Por Guadalupe Piñeiro Michel (iProfesional) - Artículos de electro a mitad de precio e indumentaria a un valor muy inferior al de las marcas locales son los dos estímulos que impulsan el "shopping trasandino". iPhones, iPads y TVs, las grandes vedettes. Los centros comerciales estimulan el consumo de los turistas con rebajas.
Cae la venta de electrodomésticos y refuerzan las promociones para reactivar el consumo Los negocios de la recesión: proliferan los polirrubros, las regalerías, hay más pizzerías y menos parrillas
Los cerros de Santiago de Chile, las visitas a los viñedos y a las distintas casas de Pablo Neruda no son los únicos motivos por los cuales los argentinos deciden visitar las tierras comandadas por Michelle Bachelet. A estos atractivos, propios de la nación vecina, se le suma un paseo ineludible de quienes compran un ticket de avión: un recorrido por los distintos shopping. "Son muchos los argentinos que viajan al país trasandino exclusivamente para llevarse electrodomésticos", cuenta a iProfesional Fabián Castillo desde la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Agrega que los productos "estrella" son los iPhones, las iPads y los televisores.
Esta afluencia tuvo un gran salto en 2016: en términos interanuales creció casi un 60%, de acuerdo con datos proporcionados por el Servicio Nacional de Turismo (SENATUR), entidad que promociona las visitas de extranjeros a esa nación.
A principios de año, el arribo de argentinos hizo furor: llegaron diariamente a Santiago unos 16.000 turistas. La explicación a este fenómeno es que allí se encuentran con artículos tecnológicos a mitad de precio respecto a lo que valen en puntos de venta locales. Tal es así que ya se ha vuelto frecuente ver personas que vuelven con una TV o un smartphone. La brecha entre los valores domésticos y los que se abonan en el exterior se agranda cuanto mayor es el precio del artículo.
Por ejemplo, mientras que una TV de 32 pulgadas marca LG en la Argentina cuesta unos $7.000, en el país trasandino hay que desembolsar apenas $4.800.
Un Smart TV de 40 pulgadas Samsung fronteras adentro sale unos $15.500 mientras que cruzando la cordillera se consigue por $6.200. Así las cosas, se han vuelto moneda corriente los "viajes exprés" de tres o cuatro días a Santiago solamente para hacer shopping.
Tal es así que el último fin de semana largo -25 al 27 de marzo- se agotaron los TV de Samsung y los LG de 32 pulgadas en el local de Falabella de Costanera Center, el principal shopping de la capital chilena. "Los argentinos vinieron en Semana Santa y se los llevaron todos", señalan a iProfesional desde la sucursal de la firma.
Ese fin de semana, en el Paso Internacional Cristo Redentor se registraron colas de vehículos que llegaron hasta los 30 kilómetros de extensión. El "finde" largo previo -el del 8 y 9 de febrero- habían sido 2.378 los automóviles que cruzaron hacia el país vecino. A fines de marzo esta cifra se multiplicó y, según Gendarmería chilena, 18.000 personas cruzaron desde Mendoza.
Un Miami sudamericano
La menor distancia respecto de Miami favorece esta afluencia. Un pasaje de avión cuesta tres veces menos y se puede acceder a productos que están casi al mismo precio. Mientras que un ticket a la capital trasandina no llega a los $4.000, un aéreo a la ciudad estadounidense se acerca a los $12.000. "El precio es más bajo y además se llega en dos horas", indica Castillo. Acostumbrados al "boom" de turistas albicelestes en los locales, los vendedores ya calculan los valores de los artículos en pesos argentinos.
Desde el local de Falabella de Costanera Center, uno de los encargados hace en pocos segundos la cuenta sobre cuál es el valor de un LCD. Hay que considerar que los mayores de 18 años que cruzan la frontera en un auto tienen una franquicia de compra sin impuestos de u$s150, mientras que por cada hijo se suman u$s75. Cuando se viaja en avión, esa cifra se duplica. De excederse, deben abonar un gravamen del 50%. Por cierto, esto es algo que los vendedores chilenos también saben de memoria.
Walter Rodríguez, secretario de la Asociación Argentina de Agencias de Viajes y Turismo (AAVyT), señala que "este país se ha consolidado como destino de compras". Agrega que "muchos aprovechan los viajes por trabajo para hacer shopping".
En el siguiente cuadro comparativo se advierte con claridad por qué los centros comerciales chilenos se encuentran repletos de argentinos los fines de semana largos. También, que algunos productos están casi al mismo precio que en Miami:
Pero el cruce de la cordillera no es sólo para ir en busca de equipamiento tecnológico. Chile también se fue convirtiendo en una muy buena opción para "renovar el placard" a precios más accesibles.
De hecho, en las tiendas de Santiago afirman que los argentinos el último año lograron desplazar a los turistas brasileños.
En la capital del país vecino, entre las marcas predilectas figuran, H&M, Forever 21 y Zara.
Por citar un ejemplo, en H&M se puede acceder a un jean por 7.000 pesos chilenos, unos $154 argentinos. Si se hace la comparación con una prenda similar de una marca local como Rapsodia (dado que H&M no está en el país), se observa que aquí cuesta ocho veces más. Es decir, unos $1.300. En Miami, por un modelo de pantalón similar -Skinny High Ankle Jeans- deben desembolsarse poco menos de $150 (u$s10). Es decir, casi el mismo precio que tiene en los locales chilenos.
Si se toma como ejemplo el caso de una camisa de hombre -Oxford- se observa que el valor en tiendas de Miami es exactamente el mismo que en puntos de venta de Santiago: 375 pesos argentinos.
La primera imagen a continuación corresponde a H&M de la capital chilena y la segunda muestra el precio que se maneja en las tiendas de la ciudad estadounidense.
Incentivos al turismo de compras
Así como los argentinos sienten que "hacen negocio" al volver a su país con nuevos artículos tecnológicos conseguidos a un precio inferior, o al llenar sus valijas con ropa traída del otro lado de los Andes, las empresas también aprovechan este interés por cruzar las fronteras. Es el caso de Despegar, que ofrece -entre otros paseos, como visitas culturales o a viñedos- "tour de Compras Outlet" por la capital chilena.
También desde los shopping y tiendas trasandinas generan incentivos para atraer a los argentinos que visitan Santiago para hacer turismo de compras. De hecho, el gigantesco mall de la capital chilena, Costanera Center, ofrece a los extranjeros -con solamente registrarse- una tarjeta de descuentos que se puede utilizar en distintas tiendas adheridas. Otro de los principales shoppings que propone beneficios para los turistas es Parque Arauco. En este caso otorga - por consumos superiores a u$s40- una tarjeta para llamadas internacionales. "Para Chile, el turismo es una actividad clave y por eso busca estimular también las compras", afirma Castillo.
El escenario está dado para que la ecuación sea win-win: los comerciantes chilenos reciben con alegría y rebajas a los argentinos y estos revientan sus plásticos en las tiendas trasandinas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.