y es la segunda entre las mayores compañías estatales beneficiadas con subsidios, tiene varios proyectos con problemas.
Un caso es en La Matanza, donde lleva invertidos $ 107 millones en el Centro Ambiental de Recomposición Energética, pero la obra está paralizada y hay un juicio con el contratista.

El Gobierno tiene en revisión obras de energía por $ 100.000 millones

Por Pablo Fernández Blanco - LA NACION
Se trata de proyectos en los que sospechan que hubo distintas irregularidades, como denuncias de sobreprecios, costos exageradamente altos o incumplimientos con el marco legal

Un año y medio después del cambio de mando, el gobierno de Mauricio Macri tiene en revisión proyectos de infraestructura energética heredados del kirchnerismo por más de $ 100.000 millones, según datos de la Jefatura de Gabinete. Son obras en las que la gestión actual, a cargo del ministro de Energía, Juan José Aranguren, encontró irregularidades de distinta índole.

Las obras, lanzadas en su momento por el Ministerio de Planificación, que conducía Julio De Vido, presentan denuncias de sobreprecios, costos exageradamente altos, incumplimientos con el marco legal, deficiencias burocráticas y falta de criterios técnicos, entre otras falencias.

Las centrales patagónicas Néstor Kirchner y Jorge Cepernic están al tope de esa lista. Si bien Mauricio Macri dudó originalmente de seguir adelante con el proyecto, decidió continuar tras escuchar las sugerencias del ministro Aranguren y de la ex canciller Susana Malcorra, que temía que su cancelación entorpeciera las relaciones con China (las centrales se harán con financiamiento asiático).
El Gobierno tiene en revisión proyectos de infraestructura energética heredados del kirchnerismo por más de $ 100.000 millones
El Gobierno tiene en revisión proyectos de infraestructura energética heredados del kirchnerismo por más de $ 100.000 millones. Foto: Archivo / Horacio Córdoba

Más allá de eso, la obra fue replanteada y el Gobierno la terminará, pero está en el último tramo de revisión, que culminará con una audiencia pública para resolver los cuestionamientos ambientales, entre otros. El presupuesto actual ronda los US$ 4700 millones. Según un documento oficial que vio LA NACION, tiene un grado de avance del 10,8% y se redujo en US$ 1400 millones el presupuesto del proyecto que había sido aprobado por el kirchnerismo.

También en Santa Cruz está el segundo entre los grandes proyectos dilatados tras el cambio de gobierno. Se trata de la central eléctrica a carbón Río Turbio, por la que hasta ahora se pagaron US$ 1600 millones, aunque aún no está terminada. En la práctica, ése es el número que ya desembolsó el Estado durante la administración kirchnerista, pero la constructora española Isolux Corsán pedía una suma millonaria adicional para terminar la usina.

Desde hace meses los funcionarios de Energía discuten con la empresa -que cambió toda su cúpula en medio de denuncias por presuntos "comportamientos irregulares"- los números finales del proyecto, que debería ponerse en marcha este año, al menos parcialmente. Un documento al que accedió LA NACION sostiene que la gestión actual redujo el costo de la obra en US$ 550 millones con respecto al reclamo de la compañía, cuyo monto no se precisó.

En diciembre pasado, la estatal Enarsa dio de baja los contratos que tenía con Iecsa -la compañía de Ángelo Calcaterra, primo de Mauricio Macri, que este año se la vendió a Pampa Energía- para finalizar las centrales eléctricas Brigadier López y Ensenada de Barragán por $ 5600 millones, según el dato anunciado por la administración anterior. El Gobierno prevé relicitar las obras faltantes, por lo que la iniciativa también tuvo demoras.

La ampliación y extensión de la central nuclear Embalse Río Tercero y obras en siete centrales térmicas forman parte de la misma lista en revisión. Aunque con números más chicos, pero que también implican fondos públicos millonarios, hay decenas de obras de transporte y distribución de gas, uno de los sectores donde están las mayores sospechas de corrupción, en el marco del plan Más Cerca, que estaba entre las cajas que manejó De Vido.

El caso Santa Cruz

En muchos casos están en revisión porque se detectaron sobreprecios, en especial en la provincia de Santa Cruz. Allí, por caso, estaba previsto construir un gasoducto de $ 3,44 millones que debía recibir la gobernación para alimentar las localidades de Pico Truncado, Koluel Kaike, Las Heras, Perito Moreno y Los Antiguos, pero la administración actual lo anuló por esa clase de denuncias.

En total, en el marco del plan Más Cerca hay 12 proyectos que han sido o están siendo evaluados, de los cuales cuatro están parados en proceso de revisión de precios y tres, en proceso de elaboración de informes que indican costos más altos que lo estimado como razonable.

El refuerzo de un ramal de un gasoducto y de la red de gas en Puerto Santa Cruz por $ 30,9 millones, que debía hacer Servicios Públicos Sociedad del Estado, una empresa provincial, está en revisión porque se detectaron costos excesivamente altos, al igual que en otra obra de $ 5 millones en San Benito, en la misma provincia. También en el marco del plan Más Cerca hay varias obras paradas o inconclusas en las provincias de Santa Fe, Tierra del Fuego, Jujuy, Buenos Aires, Tucumán y La Rioja.

En materia de transporte y distribución eléctrica, las obras bajo observación alcanzan los $ 1841 millones. Incluyen desembolsos en redes eléctricas y transformadores en al menos 13 provincias.

También están en revisión el Gasoducto del Nordeste Argentino (GNA), una de las obras emblemáticas lanzadas por el kirchnerismo, que según el último número del Gobierno recibió una inversión de $ 19.352 millones y tiene un avance físico del 73%. Enarsa rescindió semanas atrás el contrato con la constructora Vertua y estima culminar la obra a fines del año próximo, aunque no se utilizará al principio para el transporte de gas porque Bolivia no tiene el volumen suficiente del fluido para aumentar la exportación a la Argentina.

Hasta que eso ocurra, se tratará de un sinsentido económico. La Sigen está haciendo una revisión integral del proyecto.

Enarsa, que se alimenta de fondos públicos y es la segunda entre las mayores compañías estatales beneficiadas con subsidios, tiene otros proyectos con problemas. En el partido bonaerense de La Matanza, invirtió $ 107 millones en el Centro Ambiental de Recomposición Energética, pero la obra está paralizada y hay un juicio con el contratista.

Algo similar ocurrió con la planta de inyección de propano aire en Esteban Echeverría, una solución pensada para atender la demanda de gas en los días más duros de la crisis energética. Allí se pusieron $ 83 millones, pero está fuera de servicio por problemas técnicos desde 2014. Enarsa está en litigio con la constructora.

En Neuquén, la empresa puso otros $ 107 millones para una planta de envasado de garrafas. La obra está sin finalizar "por vicios en la construcción y problemas en la escrituración de los terrenos" en donde se encuentra la planta. Mientras mantiene el juicio con el constructor, el Estado puso en venta las instalaciones.

Del editor: ¿Cómo sigue? El Gobierno necesita avanzar con gran parte de las obras para resolver el abastecimiento energético. Pero no a cualquier precio.

sábado, 24 de junio de 2017

Instalaron segunda turbina en central térmica de San Pedro y prevén operar desde diciembre

La empresa Araucaria Energy instaló la segunda turbina generadora de 60 megavatios.(Ambito.com) - La empresa Araucaria Energy instaló la segunda turbina generadora de 60 megavatios.

La empresa Araucaria Energy -subsidiaria de la estadounidense Stoneway Energy- instaló la segunda turbina generadora de 60 megavatios (Mw) de la central térmica San Pedro, y anticipó que entre fines de septiembre y los primeros días de octubre comenzarán las pruebas técnicas en la usina para poder concretar su habilitación comercial a principios de diciembre.

