sábado, 26 de abril de 2008

Exportación de infusiones: El Té y la Yerba Mate

Las exportaciones argentinas de yerba mate y té alcanzaron a las 18.706 toneladas, por US$ 14,3 millones, durante el primer trimestre del año, según informó el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).

Las ventas al exterior del sector mostraron un incremento del 16% en volumen y del 21% en divisas, respecto de las 16.106 toneladas por US$ 11,7 millones registradas durante el mismo período de 2007. El principal producto exportado en el período volvió a ser la yerba mate, con el envío de 10.140 toneladas por US$ 8,8 millones, siempre con Siria como principal destino, por US$ 4,9 millones. Por su parte, las exportaciones de té sumaron 8566 toneladas por US$ 5,5 millones, de las cuales Chile recibió 4179 toneladas por US$ 2,2 millones.

1. Yerba Mate.
La yerba mate, hierba mate o simplemente yerba (Ilex paraguayensis, en guaraní ka'a) es una planta arbustiva o arbórea originaria de Sudamérica, de cuyas hojas secas y molidas se prepara el mate, una infusión estimulante común en la gastronomía de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay. El nombre mate deriva por metonimia de la palabra quechua mati que es el nombre dado a la calabacilla que tradicionalmente sirve de recipiente a la infusión. La yerba fue consumida desde tiempo inmemorial por los pueblos guaraníes y guaycurúes, que recogían las hojas de caá en la selva, donde crecía en forma silvestre. Inicialmente las mascaban, luego las prepararon en infusión.

La yerba mate es endémica de las cuencas del Paraná, Paraguay y Uruguay, donde crece en estado silvestre, sobre todo formando parte del sotobosque o del estrato mediano de los montes. Se cultiva además comercialmente en Argentina, Brasil y Paraguay desde el siglo XIX, dando lugar a una importante industria.

I. paraguayensis es un árbol perennifolio, de hasta 15 m de altura en estado salvaje. Tiene un fuste recto y cilíndrico, de hasta 3 dm de diámetro, recubierto de una fina corteza pardogrisácea acanalada. Las ramas brotan del árbol en ángulo recto, dando lugar a una copa apicada. La raíz es pivotante. Las hojas son alternas, obovadas, con el margen dentado y el ápice obtuso, de unos 11 cm de largo y 5 de ancho, coriáceas; no presentan nunca pelos ni estomas por el haz, de color verde oscuro, y estomas pequeños en el envés. Las nervaduras primarias y secundarias son de color amarillento y muy marcadas. Perduran unos tres años en la planta.

Entre octubre y noviembre, la época de floración, produce inflorescencias en forma de haces corimboides de 40 a 50 floros, que se desarrollan axilarmente. Es dioico; los ejemplares masculinos presentan dicasios de entre 3 y 11 flores, mientras que en los femeninos aparecen solitarias o en grupos de tres a lo sumo. Las flores son simples, pequeñas, polígamas, de color blancuzco; el cáliz y la corola suelen ser tetrámeros o excepcionalmente pentámeros. Enre los pétalos presenta igual número de estambres.

La polinización es entomófila, siendo tanto abejas como dípteros los vehículos de la fecundación. Entre los meses de enero y marzo madura el fruto, una núcula indehiscente de unos siete mm de diámetro, de color violáceo, rojizo o negruzco cuando madura, con un estigma poco prominente. Contiene 4 a 8 propágulos rugosos, de color amarillo. La diseminación se produce por lo general endozoicamente, siendo aves sus principales vectores.

La yerba requiere temperaturas tropicales o subtropicales y una elevada humedad ambiente, así como frecuentes precipitaciones, en el orden de los 1.500 mm anuales, especialmente durante la floración. La temperatura óptima se ubica en torno a los 20º de media, aunque soporta bien las heladas. Es muy tolerante a la sombra. Prefiere sitios bajos, con buen drenaje y posibilidad de radicar en profundidad. El suelo debe ser ligeramente ácido, arenoso o arcilloso, de textura fina o media. Tiene altos requerimientos de ácido fosfórico y potasio.

Tradicionalmente, la yerba se cultivaba de manera simplemente extractiva, aprovechando los ejemplares silvestres del sotobosque. Los intentos iniciales de domesticar su cultivo se toparon con dificultades en la germinación, lo que llevó a los sacerdotes de las reducciones jesuíticas, los primeros que emprendieron el intento, a fomentar el replante en zona selvática y la poda como medios de incrementar la producción.

