Rusia capturó un Tomahawk estadounidense sin explotar utilizado en Siria, y planea usarlo contra Estados Unidos

Por Michael Peck - The National Interest - Traducción Desarrollo y Defensa
Houston, tenemos un problema.

Punto clave: el Tomahawk sigue siendo un misil de crucero subsónico de la Guerra Fría que parece un dinosaurio en comparación con las armas supersónicas e hipersónicas que se están desarrollando hoy en día.

Aquí hay un consejo: si no quieres que el enemigo capture tus armas, entonces no las uses.
Pero si tienes miedo de usarlos porque podrían ser capturados, entonces ¿de qué sirven?

Rusia se jacta de haber recuperado los misiles de crucero Tomahawk de Estados Unidos que se lanzaron en Siria pero que no explotaron. Las autoridades rusas han prometido que examinar dos Tomahawks sin explotar, rescatados por los sirios y entregados a Moscú, permitiría que Rusia desarrolle nuevos equipos de interferencia. “Teniendo este misil en la mano, podemos entender claramente qué canales de comunicación, información y control, navegación y alcance tiene...Y conociendo todos estos parámetros, podremos contrarrestar de manera más efectiva estos misiles de crucero en todas las etapas de su despliegue de combate ", dijo Vladimir Mikheev, asesor del primer subdirector general del grupo electrónico KRET de propiedad estatal de Rusia.

Otros expertos rusos dijeron que los Tomahawks revelarían los secretos de los últimos sistemas de navegación de misiles (uno lo llamó "un libro de texto sobre ciencia de materiales, un libro de texto sobre tecnologías que caen del cielo"). Hay un video de Rusia aquí , supuestamente de escombros Tomahawk, aunque es difícil ser claro lo que estamos siendo mostrada o donde se encontró entre los escombros.

Quizás Rusia necesite alardear de algo: no está claro cuántos misiles derribaron sus defensas aéreas (Rusia reclama muchos mientras que el Pentágono afirma ninguno), y aparte de derribar un F-16, los misiles de defensa aérea de fabricación rusa de Siria han demostrado ser ineficaces contra repetidos ataques aéreos israelíes.

Pero supongamos que Rusia de hecho recuperó algunos misiles Tomahawk. De los cincuenta y nueve misiles lanzados en Siria en abril, es posible que uno o dos no hayan explotado y hayan sido recuperados. Las armas altamente explosivas a menudo no explotan: el 30 por ciento de los proyectiles de artillería aliados disparados durante la Primera Guerra Mundial en la Batalla del Somme podrían haber sido fracasos, mientras que las bombas de racimo modernas tienen una tasa de fracasos tan altos como el 20 por ciento.

La última versión del Bloque IV del Tomahawk no es el Tomahawk de 1980 de Ronald Reagan o la Operación Tormenta del Desierto. El Block IV es casi un avión no tripulado, capaz de merodear sobre un objetivo mientras envía imágenes a los controladores de tierra antes de que se le ordene sumergirse en un objetivo. También es capaz de redirigirse durante el vuelo a uno de los quince objetivos planificados previamente o a un conjunto de coordenadas GPS. Durante treinta y cinco años, el sistema de navegación y la ojiva naturalmente se habrán actualizado.

Pero todavía es un misil de crucero subsónico de la Guerra Fría que parece un dinosaurio en comparación con las armas supersónicas e hipersónicas que se están desarrollando hoy en día. Si Rusia, que coloca una impresionante variedad de misiles tácticos, necesita aprender del Tomahawk, entonces Moscú tiene problemas (y los Tomahawks se han utilizado durante décadas; es difícil creer que Rusia nunca haya tenido uno hasta ahora).

Si solo se trata de bloquear el Tomahawk, entonces Estados Unidos modificará los sistemas del misil para compensar ese bloqueo. Es el viejo juego de ajedrez de la guerra electrónica. Cada vez que los nuevos sistemas de radar y comunicación se vuelven vulnerables a interferencias, se actualizan con equipos nuevos o anti-interferencias. El juego continúa.

Como Spock le dijo una vez a los romulanos , "los secretos militares son los más fugaces de todos".