El director general de Araucaria Energy, Santiago del Sel, destacó en un comunicado que "tras haber concluido las tareas más complejas y menos vistosas de construcción de las bases y cimientos de la usina, y el montaje de la primera turbina, ahora vamos camino a instalar la segunda turbina para completar los 120 Mw de potencia instalada que tendrá la nueva central". "Una vez que termine la colocación de la segunda máquina comenzarán los trabajos de conexiones y enlaces internos y la vinculación de las turbinas con el gasoducto que alimentará la central", señaló Del Sel tras una visita a la obra junto con el intendente de San Pedro, Cecilio Salazar.

El directivo de Araucaria confirmó que las pruebas técnicas de sincronización se realizarán a más tardar dentro de dos meses y medio, y durarán aproximadamente 60 días. "Si todo va bien en los primeros días de diciembre concretaremos la inauguración y puesta en funcionamiento de la usina de acuerdo con el contrato que tenemos firmado", precisó.
Resultado de imagen para empresa Araucaria Energy
Agregó que las obras en el predio ubicado en la ruta 191 ocupan en la actualidad a un centenar de operarios, "y en las próximas semanas vamos a llegar al máximo de ocupación previsto, que es de 150 trabajadores".

La usina de San Pedro forma parte del grupo de nuevas centrales térmicas que fueron adjudicadas a mediados del año pasado en el marco de la resolución 21 del Ministerio de Energía y Minería, con el fin de ampliar la capacidad de generación eléctrica mediante la incorporación de 2.871 Mw con contratos a largo plazo y pago en dólares de la potencia y la energía suministradas.

Araucaria Energy tiene en marcha la instalación de cuatro nuevas usinas térmicas en la provincia de Buenos Aires, que implicarán una inversión total de US$ 650 millones. La empresa Siemens, en tanto, quedó a cargo de la construcción de esas centrales y de las tareas de operación y mantenimiento durante los próximos 10 años.

martes, 20 de junio de 2017

El Gobierno impuso una millonaria multa a la mayor petrolera privada del país

El ministro de Energía, Juan José Aranguren. Su cartera aplicó una multa sobre PAE, la mayor empresa privada de petróleo del país
Por Pablo Fernández Blanco - LA NACION

Dice que PAE desabasteció el mercado de gas envasado en 2016 y le exige $ 354,37 millones; la empresa responde que no opera en el sector desde abril de 2016 y que no está obligada a hacerlo


El ministro de Energía, Juan José Aranguren. Su cartera aplicó una multa sobre PAE, la mayor empresa privada de petróleo del país. Foto: DyN / Archivo

El mercado del gas en garrafas es el escenario de una de las contiendas político-económicas más importantes de los últimos tiempos. Mediante dos resoluciones, la administración de Mauricio Macri multó por $ 354,37 millones a Pan American Energy (PAE), la segunda entre las mayores petroleras del país y la más grande de ese rubro en el mercado privado. La penalización se debe a que encontró al grupo responsable de no cumplir el año pasado con sus compromisos de abastecimiento del mercado doméstico de garrafas, que atiende a los sectores más vulnerables de la población.

PAE pertenece a la firma británica BP, a la china Cnooc y a la familia Bulgheroni, que si bien no tiene una participación de control, cuenta con un rol preponderante en la conducción de los negocios en el país.

Las multas figuran en las resoluciones 63 y 64, que vio LA NACION. Ambas están fechadas el 22 de mayo pasado, pero no fueron publicadas en el Boletín Oficial porque no revisten interés general. Están firmadas por Marcos Pourteau, subsecretario de Recursos Hidrocarburíferos del Ministerio de Energía. Esa dependencia estuvo hasta principios de año a cargo de José Luis Sureda, un ex funcionario que trabajó en PAE durante años y renunció a su cargo luego de una fuerte polémica con el jefe de esa cartera, Juan José Aranguren. Fuentes al tanto de la medida explicaron que la salida del ex empleado de PAE no tiene relación con el avance de las multas, que estaban en análisis desde antes.

La primera de las resoluciones multó a PAE Sucursal Argentina con $ 142,31 millones. Es el equivalente a cuatro veces el costo de una tonelada de gas licuado de petróleo (GLP) propano a nivel mayorista "por cada tonelada de butano no entregada por PAE a diversos operadores del mercado interno, durante los meses de febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre" del año pasado.

La resolución 64, por otra parte, dispuso una multa de $ 212,07 millones a Pan American Sur (PAS) por el suministro no entregado a diversos operadores del mercado interno durante los mismos meses (de abril a diciembre) del año pasado.

El butano se extrae de los componentes ricos del gas. Las principales productoras del fluido son las empresas petroleras, que luego lo venden a fraccionadoras, encargadas de envasarlo en garrafas y tubos, entre otros envases. Algunas de estas fraccionadoras son a su vez propiedad de grandes petroleras, como YPF y Shell.

En marzo de 2015, el kirchnerismo creó el denominado Programa Hogar, que estipulaba subsidios para hogares de bajos recursos y viviendas sociales que utilizaran GLP en zonas adonde no llegaba la red de gas natural. Allí estipuló el aporte de butano y propano que las empresas productoras debían volcar al mercado interno para el fraccionamiento en garrafas de 10, 12 y 15 kilos.

PAE rechazó los argumentos que usó Energía en las resoluciones. La empresa sostuvo que no procesa, fracciona o distribuye líquidos del gas natural (GLP) y nunca participó en el mercado de garrafas, a diferencia de otras empresas enfocadas en esas actividades.

Según la empresa, tuvo un contrato por 10 años con TGS (Transportadora Gas del Sur) para la obtención de GLP, contrato que venció en abril de 2016. Y con respecto al denominado Plan Hogar, explicó que durante la vigencia del mencionado contrato de procesamiento con TGS, PAE mantuvo y cumplió con sus entregas destinadas a las garrafas sociales que la autoridad fijaba. "Desde abril de 2016, tras vencerse el contrato con TGS, PAE no dispone de GLP y no tiene obligación legal alguna para generarlo".

Según las resoluciones, las compañías de PAE se comprometieron a hacer un aporte anual de butano el año pasado, pero no cumplieron. Eso obligó a que el Estado utilizara otras alternativas para cubrir el faltante, como la provisión del gas por parte de la estatal Enarsa.

PAE le envió notas al Ministerio en que sostiene que en febrero del año pasado se cayeron contratos con TGS, que se encarga entre otras cosas de separar los componentes ricos del gas. Por ese motivo, PAE discontinuó su producción orientada a cubrir la demanda de GLP, según los argumentos que esgrimió la compañía ante la consulta de LA NACION.

Pese a eso, según el Gobierno, la compañía no solicitó la salida del registro de productores de GLP.

Las multas que estipuló la cartera de Aranguren parecen dar por tierra con críticas que se le hicieron el año pasado. Por ejemplo, Elisa Carrió denunció a tres funcionarios de Energía por supuestas "negociaciones incompatibles con la función pública" por eximir a diversas empresas de hacer su aporte a las garrafas subsidiadas.

PAE debía abonar las multas en no más de 10 días hábiles desde que fue notificada con una transferencia bancaria a una cuenta del Ministerio en el Banco Nación. No lo hizo, dado que "está evaluando medidas administrativas [de reclamo] que están contempladas en este tipo de procesos".

Las multas contra PAE

Resoluciones - El 22 de mayo pasado, el Ministerio de Energía elaboró dos resoluciones similares por las que aplicó multas millonarias a empresas de PAE por supuesto desabastecimiento del mercado de garrafas.

Rechazo - La empresa sostiene que no incumplió sus obligaciones respecto del suministro al mercado. Dice que no opera en el sector desde abril de 2016 y evalúa alternativas para responder al reclamo.

sábado, 17 de junio de 2017

Invap defiende la central nuclear despejando dudas

(Bariloche 2000) - La empresa rionegrina ubicada en Bariloche respondió las preguntas que pueden surgir a partir del proyecto de la quinta central nuclear en Argentina. 
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En un comunicado, la empresa rionegrina Invap expresó su acuerdo con la instalación de una central nuclear en la costa atlántica y respondió las dudas que pueden surgir tras el anuncio.

