(Infodefensa.com) Roberto Caiafa, São Paulo – El sector
Defensa de
Brasil vive un momento de
definiciones importantes como el ocurrido a finales de 2013, con la selección
del
Saab Gripen NG como
nuevo avión de combate de la
Fuerza Aérea Brasileira
(
FAB).
En el sector naval, el año 2014 comenzó muy ocupado y el primer gran paso
hacia la materialización del Sistema de Gestión de la Amazonía Azul (SisGAAz),
proyecto estratégico de la
Marina de Brasil
(
MB), se dio con un acto celebrado, el 17 de enero, en la
Escuela de Guerra Naval, en
Río de Janeiro. En
esa ocasión, fue presentado formalmente y la notificación de las normas y
especificaciones detalladas que deben cumplir las empresas contratadas para el
montaje y la instalación del sistema, que se espera que esté terminado en un
plazo de diez años, con un costo estimado de unos 10 mil millones de
dólares.
El vicealmirante
Antônio Carlos Frade Carneiro, director de
Gestión de de Proyectos Estratégicos de la Marinha
(
DGePEM) realizó una detallada presentación sobre los
principales puntos del programa, que será gerenciado por la
Empresa de
Engenharia e Projetos Navais (
Engepron) y recibirá la
consultoría técnica da
Fundação Ezute.
Con la introducción del SisGAAz, la Marina de Brasil podrá monitorear y
controlar una inmensa área conocida como Amazonia Azul, un espacio de 4,5
millones de kilómetros cuadrados que se extienden hasta 350 millas náuticas (648
km) da su costa, y 200 millas náuticas en torno de sus islas oceánicas,
representando cerca de la mitad del área territorial del país.
Selección de la contratista
En el modelo propuesto, una gran empresa (contratista principal), enmarcada
en la Ley de 8666, debe contar con los medios y recursos para llevar a cabo las
distintas fases del SisGAAz a largo de la costa brasileña, subcontratando
pequeñas y medianas empresas nacionales siempre que sea posible, para la
instalación de los sensores y la construcción de centros de datos (Site Survey),
etcétera. La red de sensores SisGAAz implica una combinación de tecnologías de
vanguardia, que consta de radares, vehículos aéreos no tripulados (UAV),
sistemas de comunicaciones, de guerra electrónica, meteorología para la
recolección de datos ambientales y meteorológicos, entre otras.
Inicialmente, el sistema tendrá conexión satelital contratada en el mercado
internacional, estando prevista su futura integración al
Satélite
Geoestacionário de Defesa e Comunicação (
SGDC),
actualmente en fase de formalización los contratos entre o gobierno de Brasil y
la empresa vencedora
Thales Alenia Space.
El 16 de julio de 2014, es la fecha límite para el recibimiento de las
propuestas de las empresas, ya que la Marina necesitará entregar al Gobierno
Federal su presupuesto para el año fiscal de 2015, a fin de que el SisGAAz no
vaya a sufrir retrasos. En noviembre de 2014, después de la evaluación por una
comisión designada por la Marina, será divulgada una “short-list”, y en junio de
2015, deberá ser anunciada la empresa vencedora, con la firma del contrato
prevista para el mes de diciembre.
Implementación
La implementación del SisGAAz está programada para ocurrir en cuatro módulos
con las siguientes metas: desarrollar el software principal del SisGAAz,;
integrar los sistemas existentes de la Marina de Brasil; integrar los sistemas
existentes del Ministerio da Defesa, del Ejército
Brasileiro y de la Fuerza Aérea Brasileira; integrar
los sistemas existentes en otras agencias federal; instalar el SisGAAz en el
Centro de Operaciones (CO) del Comando
de Operaciones Navales (ComOpNav); implantar el
monitoreo en áreas de vigilancia; instalar o SisGAAz en los CO de la Fuerza y de
sus unidades e integrar los medios navales al sistema.
Nuevas corbetas
En el evento del SisGAAz, también fueron comentados los aspectos del
proyecto de construcción y diseño de corbetas las
Barroso
Modificadas, actualmente en la fase de definición de los sistemas y
subconjuntos que se utilizarán en los buques, cuyo corte de metal de la primera
unidad que se construirá se espera que ocurra en a finales de 2014. Muy
comentada en el evento, la aparente decisión de la Marina en no adoptar los
mástiles integrados
I-Mast de
Thales, debido a su alto
costo y la dificultad de integrar los sensores nacionales al proyecto nacional,
que utilizaría la versión
I-Mast 100, de acuerdo con las proyecciones
iniciales.