martes, 2 de agosto de 2016

Macri pidió a los militares una “participación activa” en el país

Mauricio Macri, ayer, presidiendo por primera vez la Cena de Camaradería de las Fuerzas Armadas. Foto: DYNPor Guido Braslavsky - Clarin.com
En la Cena de Camaradería de las fuerzas armadas, también resaltó su participación en las misiones de paz.


Mauricio Macri, ayer, presidiendo por primera vez la Cena de Camaradería de las Fuerzas Armadas. Foto: DYN

Mauricio Macri convocó anoche a una “participación activa” de las Fuerzas Armadas en la vida del país, y frente a lo que recordó son los tres ejes de su gobierno: pobreza cero, lucha contra el narcotráfico y unir a los argentinos. “En todos ellos necesitamos de las fuerzas armadas”, sostuvo el presidente al hablar por primera vez en la tradicional Cena de Camaradería.

Macri sólo habló seis minutos. No fue el único gesto para diferenciarse de su antecesora, ya que por pedido de Presidencia el acto no se transmitió en vivo. El Presidente resaltó la participación de militares argentinos en misiones de paz, al afirmar que “los cascos azules son un orgullo”, y ejemplificó con la reciente decisión de enviar 75 efectivos para contribuir al proceso de paz en Colombia.

También ratificó la política de normalización salarial, incluido “el reconocimiento a los retirados de las fuerzas, que ha sido muy maltratados”.

En las 24 mesas para diez cubiertos cada una se ubicaron ministros, altos funcionarios y las cúpulas de las fuerzas. Se sirvió solomillo de cerdo laqueado a la miel con papines, y capuccino con maracuyá acaramelado de postre, regado con vino y champán. Fuera de protocolo, el ministro Julio Martínez anunció créditos del IAF por tres mil millones de pesos a una tasa subsidiada, para construir viviendas para el personal militar.

La Cena de Camaradería es el tradicional evento que todos los años reúne a las cúpulas militares con el Presidente. En el salón San Martín del Edificio Libertador, donde la organización rotativa de la cena recayó en esta ocasión en el Ejército, el clima fue distendido y de optimismo, luego del “ninguneo” que los militares consideran haber sufrido en los últimos años de Cristina Kirchner.

Durante los años K, en la cena se anunciaba el incremento salarial a las Fuerzas Armadas. Pero Macri siguió otra lógica: la recomposición fue anunciada hace dos meses; un 31% en tres tramos, como al resto de la administración pública. Pero más importante, el Gobierno anunció entonces el inicio de un proceso de blanqueo salarial y de pago de los juicios a activos y retirados por malas liquidaciones.

De acuerdo con las reuniones del “equipo de política salarial” de las Fuerzas Armadas con el coordinador económico de la jefatura de Gabinete Gustavo Lopetegui, el proceso llevará al menos tres años. “Las medidas salariales están encaminadas, en la liquidación salarial de junio ya se blanqueó un 6% del sueldo que estaba en negro”, dijo anoche a Clarín un jefe militar.

Para acentuar el buen clima, aún está fresca la celebración del Bicentenario de la Independencia, con la vuelta a los desfiles vedados durante el kirchnerismo.

Anoche se sentaron a la mesa por primera vez dos mujeres con rango de general. Una es María Isabel Panza –ex edecana de Cristina Kirchner–. La otra, la contralmirante ingeniera María Inés Uriarte.

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