El documento (textual)

Ante las inquietudes que pueda llegar a despertar en los rionegrinos la instalación de una nueva central nuclear en nuestra provincia, creemos que la experiencia que posee INVAP en este campo puede ayudar a llevar certezas y tranquilidad en esta nueva etapa que se abre para todos nosotros.

Nuestro país, a través de la Comisión Nacional de Energía Atómica y sus empresas asociadas, tiene casi 70 años de experiencia en actividades nucleares y más de 50 años de experiencia en la supervisión de la construcción y en la operación segura de centrales nucleares. 

En INVAP tenemos más de 40 años de trayectoria en el área nuclear con participación en proyectos nacionales e internacionales. Argentina y China firmaron un contrato marco para la construcción de la cuarta y quinta central nuclear de potencia en el país, con una inversión total prevista de U$S 14.000 millones, de los cuales el país asiático financiará el 85%. 

La primera de las centrales que comenzará a construirse en enero en la localidad bonaerense de Lima, brindará una potencia de 700 MW y demandará unos 7 años de construcción, mientras que la segunda de las centrales se localizará en la provincia de Río Negro, aportará 1.150 MW de potencia y requerirá unos 6 años de obras a partir de 2020. 

La empresa que estará encargada de la operación y mantenimiento de la nueva instalación es Nucleoeléctrica Argentina S.A. La compañía tiene a su cargo la operación de las centrales nucleares Atucha I, Atucha II y Embalse. Además es responsable de la extensión de vida de la Central Nuclear Embalse.

Durante su trayectoria, Nucleoeléctrica Argentina logró destacados índices de desempeño a nivel internacional en la seguridad y eficiencia de sus instalaciones. La compañía forma parte desde sus inicios de la Asociación Mundial de Operadores Nucleares (WANO), organismo que contribuye en el mundo a la mejora continua de las centrales nucleares, promoviendo en primer lugar la seguridad. También integra el Grupo de Propietarios de Centrales Nucleares de tipo CANDU (COG). Desde INVAP, como empresa de tecnología de la provincia de Río Negro, y siendo el área nuclear una de nuestras especialidades, queremos responderte a las inquietudes que puedas tener referidas a este proyecto.

 Las preguntas que más frecuentemente nos han hecho en estos días son las siguientes:

 ¿Qué es una central nuclear de potencia?

 Una central nuclear de potencia es una instalación industrial que brinda energía eléctrica a través de la transformación de la energía almacenada en el núcleo del átomo de Uranio 235 y liberada mediante la fisión del núcleo. Un reactor nuclear de potencia, el corazón de la central nuclear, es una caldera que en lugar de calentar agua mediante el quemado de un combustible fósil (carbón mineral, fuel oil, gas natural), la calienta por la fisión del uranio. El agua calentada por la fisión (circuito primario) a su vez calienta agua de otro circuito cerrado (el circuito secundario), que genera vapor. Este vapor mueve una turbina que a su vez mueve un generador de electricidad. El vapor es condensado por agua de refrigeración (circuito terciario). Este tercer circuito es el único circuito en contacto con el medio ambiente.

Si Argentina tiene amplia experiencia en energía nuclear, ¿por qué no construimos nosotros la nueva central?

Solo cinco países tienen hoy en día la capacidad de diseño y construcción de centrales nucleares de potencia: EEUU, Francia, Rusia, China y Corea. Argentina no posee esa capacidad y desarrollarla llevaría muchos años. Argentina sí tiene la capacidad para diseñar centrales nucleares de muy baja potencia, tipo CAREM. El desarrollo de esta línea tecnológica puede llevar eventualmente a una capacidad propia de diseño de centrales nucleares, pero esta posibilidad está todavía lejana en el tiempo. 
Argentina es líder en tecnología de reactores de investigación. Los reactores de investigación funcionan por el mismo principio que los reactores de potencia: ambos aprovechan la fisión del uranio. La fisión del uranio produce calor y neutrones. Los reactores de potencia aprovechan el calor para generar electricidad. Los reactores de investigación aprovechan los neutrones para mantener la fisión y para usos en distintas disciplinas de la ciencia y la tecnología. Una de las aplicaciones más conocidas es la medicinal: en los reactores se producen compuestos para el diagnóstico y tratamiento de enfermedades. Los neutrones también pueden usarse para “ver” adentro de algunos materiales y sacar información útil para distintas áreas del conocimiento, como la biología y la ciencia de materiales. Si bien el principio de funcionamiento es el mismo, los reactores de investigación son diferentes de los reactores de potencia. 

¿Cómo será la central que se prevé para Río Negro?

La Quinta Central Nuclear será de origen chino, del tipo Hualong Uno, con una vida útil de 60 años. Se ha llegado a esta decisión luego de un exhaustivo análisis de varios años de las tecnologías disponibles. La evaluación de las condiciones técnicas, económicas y financieras han dado por resultado que la tecnología china sea considerada la más apropiada. Es una central de nueva generación, con sistemas de seguridad que combinan los diseños clásicos con sistemas del tipo pasivo, que son los más avanzados actualmente. Frente a accidentes, pueden mantenerse en forma indefinida en estado seguro sin la necesidad de energía eléctrica. La central Hualong Uno es una central tipo agua presurizada (PWR). 
Se destacan los siguientes elementos: 
- El agua ambiental no está en contacto con el material radioactivo, ya que se trata del circuito terciario (el circuito que en el diagrama entra y sale del componente llamado “Condensador”).
- El combustible nuclear está contenido en un recipiente de presión metálico capaz de soportar altas presiones, temperatura y radiación (el recipiente metálico figura en el diagrama como “Núcleo/Recipiente del reactor”).
- El recipiente de presión y los generadores de vapor están contenidos en una contención doble, la interior de hormigón pretensado con revestimiento metálico y la exterior de hormigón reforzado que resiste el impacto de un avión comercial.

¿Por qué en Río Negro?

Río Negro es la cuna de la actividad nuclear en el país y, a su vez, su territorio presenta características propicias para la instalación de una central, características establecidas y acordadas a nivel internacional. Río Negro cuenta con el Instituto Balseiro y el Centro Atómico Bariloche desde la década del ´50. En la década del ´70 se incorpora INVAP, que hoy cuenta con más de 40 años de trayectoria en la industria nuclear y posee sede en San Carlos de Bariloche. También la provincia fue el lugar en el que se desarrolló la tecnología de enriquecimiento de uranio, en el Complejo Tecnológico Pilcaniyeu. Es una continuación lógica de la historia de la provincia que sea seleccionada para el emplazamiento de la Quinta Central nuclear del país. Por otro lado, la instalación de una central de potencia requiere de un sitio que reúna una serie de características que contemplan el comportamiento sísmico y las condiciones del suelo, los fenómenos volcánicos, los eventos climáticos extremos, la distancia a centros poblados y a reservas naturales, la disponibilidad de agua, la infraestructura, entre otras. La provincia de Río Negro tiene lugares en una porción de su territorio que cumplen con los requerimientos impuestos para la instalación de una central nuclear.

 ¿Por qué una central China? 

Los diseños de centrales nucleares chinas son los más modernos de la actualidad. Están basados en tecnología occidental, en particular de Francia y EEUU, a los que se le han agregado mejoras aprovechando todas las nuevas tecnologías disponibles en el siglo XXI. China es el líder actual en tecnología nuclear: es el país que más centrales ha construido en la última década y el que mayor número de centrales tiene planeadas. Hoy operan en China 36 centrales nucleares y para 2030 operarán 110. En los próximos 12 años, China tiene previsto construir más de 70 centrales nucleares. China también ha demostrado su capacidad de construir centrales nucleares de última generación, terminando los proyectos dentro del plazo y los costos previstos. 

¿Qué beneficios representa la Central para Río Negro?

La central implica una inversión en la provincia de U$S 8.000 millones. Durante la construcción se generarán más de 4.000 puestos de trabajo directos y luego, durante la operación, la central deberá contar por 60 años con un plantel de operación de más de 800 personas. La central también requerirá durante la construcción y la operación de servicios locales, algunos de ellos de alta calificación, por lo que además de los empleos directos, se generará una importante cantidad de empleos indirectos. Esto significa crear en la provincia un nuevo polo de desarrollo, no muy distinto en magnitud a lo que significan el Centro Atómico Bariloche o INVAP.

