sábado, 7 de marzo de 2009

Nano, el pequeño gigante

Por Augusto Brugo Marco (Editor de la revista Parabrisas)
Tata sacude el mercado automotriz mundial con el coche más barato de plaza: 1.970 euros en su versión básica.
Foto: Ratan Tata, el CEO del gigante industrial indio muestra orgulloso su arma para enfrentar la crisis vesión 2009: el Nano, el auto más barato del mundo.

El término rentabilidad se ha convertido en la palabra clave para la industria mundial del automóvil y para mejorar sus márgenes de beneficio, o para dejar atrás los números rojos, los fabricantes se han enfrascado en una política de reducción de costos. Las fórmulas para lograrlo son tan diversas como los propios constructores: utilización de plataformas comunes, reducciones de personal, ampliación del número de horas trabajadas, traslado de la producción a países con mano de obra más barata, mayor robotización de las cadenas de montaje.
Hasta ahora nadie pudo ofrecer un auto tan accesible como el nuevo Tata Nano que es conocido en la India como “one lakh car” en referencia a su precio, de 100.000 rupias (1.970 euros). Fue presentado en enero del 2008 con planes para lanzarlo en el corriente año, lo que equivale a decir que el mes que viene ya se encontraría en la red de concesionarios.

Ratan Tata, el presidente del grupo indio del mismo nombre, ha hecho realidad su proyecto: ofrecer a la sociedad india un vehículo de cuatro ruedas con cuatro o cinco plazas que, gracias a un precio inferior a 2.000 euros, puedan estar al alcance de una gran mayoría. Finalmente, ese modelo ya se hará realidad.
Con el Nano, Tata ofrece un auténtico vehículo de bajo costo a la medida de la India en donde el Dacia Logan –el modelo ‘low cost’ europeo por excelencia–, que Renault produce allí en sociedad con Mahindra, con sus 7.000 euros de precio, sólo es asequible para una pequeña parte de los 1.100 millones de personas que componen la población.

Desde hace años que el presidente del grupo Tata, que cede el 66% de sus ganancias a obras de beneficencia, perseguía la idea de ofrecer un vehículo lo suficientemente económico, con capacidad para la familia media india, compuesta por el matrimonio y dos o tres niños, que les asegurará mayor protección, en medio de un tráfico caótico, que la moto.

De estos vehículos de dos ruedas se matriculan cada año en India más de cinco millones de unidades y en ellos llegan a viajar hasta cinco personas: el padre, las madres y tres hijos. No es de extrañar que en estas condiciones, aunque el nivel de motorización del país sea todavía bajo, se produzcan al año cerca de 100.000 víctimas mortales. El Tata Nano se posicionará en Europa con un valor cercano a los 5.000 euros ya que debe estar equipado acorde con las normas vigentes de contaminación y seguridad del Viejo Continente que por cierto son mucho más exigentes que en otros países.

El año pasado, fue paradójico para Tata Motors. Por un lado, anunció la compra a Ford de las filiales británicas de las lujosas marcas Jaguar y Land Rover, por unos 2.300 millones de dólares. Por otra parte, dio a conocer el lanzamiento del modelo más barato del mundo, el mencionado Nano.

Jugador de toda la cancha, el gigante industrial indio ejemplifica así su naturaleza: ser la principal empresa del segundo país más populoso del mundo, con intereses en el acero, las manufacturas pesadas, informática, alimentos, telecomunicaciones, aviación, servicios financieros y el conglomerado automotor. Se estima que de los 27 millones de vehículos que ruedan por la India, casi 4 millones son de marca Tata.

Eso hasta la irrupción del Nano ya que sus directivos coinciden en apostar a un fortísimo reposicionamiento. Tata Motors Limited, que nació en 1945 bajo el nombre de TELCO (TATA Engineering and Locomotive Company), hoy tiene 24 plantas de fabricación, 5 centros de diseño de ingeniería y otras 16 instalaciones en las que tiene intereses o alianzas. Tiene en nómina a 250.000 trabajadores, de los cuales casi 30.000 están repartidos en 55 países. Es la empresa más grande de India de fabricación de automóviles de pasajeros y vehículos comerciales y el quinto mayor fabricante de vehículos comerciales del mundo: se quedó con la línea comercial de vehículos Daewoo, la española Hispano Carrocera y tiene participación en la brasileña Marcopolo. Un negocio global.

Fuente: Revista Noticias

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios mal redactados y/o con empleo de palabras que denoten insultos y que no tienen relación con el tema no serán publicados.