Por Matías Longoni - Diario Clarin
Las luces de alarma en torno al ingenio La Esperanza, el segundo más grande de Jujuy detrás de Ledesma, se encendieron meses atrás, cuando la empresa Benito Roggio, que había arrendado la planta un par de años antes, tomó la decisión de irse en medio de una escalada de conflictividad sindical.
El gobernador Eduardo Fellner pidió socorro a Buenos Aires para asegurar la paz social y evitar el ingreso de las huestes de Milagro Sala sobre la localidad de San Pedro, vecina al ingenio. Según pudo saber Clarín, Cristina Kirchner primero encomendó la tarea a la ministra de Industria Débora Giorgi, pero ante la falta de resultados luego se hizo cargo su par de Agricultura, Norberto Yauhar. El ministro no solo regó de subsidios a la empresa (le asignó unos $ 40 millones) sino que delegó al titular del PROSAP, el tucumano Jorge Neme, la búsqueda de nuevos inversores.
Así se acercó el nuevo grupo, tentado no solo por las posibilidades del negocio azucarero sino, en especial, por la potencialidad agrícola y ganadera de las 70.000 hectáreas que rodean el ingenio, de las cuales solamente un 10% están sembradas con caña. Ayer, el flamante consorcio confirmó que implementará un plan de emergencia para iniciar la nueva zafra el 18 de junio, y evitar así una parálisis de la actividad tras el final del arrendamiento por Roggio. A la cabeza de la sociedad gerenciadora estará Jaime Trejo, un experto en la industria que cuenta con aval de los sindicatos que agrupan a 1.700 trabajadores de La Esperanza. Pero Neme puso el gerente general, el ingeniero Carlos González Gehbard, del PROSAP.
La auditoría incluye un análisis contable, legal, de las instalaciones del ingenio y la negociación de los pasivos de la empresa y la formulación del plan de inversiones.
Una pregunta, ese ingenio no era el que estaba en una reserva ecologica Natural Rezzol???
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