 ¿Qué beneficios implica para el país? 

Proveer de electricidad es un requisito previo al desarrollo económico y a la mejora social. Sabemos que nuestro país tiene déficit energético y como un indicador de esta grave problemática, todos los veranos somos testigos de cortes de electricidad. Esta central nuclear incorpora más de 1100 MegaWatts eléctricos a la red de distribución, con lo que va a ayudar a cubrir el déficit. Por otro lado, la principal fuente de generación de energía eléctrica en nuestro país es la quema de hidrocarburos, con la consiguiente producción de gases de efecto invernadero. Sabemos también que la principal amenaza ambiental que sufre la humanidad es el cambio climático global causado por las emisiones de gases de efecto invernadero. Es imprescindible entonces reemplazar la generación de electricidad a partir de hidrocarburos por otras fuentes de generación. No hay una única fuente que pueda cubrir la demanda, ni sería conveniente desde el punto de vista de la seguridad del suministro confiar toda la generación a una única fuente. Por eso se requiere fomentar la instalación de todas las fuentes energéticas que no emiten gases como la eólica, solar, nuclear e hidráulica. 

¿Qué representa esta quinta central dentro de la matriz energética argentina? 

La generación nucleoeléctrica representa hoy un poco menos del 6% de la generación de electricidad en Argentina. La construcción de la Cuarta y la Quinta Central llevará este porcentaje a un valor más aproximado al promedio mundial, que es el 10%. 

¿Cuál es el rol de INVAP en el proyecto? 

INVAP ha sido contratada por la Subsecretaría de Energía Nuclear del Ministerio de Energía para la identificación de sitios potenciales para el emplazamiento de una central nuclear en Río Negro. INVAP ha realizado esta tarea con la asistencia de expertos internacionales en el tema. Con respecto al futuro, una inversión de esta magnitud seguramente será una fuente importante de trabajos también para INVAP.

¿Dónde se ubicará la Central? 

Todavía no está definido el sitio de ubicación de la central. Se están realizando estudios de preselección de un conjunto de lugares. La selección final requiere de un proceso de análisis para verificar que se cumplan con los requerimientos establecidos por la normativa de la actividad nuclear y los estándares internacionales. Estas características incluyen estudios sobre: Comportamiento sísmico, actividad volcánica, características del suelo, disponibilidad de agua, distancia a centros densamente poblados, presencia de áreas protegidas, distancia a aeropuertos, distancia a otras instalaciones (industriales, militares),u so de la tierra actual y proyectado. El proceso de selección y caracterización converge en una evaluación de impacto ambiental, requerido por la legislación provincial, así como en un estudio detallado y profundo de caracterización, exigido tanto por las leyes ambientales como por la Autoridad Regulatoria Nuclear (ARN), la agencia del estado argentino encargada de regular toda actividad nuclear en el país. La ley ambiental también prevé la realización de audiencias públicas con la participación de todos los grupos de interés.

¿Quién controlará la construcción y actividad de esta nueva central?

El proceso de diseño y construcción de cualquier instalación nuclear involucra la evaluación del diseño por parte de la Autoridad Regulatoria Nuclear. La ARN deberá estudiar el diseño de la central antes de emitir el permiso de construcción, certificación de que el diseño cumple con las normas de seguridad correspondientes. Luego de construida la central, solo podrá operarse una vez que la ARN le otorgue el permiso de operación, lo que podrá hacer una vez que haya verificado que la central ha sido construida de acuerdo a las normas propuestas en el diseño. La ARN es una institución muy experimentada y que goza de prestigio internacional. Los procedimientos de la ARN son compatibles con los lineamientos acordados por los países en el seno del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), rama de las Naciones Unidas que agrupa a los países con actividad nuclear y en donde se desarrollan los estándares y guías de procedimientos utilizados en todo el mundo para la actividad. Nucleoeléctrica Argentina estará a cargo de la supervisión de la construcción y puesta en servicio de la central, así como de la futura operación y mantenimiento de esta nueva instalación. 

¿Cómo será el abastecimiento de uranio para esta central? ¿Implica la explotación minera en la Patagonia?

Así como sucede con las demás centrales nucleares que están en operación en el país, el uranio necesario para la operación de la central será importado. El desarrollo de este proyecto no implica la reactivación de la minería de uranio: son decisiones independientes.

¿Qué se hará con los combustibles gastados de la central? ¿Cuál es la magnitud de estos combustibles que se generarían? 

En la central se prevé espacio para el almacenamiento de todos los combustibles gastados que se utilicen en el reactor durante la vida útil de la planta. Esto es lo que se hace en Atucha I y II y en Embalse. Inicialmente los combustibles se almacenan en piletas y una vez que se enfrían pueden ser almacenados en contenedores al aire. Dada la gran densidad energética del uranio, la cantidad de residuos que se generan en la industria nuclear es muy limitada. 

¿Qué experiencia tiene Argentina en la operación de centrales nucleares de potencia? 

Argentina tiene amplia experiencia en la operación de centrales nucleares. La primera central nuclear, Atucha I, se puso en marcha en 1974. Argentina fue el primer país sudamericano en operar una central nuclear. Embalse inició su operación en 1984 y Atucha II en 2015. Las centrales nucleares argentinas han sido elegidas como las de mejor performance en el mundo en varias oportunidades. Esto solamente es posible con una operación y un mantenimiento ejemplares. 

¿Por qué no se construyen nuevos parques eólicos o solares en vez de nuevas centrales nucleares?

Si bien se puede hacer el ejercicio aritmético de calcular cuántos generadores eólicos o solares se necesitan para reemplazar una central nuclear de 1000 MW eléctricos, la comparación no es directa. Una central nuclear produce energía eléctrica llamada “de base”: siempre el mismo nivel de potencia independiente de las condiciones del entorno. Un conjunto de generadores eólicos solamente produce cuando hay viento, y si en ese momento no hay demanda, el exceso de energía no se puede almacenar. Y lo mismo vale para la energía solar. Esto no quiere decir que la energía eólica o solar no sean buenas o necesarias. De hecho, nuestro país apunta a diversificar su matriz energética. Así, paralelamente a la planificación de esta central nuclear se está trabajando en el desarrollo de nuevos parques eólicos en Río Negro. Cualquier fuente de energía que no libere gases de efecto invernadero es una buena opción para reemplazar la quema de hidrocarburos. 

¿Por qué son convenientes las matrices energéticas diversificadas? 

El suministro de energía es tan fundamental y los tiempos involucrados en el desarrollo de tecnologías de generación son tan largos que, desde el punto de vista de garantía del suministro, no es conveniente descansar para la generación eléctrica en fuentes preponderantes de energía: es conveniente tener fuentes diversas. Los países deben entonces apuntar a tener una matriz energética diversa, con distintas fuentes de producción, incluyendo nuclear, para poder garantizar que se satisface la demanda de energía sin emisión de gases de efecto invernadero. 

¿Por qué decimos que la energía nuclear es una fuente de generación muy segura? 

Ninguna actividad industrial se encuentra tan estrictamente regulada como la nuclear. La actividad cuenta desde sus inicios con una disciplina técnica denominada “seguridad nuclear”. En esta disciplina, los especialistas llevan adelante análisis durante la etapa de diseño para verificar que se cumplen con las condiciones impuestas por la regulación. Uno de los principios de la seguridad nuclear es el de Defensa en Profundidad, que establece que debe haber múltiples barreras, físicas y funcionales, para evitar que fallas múltiples resulten en liberación de material radioactivo al ambiente. 
Otro de los principios es el de “Tan Bajo Como Sea Razonablemente Alcanzable” -ALARA, su sigla en inglés - que establece requerimientos tanto para el diseño como para la ubicación de la central y el manejo de la emergencia. Más información se puede encontrar en Seguridad Nuclear Radiológica. En estos momentos hay 447 reactores de potencia en operación. EEUU es el país con mayor número de centrales nucleares (100 reactores de potencia). Francia es el país con mayor porcentaje de energía de origen nuclear (80%). El accidente de Fukushima, el más severo ocurrido en un reactor de diseño occidental, no llevó a ninguna muerte como consecuencia de la radiación. Está en discusión el manejo de la emergencia y la necesidad de evacuación, teniendo en cuenta los niveles de radiación y las consecuencias sobre la salud de los evacuados. 

