Por qué los marines aman a sus "destructores" LAV-25

Por Kyle Mizokami - The National Interest - Traducción Desarrollo y Defensa

Un vehículo valiente y útil.

Punto clave:  El LAV-25 ha servido en muchos conflictos y ha demostrado su utilidad.

El LAV-25, el principal vehículo blindado de reconocimiento del Cuerpo de Marines de EE. UU., tiene su origen en un esfuerzo por desarrollar una nueva fuerza de ataque altamente móvil para Oriente Medio. Rápido, ligeramente blindado y armado con una cañón de cadena Bushmaster, el LAV actúa como la caballería de los marines, explorando por delante de otras fuerzas amigas y buscando al enemigo. En los últimos treinta y cinco años, los cerca de 1,000 LAV han servido desde Panamá a Irak, donde se ganó el apodo de "El Destructor".

En 1980, estaba claro que la situación política en el Medio Oriente se estaba deteriorando. Citando la revolución iraní y la invasión soviética de Afganistán, la administración Carter estableció la llamada Fuerza de Despliegue Rápido (RDF). Diseñado para desplegar rápidamente las fuerzas aéreas, marítimas y terrestres de los EE. UU. en todo el mundo en Oriente Medio, el RDF (que más tarde se convirtió en el Comando Central de los EE. UU.) exigió movilidad estratégica y potencia de fuego.

El Ejército y el Cuerpo de Marines de los EE. UU. examinaron una nueva generación de vehículos blindados ligeros que podrían utilizarse para equipar sus contribuciones al RDF, incluido el AAI RDF / LT , o el tanque ligero de la Fuerza de Despliegue Rápido, equipado con el cañón automático ARES de 75 milímetros, buggies armados con misiles TOW y ametralladoras pesadas, y el nuevo LAV M1047. Basado en el vehículo blindado ligero GM Canada, que esta basado en el Mowag Piranha suizo, el M1047 era un vehículo blindado de 8x8 ruedas con una torreta armada con un cañón automático Bushmaster de 25 milímetros y una ametralladora mediana de 7,62 milímetros.

Mientras el ejército declinó adoptar el M1047, el Cuerpo de Marines abrazó el nuevo vehículo. Los marines usarían lo que llamaron el LAV-25 como un vehículo de combate de infantería, una especie de Bradley lite, y dejaron espacio para que seis soldados de infantería se sentaran dentro. Los marines crearon cuatro batallones de vehículos blindados ligeros, uno por división marina.

El LAV fue diseñado para la movilidad táctica y estratégica, dando a los marines la ventaja en la llamada teoría de la guerra de maniobras, una forma de táctica ampliamente adoptada por el Cuerpo de Marines de los EE. UU. en la década de 1980. La teoría de la guerra de maniobras enfatizó la capacidad de superar a las fuerzas enemigas sobre el poder de fuego para ganar batallas y el LAV personificó esa habilidad. El LAV tiene una velocidad en carretera de sesenta y dos millas por hora, lo que le permite viajar rápidamente por las carreteras, gracias a un motor diesel turboalimentado de 275 caballos de fuerza. Era completamente anfibio, y con la fijación de una veleta de ajuste podía hacer seis millas y media por hora en el agua. El vehículo podría ser transportado por aviones de transporte C-5, C-141, C-17 y C-130, e incluso podría ser levantado por un helicóptero CH-53E Sea Stallion.

Además del modelo base LAV-25, los Marines compraron otras seis variantes LAV. El LAV-C2 sirve como puesto de comando móvil y vehículo de comunicaciones para los batallones del LAV. El LAV-C2 elimina la torreta del vehículo y el cañón Bushmaster y, en cambio, tiene una cabina de pasajeros elevada y posiciones para operadores de radio. Otra versión, el LAV-L (Logística) es similar, pero está diseñado con un área de pasajeros vacía para acomodar hasta tres toneladas de equipos paletizados, particularmente municiones. A diferencia del LAV-C2, el LAV-L está armado con una ametralladora de 7,62 milímetros.

El LAV ocupa un punto medio entre la flota de tanques pesados ​​del Cuerpo de Marines y Humvees más ligeros, y como resultado, la flota del LAV necesitaba su propio vehículo de recuperación para recuperar vehículos dañados y discapacitados. El LAV-L tiene una grúa hidráulica para cargas de hasta 6,600 libras y un cabrestante de 30,000 libras para sacar vehículos del barro, zanjas y otras condiciones peligrosas del suelo.