Para el cultivo organizado, las semillas se cosechan entre febrero y abril; deben plantarse de inmediato o almacenarse con sumo cuidado, para evitar que el endurecimiento de las mismas las haga inviables. A bajas temperaturas pueden almacenarse hasta un año, aunque su capacidad de germinar se reduce abruptamente. En muchas semillas externamente maduras el embrión es aún rudimentario, lo que provoca larguísimos períodos de germinación en algunos casos. Sin embargo, la reproducción sexual sigue siendo la forma más frecuente de cultivo.

Normalmente las semillas obtenidas de frutos maduros se quiebran y remojan una vez cosechadas; después de dejarlas secar, se siembran menos de 30 días después de su cosecha. Con riego abundante y temperatura favorable, la germinación tiene lugar al cabo de uno o dos meses. Se trasplantan al cabo de un año a su ubicación definitiva, insumiendo otro año más su arraigo.

Las plantaciones organizadas comenzaron a ponerse en práctica en Argentina hacia 1915, empleando una disposición en cuadrilátero o tresbolillo. Hacia la misma fecha se desarrollaron mejoras en técnica de poda, entre ellas el llamado corte mesa, una poda horizontal adecuada a la cosecha mecánica, que mejora además el rendimiento de la planta. En 1953 se impuso una modificación a la técnica de plantado, ubicando los renovales en curvas de nivel e incrementando la densidad por hectárea. El uso de leguminosas como cultivo de acompañamiento mejora también el rendimiento del suelo.

Hay tres formas básicas de consumir la yerba mate, que reciben distintos nombres:
-La forma más común es el mate, una infusión que se prepara en un recipiente (también denominado “mate”) o —si el recipiente es de boca ancha se le llama “porongo”— en donde se vierte agua entre 75 y 82 grados de temperatura, que se succiona por intermedio de una bombilla.
-El tereré es similar al mate, pero se lo prepara con agua helada, en épocas de calor agobiante. Se le suele agregar al agua helada limón, pomelo o naranja, tanto el jugo y la pulpa como la cáscara del fruto.
-El mate cocido es un decocto. Para prepararlo primero se hierve la yerba mate en agua, y posteriormente se cuela y se sirve en una taza. Cabe destacar que esta forma "tradicional" de preparar el mate cocido, ha sido en gran parte desplazada por el mate cocido en bolsitas, iguales a las del té común.

Según el Código Alimentario Argentino (CAA) se conoce con la denominación de yerba mate o yerba exclusivamente al producto formado por las hojas desecadas, ligeramente tostadas y desmenuzadas, de Ilex paraguayensis, mezcladas o no con fragmentos de ramas secas jóvenes, pecíolos y pedúnculos florales, sin perjuicio de autorizar la inclusión de otras especies de igual género tan pronto como se disponga de estudios que avalen su inocuidad y sean aprobados por la Autoridad Sanitaria Nacional.
También se consideran otras denominaciones:
-Yerba mate canchada: es la yerba zapecada, secada y triturada de manera gruesa.
-Yerba mate elaborada: es la yerba canchada que ha sido sometida a procesos de zarandeo, trituración y molienda, tal que se ajuste a las siguientes clasificaciones:
Yerba mate elaborada con palo: es la yerba que contiene no menos del 65 % de hojas desecadas, rotas o pulverizadas y no más del 35% de palo grosera y finamente triturada, astillas y fibras del mismo. Con el fin de determinar la cantidad total de palo, se utilizarán los tamices de abertura de 1 x 20 mm y n.° 40 (cuarenta mallas por pulgada). La fracción retenida sobre el tamiz de 1 x 20 mm será considerada palo y no deberá ser inferior al 12,5% en peso de la muestra analizada. La fracción que pasa por el tamiz n.° 40 será considerada hoja. Con una alícuota de la fracción retenida en el tamiz N° 40 proveniente de sucesivos cuarteos, se procederá a extraer con pinza las astillas y cáscaras de palo presentes con lo que se cuantificará la cantidad de palo en dicha fracción. Este porcentaje, más el retenido en el tamiz de 1 x 20 mm conformará el porcentaje total de palo de la muestra analizada. El cien por ciento de la muestra analizada deberá pasar por un tamiz cuya abertura sea de 5 x 70 mm.
-Yerba mate elaborada despalada (o despalillada): es la yerba que contiene no menos del 90% de hojas desecadas, rotas o pulverizadas y no más del 10% de palo grosera o finamente triturado, astillas y fibras del mismo.
-Caaminí ( kaá: hierba; miní: pequeño/a ): Es la variedad de yerba mate caracterizada por estar muy finamente molida ( de allí "miní" por estar las hojas reducidas a fragementos diminutos ) y prácticamente desprovista de palo.
-Yerba mate tostada: es la yerba mate elaborada sometida posteriormente a un proceso de tostación.
-Yerba soluble, mate instantáneo, extracto de mate en polvo, o concentrado de mate: es el producto en polvo resultante de la deshidratación de los extractos acuosos obtenidos exclusivamente de la yerba mate.
El abuso de la Yerba Mate en cualquiera de sus formas es causa frecuente de disrupción hormonal (sobre todo en mujeres), alteración cardiovascular (taquicardia, arritmias), alteración nerviosa (insomnio, excitación y hasta delirio) y digestiva (gastritis crónica, esofagitis, duodenitis, reflujo gastroesofágico, "colitis" crónica, etc.).
2. El Té.
El té es una infusión de las hojas y brotes de la planta del te (Camellia sinensis). La planta del té es un arbusto. El te es la infusión preparada con sus hojas secas molidas o brotes del arbusto Camellia sinensis o Camellia viridis en agua caliente, que se usa como bebida, en usos de estimulante, estomacal y alimentario. El té puede también contener otras hierbas, especias o frutas usadas como saborizantes.

