El sol no es sólo una fuente de luz que hace posible el día o ese elemento fundamental que cada verano nos permite lucir bronceados en la playa o la piscina. Lo sabemos, pero parece que pasarán muchos años para que logremos entenderlo e incorporarlo a nuestra vida cotidiana. El sol es una poderosa fuente de energía que, correctamente utilizada, nos permite reducir el consumo de energía eléctrica que tanto daño provoca al medioambiente.
Afortunadamente, hay muchos que trabajan en el desarrollo de artefactos alimentados a energía solar que demuestran ser de gran utilidad. Es el caso del llamado VEIL, una creación realizada por la prestigiosa firma de diseño australiana Büro North, por encargo del Victorian Eco Innovation Lab (de ahí las siglas VEIL), una organización pública dedicada a promover la sostenibilidad en el estado australiano de Victoria.
Como podéis observar en la fotografía se trata de un objeto de aspecto futurista que, como muchos han señalado atinadamente, parece emular la forma de una cobra. Pues se trata de una especie de sombrillas solares que, paradójicamente cumple la función de, por un lado, evitar la incidencia del sol, y por otro alimentarse de ella.
Estos grandes paneles solares, gracias a sus células fotovoltaicas, permiten almacenar energía solar que luego puede ser aprovechada para otros fines, tales como servir al funcionamiento de otros aparatos. Y además, debido a su particular morfología, aportan la sombra necesaria para repararse del sol en horarios poco adecuados para la exposición. La idea es colocar los VEIL en el patio de los colegios (como se ve en la fotografía) para que los niños aprendan a orientar los artefactos a fin de aprovechar al máximo la energía solar.
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