RevistaNaval.com - El LSV será, con 180 metros de eslora y 26.000 toneladas apc, el buque más grande en la historia de la marina nórdica
Mediante la adquisición de este buque, confirmada el 28 de junio, la armada nórdica pretende dar un salto cualitativo y cuantitativo en sus capacidades de apoyo logístico, en la actualidad soportadas por dos pequeños buques de origen civil, el KNM Tyr, especializado en guerra de minas, y el logístico KNM Valkyrien, de apenas 68 metros de eslora y 3.500 toneladas de desplazamiento.
El futuro LSV tendrá alrededor de 180 metros de eslora y 26 metros de manga, desplazando 26.000 toneladas a plena carga. La entrega está prevista para octubre de 2016, contando con un año de garantía contractual a partir de esa fecha.
El montante económico del acuerdo asciende a 1.320 millones de coronas noruegas, más de 160 millones de euros. La primera licitación de este concurso convocada por NDLO había quedado desierta al sobrepasar todas las propuestas presentadas por astilleros internacionales las limitadas expectativas económicas del programa, que contempla por otra parte compensaciones comerciales (off-sets) para la industria local por parte del contratista.
Propuesta anglocoreana
Este contrato supone un espaldarazo a la alianza entre DSME y la británica BMT, que se reparten la construcción y el diseño e ingeniería del buque. La compañía coreana construirá el LSV noruego en sus instalaciones de Okpo.
El diseño del LSV será una variante de la familia AEGIR que ya se alzó ganador del programa UK MARS (Military Afloat Reach and Sustainability) para la construcción de cuatro buques de apoyo logístico de más de 200 metros de eslora y 37.000 toneladas de desplazamiento apc para la Royal Fleet Auxiliary británica.
Modernización de la Flota
La adquisición del LSV se suma, junto a la construcción de las fragatas de la clase Nansen o los patrulleros del tipo Skjold, a la ambiciosa modernización emprendida por la fuerza naval noruega para dar respuesta a los crecientes compromisos que está adquiriendo a nivel nacional, en la defensa de los recursos naturales estratégicos del país, e internacional, a través de su participación en misiones internacionales y en el ámbito de la OTAN.
En este sentido, el LSV actuará como multiplicador de la fuerza al asegurar la capacidad de permanencia en la mar por largos periodos a una fuerza naval, así como una cierta capacidad expedionaria para las fuerzas armadas noruegas.
El círculo virtuoso de la modernización de la Marina Real se cerrará a partir de 2014, cuando se tomará una decisión sobre la renovación de la fuerza de submarinos, precisamente cuando asuma la jefatura del Estado Mayor de la Defensa noruega un antiguo oficial submarinista, el almirante Bruun-Hanssen.
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