(Infobae.com) - El nuevo proyectil voló a una altura mayor que la de cualquier otro de Pyongyang, lo que significaría un alcance de más de 13.000 kilómetros. Se especula, además, que podría tener un motor de combustible sólido, más apto para una guerra nuclear
El régimen de Kim Jong Un anunció este miércoles que su último lanzamiento corresponde a un nuevo modelo de misil balístico intercontinental (ICBM), bautizado Hwasong-15 y capaz de alcanzar "todo el territorio de los Estados Unidos".
A pesar de que por el momento la dictadura de Corea del Norte no reveló fotos o videos del lanzamiento ni de que los Estados Unidos, Corea del Sur y Japón confirmaron que se trate de un nuevo misil, expertos aseguraron que el cohete, que según Pyongyang cuenta con una "ojiva pesada supergrande", puede, en efecto, representar un notable avance en el programa armamentista con el que el dictador norcoreano amenaza al mundo.
El propio secretario de Defensa estadounidense, James Mattis, confirmó que el proyectil "voló más alto que cualquier otro" de los lanzados por Corea del Norte, y agregó que ese país está construyendo "misiles balísticos que amenazan a cualquier parte del mundo".
El especialista en armamento norcoreano Scott LaFoy explicó en su cuenta de Twitter que Pyongyang cambia el número de los misiles cuando realiza cambios significativos en su estructura física. Corea del Norte dijo que el cohete "tiene muchas más ventajas en sus especificaciones tácticas y tecnológicas", que lo harían un modelo más avanzado que el Hwasong-14, el que Corea del Norte probó el 4 de julio pasado y que consideró el primer misil balístico intercontinental.
Lo que se sabe, según detalles ofrecidos por Pyongyang y que concuerdan con los que manejan Seúl, Washington y Tokio, es que el misil fue lanzado de una plataforma móvil, recorrió una distancia de 950 kilómetros en 53 minutos antes de caer al Mar de Japón ("Mar del Este" en las dos Coreas) y alcanzó un apogeo, altitud máxima, de 4.475 kilómetros.
Estos datos indican que la altura, 10 veces la de la Estación Espacial Internacional, es la mayor, hasta la fecha, alcanzada por un proyectil norcoreano, lo que implica un nuevo y peligroso avance en el programa de armas del régimen.
Teniendo en cuenta que el misil ha sido lanzado con un ángulo muy abierto, esta altura significaría que el arma puede tener un alcance mucho mayor, y algunos expertos creen que el proyectil podría haber recorrido en un vuelo normal más de 13.000 kilómetros, suficiente para alcanzar Washington o cualquier parte continental de los Estados Unidos.
Según dijo David Wright, un experto en misiles de la Unión de Científicos Preocupados, a The New York Times, el misil podría llegar a Washington, la costa oeste de los Estados Unidos, Europa o Australia. "Es bastante impresionante", comentó el científico.
Por otra parte, el experto indicó a la BBC que el misil contenía una ojiva simulada muy ligera, lo que podría significar que aún no puede transportar por esa distancia una carga nuclear mucho más pesada.
Además, todavía no hay pruebas de que el régimen haya podido miniaturizar una bomba atómica, paso previo para poder montarla en la ojiva de un misil.
El dato que permanece aún desconocido es el tipo de combustible usado en el Hwasong-15. De acuerdo con Ankit Panda, editor The Diplomat, el régimen probó recientemente dos motores, uno de combustible sólido y otro líquido, aunque no había información del utilizado en la prueba.
Hasta el momento los misiles norcoreanos de largo alcance han utilizado preferentemente combustible líquido, una opción menos complicada y más barata. Pero dado el alto poder corrosivo de estas sustancias, los proyectiles solo pueden ser cargados momentos antes del lanzamiento en un proceso lento, lo que implica una pérdida de tiempo que en el contexto de una guerra puede ser letal para las baterías.
El combustible sólido, mucho más complicado de fabricar e instalar, es, al mismo tiempo, más estable y permanece en todo momento dentro del misil, posibilitando lanzamientos rápidos.
Si bien no hay confirmación, el hecho de que se haya utilizado una plataforma móvil para el lanzamiento del Hwasong-15 podría indicar que su motor funcionó con combustible sólido.
Las capacidades de los misiles de Pyongyang "se están haciendo más sofisticadas a un ritmo rápido en todos los aspectos, incluyendo tiempo y distancia de vuelo", según reconoció el primer ministro Lee Nak Yon.