El telescopio más grande del mundo, que tendrá un diámetro de entre 30 y 40 metros -hoy los de mayor tamaño miden entre ocho y diez-, está buscando ubicación y uno de los sitios bajo estudio es el cerro Macón, en Tolar Grande, departamento Los Andes. Los estudios definitorios, que demandarán un año, ya comenzaron e incluyen equipos especiales instalados especialmente en esa zona puneña. Serán controlados por investigadores de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC).
El proyecto internacional E-ELT prevé una inversión de mil millones de dólares y requerirá un espacio similar a una cancha de fútbol. Las investigaciones para determinar el mejor lugar de emplazamiento comenzaron en 2000. La lista de sitios preseleccionados incluye Salta, el norte de Chile, Marruecos e Islas Canarias, según explicó a LA NACION el doctor Marc Sarazin, de la Organización Europea para la Investigación Astronómica en el Hemisferio Austral (ESO, por sus siglas en inglés). El telescopio será "cuatro a cinco veces más grande que los que existen en Chile, los Estados Unidos y Hawai, y esperamos que le sirva a la comunidad astronómica internacional para comprender mejor nuestra vida en la Tierra", agregó Sarazin durante su visita al país.
El telescopio será una combinación de cristales ópticos y computadoras que representa un salto tecnológico. Tendrá en cuenta incluso el movimiento terrestre para un encuadre correcto de las imágenes. Para la preselección se tomó en cuenta la calidad del cielo a 4600 metros de altura. Las observaciones se iniciaron hace dos años con ayuda de un telescopio con control robótico instalado en el cerro y operado desde una central de Tolar Grande a cargo de científicos de la UNC, aunque en esta nueva etapa -que durará un año- se instalaron equipos de mayor precisión. Sarazin explicó que todos los sitios preseleccionados se están investigando con los mismos instrumentos: "Vamos a comparar la calidades de cada uno para decidir".
Se estima que el nuevo observatorio podría estar funcionando para 2015. En tanto, un proyecto de ley declararía de interés provincial la instalación del observatorio astronómico para poder otorgar el terreno en comodato durante 99 años e iniciar trabajos de infraestructura vial, ferroviaria y de comunicaciones, así como gestionar facilitaciones aduaneras para permitir el ingreso del equipamiento y permitir una fluida vinculación con los observatorios chilenos.
Como paso previo, los investigadores se reunieron con los coyas de esa zona puneña, y su cacique acompañó el diseño de un camino de 12 kilómetros hasta donde se instalaron los equipos para realizar las observaciones sin atravesar ningún sitio ritual de esas comunidades originarias, informaron las autoridades de Tolar Grande. Se aclaró además que el observatorio no se instalaría en la cumbre del Macón, que es un santuario de altura de 5400 metros por el que peregrinan los pobladores para honrar a la Pachamama, sino más abajo. Precisamente en Tolar Grande está el volcán Llullaillaco, en cuya cumbre una expedición de la National Geographic Society encontró los cuerpos de tres niños sacrificados en un rito incaico 500 años atrás en perfecto estado de conservación.
Fuente: Carlos Pastrana (Diario La Nación)