La compañía del Grupo Scalise ganó una licitación para producir modelos Mondial, que cubrirán la demanda de organismos públicos y de agencias de turismo que operan en la isla. También proyecta exportar al resto de los mercados de la región.
Las motos Mondial recorrerán las calles de La Habana, Varadero y Cayo Largo a partir de este verano luego de que la empresa argentina que las fabrica ponga en marcha una nueva planta de producción de ciclomotores en Cuba.
Se trata de Juki S.A, propiedad de Arturo Scalise, que ganó una licitación organizada por el gobierno de Fidel Castro para abastecer de ciclomotores a organismos públicos y agencias de turismo que operan en la isla caribeña.
En la Argentina, también tiene a cargo la importación de motos Kawasaki y los autos Mitsubishi y desde hace dos años está en concurso preventivo, aunque sus ejecutivos descuentan que en los próximos meses levantarán el proceso judicial.
El contrato que se adjudicó en Cuba le permite a Juki suscribir un acuerdo con una sociedad estatal para reabrir una planta ensambladora cerrada desde hace un año, tener a cargo la provisión de piezas y la asistencia tecnológica.
De la licitación, también participaron dos empresas italianas, una china y dos japonesas, entre las que se encontraba Suzuki. La propuesta de Juki contempla integrar a los modelos piezas fabricadas en Cuba.
Si bien inicialmente se habla de un sistema de producción cooperada, todo indica que participará de una empresa mixta. Su socio cubano es Rodar Motociclos, única autorizada a ensamblar motocicletas en la isla y que depende del Ministerio Sidrometalúrgico.
En noviembre pasado, la sociedad ensambló las primeras 350 unidades Mondial LD 110 y, por un compromiso establecido en el pliego de licitación producirá otras tres motos que hereda de su partner cubano: la Jawa 350 y dos modelos Suzuki, muy populares entre la población.
El programa de negocios de Juki y Rodar Motociclos establece, además, un nivel de montaje de 250 unidades mensuales que se destinarán para consumo interno de organismos estatales y compañías turísticas cubanas.
También se contempla una estrategia exportadora de motos Mondial al resto de los países del Caribe y la comercialización al público de todas las motos que la empresa mixta desarrolle.
En lo que respecta al mercado local, la empresa atravesó por una seria crisis financiera producto de la drástica caída en las ventas del sector que, de un parque de 350 mil motos de 1993, cayó a 50 mil unidades en el 2002.
De todos modos, en la industria esperan un leve repunte para este año cuando las ventas de motos alcanzarán las 70 mil unidades.
En el caso de Juki, buscan impulsar un mayor crecimiento a partir de la fabricación de los cuatriciclos de 125 cm3 que produce en su planta de Ramos Mejía. Sostienen que se trata de un vehículo que tiene gran potencial de crecimiento en el país, en especial para ser utilizado por sectores relacionados con el entretenimiento y como vehículo de trabajo.
Fuente: Andrés Sanguinetti (Infobae.com)