jueves, 10 de marzo de 2016

Terminó una reunión clave para el futuro de Aerolíneas

Por Diego Cabot - LA NACION
Hace minutos terminó el encuentro entre el presidente Mauricio Macri, el ministro Guillermo Dietrich y la presidente de la empresa, Isela Costantini


Fueron varios días de espera que sirvieron para echar a correr decenas de rumores sobre el futuro inmediato de Aerolíneas Argentinas. finalmente hoy se concretó. El presidente Mauricio Macri , el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich , y la Gerente General de la compañía aérea, Isela Costantini fueron los protagonistas del encuentro.

"El Presidente escuchó y se interiorizó del plan de negocios de la empresa. Se lo puso al corriente de la operación y de todos los números de Aerolíneas. Se interesó en las pérdidas que dejan algunos vuelos internacionales", dijo una fuente.

Más allá de la expectativa, nada se decidió. Habrá otro encuentro en 15 días para decidir las cuestiones más importantes de lo que será el plan de negocios. Sin embargo hay algunas certezas. Habrá cambios en algunos destinos, modificaciones de flota y no se descarta la apertura de un plan de retiro voluntario para reducir la plantilla de alrededor de 12.800 empleados que tiene la empresa.

En la línea aérea prepararon con cuidado artesanal las principales variables de la firma. Llevaron calculado el número de subsidios que se necesitaría para transcurrir el año sin hacer modificaciones importantes en la operación. Si bien el celo por no dejar trascender cifras fue al extremo, fuentes de la empresa hablan de un mínimo para 2016 de alrededor de 750 millones de dólares.

Allí se cuentan algunas deudas que dejó la administración anterior y que si bien se pagan en este ejercicio quedaron impagas desde 2015. Además, se deben los servicios del boom de pasajes al exterior que se vivió gracias al tipo de cambio a poco más de 9 pesos.

Esos 750 millones de dólares están lejos de lo que se aprobó en el presupuesto de este año y que llega a 350 millones de dólares. La decisión que parece estar tomada es que no habrá delivery de dinero como ocurría en épocas de La Cámpora al frente de la gestión. Aquel sistema de gastar y pedir dinero al Fisco será reemplazado por otro, más a gusto del Ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay. La idea es darle un monto y ajustar la operación a los ingresos del año, contabilizando, claro está, ventas más subsidios.

Macri será el encargado de poner ese número. Una tarea en la que no estará ausente la política. Sucede que hay una directa relación entre esa cifra y la conflictividad gremial: a menor subsidio más ajuste y más protesta sindical. Y obviamente, cuanto mayor es la cantidad de dinero, las otras dos variables se reducen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.