Por Martín Dinatale - LA NACION
Reforzará las acciones conjuntas con agencias antidrogas de EE.UU., Europa y América latina
Mauricio Macri durante la presentación de Argentina sin narcotráfico, en Tecnópolis. Foto: EFE
El anunciado plan del Gobierno de lucha contra el narcotráfico cuenta con una pata internacional clave para la desarticulación de redes y la incautación de drogas gracias al apoyo de más de 40 países.
En el plan de trabajo que elaboraron los Ministerios de Seguridad, Justicia e Interior con la Cancillería figura la idea de Mauricio Macri de profundizar los acuerdos de cooperación técnica y operativa con países vecinos, así como también con otros Estados que tienen conexión aérea o marítima con el país.
Según confiaron a LA NACION en la Casa Rosada, el aporte internacional para el combate contra el narcotráfico estará sustentado en el intercambio de recursos técnicos, coordinación de tareas de inteligencia y metodologías de trabajo compatibles con la Argentina. La "colaboración horizontal" se profundizará con Bolivia, Chile, Brasil, Uruguay, Paraguay y Colombia.
También se buscará fortalecer los acuerdos de cooperación con la DEA y el FBI, de Estados Unidos. De hecho, en uno de los capítulos de los acuerdos que Macri y Barack Obama firmaron se especificó la idea de intensificar el intercambio de información sensible relacionada con el tráfico de drogas. La colaboración de la DEA con la Argentina nunca se cortó ni en la peor época de la relación de Cristina Kirchner con Washington. Pero ahora se potenciará al máximo ese trabajo. Fuentes diplomáticas dijeron a LA NACION que la DEA ampliará su oficina en Buenos Aires.
A su vez, con los 26 países que integran hoy la Unión Europea (UE) se prevé el acceso a la información de bancos de datos conjuntos o separados. Con Alemania y Gran Bretaña se busca avanzar en nuevos acuerdos de cooperación para los controles en rutas aéreas y en el intercambio de información sobre drogas sintéticas. La profundización de este acuerdo con la UE cobra relevancia si se tiene en cuenta que la República Checa es uno e los mayores productores de droga sintética de Europa. Para estos casos habrá un intercambio de información sobre los componentes químicos y las marcas de esas drogas, los que se encuadra en el proyecto internacional de operación NPS-ION, sobre aparición de nuevas drogas psicoactivas.
"Hay una novedad permanente en el mundo de las drogas que la Argentina debe atender para combatir", dijo a LA NACION un funcionario de Seguridad. Así, se intensificará el programa Smart, sobre vigilancia mundial de drogas sintéticas, y el programa global con la ONU para el control de contenedores. Esto se hará con la Aduana y Prefectura.
También el gobierno de Macri está reforzando los lazos con China y Rusia para combatir el contrabando de drogas por barco. Hay también una línea de trabajo muy fuerte con Israel en materia de seguridad y lucha contra el narcotráfico.
"El Gobierno va en el sentido correcto con medidas que requieren esfuerzos concretos", dijo a LA NACION Nicolás Dapena, especialista de la ONU en temas de seguridad.
Por otra parte, el Gobierno intensificará el programa AirCop de alertas tempranas, intercambio de información y criminal y cooperación con más de 40 aeropuertos de todo el mundo. A la vez, la Dirección de Migraciones acaba de poner en marcha un sistema de alertas con Interpol para tener en todos los aeropuertos de ingreso al país una red online con las bases de datos de la casa central de Interpol en Lyon. El Gobierno cree que necesitará del apoyo externo para afrontar este reto.
Junto con la oposición, Macri lanzó un amplio plan antidrogas
En una señal de búsqueda de consensos políticos, el Gobierno invitó a las distintas fuerzas para exponer un ambicioso programa, que incluye numerosas medidas de seguridad y la articulación de fuerzas especiales
Agregado: Mariano Obarrio - LA NACION (Extractado)
Como parte de su nueva política de acuerdos multisectoriales, el presidente Mauricio Macri lanzó ayer en Tecnópolis el plan Argentina Sin Narcotráfico, un conjunto de medidas contra el negocio y el consumo de drogas que como prioridad se propuso erradicar el paco, conformar equipos entre las fuerzas de seguridad federales y provinciales y saturar las rutas con presencia y operativos antidrogas.
También apuntará a diseñar nuevas estadísticas, avanzar en radarización y tecnología, inteligencia criminal, campañas de concientización, prevención en las escuelas, aportes al Poder Judicial para avanzar en las causas y hacer planes de reinserción laboral de los adictos.