¿Qué impactos ambientales tiene la instalación de una central nuclear? 

La regulación ambiental provincial requiere que se realice una evaluación de impacto ambiental para el proyecto de la Quinta Central, por lo tanto la información sobre los impactos ambientales estará disponible para el público. El factor que más captura la atención en materia de impacto sobre el público y el ambiente, es la presencia de material radioactivo. El material radioactivo está contenido y se establecen múltiples barreras al medio ambiente. En operación normal, el impacto de la radiación en el público (medido en dosis, unidad Sieverts Sv) es como máximo de 250 microSv por año. 
Vale la pena comparar esta dosis con otras dosis radioactivas: 
• Es diez veces menor que la dosis anual natural de radiación que recibimos todos, ya que la tierra es radioactiva, la comida tiene radiación, y hasta las personas emitimos radiación. 
• Es parecida a la dosis anual que recibe un viajero frecuente de avión y mucho más baja que la dosis que reciben las tripulaciones aéreas. 
• Es más de diez veces menor que la dosis que se recibe con una mamografía. 
• Es veinte veces menor que la dosis típica recibida por una tomografía computada: una tomografía equivale a la dosis máxima que recibiría el poblador más cercano a una central nuclear durante veinte años.  El impacto ambiental de una central nuclear es extremadamente bajo, como lo muestra la experiencia operativa de más de cuarenta años en los sitios de Atucha y Embalse. 

¿Cómo es el uso del agua en la central? 

El agua en contacto con el combustible nuclear es el agua del circuito primario, que es un circuito cerrado. El circuito primario está en contacto (a través de superficies metálicas en los generadores de vapor) con el circuito secundario, que también es un circuito cerrado. Recién el circuito terciario, que es el que extrae el calor residual del circuito secundario, está en contacto con el medio ambiente. No hay entonces consumo de agua ya que el circuito terciario toma agua del mar o de un río y se devuelve al mismo, sin ningún tipo de contaminación. 

¿La central se vería afectada ante un terremoto o la erupción de un volcán? 

El proceso de selección del lugar de emplazamiento de una central nuclear incluye la evaluación del comportamiento sísmico. La central se diseña para resistir el máximo movimiento sísmico previsto para el lugar. En relación a la central planificada para nuestra provincia, la selección del sitio buscará un lugar sin actividad sísmica significativa. La zona de la costa argentina no presenta actividad de maremotos o tsunamis. En cuanto a la actividad volcánica, se toma en cuenta la experiencia acumulada sobre erupciones de volcanes para diseñar sistemas que impidan que la presencia de cenizas volcánicas afecte el funcionamiento de la central. 

¿Qué medidas se prevén ante un accidente provocado por un evento natural extraordinario como fue en Fukushima? 

En nuestra provincia no hay áreas que estén expuestas a eventos extremos como el ocurrido en Fukushima. La mayor parte de la provincia tiene bajo nivel de sismicidad, y no se presentan fenómenos extremos como maremotos y huracanes. La selección del sitio donde se construirá la central deberá cumplir con toda una serie de requisitos y protocolos, nacionales e internacionales, que apuntan justamente a evitar que la misma se instale en un área geográfica proclive a fenómenos naturales que puedan atentar contra el normal funcionamiento de la central. El manejo de situaciones accidentales deberá cumplir con los estrictos requerimientos de la Autoridad Regulatoria Nuclear. 

¿Hay razones para pensar en un accidente como el de Chernobyl hoy? 

No. La secuencia de eventos que desembocó en la destrucción del reactor de Chernobyl no es posible en los diseños actuales de centrales nucleares; tampoco en el propuesto para la Quinta Central nuclear. La central de Chernobyl, que fue escenario del peor accidente de la industria nuclear en 1986, tenía un diseño conocido como RMBK que fue descartado después del evento y que presentaba una serie de características que lo diferencian de las centrales construidas en Europa, América, Japón y China.

El porvenir argentino y las futuras plantas nucleares

Editorial del diario La Nación
Cuando el mundo desarrollado abandona por peligrosa la energía atómica, la Argentina construirá dos centrales en virtud de los acuerdos con China
Resultado de imagen para futuras plantas nucleares
Entre los acuerdos firmados en el reciente viaje del Presidente a China se destaca el de la construcción de dos centrales nucleares: Atucha III, junto al río Paraná, en Zárate, y otra central que se instalará en Río Negro. El compromiso provenía del gobierno anterior junto a las polémicas represas sobre el río Santa Cruz. Ambas infraestructuras revelan una nula racionalidad económica y energética y son el resultado de decisiones del Poder Ejecutivo de la década anterior que no han sido social ni institucionalmente consensuadas.

La energía nuclear es difícil de justificar para la Argentina. Es riesgosa, es vulnerable a cualquier atentado terrorista, sus residuos radiactivos persisten por miles de años y es cara. Al mismo tiempo, nuestro país posee mucho gas, con un gran potencial en Vaca Muerta, y excelentes condiciones para el desarrollo de energías renovables. Cabe preguntarse entonces por el sentido de invertir en tecnologías que el mundo está abandonando: Alemania apagará todas sus centrales antes de 2022; Suiza las desactivará una vez cumplida su vida útil, e Italia ha decidido no avanzar en el desarrollo de esta tecnología luego de que un 95 por ciento de los italianos que participaron de un referéndum votaron en contra de la energía nuclear. Incluso Francia, país donde la energía nuclear representa más del 75 por ciento de la matriz eléctrica, ha propuesto diversificar la producción de electricidad y reducir al 50 por ciento el peso de la energía nuclear para 2025. 

La Argentina va por el camino inverso. Parece ignorar que no hay energía nuclear sin riesgo. Riesgo porque implica guardar por miles de años los residuos radiactivos que genera. Riesgo ante un posible atentado, que no es una posibilidad disparatada, y menos para un país que los ha sufrido y no ha podido siquiera avanzar en la investigación de los hechos. Nos guste o no, la energía nuclear aumenta el peligro en nuestra sociedad y se trata de un riesgo no solo para las personas y su salud, sino para la naturaleza.

Resultado de imagen para futuras plantas nuclearesEn los últimos siete años las energías renovables no convencionales eólica y solar fotovoltaica han tenido un crecimiento promedio del 20 por ciento. Desde 2015, la capacidad instalada global de energía eólica superó a la de la nuclear y en breve lo hará también la energía solar.

Es cierto que la intermitencia de las energías renovables es una de sus debilidades, pero con una generación distribuida y descentralizada, el avance tecnológico en almacenamiento y la caída de los costos de las energías renovables no convencionales nos lleva a preguntarnos acerca de la pertinencia de invertir en energía nuclear. El costo de instalación de una central nuclear es, aproximadamente, cuatro veces más caro que el de la eólica. Sin embargo, su capacidad de generación es apenas el doble, y a esto hay que sumarle todo el costo de operación y mantenimiento, el costo del combustible nuclear, la custodia por miles de años de los residuos radiactivos y los impactos de la minería del uranio, que no están contemplados dentro del precio del combustible que utilizan.

Uno de los desvelos del Ministerio de Energía y Minería es el autoabastecimiento energético, pero no es posible confundir el precio del desarrollo con el desarrollo a cualquier precio. Instalar centrales nucleares en la Argentina tiene como única justificación posible la búsqueda de inversiones a cualquier costo. Se trata de una tecnología que ya es antigua y lo será aún más cuando las plantas hayan sido finalizadas.

