jueves, 5 de junio de 2014

Atucha II: Se despertó un gigante

“Se despertó un gigante”Agencia TSS - A las 9:02 de la mañana del martes 3 de junio, en la localidad de Lima –provincia de Buenos Aires–, la tercera central de potencia Atucha II, rebautizada recientemente por el Congreso como Néstor Carlos Kirchner, realizó la primera reacción de fisión.

Inició exitosamente su funcionamiento Atucha II, la tercera central nuclear argentina y la de mayor potencia. Después de más de 30 años, se activó el reactor que producirá 745 MW y abastecerá a más de 3 millones de argentinos. De esta forma, se pone en actividad la usina atómica de mayor potencia del país, capaz de proveer un 5 por ciento del total de energía del sistema interconectado nacional.

“Lo que sucedió hoy fue que se declaró el estado de criticidad del reactor Atucha II. Esto significa que por primera vez se detectó actividad atómica en el interior del núcleo”, cuenta a TSS el ingeniero mecánico, Oscar Beuter, gerente de laComisión Nacional de Energía Atómica (CNEA). Este es el punto de partida de un proceso que espera poder alcanzar en un mes y medio el 15 por ciento de la potencia final. Para agosto se estima que se podrá comercializar un 30 por ciento de la producción total, que se alcanzará en noviembre, cuando la central opere en su máxima capacidad.

“Esto es un verdadero hito, sobre todo considerando que Atucha II es una central que comenzó su construcción a principio de la década del 80 y estuvo muchísimos años parada, con la obra civil casi concluida. Por suerte, el equipamiento que era de origen alemán, de la empresa Siemens, estaba provisto casi en su totalidad. Pero hubo que readecuarlo, repararlo y cambiar toda la instrumentación. Todo eso demandó 6 años hasta hoy, cuando vimos por primer vez en las pantallas que miden el núcleo, cómo prosperaban los neutrones”, comenta orgulloso el responsable de la Gerencia de Coordinación de Proyectos entre CNEA y la empresa Nucleoeléctrica Argentina SA (NASA).


La historia de Atucha II empezó en 1980, cuando durante el gobierno de facto de Rafael Videla se llamó a licitación la tercera central de uranio natural, agua pesada y 700 MW de potencia, que debería entrar en operación en 1987. En 1981, la empresa alemana Kraftwerk Union AG (KWU), subsidiaria de Siemens y adjudicataria de las obras por 1300 millones de dólares, comenzó la construcción.

El gobierno radical heredó el proyecto pero también una deuda externa que hacía imposible costear un programa nuclear que había sido sobredimensionado para la capacidad económica del país. Finalmente, las obras se paralizaron a comienzos de los años noventa, y sólo se pensó en retomarlas con el intento fallido del gobierno de Menem de privatizar las centrales. Sin embargo, hubo que esperar hasta mediados de 2006, cuando el gobierno de Néstor Kirchner relanzó el Plan Nuclear Argentino y dio el impulso definitivo para poder concretar el proyecto.

“Costó muchísimo terminar de construir la central nuclear, sobre todo desde que el constructor, Siemens, se retiró del mercado y nos dejó en manos de los argentinos la finalización del proyecto”, afirma Beuter, quien agrega que del montaje estuvo a cargo la firma NASA, junto a la CNEA, partícipe en lo relativo al reactor y sus circuitos.

“Desde el punto de vista nuclear, este fue un hecho que nos llenó de orgullo, sobre todo por el gran componente argentino que logramos incorporar y la gran participación de la industria argentina. En cuanto a lo energético, esta central aportará un 5 por ciento de la provisión nacional de electricidad. Estamos frente a un gran acontecimiento nuclear, porque estamos hablando de un reactor de una potencia de más de 700 megawatts”, explica Beuter. Y concluye: “Se despertó un gigante”.

Fuente: http://www.unsam.edu.ar/tss/se-desperto-un-gigante/

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.