Rusia y los Emiratos Árabes crearán conjuntamente caza de quinta generación

En caso de que las negociaciones con Rusia tengan éxito, los expertos rusos esperan la aparición en el mercado de un producto muy interesante que podrá venderse libremente. 

Fuente: Sergey Mamontov/RIA Novosti

NIKOLÁI LITOVKIN, RBTH

Rusia y los Emiratos Árabes Unidos construirán un caza ligero de quinta generación sobre la base del modelo de alta maniobrabilidad MiG-29. Este proyecto será el primer desarrollo conjunto entre los dos países en el ámbito de la aviación de cazas.

Según declara el director de la corporación estatal Rostec, Serguéi Chémezov, en una entrevista a Defense News, la producción de la aeronave se llevará a cabo en los Emiratos Árabes Unidos, donde se ha creado un despacho de ingeniería especialmente para esta misión. Próximamente, Rusia transmitirá a la monarquía de Oriente Próximo las tecnologías necesarias para la construcción del caza ligero de quinta generación junto con la licencia. Se prevé que el desarrollo del avión comience en 2018 y su construcción a mediados de la década del 2020.

¿Podría impedirlo EE UU?

Los expertos señalan que la actividad de Rusia y los Emiratos Árabes Unidos va en contra de los intereses de otros países exportadores de armas, en primer lugar EE UU.

“En 1995 se produjo una situación similar cuando los Emiratos mostraron interés por comprar cazas rusos Su-35. En aquel momento, los estadounidenses fueron capaces de presionar a los EAU para que compararan cazas F-16 en condiciones más ventajosas y las negociaciones con Rusia se interrumpieron”, comenta a RBTH el director adjunto del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías, Konstantín Makienko.

Según una fuente anónima del periódico ruso Gazeta.ru en el sector de la industria de aviación, sigue existiendo el riesgo de que se repita esta situación, ya que, a pesar de que Moscú y Abu Dabi están de acuerdo, el contrato todavía no está firmado.

Otros expertos se muestran más optimistas. Según el director del laboratorio internacional de Mecánica y Sistemas Energéticos de la Universidad de Tecnologías de la Información, Pável Bulat, el hecho de que los Emiratos Árabes Unidos hayan escogido a Rusia para desarrollar el caza de forma conjunta es perfectamente lógico.

Además de Rusia, los únicos países que han desarrollado tecnologías para cazas de quinta generación son EE UU y China. Según el experto, Pekín todavía necesita muchos años para trabajar en su nuevo avión antes de sacarlo al mercado. En caso de EE UU es una historia distinta: Washington solo vende su caza de quinta generación a los aliados que han participado en el desarrollo del proyecto desde el inicio.

“Por estas razones, Israel pudo comprar el F-35 estadounidense y Japón no. Debido a ello, los EAU han decidido colaborar con Rusia con la condición de que Moscú despliegue la producción de los cazas de quinta generación en los Emiratos”, añadía Bulat.

En caso de que las negociaciones con Rusia tengan éxito, los expertos rusos esperan la aparición en el mercado de un producto muy interesante que podrá venderse libremente.

Cómo será el caza ligero de quinta generación

“Actualmente, el planeador del MiG-29 es el mejor de la clase de los cazas ligeros. Por esta razón, la cuestión de la apariencia del caza está en parte resuelta. Ahora es necesario desarrollar la cuestión de la visibilidad del futuro aparato para adaptarla a los requisitos de los aviones de la nueva generación y construir un motor que permita alcanzar una velocidad de crucero supersónica en vuelo”, señalaba Bulat.

El experto añade que la velocidad del nuevo avión llegará a Mach 1,6 (unos 2000 km/h) dependiendo del terreno que sobrevuele. “El caza ligero heredará el armamento de otro avión ruso de quinta generación, el T-50. De este modo el avión contará con uno de los cañones más ligeros de su clase, el 9-A1-4071K, que en un solo ataque aéreo puede lanzar 150 proyectiles de 30 mm de calibre”, comenta el analista.

Entre las armas del futuro avión se encuentran también misiles aire-aire y aire-tierra. La aeronave podrá transportar un total de cinco toneladas de proyectiles no guiados de caída libre. El peso al despegue del futuro avión será de entre 15 y 18 toneladas.