Es cierto que la instalación de estas centrales se encontraba acordada, sin transparencia alguna ni información pública, por el gobierno saliente con el apoyo del sector nuclear argentino. Pero en una sociedad democrática no resulta aceptable la imposición sin consenso social de infraestructuras capaces de amenazar el entorno y la vida humana. Frente a la aceptación resignada de los acuerdos con China por parte del gobierno actual, parecería que la sociedad no cuenta con medios institucionales para evitar negocios realizados con un altísimo grado de corrupción, a puertas cerradas. Es indudable que, para un país como China, resulta indiferente el control que puedan ejercer las instituciones republicanas. La decisión de construir centrales nucleares debe insertarse en un plan que defina la matriz energética del país, con audiencias públicas, aprobado por el Parlamento.

Desde su reforma en 1994, la Constitución Nacional cuenta con la posibilidad de llamar a una consulta popular que puede ser convocada por el propio Congreso o el Poder Ejecutivo Nacional. Mediante esta modalidad, es posible realizar una consulta sobre una determinada ley o política, o bien sobre cuestiones de Estado excepcionales.

Definir la matriz energética que tendrán las próximas generaciones es, sin duda, una causa lo suficientemente trascendente como para hacer ese ejercicio cívico. En particular cuando se trata de decidir la instalación de industrias que poseen la capacidad de amenazar el entorno y la vida humana. No es que no haya medios institucionales para evitarlo. Solamente hay que utilizarlos. Se necesita generar un debate transparente para evitar errores que no tendrán remedio.

Existen alternativas más limpias, baratas y seguras. Las industrias solar y eólica están creando empleos 12 veces más rápido que otras. Es natural que la sociedad se plantee si tiene sentido seguir adelante con la construcción de centrales nucleares o resulta más adecuado utilizar otras modalidades para generar energía sin riesgos.

El rol del Gobierno debe ser representar y defender el interés público y brindar transparencia. Mas allá del hecho de que los acuerdos hayan sido iniciados por el gobierno anterior, sólo el consenso público podría decidir si el proyecto de construir centrales nucleares posee, más allá de las justificaciones y el interés del sector nuclear argentino, un valor ético. Por ahora, se trata de la imposición de un alto riesgo y un costo innecesario para nuestra sociedad. Sin dudas, éste no es el cambio prometido.

jueves, 15 de junio de 2017

“Estamos desaprovechando nuestras costas”

Por Franco Córdoba - Telam
Alejandro Haim, profesor de Ingeniería Mecánica de la Universidad Tecnológica Nacional de Buenos Aires, se refirió al Proyecto de Investigación de Energía Undimotriz y reconoció que desde la casa de estudios desarrollaron un proyecto de generar energía eléctrica, en el marco del comienzo de la 5ta Jornada de Energías Renovables.
La energía undimotríz es la que poseen las ondas marinas. Esas ondas se generan a través de las grandes olas que nacen en los océanos, se trasladan cientos de kilómetros y generan una a elevada cantidad de energía que puede ser aprovechada mediante dispositivos para generar electricidad.

“La energía undimotriz posee una elevada densidad energética muy superior a la energía eólica y la solar y se transporta mediante cables submarinos a la costa o se colocan equipos sobre ella”, indicó el ingeniero Alejandro Haim, de la UTN BA.

“Este equipo se pone en  parques  con grandes cantidades. Para tener una idea, en cien equipos que costarían de 200 boyas, se pueden llegar a tener una potencia instalada de cuatro mega watts, que permite suministrar de energía eléctrica a 20 mil personas o 5 mil hogares”, agregó.
Sistema de Generación por Plano Articulado (Fuente: UTN)

Es por eso que desde la universidad aseguran que el país desperdicia sus costas. Por eso trabajan en un ambicioso proyecto de explotación de aguas, en la búsqueda de una alternativa energética por sobre los combustibles fósiles.

“El lugar de generación ocuparía una manzana, lo que representa un punto en el mar. En definitiva, con el espacio con que contamos en el océano, sabemos que  estamos desperdiciando nuestras costas”, afirmó.

Por su parte,  el ingeniero Mario Pelissero, director de la cátedra de Química Aplicada de la carrera de Ingeniería Mecánica de la UTN. FRBA y director del proyecto “Aprovechamiento de la energía undimotriz” indicó en diálogo con Télam que “el potencial que tiene Argentina con respecto a la energía undimotriz es muy grande”.

“De todo nuestro litoral marítimo, en principio los más de 200 kilómetros que van entre Quequen y Villa Gesell son un terreno fértil para generar ese tipo de energía. Es por ello que la UTN lleva adelante el proyecto experimental y está en tratativas para hacer la transferencia tecnológica a empresas que lo puedan desarrollar”, agregó.

La 5º Jornada de Energías Renovables en la UTN Buenos Aires se realiza este miércoles en conjunto por el Proyecto de Investigación de Energía Undimotriz, la Cátedra de Energías Renovables, el Centro de Estudiantes de Ingeniería Tecnológica (CEIT) y la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la UTNBA.

El encuentro comenzará a las 18.30 con palabras de la secretaria de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la UTN.BA., Patricia Cibeira. A continuación, Ariel Mesch, socio Gerente de EOLOCAL, brindará la charla “Electrificación de instalaciones alejadas de la red eléctrica con fuentes renovables”. Posteriormente, el coordinador del área de “Fotovoltaico y Redes Inteligentes” del INTI, Marcos Politi, expondrá sobre “Redes inteligentes en Armstrong, Santa Fe”. Para finalizar Jorge Pozzo, gerente del área de Geofísica de YPF, desarrollará la charla “Breve descripción de las actuales energías marinas”.

Según el Ministerio de Energía y Minería, las inversiones en energía renovable superaron los 6.500 millones de dólares en 2016. Para el 2018 se calcula que la eólica y solar sumarán 3000 megavatios de energía en 2018, lo que representa casi el 15% respecto al sistema eléctrico actual.

lunes, 12 de junio de 2017

Las usinas que financiará China calientan el debate nuclear

Las usinas que financiará China calientan el debate nuclearPor  CLEDIS CANDELARESI - Cronista.com
Expertos cercanos al Gobierno cuestionan la supuesta "opacidad" de las negociaciones que encararon Finanzas y Energía y reclaman intervención parlamentaria, mientras ambientalistas van a los tribunales.

Mauricio Macri firmó un contrato general con China National Nuclear Corporation y China Zhongyuan Engineering Corporation para construir dos usinas atómicas que incluye, al menos, un cambio clave respecto a los compromisos esbozados por la gestión anterior: cualquier eventual controversia será dirimida en tribunales locales y no en los de Londres, tal como había admitido Julio De Vido, con cierto descuido de la soberanía jurídica. Pero ese logro negociador puede diluirse en un escenario de dudas y críticas a la estrategia nuclear que surgen en el propio entorno afín al Gobierno.

Los ministerios de Energía y Finanzas necesitaron seis meses para desentrañar la voluminosa documentación que formaba parte de un memorando de entendimiento que el otrora ministro de Planificación firmó con China poco antes de abandonar el poder. Aunque, a decir de un estrecho colaborador de Juan José Aranguren, la firma oficial sólo rubricaba un par de hojas iniciales. El resto podría tener la categoría de paper de trabajo.

La primer controvertida decisión oficial fue sostener una ambiciosa iniciativa de la gestión kirchnerista en nombre de la continuidad jurídica del Estado, aunque modificando puntos que, a decir de Energía, eran "lesivos de los intereses nacionales".

Estímulos

El afán de evitar conflictos con la potencia oriental y la posibilidad de tener financiamiento accesible a obras de envergadura, fueron los estímulos. Quizás los mismos que para no apartarse de la decisión de construir dos hidroeléctricas sobre el río Santa Cruz, también con recursos y tecnología oriental.

El dificultoso pulido permitió firmar semanas atrás en Beijing un contrato general, que fija condiciones y plazos para rubricar luego los acuerdos específicos de obra y financiero, cuyos términos y condiciones aún siguen negociándose.

