martes, 20 de mayo de 2008

Opinión: Israel echa la culpa al RPG-29 de su fracaso militar en el Líbano

El Hezbollah habría destruido al menos una división de blindados de las siete con que cuenta el ejército israelí (Tsahal). Estas perdidas han puesto en tela de juicio su estrategia de la guerra relámpago blitzkrieg del comando conjunto hebreo y ha obligado a limitar su progresión en el campo de batalla a la velocidad de marcha de tropa. La Resistencia libanesa utiliza bazukas antitanque rusas de la última generación que perforan no solamente los Merkava israelíes pero también los tanques de fabricación estadounidense.

La declaración del ministro israelí de Seguridad Pública, Avi Dichter, y aquella del ministro de Defensa, Amir Peretz, anunciando que el Hezbollah utilizaría en el sur del Líbano modernas bazukas antitanque de fabricación rusa, en particular la RPG-29 a carga hueca en tándem, ha generado la sorpresa de expertos militares interrogados por la agencia de noticias rusa Ria Novosti que deseosos de mantener una posición neutra, han aceptado de comentar estos rumores bajo el anonimato.

La presencia de bazukas portátiles antitanque RPG-29 en el arsenal del Hezbollah no significa en ninguna manera, estiman los expertos rusos, que estos armamentos provengan de las ventas de armas rusas efectuadas en el marco de la cooperación técnico-militar entre Moscú y Damas (Siria). Los fragmentos y otros restos de obuses y granadas que los israelíes han comunicado a Rusia no permiten de establecer su origen. Encontramos, es verdad, letras del alfabeto cirílico, pero esto no es suficiente para tener un peritaje efectivo: es necesario tener y absolutamente los números de serie sin los cuales es imposible de establecer una identidad del fabricante, del proveedor y del destinatario.

Creada a finales de los año 80, con la aparición de blindajes reactivos, la bazuka RPG-29 Vampiro a carga hueca en tándem entró en servicio en el Ejército Soviético en 1989. Después de la desaparición de la Unión Soviética (URSS) y del Pacto de Varsovia, las bazukas y municiones de este tipo se conservaron prácticamente en todos los países nuevamente creados, incluso, en algunos de estos países se efectuaba su fabricación.

Difícil así pues de establecer el origen de estas bazukas que perforan los tanques israelíes, porque además y paralelamente a las exportaciones legales de armamento y de otro material de guerra, los contratos estipulan una cláusula obligatoria e indispensable respecto al utilizador final.

El Hezbollah, el Hamas y otros grupos armados del Medio Oriente han podido dotarse de las bazukas RPG-29 en cualquier lugar y con quien sea, por una compleja red de intermediarios suministradores. Evitemos las acusaciones arbitrarias. Mismo si los procesos judiciales a los traficantes de armas es pan de cada día, toda acusación pública emanando de un alto funcionario estatal o de un estado, necesita las pruebas irrefutables materiales, sin ello, entonces sólo se trata de una conversación estéril y politizada.

Los expertos militares señalan también una curiosa circunstancia. El debate de la utilización «ilegal» de armas rusas siempre comienza en el momento cuando una de las partes implicadas en el conflicto comienza a tener perdidas y bajas en el frente de batalla. Tal fue el caso de los norteamericanos en Vietnam, la misma cosa sucedió veinte años después en Irak, cuando recriminaban a Rusia por el hecho que los combatientes locales [iraquíes] estuviesen equipados de armas rusas.
¿Pero cómo podía ser de otra manera, armas en Irak que no fuesen rusas si este gobierno [de Irak] compró oficialmente durante más de treinta años armamento soviético? Los oficiales [gobierno] israelíes parecen haber adoptado la misma táctica, a la vez acusadora y justificadora.

El tanque israelí Merkava ha tenido siempre la reputación de ser un blindado invulnerable. En Tel-Aviv, se hacían elogios a sus cualidades y de su protección blindada reforzada por un blindaje reactivo, calificado el mejor del mundo. Sobre el plano táctico, el ejército israelí lo ha utilizado exitosamente para neutralizar a grupos terroristas en la banda de Gaza y en Cisjordania, donde los tanques Merkava entraban hasta en los barrios, aunque apoyados por helicópteros con los cuales estaban en permanente contacto directo.

En el Líbano, parece que no hubo suficientes helicópteros para proteger a todos los tanques. El equipaje de cualquier tanque se contenta con un panorama limitado y no puede ver lo que se pasa a su izquierda, a su derecha ni atrás. De esta manera pues, puede ser presa fácilmente de una bazuka escondida detrás de un arbusto o de una roca. Claro está que los rebeldes no necesitan hacer fuego sobre la parte delantera del Merkava que está bien protegida, pero pueden apuntar los lados, la cola o las orugas del tanque, porque como todo blindado tiene sus puntos débiles.

Fuente: por Viktor Litovkin (RIA-Novosti).