Como arbusto tiene muchas ramificaciones, de entre 1 y 2 metros de altura, puede alcanzar incluso los 12 metros, aunque muy raramente. Las hojas son siempre verdes, lanceoladas hacia adelante e incluso del revés u oblongoovadas, de unos 4 cm de ancho y entre 3 y 12 cm de largo, sobre las que destaca una fuerte nerviación. Las flores están en grupos de 2 ó 3 o bien aisladas, de color blanco, inclinadas hacia abajo, y aromáticas. Las flores de Camellia japonica son erguidas.

El arbusto ha crecido silvestre a lo largo de la historia, en Extremo Oriente, aunque hoy día se cultiva en muchos lugares aparte, si se hace sobre terreno poco fértil, suele ser sobre una terraza. Se suele descogollar el centro y se poda para que no supere los 2 metros de altura, facilitando así la labor de recolección. A partir del tercer año, las hojas pueden cosecharse con rendimiento. Cabe aclarar que sólo se puede llamar té a aquellas preparaciones que hayan sido elaboradas con "Camellia sinensis" o con "Camellia viridis"; incluyéndose aquí mezclas perfumadas, como lo son la de bergamota y la de menta, que llevan como base la planta del té. Aquellas que son preparadas con flores o frutos deberán llamarse infusiones y no tés.
El té proviene principalmente de la China continental, India, Sri Lanka, Taiwán, Japón, Nepal, Australia y Kenia.