En noviembre se alistaría el texto que servirá para la usina IV, a localizar en la bonaerense Lima, y que empezará a operar en 2025. Utilizará tecnología Candu (Canadian Deuterium Uranium), la misma que se utiliza en Embalse y requiere uranio natural y agua pesada.

La segunda, de mayor porte, se comenzará a construir más tarde y estará alimentada con uranio enriquecido: tecnología china de última generación, la que al país de Xi Jiping verdaderamente le interesa financiar. "Ellos tienen una veintena de centrales operativas y otras tantas en construcción y nunca tuvieron un accidente", pondera Enrique Fernández Taboada, de la Cámara de Comercio bilateral, reivindicando la importación de tecnología asiática para la quinta central proyectada (PWR, de tercera generación).

La localización prevista para esta última usina es Río Negro. Una opción anunciada con algarabía por el gobernador Alberto Weretilneck y objetada duramente por el de Chubut, Mario Das Neves, quien considera a este tipo de centrales lisa y llanamente "un basurero nuclear". El encontronazo con un mandatario de un Estado petrolero es una de las varias polémicas que fragmenta al arco político y técnico respecto a la decisión de subir de tres a cinco las unidades del parque atómico local.

Ambas usinas aportarán en conjunto cerca de 1900 mega al sistema interconectado y tienen un presupuesto global de u$s 14.000 millones, de los cuales bancos chinos financiarían el 85% (u$S 12.500 millones), a 20 años, con 8 de gracia y una tasa que rondaría el 4,5% anual, según los términos preacordados hasta el momento.

Caro o barato

El precio al que proveerán energía es otro punto controvertido, desde la definición del criterio para calcularlo. Si debe ser suficiente para repagar las obras, el megawatt hora en el mercado mayorista debería valer al menos de u$s 100, algo más del doble de lo que cuesta hoy. Si la futura tarifa sólo tiene que remunerar los costos de mantener y operar las centrales, puede bajar razonablemente. La cartera energética apuesta a que estará en "valores internacionales": entre u$s 65 y 85 el MWh.

La Argentina tiene en Pilar un reactor experimental desarrollado por la estatal Invap, Carem25, y tres usinas en operación comercial. Atucha I y la cordobesa Embalse, ahora fuera de servicio por un revamping que costará u$s 2100 millones y le prolongará la vida útil por tres décadas más. Y Atucha II, emblema de los tropiezos locales para grandes obras.

Esta central, proyectada a principio de los 80, tuvo años de parálisis hasta que en el 2004 Néstor Kirchner decidió terminarla, algo que ocurrió una década después y con un presupuesto quintuplicado, cercano a los u$s 4000 mil millones. Un punto negro que destaca en el historial del destacado desarrollo científico local en la materia.

Subir de tres a cinco el parque de usinas nucleares se enmarca en la determinación de fortalecer a la Argentina como uno de los países destacados en el desarrollo nuclear con fines pacíficos y sujeto a regulaciones con un doble estándar de seguridad, el local y el internacional. De hecho, la Argentina acaba de ser aceptada como miembro pleno de la Agencia Nuclear de la OCDE y su banco de datos, selecto club que integran naciones con tecnología de avanzada. Un honor que la comunidad científica local defiende con orgullo.

La contraparte local del contrato firmado y de los documentos en discusión es Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima, cuyas autoridades defienden los presuntos logros conseguidos respecto a lo delineado por la administración anterior.

Uno fue amparar el acuerdo bajo legislación argentina. Otro, haber delimitado las responsabilidades, de modo tal que si algo falla en la ingeniería o equipamiento, los proveedores asuman el costo. Según fuentes oficiales "tal como estaba redactado en origen, NASA era la única responsable de todo".

Pero la falta de comunicación sobre estas tratativas y sobre los fundamentos para reafirmar el camino nuclear avivan las críticas a la política oficial, no sólo de los defensores acérrimos del medio ambiente sino de técnicos allegados al Gobierno.

Los detractores

El tema provoca odios y amores. Están los militantes de la actividad nuclear como herramienta de desarrollo intelectual y económico. Los fundamentalistas del ambiente que la censuran de cuajo y los intermedios, que avalan la actividad nuclear, pero cuestionan los procedimientos para tomar decisiones estratégicas delicadas.

El grupo de los ocho ex secretarios de Energía -al que la gestión macrista asignó el honroso e inocuo lugar de "asesor"- ya había advertido sobre la delicadeza del tema en su documento de 2014, criticando los avatares de Atucha II y reclamando una auditoría exhaustiva sobre esa mega obra. En la misma carta compromiso suscripta por varios de los entonces candidatos a presidente, incluyendo a Macri (y excluyendo a Daniel Scioli, FPV), se sentencia que: "Por ley especial del Congreso se determinarán los objetivos de construcción de nuevas plantas nucleares".

Uno de sus miembros y actual director de Enarsa y presidente de Transener, Jorge Lapeña, lo reclama ante 3Días con vehemencia. "La decisión de construir centrales nucleares debe insertarse en un plan energético de alta estrategia y aprobado por el Parlamento. Esto no está pasando. Y Embalse tiene que volver a servicio en tiempo perentorio", dispara el radical.

Su correligionario del mismo grupo asesor y actual director de YPF, Daniel Montamat, es más comprensivo respecto a la decisión de continuar con los acuerdos esbozados por el kirchnerismo por la obligación del Estado de atender sus compromisos más allá de los gobiernos de turno, aunque también apunta a una debilidad de unos que estarían sosteniendo los otros. "La estrategia nuclear es una decisión estratégica que debe formar parte de un plan cuidadoso, que el gobierno anterior no tenía", sentencia.

A contramano

El consultor en temas energéticos Ricardo Molina imputa a los acuerdos con China de tener "gran opacidad" y de condicionar al país en una dirección "opuesta al mundo", donde otros repudian la energía nuclear y reivindican la renovable. Suiza es un buen ejemplo en este sentido, ya que por un reciente plebiscito decidió apartarse definitivamente de la actividad nuclear.

Luis Rotaeche, del Instituto General Mosconi, advierte de los supuestos riesgos técnicos. "El accidente de Chernobyl produjo un daño equivalente a cuatro bombas como la que los EE.UU. arrojó sobre Hiroshima". Ergo, es mejor seguir apostando al camino eólico y solar, donde los precios seguirán bajando y no hay riesgo de catástrofe.

Una divisoria de aguas es el sendero formal institucional, sugerido por Lapeña: darle participación a otros poderes y profundizar el debate antes de decidir una inversión millonaria. El otro costado controvertido es si la energía nuclear es "limpia", como reivindica la mayoría, o una amenaza para el ambiente. Y esto depende de si la mira se pone en la combustión o en los residuos.

Desde una visión más radical, el biólogo cordobés Raúl Montenegro plantea una alerta roja. "Es la más sucia y peligrosa de todas por la acumulación de residuos radioactivos, que duran 240 mil años. Hay poca información sobre el tema y las decisiones argentinas también afectan al Uruguay", advierte el titular de Funam (Fundación para la Defensa del Medio Ambiente), premio Nobel Alternativo en 2004.

Para el destacado activista y profesor universitario no es posible encarar un proyecto sin la correspondiente licencia. Por esta razón, la extensión de vida útil de Embalse "es ilegal" ya que las obras de reacondicionamiento habrían comenzado antes de tener ese aval. Con el patrocinio del abogado Ricardo Moner Sans, formuló una denuncia penal contra De Vido y Aranguren que tramita en el juzgado de Claudio Bonadío por presunto abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público.

NASA descalifica esa iniciativa. "La denuncia fue presentada después de la audiencia pública para discutir el tema, en la que Montenegro participó", aseguran off the record.

El examen ambiental para avanzar con la cuarta central cofinanciada por los chinos estaría listo a fin de mes, lo que habilitaría a comenzar con las obras en enero, después de rubricar los contratos específicos.

