viernes, 12 de julio de 2013

Plan de Manejo del Delta del Tigre

Por Elena Peralta - especial para ARQ - Clarin.com
El proyecto urbano que se desarrollará en la zona norte de la Provincia de Buenos Aires busca compatibilizar las actividades recreativas, productivas y deportivas con un ambiente frágil y único.
La Primera Sección del Delta del Paraná, en el Partido de Tigre, crece sin cesar. Por eso, el Municipio encargó un plan que regule su desarrollo. El proyecto incluye un complejo diagnóstico urbano ambiental, una serie de audiencias públicas y la discusión de leyes específicas. “Este territorio tienen una dinámica muy delicada que requiere de normas claras y de una mirada sostenida que contemple su evolución y el de la gente que vive en él. Por eso hablamos de plan de manejo y no de un código urbano”, explica la arquitecta Silvia Fajre, coordinadora general del Plan. Su estudio fue convocado por la Municipalidad de Tigre, a través de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), para elaborar el Plan de Manejo del Delta.

Hace dos años, un equipo de urbanistas, biólogos, ecologistas, sanitaristas, economistas y abogados comenzó a relevar los 220 km2 del Delta de Tigre. El diagnóstico fue preocupante: los tres ambientes naturales de las islas (praderas de herbáceas altas, bosques nativos y albardones) se encuentran en avanzada degradación. Los especialistas detectaron 10 ambientes modificados. Varios altamente agresivos, como forestación con especies exóticas invasivas; islas y playas artificiales; movimientos de tierra de hasta 8 metros de altura y viviendas construidas sobre los albardones que interrumpen los ciclos de inundación de las islas.

Además, determinaron un área de altísimo nivel de fragilidad. “Se trata del frente de avance de islas hacia el río de La Plata, la parte más nueva del Delta. Es un conjunto de islas que aparecieron hace menos de 120 años que deben ser prioritarias en el esquema de conservación”, explica Fajre.

“El Delta es uno de los pocos ecosistemas de agua dulce en el mundo. Protegerlo tiene una importancia estratégica, si pensamos el valor que tendrá el agua en el futuro y si vemos como España o México (que rellenaron sus deltas) están gastando fortunas en recuperarlos”, explica el arquitecto Alvaro Arrese, coordinador técnico del Plan. El sistema de cuencas se comporta con ciclos parecidos a las mareas oceánicas, lo que determina las inundaciones. “La visión predominante es que las inundaciones son malas, pero forman parte de un ciclo que no hay que interrumpir, porque sin ellas el Delta no se podría seguir reproduciendo. Todo eso sin olvidar que debe continuar siendo un territorio habitado”, asegura Fajre.


Actividades predominantes fuera de las Islas del Tigre

1 Forestación y ganadería

2 Forestación extensiva

3 Forestación moderada

4 Forestación

5 Área inactiva

6 Reactivación productiva y quintas

7 Delta de las Islas del Tigre

El estudio detectó 800 mil m2 de construcciones no declaradas y más de 16 mil parcelas fuera de norma. “La codificación indica que el Delta es zona rural, lo que determina que no debe haber parcelas menores a una hectárea. Subdividir más los terrenos generaría una densidad no compatible con la conservación”, explica Arrese. La mayoría de los terrenos de menos de 1 hectárea, muchos vacíos, están dentro de emprendimientos residenciales cerrados. El desafío de compatibilizar el uso residencial con el medio natural requiere un equilibrio entre tipologías, infraestructura, redes de transporte, usos del suelo y actividades productivas. Entre “las buenas prácticas” recomendadas por el plan está: usar materiales autóctonos (como la madera) respetar retiros de la costa y limitar las defensas reglamentando su tamaño y prohibiendo el hormigón.
Consolidación de las zonas

1 Zona productiva mixta

2 Ribera del Río Paraná

3 Zona consolidada

4 Zona aluvional reciente, amortiguación

5 Zona aluvional reciente, reserva

6 Ribera del Río Luján

La búsqueda de una tipología isleña debe mirar la tradición del propio Delta. “Está de moda copiar tipologías del continente, cuando las residencias tradicionales de las islas, con estructuras de madera montadas sobre pilotes, ha demostrado ser mucho más sabia”, asegura Fajre. Y rescatar los aciertos del pasado no significa vivir mal. “Hay una cantidad de soluciones que pueden representar un gran ahorro a futuro, como paneles solares y sistemas de deposición sanitaria sustentable”, agrega la arquitecta. Los especialistas también recomiendan el fomento la reforestación con especies no agresivas y el incentivo a actividades sustentables, como la cestería. “La política productiva es importante para cumplir otro objetivo del Plan de Manejo: detener la migración de los habitantes del Delta”, agrega Arrese. El Delta ocupa el 60% de la superficie del partido de Tigre y viene perdiendo población permanente año tras año. En cambio, los residentes de fin de semana aumentan.

Referencia de las tipologías de urbanizaciones dominantes

El fenómeno tiene que ver con la pérdida de actividades productivas, la falta de infraestructura para los que la necesitan y no la pueden pagar y una alta presión inmobiliaria que incluye proyectos a gran escala, frenados por una ordenanza cautelar sancionada el año pasado (ver Medida cautelar). “La idea no es interrumpir la explotación turística sino orientarla a actividades no invasivas, como el turismo ecológico y de interpretación”, dice Fajre. El Plan también busca minimizar el impacto de los deportes náuticos y la navegación. “Se han realizado dragados que comprometen el ecosistema”, explica Arrese. Otra premisa es reducir el uso de autos en las islas. La medida cautelar prohibió, entre otras cosas, el plan de un ferry. Una visión incompatible con la supervivencia de un ecosistema en peligro.



Los ecosistemas existentes y su grado de vulnerabilidad a la acción del hombre

1 Área menos vulnerable

2 Zona de vulnerabilidad

3 Ecosistema de alta fragilidad

4 Área de máxima fragillidad

Medida cautelar

El diagnóstico ambiental y social realizado por el estudio Fajre & Asociados incluyó una serie de recomendaciones que dieron lugar a una ordenanza de protección cautelar sancionada en 2011. La disposición dividió a la Primera Sección del Delta en cinco zonas especificando normas de uso. Además, contiene reglas generales, como prohibir el movimiento de suelos y la construcción de lagunas y playas artificiales. Limita el uso de autos sólo para actividades productivas y de mantenimiento y desestima la construcción de puentes que no sean de uso peatonal y de interés vecinal.

Plan de manejo del Delta del Tigre

Coordinación General: Arqta. Silvia Fajre. Coordinador Técnico: Arq. Alvaro Arrese. Asistente de Coordinación: Arqta. Andrea Cerletti. Especialistas - Procesos bióticos: Dr. Fabio Kalesnik y Lic. Ricardo Vicari. Medio ambiente: Arq. Horacio Civelli. Patrimonio y transporte: Arq. Rodolfo Gassó. Saneamiento: Arqta. Elena Guaresti. Leyes y normativas: Dra. Nora Galli. Economía: Lic. Alejandro Daniel Aisen. Participación: Lic. Ricardo Stern.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...