Los aficionados a las máquinas
rodantes encontrarán en el Ejército de Israel un paraíso de vehículos
que saben superar todo terreno. Amit Smat, reportera de Bamahane
(revista del ejército), decidió dejar de lado los estereotipos sobre las
mujeres y probar los mejores fierros del ejército. Una soldado, cuatro
vehículos: la prueba al volante.
Mientras
para algunos soldados la acción comienza con decenas de kilómetros a
pié en condiciones extremas, para otros es apretar el acelerador a
fondo. Cada uno de estos vehículos se usan para distintas misiones, se
enfrenta a distintos obstáculos. Cada uno es un monstruo sobre ruedas,
la fantasía de cualquier aficionado. Veamos algunos de los vehículos de
combate más potentes que tiene el Ejército. Abróchense los cinturones,
arrancamos.
Peso: algunas decenas de toneladas (con el blindaje).
Debut: 1954.
Motor: 405 Hp (casi 7 veces un Ford Ka).
Velocidad máxima: 10 Km/h
Consumo: 960 l. cada 10 hs. de funcionamiento (casi 50 veces más que el promedio de consumo de un Citroën C1)
Accesorios: pala y pico.
Entrenamiento: 2 meses y medio, 30 hs. de manejo.
Lugares: 2, comandante y conductor.
El amenazador D9 me impactó desde un
principio. Por un lado me sentí más pequeña que nunca cuando vi que mi
cabeza no llega ni raspando a la parte superior de la oruga. Pero por
otro lado, apenas subí a la cabina, me olvide rápidamente de mi
sensación de inferioridad. No porque la situación haya cambiado
drásticamente, sino porque no dejé de golpearme la cabeza en la
infinidad de hierros que me rodeaban. Un poco dolida, logré trepar a la
cabina donde me lleve una sorpresa. A pesar de que desde abajo parece
ser muy pequeña, resulta que los asientos son cómodos, hay bastante
lugar para las piernas y hasta tiene aire acondicionado. En la jerga
militar al D9 se lo llama ‘Dubi’ (osito de peluche), pero cuando arranca
de tierno no tiene nada. La potencia con la que la pala levanta la
tierra y el pico trasero mueve las rocas explica por qué es el primero
en ir al frente para despejar caminos, destruir infraestructura enemiga y
despejar campos minados. Incluso, si lo quisiesen, pueden mover una o
dos montañas enteras.
Mayor ventaja: puede
superar cualquier obstáculo, indistintamente de la condición del
terreno, incluso campos minados. Por esta ventaja, en casos de
emergencia, está en la primera línea despejando el camino al resto.
El volante en las manos: “No hay una guerra sin el osito”, explica orgullosa Carmel Bercovitch. instructora de D9. “Es la punta de la lanza en cualquier enfrentamiento o actividad, es una máquina fuerte que hace el trabajo pesado”.
Hummer
Peso: 4.7 toneladas.
Debut: 1996
Motor: 150 Hp (como una lancha promedio)
Velocidad máxima: 100 Km/h
Consumo: varía según el terreno.
Accesorios: Sofisticado sistema de rayos láser que te hacen sentir en una película de ciencia ficción. Estos equipos emulan en 3D los recorridos y combates.
Entrenamiento: 15 semanas, de los tres cursos anuales, uno es exclusivo para mujeres con licencia civil de camiones.
Lugares: 5.
Al parecer el mejor
lugar para romper los estereotipos sobre las mujeres al volante es en la
unidad de conductoras de Hummer en el Centro Nacional de Entrenamientos
Terrestres. Es imposible no mirar con admiración a estas chicas, que no
le temen a ningún terreno y meten la marcha atrás de forma perfecta.
Después de unos minutos me calmé de la potencia femenina que me cegaba y
vi la larga fila de Hummer estacionados en la arena.
El Hummer es uno de los
vehículos más económicos. Por ello se lo ‘disfraza’ de tanques, APC, D9 y
otros vehículos blindados. A pesar de que con los sistemas de simulación
cada Hummer se adapta a las condiciones del vehículo simulado, viajar
tambaleándose de un lado a otro denota que se trata tan solo de un
todo-terreno que solo aparenta ser otro vehículo.