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, precisó que se va a "localizar con sistemas de georreferenciación a las bandas en las rutas, las fronteras y las hidrovías". También habrá capacitación de recursos humanos de las fuerzas federales y provinciales y se mejorará la asistencia a adictos en la Sedronar, que dirige Rubén Moro.
Bullrich dijo a LA NACION que el plan Argentina Sin Narcotráfico se financiará con el presupuesto 2017. La ministra consensuó el programa con sus pares de Seguridad de las provincias, con intendentes, con tres comisiones de la Cámara de Diputados vinculadas al tema y con dos comisiones del Senado. "El narcotráfico en los últimos años ha avanzado mucho, frente a la negación del problema por parte del Estado", dijo Macri, en una clara crítica al gobierno de la ex presidenta Cristina Kirchner.
El narcotráfico, la pobreza y la unidad nacional fueron los ejes de campaña de Macri. En el pasaje más dramático, dijo ayer que el narco "ya se ha extendido por todo el país y nos afecta en nuestras raíces, porque corrompe las personas y nuestras instituciones, y eso nos degrada, nos separa, nos paraliza". Además, adelantó que la política de acuerdos con diversos sectores políticos y económicos continuará con la "educación, la energía y la creación de empleo", tal como adelantó LA NACION el domingo último.
El plan antidrogas consta de seis capítulos. Se propone la "erradicación del paco"; detectar y destruir cocinas, búnkeres y centros de distribución; aumentar las penas, y aplicar el modelo Barrios Seguros, que consiste en entrar con las fuerzas e impedir el dominio de las bandas.
Otra meta es la "presencia activa de las fuerzas federales y provinciales en todo el país", con operativos en rutas, vías navegables, espacio aéreo y fronteras; planes entre fuerzas federales y provinciales, y capacitación contra las innovaciones de las bandas, como el uso de redes sociales, empresas pantalla, lavado de activos y uso de testaferros. Además, se recuperarán para el Estado los bienes provenientes del narcotráfico; se identificará y perseguirá a bandas criminales; se integrarán grupos especiales mixtos (de fuerzas federales y provinciales), y se mejorará la tecnología para el combate del narcotráfico.
Se busca controlar los espacios aéreo, terrestre y marítimo, con un sistema nacional de radarización, escáneres, drones, sistemas morpho-touch e innovación tecnológica adecuada para el narcotráfico.
Por otra parte, se creará el Consejo Federal de Precursores Químicos y se atenderán la formación y la capacitación. Se creará el Instituto Conjunto de Conducción Estratégica del Ministerio de Seguridad para oficiales, jefes y funcionarios del gobierno, según estándares internacionales.
Se crearán un modelo estadístico narcocriminal con estadísticas semestrales y una base de datos única de organizaciones criminales. Se conformará un mapa del narcotráfico, rutas, hidrovías, espacio aéreo, aeropuertos, pistas clandestinas, terminales ferroviarias, transporte automotor, así como la trazabilidad de equipajes y encomiendas. Se federalizarán, además, los acuerdos internacionales de la Nación.
Los seis ejes de la iniciativa
Objetivos operativos: Se buscará lograr un compromiso para erradicar el paco y se aumentarán las penas. También se intensificarán los controles en las fronteras y se recuperarán los bienes provenientes del narcotráfico
Objetivos instrumentales: Prometen formar a las fuerzas de seguridad y funcionarios según los más altos estándares internacionales y se creará un modelo estadístico narcocriminal. Se sumará un mapa del narcotráfico
Prevención de adicciones: Se prevé garantizar la inclusión social a través de campañas de concientización, con especial énfasis en los sectores más vulnerables. Además, impulsarán la reinserción sociolaboral para consumidores
Transparencia: Se buscará controlar la integridad para funcionarios públicos y fuerzas de seguridad. También se creará un programa contra la cooptación y corrupción del narcotráfico
Justicia y Poder Legislativo: El Gobierno quiere dinamizar la designación de los jueces y dotar a la Justicia con las herramientas adecuadas. A su vez, prometen trabajar en la creación de nuevos y más eficaces proyectos de ley
Participación de la sociedad civil: Crearán la Comisión Asesora de la Sociedad Civil para fomentar la prevención, se dispondrán mecanismos para que la ciudadanía aporte información y para que su seguridad no corra peligro