Un punto a favor de los que avalan la marcha del plan atómico y reivindican esta forma de producir energía definida como "limpia", porque no emite los denostados gases de efecto invernadero. Este tipo de energía representa hoy algo más del 5% en la matriz de generación eléctrica y aporta una potencia estable para el sistema, algo no factible con la eólica y la solar, al menos hasta que puedan almacenarse a bajo costo.

Pero la actividad atómica trasciende este rubro y el alto estatus científico del país en la materia es un preciado galardón que ningún gobierno parece dispuesto a resignar, más allá de las voces críticas.

Central IV y V, esquema de los futuros contratos

El Gobierno preserva con celo hasta de su propia tropa las negociaciones con las compañías chinas para definir los términos de los contratos que el kirchnerismo sólo delineó como un borrador. Aquí algunos puntos ya definidos en la tarea de remozarlos, según fuentes oficiales:

- Finanzas estaría intentando bajar la tasa de interés, que podría anclarse en torno al 4,5% anual, supuestamente por debajo de lo previsto en origen. Como crédito concesional, debe ser menor al interés de mercado.

- Se desdobló en el tiempo la construcción de las centrales que, en principio, hubieran sido levantadas al mismo tiempo, con las dificultades que entraña semejante esfuerzo.

- Los ocho años de gracia hasta comenzar con el repago permitirían que la segunda usina (V) comience cuando la primera (IV) ya esté comercializando su energía y Nucleoeléctrica Argentina perciba ingresos por esa venta. Ese esquema permitiría alivianar la carga pública financiera.

- El precio al que las centrales venderán la energía que produzcan se ubicaría entre u$s 65 y 85 el MWh, por encima de los u$s 48 actuales y "a valores internacionales".

- Nucleoeléctrica intentará firmar contratos de abastecimiento que le garanticen a mediano plazo un ingreso por la energía que vendan al sistema. Según la expectativa oficial, para entonces son los usuarios quienes deberían costear ese valor y no el Estado vía un subsidio.

- No es posible afirmar que los u$s 14.000 millones (6000 para la IV y 8000 para la V) será el presupuesto definitivo. Tampoco que el número final implique una reducción efectiva del presupuesto K para la misma obra: por ahora sólo puede hablarse de estimaciones.

- No se utilizará la legislación británica para amparar los contratos sino la argentina, lo que ofrece ventajas naturales a los abogados locales en caso de conflicto con los chinos.

- Se delimitaron las responsabilidades contractuales de modo tal que los proveedores asuman los riesgos propios de las fallas en la ingeniería y equipos. No existen seguros de cobertura para la actividad nuclear.

miércoles, 7 de junio de 2017

Ranking verde: Chubut es la mayor productora de energía renovable en la Argentina

Parque eólico en Comodoro RivadaviaPor Laura Rocha - LA NACION
Avanza la ejecución de obras para que la generación eólica y solar alcance, a fines de este año, el 8% de la matriz de consumo; destacan que las nuevas fuentes son más baratas y sustentables.

Parque eólico en Comodoro Rivadavia. Foto: Archivo .
Los vientos patagónicos y el sol del Norte ya no son sólo parte de los hermosos paisajes que tiene la Argentina. Hoy estos recursos naturales ya representan un aporte energético y ambiental. Chubut lidera la generación en este sector gracias a la fuente eólica. Le siguen Río Negro y La Rioja. Detrás vienen San Juan y San Luis.

Hoy, sólo 10 provincias cuentan con proyectos de energías limpias y representan, aproximadamente, el 1% de la matriz energética del país. Sin embargo, el número debe crecer en los próximos años. De hecho, para fines del actual, el porcentaje debería trepar a 8%, y para 2025, al 20.

"En lo que tenemos que pensar es en cómo se están posicionando las provincias en materia de renovables. Desde la mitad del país hacia el Sur se destaca la eólica, y hacia el Norte, por el enorme potencial de la radiación, la solar. Las provincias patagónicas lideran hoy el mercado porque la primera tecnología que se desarrolló en el país fue la de aprovechamiento del viento. Pero en los próximos años la vedette será la solar", explica María Eugenia Testa, de la consultora Línea Verde. La firma elaboró un informe en el que se muestran el mapa actual y el futuro con los proyectos licitados por el gobierno nacional desde el año pasado.

foto: LA NACION Los molinos de aspas enormes ya son parte del paisaje en Chubut. Allí, los parques eólicos aportan 137,7 MW; le sigue Río Negro, con 52,2MW, y luego, La Rioja, también con el viento, con 50 MW. Los parques solares, en tanto, pueden verse en San Juan y San Luis. Mendoza cuenta con una pequeña central hidroeléctrica.

Foto: LA NACION

Pero este mapa va a cambiar en los próximos meses. De las 24 provincias hay 17 que contarán con proyectos que harán que el país sume generación limpia y alcance el 6% de la producción de electricidad, casi lo mismo que representa, por ejemplo, la generación de fuente nuclear, 5,6% a diciembre de 2016. En los proyectos, Buenos Aires y Jujuy aparecen como grandes generadores.

Pero los beneficios que aportan las energías derivadas del sol, del mar, de la biomasa o del viento también generan beneficios económicos, sociales y, especialmente, ambientales. Según proyecciones de la Cámara Argentina de Energías Renovables (Cader), de aquí a 2020 esta industria podría crear alrededor de 60.000 nuevos empleos en el país.

Sebastián Kind, subsecretario de Energías Renovables de la Nación, cree que lo que está instalado es muy poco como para hacer una comparación que explique algo. El funcionario puso en marcha el Programa Renovar, que tuvo dos rondas de licitaciones, para la generación de 1000 MW. "El impulso a las renovables tiene dos cuestiones beneficiosas fundamentales directas: son más baratas que lo que desplazan. Cuesta más barato el MW/h. Eso quiere decir que va a bajar el costo de la energía. El segundo es el tema ambiental. Todo el mundo tiene conciencia de lo que significa", apunta.

Los cálculos oficiales sostienen que si se concretaran los 59 proyectos licitados se evitaría la emisión de dióxido de carbono equivalente a la de unos dos millones de autos por año. "Al desarrollar emprendimientos en 17 de 24 provincias se generan proyectos de infraestructura con su cadena de valor. El posicionamiento de cada provincia tiene que ver con lo que cada una quiere para su desarrollo y éste es uno de los canales para conseguirlo", agrega Kind.

Testa coincide con él y apunta: "Dentro del Renovar se destaca Jujuy, que se posiciona como una provincia de renovables. Precisamente, allí se va a construir un parque solar de 300 MW".

En busca de una ley

Según el análisis de Línea Verde, lo que falta para el usuario es una ley de generación distribuida. Es decir, un mecanismo que permita que los vecinos puedan no sólo producir su propia energía, sino también aportar a la red. "Está pendiente la ley de energía distribuida. Hay varias provincias que ya tienen ley, pero sin fondos nacionales", dice Testa.

Kind cree que es fundamental contar con esa normativa: "Apoyamos esa ley y hemos enviado un proyecto para que sea realidad. El desafío en la implementación tiene que ver con que esa política tiene que considerar que hay un esquema de subsidios y que en esa realidad para poder desarrollar un sistema con herramientas asociadas. Por eso, la discusión debe darse en la generación, que es de jurisdicción nacional".

Este debate está hoy en la Cámara de Diputados. Juan Carlos Villalonga, legislador nacional de Cambiemos, es optimista: "En este momento tenemos un nuevo texto. El mercado eléctrico tiene una gran complejidad. La renovable la podés instalar en tu casa y podés mejorar la ecuación en tu factura. A la economía familiar le va a convenir, a la economía energética le conviene porque va a estar desplazando la generación más cara. Siempre va a estar desplazando lo más caro y lo más caro va a seguir siendo la importación de combustible y, por otro lado, se hace más eficiente el sistema".

El texto del proyecto sostiene que el modo de compensación por la generación de energía será determinado por la autoridad de aplicación. "Puede haber distintos casos, desde descuento en la factura hasta créditos para poder mejorar la tecnología para la generación", detalla el diputado.
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