martes, 19 de agosto de 2008

"Aurora": el programa secreto Activo de Alta Frecuencia

El proyecto HAARP (del inglés High Frequency Active Auroral Research Program, Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia) es una investigación financiada por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, la Marina y la Universidad de Alaska para "entender, simular y controlar los procesos ionosféricos que podrían cambiar el funcionamiento de las comunicaciones y sistemas de vigilancia".

Se inició en 1993 para una serie de experimentos durante veinte años. Es similar a numerosos calentadores ionosféricos existentes en todo el mundo, y tiene un gran número de instrumentos de diagnóstico que se usan para mejorar el conocimiento científico de la dinámica ionosférica.El enclaveEl lugar donde se sitúa HAARP es cerca de Gakona, Alaska (lat. 62°23'36" N, long 145°08'03" W), al oeste del Parque Nacional Wrangell-San Elías. Tras realizar un informe sobre el impacto ambiental, se permitió establecer allí una red de 180 antenas.

El HAARP se construyó en el mismo lugar donde se encontraban unas instalaciones de radar sobre el horizonte, las cuales albergan ahora el centro del control de HAARP, una cocina y varias oficinas. Otras estructuras más pequeñas albergan diversos instrumentos. El principal componente de HAARP es el Instrumento de Investigación Ionosférica (IRI), un calentador ionosférico. Se trata de un sistema transmisor de alta frecuencia (HF) utilizado para modificar temporalmente la ionosfera. El estudio de estos datos aporta información importante para entender los procesos naturales que se producen en ella.

Durante el proceso de investigación ionosférica, la señal generada por el transmisor se envía al campo de antenas que la transmiten hacia el cielo. A una altitud entre 100 y 350 km, dicha señal se absorbe parcialmente, concentrándose en un volumen de unos cientos de metros de altura y varias decenas de kilómetros de diámetro sobre el lugar. La intensidad de la señal de alta frecuencia en la ionosfera es de menos de 3 µW/cm2, decenas de miles de veces más pequeña que la radiación electromagnética natural que llega a la Tierra procedente del Sol, y cientos de veces menor que las alteraciones aleatorias de la energía ultravioleta (UV) que mantiene la ionosfera. Sin embargo, los efectos producidos por HAARP pueden observarse con los instrumentos científicos de las instalaciones antes mencionadas, y la información que se obtiene es útil para entender la dinámica del plasma y los procesos de interacción entre la Tierra y el Sol.

El enclave donde se encuentra HAARP fue construido en tres fases. El prototipo tenía 18 antenas, organizadas en tres filas de seis antenas cada una. Esta instalación inicial demandaba 360 kW de potencia, y transmitía la energía suficiente para las pruebas ionosféricas más básicas.En la segunda fase se habían instalado 48 antenas, ordenadas en seis filas de ocho antenas, con una potencia de 960 kW. Con esta potencia, ya era comparable a otros calentadores ionosféricos. Esta fase fue utilizada para varios experimentos científicos que dieron sus frutos, y varias campañas de exploración ionosférica durante varios años.

El diseño final de HAARP consta de 180 antenas, organizadas en 15 columnas de 12 unidades cada una. Proveen una ganancia máxima teórica de 31 dB. Requieren una alimentación total de 3,6 MW. La energía irradiada es de 3981 MW (96 dBW). En verano de 2005, todas las antenas estaban ya instaladas, pero aún no se había transmitido a máxima potencia.Cada antena consta de un dipolo cruzado que puede ser polarizado para efectuar transmisiones y recepciones en modo lineal ordinario (modo O) o en modo extraordinario (modo X). Cada parte de cada uno de los dipolos cruzados está alimentada individualmente por un transmisor integrado, diseñado especialmente para reducir al máximo la distorsión. La potencia efectiva irradiada por el calentador está limitada por un factor mayor de 10 a la mínima frecuencia operativa. Esto se debe a las grandes pérdidas que producen las antenas y un comportamiento poco efectivo.

HAARP puede transmitir en un rango de frecuencias entre 2,8 y 10 MHz. Este rango está por encima de las emisiones de radio AM y por debajo de las frecuencias libres. No obstante, HAARP tiene permisos para transmitir únicamente en ciertas frecuencias de su rango. Cuando el calentador está transmitiendo, el ancho de banda de la señal transmitida es de 100 kHz o menos. Puede transmitir de forma continua o en pulsos de 100 microsegundos. La transmisión continua es útil para la modificación ionosférica, mientras que la de pulsos sirve para usar las instalaciones como un radar. Los científicos pueden hacer experimentos utilizando ambos métodos, modificando la ionosfera durante un tiempo predeterminado y luego midiendo la atenuación de los efectos con las transmisiones de pulsos.