Los cuatro tipos principales de té se distinguen según su procesamiento. Camellia sinensis es un arbusto, cuyas hojas, si no son secadas apenas se recolectan, comienzan a oxidarse. Para prevenir este proceso de oxidación se calientan las hojas con el objetivo de quitar su humedad:
-Té blanco - hojas jóvenes (brotes nuevos del arbusto) que no se han oxidado; los brotes pueden haber sido protegidos del sol para evitar la formación de clorofila.
-Té verde - sin oxidación. Un favorito en Asia, té verde es así denominado porque las hojas se secan y son fragmentadas rápidamente después de ser recogidas. El té hecho de estas hojas es templado y más fresco en el sabor que otros tipos de té. A causa de esto, el té verde generalmente no se sirve con leche ni azúcar. Algunos tipos de té verde son Gunpowder, Sencha, y Gyokuro, un té japonés también conocido como té de rocío de perla.
-Kukicha o Té de invierno - Hojas viejas tostadas sobre fuego. Popular como alimento macrobiótico en Japón.
-Oolong - con un grado de oxidación media. El té del té oolong tiene características de ambos tés negros y verdes. Sus hojas son fermentadas cerca de la mitad del tiempo del empleado en el té negro. Mucha de la producción del mundo del té es de té oolong y proviene de la provincia de Fukien de China, donde se originó. El té de Formosa, denominado para el nombre anterior de Taiwán, es considerado por muchos el té más fino de té oolong.
-Té negro - oxidación sustancial. Realmente un té marrón, rojizo y oscuro cuando se hace, el té negro totalmente condimentado es popular en naciones Occidentales. Es té muy procesado y más fuerte condimentado. Después de que las hojas se escogen, se fermentan en el sol abierto siendo secado antes. El tamaño de las hojas de té determina la graduación de té negro. Las variedades negras comunes del té incluyen Ceilán, Assam, y Darjeeling, considerado por muchos el té negro más fino.
-Pu-erh - Una subclase del té negro de color rojizo, Pu-erh es un producto inusual dado que suelen estacionarse por un período de hasta 50 años. Es considerado un producto medicinal en China. Suele ser llamado Té rojo.
-Chong Cha - literalmente "té gusano", se prepara con las semillas en lugar de las hojas. Usado como producto medicinal en China.

Las hojas de té se procesan para producir el té verde o negro. La fabricación del té negro comienza con el proceso de “desecado” de las hojas, sea en forma natural o con aire caliente. Luego del desecado, hay que pasar el material entre los rodillos para exprimir los jugos y golpearlo para romper las hojas. Después se ciernen y se fermentan para lograr la calidad del producto final. Entonces, hay que secar, graduar y clasificar el té fermentado para empaquetarlo. El té verde se prepara, calentando las hojas, sea en platos calientes o con vapor, las hojas se apisonan con el rodillo, se calientan y se apisonan otra vez, para lograr la calidad deseada.

La producción del té puede causar algunos desechos gaseosos de la operación de desecado. Estas emisiones tienen poca importancia comparadas con las descargas de las calderas a carbón o petróleo que se utilizan para producir el vapor. Los desechos líquidos procedentes de las operaciones de limpieza son, igualmente, de poca importancia.

Las sales minerales en el té son de sodio, potasio, y níquel. También contiene cobre y hierro, silicio, aluminio, magnesio, fósforo y calcio, aunque algunas de ellas pierden su solubilidad con el envejecimiento de las hojas. Otro de los contenidos importantes del té es el flúor, conocido protector de los dientes. El aceite esencial destilado del té es de color amarillo y posee un fuerte olor, que es la causa de los aromas del té. Contiene el té taninos catéquicos y derivados polifenólicos, como los flavonoides kenferol, quercetol y miricetol.

Los componentes más conocidos del té, y los más apreciados por su efecto, son sin duda las bases xánticas, la principal de ellas es la teína o cafeína, pues se trata del mismo alcaloide, también contiene teofilina y teobromina. La presencia de vitaminas en el té es mínima pero constituyen un enriquecimiento de la bebida al contener vitaminas del tipo A, B, C, E y P. Se considera que el té con mayor cantidad de principios activos altamente benéficos para la salud humana es el té verde.

La costumbre de servirse de las hojas de té para conferir un buen sabor al agua hervida se utilizó por primera vez en la China hacia el 2500 a.C. El té entró en contacto con los europeos por primera vez en la India, cuando los portugueses llegan a ella en 1497, ya que en la India el uso del té estaba muy extendido. El primer cargamento de té debió llegar a Ámsterdam (Holanda) hacia 1610, por iniciativa de la Compañía de las Indias Orientales. En Inglaterra, el té negro llega a través de Holanda y de los cafeteros de Londres que lo pusieron de moda hacia 1657.

El consumo de té solo adquirió notoriedad, en Europa, en los años 1720-1730. Empieza entonces un tráfico directo entre China y Europa. Aunque tan sólo una exigua parte de Europa oriental, Holanda e Inglaterra, consumían la nueva bebida. Con el tiempo y con la ayuda de los comerciantes europeos el té llego a todo el mundo, ya sean lugares para su cultivo como lugares para beberlo. Hoy, el tomar té a las cinco de la tarde es una de las características del Reino Unido. Aunque en China se tomaba el té desde mucho antes, actualmente es tomado por más gente que en cualquier otro país del mundo.

Fuente: Diario La Nación y Wikipedia