Por Hugo Alconada Mon - LA NACION
El Ministerio de Energía quiere anular las obras por presuntos sobreprecios y pidió a la OA que evalúe una denuncia.
El Ministerio de Energía impulsó la anulación de un convenio que reactivó Julio De Vido poco antes de marcharse del Ministerio del Planificación y que conllevaba destinar al menos $ 1000 millones del Estado nacional a una obra en Santa Cruz sospechada de arrastrar un sobrecosto general de al menos 100 por ciento, según surge de documentos oficiales y privados y de testimonios que recopiló LA NACION durante semanas.
El proyecto cuestionado se centra en la tercera y última etapa del Fideicomiso Sistema de Expansión de Gasoductos de la Provincia de Santa Cruz. Y la cartera que lidera Juan José Aranguren avanzó hacia su anulación durante los últimos días de 2016, cuando le consultó al gobierno de Alicia Kirchner si le interesaba continuar con ese proyecto y, en caso de ser afirmativo, si lo financiaría por su cuenta.
El equipo de Aranguren, sin embargo, ya dio otro paso que refleja su posición sobre el proyecto, cuyas obras están paradas. Requirió a la Oficina Anticorrupción (OA) que evalúe radicar una denuncia penal por presuntos sobreprecios. Para eso se basó en un informe interno del Ministerio que concluyó que el monto evaluado es "como mínimo un 100% mayor" que el correcto.
Las sospechas se concentran en la última etapa del fideicomiso, destinada a conectar a la red la localidad santacruceña de Los Antiguos. Y apuntan contra las anteriores autoridades del Enargas, que convalidaron ese supuesto sobrecosto.
El proyecto quedó bajo sospecha porque la "tercera etapa" se reactivó a pesar de que había sido ya calificada por técnicos oficiales como "no económicamente viable", a lo cual se sumaron las objeciones de una gerente de Nación Fideicomisos, según reconstruyó LA NACION. Pero aun así se destrabó sobre el final del kirchnerismo en el poder.
La obra en manos de la constructora BTU, ante la consulta de LA NACION, rechazó las sospechas por "infundadas". "Esta obra estuvo parada varios años porque Santa Cruz se quedó sin financiamiento y nosotros tuvimos serios problemas económicos; hablan de promover la creación de empleos, pero ahora hacen esto", reclamaron.
El fideicomiso patagónico acumuló años de avances y retrocesos. Tomó forma con el arribo de Néstor Kirchner a la Casa Rosada. Pero en 2005 quedó paralizado, a pesar de los sucesivos anuncios, los reclamos de los vecinos y las huelgas de los operarios de BTU.
Diez años después, con Máximo Kirchner en plena campaña por toda la provincia, volvieron los anuncios. Y en agosto -cuando se llevaron a cabo las PASO-, Planificación y el Enargas dieron el primer paso para resucitar la obra.
Esa resurrección se concretó, no obstante, con aumentos en múltiples rubros, que fueron informados por la línea técnica del área de Energía, según reconstruyó LA NACION. Entre otros, en los valores que fijó el Enargas para comprar cañerías (US$ 3600 por tonelada cuando Santa Cruz quería comprar a US$ 1000 y Tenaris vendió las tuberías para un gasoducto en Córdoba a US$ 1500 la tonelada).
Tanto la topografía como el clima en Santa Cruz son muy diferentes de Córdoba. Pero los valores acordados para la obra quedaron muy por encima de los trazados para las anteriores etapas del mismo fideicomiso. Así, los valores de la tercera etapa resultaron seis veces más altos que los fijados para la segunda y diez veces más caros que los registrados durante la primera etapa.
Esa disparidad queda expuesta al revisar cada rubro. Por ejemplo, el de los costos salariales. Se fijó que cada chofer cobraría unos US$ 25.200 por mes, más viáticos y alojamientos. ¿Un ayudante de la Uocra? Algo menos: US$ 18.700 más viáticos y alojamientos. ¿Y un director de obra? US$ 43.100 por mes, más viáticos (US$ 1700) y alojamiento (US$ 2000 al mes). ¿Total? Casi US$ 47,000 al mes. Es decir, unos $ 725.000 cada 30 días al cambio vigente, lo que equivale a algo más de cuatro veces el salario bruto del presidente de la Nación.
Hay más datos llamativos. El Enargas dispuso valores para el "sistema de comunicaciones" que quintuplican la alternativa técnica más cara del mercado: US$ 32 millones, incluido IVA. ¿Y el rubro "campamentos"? Se aprobaron otros US$ 29,8 millones.
Los posibles sobrecostos abarcan más rubros. Así, el Enargas aprobó destinar casi US$ 15.000 por mes a cada "carpa" para soldar las tuberías. Un total de US$ 1,2 millones para desplegar ocho carpas de lona durante ocho meses.
La orden de Planificación de destrabar la obra a fines del año pasado y girar los fondos a Santa Cruz se canalizó a través de Nación Fideicomisos, es decir, la misma empresa del Grupo Banco Nación que albergó el fideicomiso bilateral con Venezuela que controló De Vido durante la última década.
El último paso se concretó el 16 de diciembre pasado. Es decir, seis días después de que Macri asumió como presidente. Pero para entonces Nación Fideicomisos (NF) actuó como si continuara la gestión anterior, con los mismos responsables. Y tres días después, el 19, sin que mediara una orden de aviso previo, se libró la orden por $ 1000 millones a BTU. La impartió un director saliente, el ingeniero Roberto Mandolesi, a pesar de las objeciones de una gerente que se negó a firmar los instrumentos o pagar.
Las claves de la operación
Julio De Vido - Ex ministro de planificación - Una decisión clave - Antes de dejar su cargo, el ex ministro kirchnerista reactivó el proyecto que se encontraba paralizado desde hacía años. Pero el Ministerio de Energía sospecha que lo hizo con un 100% de sobrecosto
Carlos Mundin - Titular la firma BTU - Acusación "infundada": Desde la empresa rechazaron las sospechas por "infundadas". "Esta obra estuvo parada varios años porque Santa Cruz se quedó sin financiamiento y nosotros tuvimos serios problemas económicos". El fideicomiso tomó forma cuando Néstor Kirchner asumió como presidente, para quedar luego paralizado en 2005
Diez años después, y con Máximo Kirchner en plena campaña para ganar una banca de diputado, volvieron los anuncios. Y en agosto de 2015, Planificación y el Enargas dieron el primer paso para reactivarlo. Se terminó de impulsar en plena transición con el gobierno de Mauricio Macri
La línea técnica del Ministerio de Energía detectó aumentos en múltiples rubros; entre ellos, los valores de las cañerías, los costos salariales, las comunicaciones, las carpas para soldar