También se adquirieron varias variantes de LAV especialmente armadas. La versión LAV Antitank, o LAV-AT, monta una torreta con dos lanzadores de misiles guiados antitanque TOW de largo alcance, más catorce recargas de misiles más. Esto le dio a los marines, que previamente habían colocado misiles TOW en jeeps M151, un paquete antitanque protegido, más poderoso y con mayor capacidad de supervivencia. El vehículo de mortero LAV-M lleva un mortero de 81 milímetros y su tripulación de tres personas, y la variante de defensa aérea LAV-AD tiene un cañón gatling de cinco cañones y 25 milímetros, un paquete de cuatro misiles Stinger y un pod para cohetes de 70 milímetros. .

El LAV-25 vio combate por primera vez en Panamá en 1989, cuando las provocaciones del gobierno del general Manuel Noriega contra Estados Unidos obligaron al Pentágono a enviar a los marines para reforzar la seguridad. Los LAV también vieron combate en la invasión estadounidense del país en agosto. La movilidad de los LAV le permitió rodar rápidamente por las calles de Panamá e incluso cruzar el Canal en modo anfibio.

En 1990, el batallón LAV de la Primera División de Infantería de Marina se desplegó en Arabia Saudita, donde sirvió en la Operación Escudo del Desierto y Tormenta del Desierto. Los LAV se usaban típicamente en la función de detección, identificando las fuerzas iraquíes por delante del resto de la división, aunque ocasionalmente se usaban en batallas campales cuando los iraquíes atacaban inesperadamente, particularmente en la Batalla de Khafji. Aunque los LAV generalmente enfrentaban tanques iraquíes T-55, T-62 y T-72 más pesados, los vehículos LAV-AT podían manejar los vehículos más pesados, mientras que los armados con cañones Bushmaster de 25 milímetros atacaban vehículos blindados iraquíes ligeramente blindados, vehículos no blindados y personal iraquí en tierra. Los equipos incluso descubrieron que sus proyectiles perforantes de blindaje de 25 milímetros podían penetrar el flanco y la armadura trasera de los tanques T-55.

En 2003, los LAV participaron en la invasión de Iraq. Los LAV habían sido redesignados como batallones de reconocimiento blindados ligeros a mediados de la década de 1990, una descripción más apropiada para las unidades que apenas tenían infantería y exploraron antes que las fuerzas marinas más grandes y pesadas. Las unidades de LAV participaron en la invasión inicial y los esfuerzos posteriores de contrainsurgencia destinados a eliminar a los insurgentes locales, quienes supuestamente los apodaron "Destructores". Su tamaño más pequeño y el uso de pistas en lugar de ruedas los hizo más silenciosos y más capaces de sorprender a las fuerzas enemigas. Los LAV también se desplegaron en Afganistán y formaron parte de la ola inicial de tropas terrestres en 2002. Los LAV acompañaron a los marines en la provincia de Helmand y en otros lugares, proporcionando apoyo contra incendios y control de la infantería.

A mediados de la década de 2000, la flota restante de 893 LAV se sometió a una serie de mejoras para llevar los vehículos a un nuevo estándar A2. El LAV-25A2 incluyó una protección mejorada de la armadura (ametralladoras pesadas de hasta 14.5 milímetros) tanto dentro como fuera del vehículo, suspensión mejorada, un nuevo sistema de extinción de incendios y un nuevo Sistema de visión térmica mejorado para el comandante y el artillero.

La serie de vehículos LAV probablemente continuará en servicio en el futuro previsible. Aunque la nueva generación de vehículos blindados con ruedas, como Terrex de ST Engineering y VBCI de Francia, son más modernos que el LAV de casi treinta años, pocos ofrecen una protección blindada mejor. Como siempre, el enemigo obtiene un voto: el viejo estándar para las amenazas de vehículos enemigos, la máquina pesada de 14.5 milímetros se reemplaza gradualmente por el cañón automático de 30 milímetros que equipa los nuevos vehículos blindados con ruedas Bumerang de Rusia. 

Contrarrestar esa amenaza podría requerir un vehículo completamente nuevo. Si es así, Estados Unidos ya ha obtenido más de lo que vale su dinero de la serie de vehículos LAV.