Mayor ventaja: este caballero del terreno puede enfrentarse a barrancas, médanos, bancos de arena y charcos. Además, las condiciones climáticas extremas no le hacen ni cosquillas.
El volante en las manos: “hace algunos años dejaron de enrolar hombres para este puesto”, nos cuenta la Sargento Mika Alkayam, instructora de Hummer. “Simplemente comprendieron que las mujeres manejamos mejor y tenemos mejores relaciones interpersonales”.
Puma
Peso: 50 toneladas.
Debut: 1988
Motor: 900 Hp (más de 7 veces la potencia de un Ford Focus)
Velocidad máxima: 50 Km/h
Consumo: 100 l. por hora.
Entrenamiento: 2 semanas (parte del programa de ingenieros de combate).
Lugares: 8.
Camino al APC (transporte blindado de
personal) me preguntó la instructora que me acompañaba si traje algo
para lustrar mis borceguíes. Al principio pensé que se trataba de una
preocupación maternal y aduladora, pero la tremenda nube de arena que
levantó un Puma que pasó al lado nuestros me lo aclaró todo. Sin duda,
conducir el Puma es la mejor tarea del equipo. No sólo que tiene una
ventilación constantes, sino que también es el único que no terminará el
viaje blanco como una geisha por la arena. A pesar que el conductor
controla el APC, el que ve el camino y lo guía es el comandante que se
para detrás de él y asoma la cabeza. Así que si alguna vez quieren
sentir cómo es manejar con los ojos cerrados los invitamos al Puma.
Mayor ventaja: El capó
trasero conserva el calor del motor. Nos cuentan las soldados que no hay
mejor sensación que dormir en el terreno reposadas sobre un cómodo capó
calentito.
El volante en las manos: “El conductor no puede opinar sobre el camino. Él es más bien el caballo y el comandante el jockey”, nos cuenta Stte. Alon Levin, comandante de los cadetes. “La
sensación adentro del vehículo varía. El conductor viaja muy cómodo,
pero no ve. El comandante y el ametrallador disfrutan el paisaje, pero
van parados y están expuestos. El resto de la tripulación viaja apretada
y se siente como adentro de una lata de atún”.
David
Peso: 3.5 toneladas.
Debut: 2006
Motor: 122 Hp (como un Mazda 3)
Velocidad máxima: 70 Km/h (velocidad legal, en emergencia puede ir mucho más rápido)
Consumo: varía según el terreno.
Accesorios: Sobre el techo hay un lanzador de cohetes ‘Venus’, utilizado para dispersar manifestaciones. Este cañón se activa por control remoto y dispara granadas de humo.
Entrenamiento: 2 semanas, luego otras 50 horas acumuladas con acompañante.
Lugares: 6
Además de ser un
todo-terreno de verde petróleo (el color del uniforme de la Guardia
Fronteriza), el David es mucho más. Está blindado por todos lados y
tiene redes metálicas en las ventanas, sin duda bien protegido. El
chasis es del Land Rover Defender con una caja de cambios manual (5
cambios para los interesados) que permite acelerar rápidamente. Viajar
en el vehículo propiamente dicho, es cómodo, fundamentalmente para los
que viajan adelante.
Mayor ventaja: blindado, ligero y relativamente compacto. Es perfecto como vehículo para enfrentamientos en áreas urbanas. Hasta las ruedas del David están blindadas, así que incluso con las cubiertas pinchadas puede seguir varios kilómetros.
El volante en las manos: “Hace dos años estábamos en una manifestación violenta en Nabi Saleh”, nos cuenta Benny Sitotau, “nos apedrearon por todos lados y hasta nos tiraron una heladera. Pero al David no le hizo nada, nos salvó la vida”.
Fuente: http://www.idfblog.com/spanish/calentando-los-motores-mujeres-y-vehiculos-en-el-ejercito/
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.